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Cap 11/

Mayo / Dos meses después de Marzo

Aiden caminaba hacia el salón de artes, después de un retraso innecesario por el baño. Había quedado de verse con Tess, pero estaba bastante seguro de que ya la había hecho esperar. Al doblar la esquina del pasillo, lo vio. Jake. Claro, estaba esperándolo justo allí, con una sonrisa socarrona en el rostro, dispuesto a hacer que todo pareciera una coincidencia. Jake tenía el cabello suelto y el uniforme de deporte, pero no el típico de siempre. En lugar de su chaqueta, llevaba su poleron favorito. En sus manos, dos cafés, uno para él y otro para Ellie.

-"Qué casualidad, Aiden. Mi mejor amigo, mi hermano, mi príncipe, mi amor platónico..."

-"No sigas." - Aiden levantó una mano, interrumpiéndolo. Sabía lo que venía.

Jake seguía con su ritmo, incapaz de parar

-"No, en serio. Tengo que seguir. La última fiesta de abril, vi cómo James estaba pegado a su ex y tú te hacías el tonto. Explícame eso."

Aiden lo miró con cara de agotamiento.

-"Oh, ¡por Dios, Jake! Ya pasaron dos meses. Supéralo."

-"Superar a mi ex me costó cinco meses. Explícame, ¿por qué dejas que te bajen a tu negro?" - Jake lo miró fijamente, como si estuviera esperando una respuesta, pero Aiden no dijo nada. Estaba demasiado cansado de esa conversación.

Antes de que Aiden pudiera decir algo estúpido en respuesta, apareció Ellie. Era la primera vez en el año que llegaba tarde y, al ver el café que Jake le tendía, frunció el ceño.

-"¿Y tú?" -le preguntó Jake, dándole el café.

-"Nada, solo que el tarado de Alec..." -Ellie hizo una pausa y se mordió el labio, recordando lo que había sucedido el día anterior, como si no pudiera creer que lo decía en voz alta -"...me regaló un maldito ramo de flores en medio de la clase de historia."

Jake no pudo evitar reírse

-"¿Maldito ramo? ¿Esa es la forma en que lo llamas?"

Ellie rodó los ojos

-"¡Oh, ya sabes, Jake! No soy de esas personas que se emocionan por flores, ¡pero es Alec! Eso lo hace aún más raro."

-"Veo que tus 47 puntos jamás van a superar mis 78." - Aiden lo dijo como si no fuera gran cosa, pero por dentro, no entendía cómo había llegado hasta esos 78 puntos.

Ellie lo miró, sorprendida.

-"¿78? ¿Cómo ganaste esos puntos extra? Sabemos que los puntos son por las interacciones y citas con James, pero... 78 puntos?"

Aiden se inclinó ligeramente, como si estuviera a punto de contarle un secreto.

-"Yul es más reservado conmigo."

Jake y Ellie lo miraron confundidos. Aiden no lo dijo a la ligera. Yul, ese chico siempre tan ruidoso y provocador, había dejado de molestar a Aiden. En lugar de eso, desviaba las burlas hacia otros y, sorprendentemente, cuando pasaba por al lado de Aiden, lo saludaba. Incluso, en clases, si Aiden necesitaba algo como una goma o algún objeto de su estuche, Yul lo prestaba sin pensarlo dos veces.

Era algo que no ocurría con Yul. No era el tipo de persona que hacía ese tipo de gestos. Aiden se sintió incómodo por un momento, como si no quisiera que lo dijeran en voz alta. Pero, al mismo tiempo, no podía evitarlo.

Ellie bebió un sorbo de su café mientras procesaba lo que Aiden acababa de decir. La información sobre Yul no era algo que hubiera esperado escuchar tan temprano en la mañana, y sinceramente, no sabía cómo sentirse al respecto. Pero antes de que pudiera hacer un comentario sarcástico al respecto, Jake le dio un codazo con una sonrisa burlona.

-"¿Y bien? ¿No tienes nada que decir sobre tu estatus de chica con más puntos y menos dignidad?"

Ellie lo fulminó con la mirada.

-"Cállate, Jake."

Jake sonrió aún más.

-"Oye, solo digo. El señor 'te regalo flores en medio de la clase' te está subiendo puntos como loco."

Ellie suspiró, pasándose una mano por el cabello. No quería hablar de Alec ahora mismo. No quería pensar en el ramo de flores, en las miradas de toda la clase, en la manera en que su profesor de historia simplemente se quedó en silencio mientras Alec le extendía las flores con una sonrisa de suficiencia.

Pero lo peor de todo no era el ramo en sí. Era que Gabby lo había visto.

Gabby no dijo nada en su momento. Solo sonrió y siguió con su día como si nada. Pero Ellie la conocía demasiado bien. Sabía que le había molestado, aunque intentara esconderlo. Y eso le hacía un nudo en el estómago.

Respiró hondo, como si eso pudiera borrar su ansiedad, y miró a sus dos amigos.

-"Es demasiado temprano para esto. Me voy."

-"¡Oh, sí, claro! Corre, Ellie, huye. Deberás afrontarlo pronto." - Jake la molestó, pero Ellie ya estaba de espaldas a ellos, avanzando por el pasillo.

Quería encontrar a Gabby. No porque tuviera algo en especial que decirle, sino porque estar con ella siempre le daba un poco de paz. Pero cuando llegó a su salón, Gabby no estaba.

Frunció el ceño y sacó su celular.

Ellie: ¿Dónde estás?

Pasaron unos minutos antes de que Gabby respondiera.

Gabby: Patio trasero, necesitaba aire.

Ellie apretó los labios. Podía hacer dos cosas: ir con ella y pretender que todo estaba bien o quedarse en clase y dejar que el silencio lo resolviera por sí solo.

Y claro, como siempre, eligió la opción más estúpida.

Se dio la vuelta y salió del edificio en dirección al patio trasero.

Ellie salió al patio trasero y, como había imaginado, encontró a Gabby sentada en una de las bancas, con los audífonos puestos y la mirada perdida en su celular. No parecía molesta ni triste, pero Ellie sabía que Gabby era experta en esconder lo que realmente sentía.

Se acercó sin hacer ruido y se dejó caer en la banca a su lado. Gabby le lanzó una mirada rápida y se quitó un solo audífono.

-"¿No deberías estar en clase?"

-"¿No deberías estar tú?"

Gabby sonrió apenas y volvió la vista al celular. Ellie aprovechó para espiar de reojo lo que estaba viendo. Parecía una lista de reproducción, con una canción pausada en la pantalla.

-"¿Qué escuchas?"

Gabby bloqueó el teléfono antes de que Ellie pudiera ver el título.

-"Nada."

-"¿Nada? ¿Entonces para qué los audífonos?"

-"Para que nadie me hable."

Ellie entrecerró los ojos.

-"¿Eso me incluye?"

Gabby se encogió de hombros con una pequeña sonrisa, como si estuviera disfrutando de la conversación.

-"Eres molesta, ¿Sabes?"

-"Lo soy cuando alguien me interesa."

Ellie la observó por un momento y luego miró hacia el frente, al pasto algo descuidado del patio trasero. No era un lugar al que los estudiantes vinieran mucho, lo que lo hacía perfecto para cuando alguien necesitaba un respiro.

-"¿Te escondes de alguien?"

-"No."

-"Entonces, ¿de qué?"

Gabby tardó unos segundos en responder.

-"Del ruido."

Ellie asintió lentamente. Lo entendía. A veces el instituto podía sentirse demasiado. Demasiadas voces, demasiada gente, demasiada energía. A ella no le molestaba tanto, pero sabía que Gabby era diferente en ese aspecto de vez en cuando. No eran tan distintas cuando se trataba del odio mutuo al ruido exagerado del bodrio de instituto donde estaban.

Se quedaron en silencio un rato, hasta que Ellie, sin pensarlo demasiado, extendió una mano y le quitó el audífono que le quedaba puesto. Gabby parpadeó sorprendida cuando Ellie se lo puso y le dio play a la canción pausada.

El sonido suave de una guitarra llenó sus oídos, seguido de una voz que no reconoció de inmediato. Frunció el ceño.

-"¿Desde cuándo escuchas música tan cursi?"

Gabby soltó una risa suave.

-"No es cursi."

-"Es un poco cursi."

-"Solo escúchala."

Ellie bufó, pero no se quitó el audífono. Se quedaron así un rato, compartiendo la canción en un rincón tranquilo del instituto. Ellie no lo dijo en voz alta, pero entendía por qué Gabby la estaba escuchando. Y aunque jamás lo admitiría, en ese momento, la melodía le pareció agradable.

El ritmo suave de we fell in love in october flotaba entre ellas. Gabby la miró de reojo, una sonrisa apenas perceptible en sus labios.

-"Sabía que te gustaría."

-"No dije que me gusta."

-"Pero tampoco la quitaste."

Ellie chasqueó la lengua, pero en lugar de responder, miró hacia el cielo nublado. Había algo en la tarde que la hacía sentir extrañamente cómoda, como si por un momento no hubiera nada más allá de esa banca, de esa canción, de Gabby a su lado.

Gabby volvió a revisar su celular y deslizó la pantalla hacia abajo, revisando algo en silencio. Ellie se fijó en cómo apretó los labios, como si estuviera pensando demasiado en algo.

-"¿Todo bien?"

Gabby tardó un momento en contestar.

-"Sí... solo que Grett me acaba de escribir."

-"¿Y qué quiere la criaturita?"

-"Nada importante. Solo que no fue a clases hoy y quiere saber si me pasó algo porque no respondí sus mensajes antes."

Ellie alzó una ceja.

-"¿Y por qué no le respondiste?"

Gabby se encogió de hombros.

-"No tenía ganas de hablar con nadie. Lo entenderá."

Ellie la miró por un momento antes de volver la vista al frente. No insistió, pero algo dentro de ella le decía que Gabby no estaba diciendo todo.

La canción cambió a otra de girl in red, y Ellie dejó caer la cabeza hacia atrás, apoyándola en el respaldo de la banca.

-"Voy a asumir que todas las canciones de esta playlist son igual de melancólicas."

Gabby sonrió levemente.

-"Tal vez."

-"Dios, me estás deprimiendo."

Gabby soltó una risa genuina esta vez.

-"Puedes quitarte el audífono si quieres."

Ellie hizo una mueca.

-"Nah. Ya estoy invertida en el ambiente triste."

Gabby negó con la cabeza, pero su sonrisa seguía allí.

El silencio volvió a instalarse entre ellas, cómodo, sin prisas. Ellie no sabía por qué, pero sentía que Gabby quería decirle algo más. Solo que aún no encontraba las palabras.

Así que decidió esperar.

Gabby dejó escapar un suspiro y, sin previo aviso, apoyó la cabeza en el hombro de Ellie. Fue un movimiento tan natural que Ellie no tuvo tiempo de reaccionar. Solo parpadeó un par de veces, sintiendo el peso de Gabby contra ella, y decidió no moverse.

-"Sabes, a veces pienso que si hubiera nacido en otra época, me gustaría ser exploradora."

Ellie arqueó una ceja.

-"¿Exploradora?"

-"Sí, tipo, de esas que descubren cosas nuevas, que se pierden en la selva con un machete en la mano o encuentran ruinas antiguas que nadie ha visto en siglos."

Ellie bufó una risa.

-"Te perderías en el primer minuto."

(Ellie, la que una vez se perdió en su cita con Alec y acabó en la zona de carga y descarga en lugar de la salida principal).

-"¡No es cierto!"

-"Gabby, te perdiste en un museo con mapa."

-"¡Pero eso fue porque me distraje!"

-"Exacto. ¿Cómo esperas sobrevivir en la selva?"

Gabby frunció el ceño, pero no se movió de su hombro.

-"Bueno, entonces cambiaré de respuesta. Tal vez sería arqueóloga. Pero no de las aburridas que se la pasan catalogando cosas en un laboratorio, sino de las que viajan y descubren templos ocultos. Como Indiana Jones, pero con más sentido común."

Ellie sonrió, sacudiendo la cabeza.

-"Vas a terminar atrapada en una trampa milenaria y va a salir una piedra gigante a aplastarte."

-"¡Qué poca fe me tienes!"

Ellie se encogió de hombros, sintiendo la risa de Gabby vibrar contra su brazo.

-"Ok, ok, entonces dime, ¿qué hubieras querido ser en otra época?"

Ellie se quedó en silencio un momento, mirando al frente.

-"Mmm... pirata."

Gabby se apartó un poco para mirarla, sorprendida.

-"¿Pirata?"

-"Sí. Robar barcos, pelear con espadas, decir argh cada cinco segundos."

Gabby soltó una carcajada.

-"¿Y qué harías cuando te quedaras sin provisiones en alta mar?"

-"Saqueo un pueblo costero, obvio."

Gabby la miró con fingida indignación.

-"Dios, serías la peor."

Ellie sonrió con suficiencia.

-"Esa es la idea."

Gabby volvió a acomodarse en su hombro, y Ellie sintió cómo su respiración se acompasaba.

-"Sabes, podríamos haber sido una gran dupla. La exploradora y la pirata. Viviendo aventuras en diferentes épocas."

Ellie entrecerró los ojos, pensándolo.

-"Seríamos un desastre."

-"Tal vez. Pero sería divertido."

Ellie no respondió de inmediato. Se quedó mirando al frente, sintiendo el peso de Gabby en su hombro y el sonido de girl in red de fondo.

-"Supongo que sí."

Gabby sonrió suavemente, sin moverse.

-"Entonces, ¿qué haríamos primero? ¿Robar un barco o descubrir una civilización perdida?"

Ellie suspiró con exageración.

-"No podemos hacer ambas cosas a la vez, Gabby."

-"¿Por qué no?"

-"Porque si robamos un barco, nos perseguirán. Y si descubrimos una civilización perdida, nos matarán por irrumpir en su territorio."

Gabby se separó un poco, frunciendo los labios como si estuviera realmente pensando en eso.

-"Ok, nueva estrategia: nos aliamos con la civilización perdida, les conseguimos recursos y, a cambio, nos ayudan a saquear barcos enemigos."

Ellie soltó una risa incrédula.

-"Así que ahora somos traficantes y piratas."

-"Claro. Pero unos con sentido del honor."

-"Gabby, eso suena demasiado elaborado."

-"Así funcionan las mejores historias."

Ellie negó con la cabeza, pero no pudo evitar sonreír. Gabby siempre tenía la habilidad de convertir cualquier conversación en algo completamente aleatorio y, de alguna forma, entretenido.

Se quedaron en silencio por un momento, hasta que Gabby murmuró:

-"Oye, Ellie..."

-"Mmm."

-"¿Tú crees que la gente cambia?"

Ellie parpadeó, sin esperarse ese cambio de tema.

-"¿A qué te refieres?"

Gabby no respondió de inmediato. Sus dedos jugaron con una pulsera en su muñeca, como si estuviera organizando sus pensamientos.

-"No sé, solo... A veces siento que la gente dice que cambia, pero en el fondo sigue siendo la misma. O que fingen que cambiaron, pero en realidad solo aprendieron a actuar diferente."

Ellie ladeó la cabeza, pensativa.

-"Creo que depende. Hay gente que cambia porque realmente quiere hacerlo, y otros que solo se adaptan a lo que les conviene."

Gabby asintió lentamente.

-"Sí... supongo que tienes razón."

Ellie entrecerró los ojos.

-"¿Por qué lo preguntas?"

Gabby dudó un momento antes de encogerse de hombros.

-"No sé, solo lo estaba pensando."

Ellie no estaba convencida, pero no presionó.

-"Bueno, si en algún momento quieres discutirlo más, aquí estoy. Aunque probablemente te dé respuestas sarcásticas el 80% del tiempo."

Gabby soltó una risa suave.

-"Lo sé. Y por eso lo valoro."

Ellie no dijo nada más. Solo dejó escapar un suspiro leve y, con un movimiento casi instintivo, tomó la mano de Gabby.

Gabby parpadeó, sorprendida, pero no hizo ningún intento de apartarse. En lugar de eso, entrelazó sus dedos con los de Ellie, con una suavidad que hizo que el corazón de Ellie latiera un poco más rápido.

-"Sabes..." -murmuró Gabby, observando sus manos juntas- "esto es lindo."

Ellie rodó los ojos, pero su agarre no aflojó.

-"Tú eres la que siempre dice que la amistad es importante, ¿no?"

Gabby sonrió.

-"Sí. Pero eso no significa que no pueda disfrutar de los momentos lindos."

Ellie bufó, pero su pulgar acarició inconscientemente la piel de Gabby. No sabía por qué lo hacía, pero tampoco sintió la necesidad de detenerse.

-"Supongo que tienes razón."

Se quedaron así un rato, sin decir nada, mientras la música seguía sonando de fondo. Gabby seguía recostada en su hombro, con su mano cálida en la fría mano de Ellie.

La clase de deportes estaba a punto de comenzar. Los estudiantes se dispersaban por el campo, y Jake estaba sacándose el sudor de la frente mientras se estiraba, preparándose para lo que parecía ser una práctica intensa de fútbol. Tom estaba cerca, haciendo algunos estiramientos mientras lo observaba desde el otro lado del campo.

De repente, Jake, con su característico estilo desordenado, se dejó caer en el césped cerca de donde Tom estaba, tomando su botella de agua.

-"¿Ya listo para perder contra el equipo de las chicas?" -dijo Jake, con una sonrisa juguetona.

Tom se acercó un poco, caminando lentamente hasta donde estaba él. Su voz, cuando respondió, sonó más baja de lo normal.

-"No lo sé. Yo diría que te falta algo para ser un verdadero reto."

Jake lo miró, levantando una ceja. Tom, normalmente tan tranquilo, parecía... diferente.

-"¿Y qué necesitas, Tom? ¿Un entrenamiento personalizado?"

Tom hizo una pausa antes de responder, dejando que el silencio entre ellos se llenara de algo que Jake no podía identificar exactamente. Se agachó cerca de él, como si fuera a corregir su postura en algún movimiento o técnica. Tom tocó suavemente el brazo de Jake, ajustando su posición de forma casual, pero con una suavidad que no pasó desapercibida.

-"Quizás... algo así."

La cercanía de Tom hizo que Jake dejara de sonreír por un momento, con el corazón latiendo un poco más rápido de lo que era normal en medio de un partido de fútbol.

-"Vaya, ¿acaso me estás coqueteando, Tom?" -dijo Jake en tono burlón, aunque sin ser tan confiado como de costumbre.

Tom se echó atrás, una ligera sonrisa se dibujó en su rostro, pero sus ojos tenían algo más. No era solo diversión.

-"¿Qué, no puedes soportarlo? Estás acostumbrado a estar en control, ¿no?"

Jake no sabía si era el calor del momento, el sudor en su frente o la forma en que Tom lo miraba, pero de repente se sintió completamente fuera de lugar. La presión de la situación se apoderó de él por un segundo, y por un momento, solo por un segundo, Jake se sintió vulnerable frente a Tom.

-"No... es solo que... no me esperaba esto." -Jake lo dijo más bajo de lo habitual.

Tom dio un paso atrás, pero no tan rápido, como si aún estuviera disfrutando de la conversación.

-"Tal vez deberías esperar más, Jake. Yo soy impredecible."

Jake no pudo evitar soltar una pequeña risa nerviosa, y de alguna forma, se dio cuenta de que Tom tenía razón. Era impredecible. Pero lo que más le sorprendió fue lo fácil que era hablar con él, cómo todo se sentía cómodo a pesar de lo extraño que era.

Cuando Tom se alejó para unirse a sus compañeros de equipo, Jake se quedó parado, mirando cómo Tom corría por el campo, y se dio cuenta de que no solo lo veía como a un amigo. Había algo más en esa mirada. Algo que aún no entendía, pero que no podía negar.

...

La biblioteca estaba casi vacía a esa hora, salvo por un par de estudiantes que realmente necesitaban estudiar y no como ellos tres, que estaban allí más por obligación que por iniciativa. Tess y Ally estaban sentadas juntas, con libros abiertos en la mesa, mientras Hunter estaba a un lado, inclinado sobre su teléfono como si fuera lo más importante del mundo.

-"Espera, espera... ¿Eres buena en esto?" -preguntó Ally, mirando la hoja de ejercicios que Tess acababa de completar sin aparente esfuerzo.

Tess sonrió, apoyando la barbilla en su mano.

-"Soy un misterio, Ally. Nadie sabe realmente de qué soy capaz."

Ally soltó una risa, pero había algo en la forma en que Tess la miraba que la hizo sentir... ¿extraña? ¿nerviosa? Decidió ignorarlo y concentrarse en el ejercicio que tenía frente a ella.

Hunter, sin despegar la vista de su teléfono, murmuró:

-"Dios, solo bésala ya."

Ally sintió que todo su sistema colapsaba por un momento. Su cara ardió, y su cerebro no pudo procesar ninguna reacción lógica.

Tess, en cambio, solo se rió y le dio un leve empujón en el brazo a Hunter.

-"Cállate."

...

Gabby estaba sentada en el borde de la azotea, con las piernas colgando y el viento despeinándole suavemente el cabello. Se había saltado la clase sin pensarlo demasiado, sintiendo que necesitaba un momento para sí misma. En su mano temblorosa, sostenía una carta vieja, una que había escrito hace tiempo pero nunca tuvo el valor de entregar.

La deslizó con cuidado de su sobre, las esquinas ya un poco dobladas por el tiempo y el manoseo constante. Sus ojos recorrieron la caligrafía apurada pero cuidadosa, las palabras que en su momento había escrito con el corazón desbordado.

"Eres la única constante en este caos. La única persona que, cuando sonríe, hace que todo en mi cabeza se detenga. Y es aterrador, porque me doy cuenta de que te quiero de una forma que no sé si está bien. Que no sé si es justa. Pero lo hago. Te quiero, y no sé qué hacer con todo esto."

Atte: Nowak.

Gabby sintió un nudo en la garganta. ¿Cuántas veces había leído esas palabras? ¿Cuántas veces había pensado en entregarlas, solo para retractarse a último momento? Lo peor de todo era que ni siquiera podía convencerse de que sus sentimientos habían cambiado. No lo habían hecho. Si acaso, solo se habían vuelto más fuertes.

Suspiró y dobló la carta con cuidado, dispuesta a guardarla de nuevo. Pero en ese momento, escuchó el sonido de la puerta de la azotea abriéndose.

Alguien la había encontrado.

Gabby se tensó al escuchar la puerta de la azotea abrirse con un chirrido suave. Su primer instinto fue guardar la carta rápidamente en el bolsillo de su chaqueta, como si fuera un secreto peligroso que nadie más debía ver.

-"¿Saltándote la clase?" -La voz era relajada, casi divertida. Gabby giró la cabeza y vio a Tess, apoyada contra el marco de la puerta con los brazos cruzados sujetando un cafe.

Gabby dejó escapar un suspiro de alivio. Si alguien tenía que encontrarla, mejor que fuera Tess y no... bueno, Ellie.

-"Podría decir lo mismo de ti" -respondió Gabby con una leve sonrisa.

Tess encogió los hombros y se acercó, sentándose en el suelo junto a ella.

-"Nah, el profe me dejó salir. Tenía que entregar un trabajo, pero luego te vi aquí y pensé en hacerte compañía. Parecías... pensativa."

Gabby soltó una risa breve. Pensativa era poco.

-"Supongo. Cosas en la cabeza."

-"¿Cosas tipo existenciales o cosas tipo "estoy enamorada de mi mejor amiga y no sé qué hacer con mi vida"?"

Gabby sintió que el corazón se le detenía por un segundo. Giró la cabeza rápidamente hacia Tess, pero ella solo sonreía con burla.

-"¡No es eso!" -exclamó Gabby con nerviosismo.

Tess levantó las manos en señal de rendición.

-"Tranquila, tranquila. Solo bromeaba."

Gabby trató de relajarse, pero la sensación de haber sido descubierta no se iba. Se aclaró la garganta y cambió de tema rápidamente.

-"¿Y tú? ¿Por qué me seguiste?"

-"Te vi rara" - admitió Tess. Luego miró hacia el horizonte, apoyando los brazos en sus rodillas -"Y supongo que entiendo lo que es sentirse así."

Gabby se quedó en silencio un momento. Luego, miró a Tess de reojo.

-"¿Así cómo?"

-"Así como si tu cabeza estuviera a punto de explotar por pensar demasiado en alguien."

Gabby desvió la mirada al horizonte, tratando de no dejar que la conversación la delatara más de lo que ya lo había hecho. Pero la carta seguía en su bolsillo, como un recordatorio de todo lo que nunca se atrevía a decir en voz alta.

Ellie esto, Ellie aquello... Era absurdo.

-"Ya sabes, a veces desearía que mi cabeza se callara" -murmuró Gabby.

Tess soltó una risa breve.

-"Créeme, te entiendo."

Gabby suspiró, apoyando el mentón en sus manos. Podía fingir que no pasaba nada, que la carta no existía, que sus sentimientos eran algo pasajero, pero la verdad era otra.

Se sabía de memoria cada gesto de Ellie. Cómo fruncía el ceño cuando intentaba resolver un problema difícil en clase. Cómo reía con los ojos cerrados y la cabeza echada hacia delante cuando algo realmente la divertía. Cómo se acomodaba el cabello sin darse cuenta cuando estaba distraída, enredando los dedos en los mechones con una suavidad que Gabby encontraba hipnotizante.

Era ridículo cuánto había llegado a fijarse en cada pequeño detalle.

-"¿Sabes qué es lo peor?" -dijo sin pensar demasiado.

Tess la miró con curiosidad.

-"¿Qué?"

Gabby sonrió con amargura.

-"Que ni siquiera hace falta que me rompa el corazón."

Tess la observó en silencio por un momento, y aunque no dijo nada, su expresión hablaba por sí sola. Sabía que Gabby estaba sintiendo algo grande, algo que la estaba consumiendo.

Después de un rato, Tess suspiró y se dejó caer de espaldas en el suelo, mirando el cielo.

-"¿Y qué piensas hacer al respecto?"

Gabby apretó los labios.

-"Nada."

-"Eso suena horrible."

-"Lo es."

-"Entonces, ¿por qué?"

-"Porque a veces es más fácil querer a alguien en secreto que arriesgarse a perderlo. No importa si es como si no quisiera resolverlo. Solo tengo miedo."

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- Publique un Fanfic Anarissa por si quieren ir a verlo. Próximamente uno TessAlly (AU: Idol)

Preguntas:

¿Que les gustaría ver?

Datos: La mejor amiga de Gabby es Grett (lo mantienen piola por la popularidad) / Hunter molesta a Tess y Ally a propósito (solo el sabe que Ally le gusta Tess)

Dos datos pk en el anterior olvide darles datos.

Canal de WhatsApp: https://whatsapp.com/channel/0029Vb4ZeMF2v1IqNQ2dLg2i

Recuerden que si votan y comparten el fanfic, me ayudaría bastante a motivarme y sacar capitulos con más frecuencia (lo mismo si aportan con ideas).

Mati, fuera.