𝖈𝖍𝖆𝖕𝖙𝖊𝖗 𝖝𝖎𝖎𝖎

𝔠𝔬𝔪𝔢 𝔩𝔦𝔱𝔱𝔩𝔢 𝔠𝔥𝔦𝔩𝔡𝔯𝔢𝔫 & 𝔱𝔥𝔢 𝔥𝔞𝔫𝔤𝔦𝔫𝔤 𝔱𝔯𝔢𝔢

— Vengan mis niños, los llevaré, a una tierra de encanto— la diosa comenzó a cantar ganándose sonrisas de los niños—. Vengan mis niños, es tiempo de jugar, aquí en mi jardín de sombras.

— Síganme mis niños, les mostraré el camino, a través del dolor y la tristeza— siguió Ace tocando perfectamente los acordes, haciendo sonar una tranquila música atrapante—. No lloren mis niños, porque así es la vida, asesinando bellezas y pasiones.

» ¿Vendrás, Vendrás al árbol?, colgaron a un hombre, dicen que asesinó a tres.«

» Cosas extrañas pasaron aquí, no sería de extrañar. Si nos encontramos a medianoche en el árbol colgante. «

— Silencio mis niños, tiene que ser así, cansada de vivir y las desepciones— cantó Ginny, mientras acariciaba el cabello de Lian—. Cosas extrañas pasaron aquí, no sería de extrañar. Si nos encontramos a medianoche en el árbol colgante. 

En la calma y la tranquilidad, la siguió Ace por lo bajo.

— ¿Vendrás, Vendrás al árbol?— Agnys miró al de mechas rojas para que siguiera su juego.

A través del dolor y la tristeza

» Cosas extrañas pasaron aquí, no sería de extrañar. «

Asesinando bellezas y pasiones

» Si nos encontramos a medianoche en el árbol colgante. «

— Vengan mis niños, los llevaré, a una tierra de encanto — se unió Ginny mientras veía cómo los niños caían dormidos uno por uno.

Cosas extrañas pasaron aquí, no sería de extrañar

— Vengan mis niños, es tiempo de jugar— siguió Agnys a la vez que se levantaba con lentitud para no despertar a Winnie.

Si nos encontramos a medianoche en el árbol colgante

» Aquí en mi jardín de sombras. «, terminó para dejar un beso en la frente de la pelirroja y así salir del gran edificio.

https://youtu.be/3SFf1CLrGeI