Las amigas de Edah, miraban atónitas las actitudes del hombre que estaba con ella, sabían con certeza que Jungkook era reservado a sus emociones y sentimientos, pero ahora lo veían diferente.

¿Era el efecto Edah?

Podían deducirlo, sin embargo, era poco creíble que surgiera amor en los pocos días donde entablaron pocas palabras y mostraban un poco de indiferencia.

—Tenemos que irnos al trabajo, ¿estás lista? —pregunta Jungkook aún sintiendo las miradas inquisitoras de las amigas de su "prometida".

—Si, solo tomaré mi bolso, me despido de las chicas y nos vamos.

El pelinegro asintió y dejó a la fémina despedirse de sus amigas, quiénes aún tenían varias preguntas por hacerle.

—Nos veremos luego, iré a trabajar.

—¿Ahora ya trabajas para él? Esto si que va enserio. —comenta Scarlett mientras miraba de reojo a Jungkook, quien subía a su auto.

—¡Queremos que nos platiques después todos los detalles! —menciona Serenity con alegría.

Edah asintió a todo lo que le comentaban y salió de la floristería, mientras la pelirroja saludaba a Jeon.

—¡Hasta pronto cuñado! —gritó la pelirroja, ganándose miradas fulminantes de las mujeres a su lado.

—¡Hasta luego! —respondió Jungkook.

Este le abrió la puerta a Edah para que entrara a su auto y posteriormente, él subió. Ambos estaban tensos aún, así que pensaban que el trayecto sería incómodo.

Pero durante el camino, Edah decidió tomarse la molestia de poner música y abrir el techo corredizo del auto, mientras Jungkook le daba leves miradas a cada acción que la fémina hacía.

—¿Te gusta esto? —pregunta con curiosidad.

Recordaba que su anterior ex novia le molestaba cuando él hacia eso, pues siempre recibía malos comentarios o quejas de la rubia, hasta  podía recordar como le molestaba el ruido de la radio con el pretexto que le causaba dolor de cabeza y era fastidioso.

—¡Claro! La música y el aire puro genera mucha energía en mi sistema, espero no te moleste.

La castaña lo miró sonriente, era algo característico de ella o eso es lo que pensaba Jungkook al verla sonreír así, aunque fueran poca las veces que lo hiciera a su lado.

—Vaya, al parecer tenemos algo en común.

—Supongo, aunque dudo que con tu comportamiento frío y amargo, seas así. —menciona la castaña soltando una leve risita.

Jungkook solo suspiró y guardó silencio, aunque no dejaba de mirarla algunas veces, captando la imperatividad de ella.

[...]

Tal vez si le dirían a Edah que en estos momentos estaría con su peor enemigo no lo creería en absoluto, pero como bien dicen: "Más vale tener al enemigo cerca", aunque recordaba que no estaba del todo de acuerdo con aquel contrato de noviazgo y matrimonio, mucho menos cuando la hayan amenazado con pagar millones por algo absurdo donde ella no tuvo la culpa.

Ahora ambos habían llegado a la empresa Art Life, donde se veían a personas trabajando sobre planos de construcción, diseño de interiores y un sin fin de labores que hacían de Jeon Jungkook un gran arquitecto.

—Aún no saben que eres mi prometida oficial, así que tomaré tu mano para que no hayan preguntas absurdas. —exclama el pelinegro captando la atención de la mujer.

—¿Qué? Me niego rotundamente, esto no es parte del contrato, yo no haré eso y no permitiré que me toques.

Jungkook masajeó su sien con frustración, al parecer era difícil llegar a un acuerdo con Edah, por lo que sentía que no podía lograr nada de lo que tenía en mente.

—Por favor, tenemos que hacerlo, no habrá un toque más allá donde te haga sentir incómoda.

Edah lo meditó unos segundos hasta que aceptó. El tatuado tomó su mano y entraron al lugar, las miradas de los trabajadores no se hicieron esperar, incluyendo murmullos de los presentes desde el recorrido de la pareja hasta la Oficina de su jefe.

El aura que enmanaba Edah era maravilloso, podía ser como un arcoiris al aparecer después de una tormenta, o el mismo Sol que aparece en la mañana.

—Actúa normal. —susurra Jungkook en su oído mandando una corriente de escalofríos en todo su cuerpo.

Layla, quien era la secretaria de Jeon, se acercó a ellos cautelosamente, por lo que ambos detuvieron sus pasos al tenerla frente a ellos.

—¿Sucede algo Layla?—cuestiona con molestia.

—E-eh, en realidad si, lo que pasa es que el joven Park quiere platicar con usted al igual que la señorita Grace, lo están esperando en su Oficina.

—Entiendo, pues ya estoy aquí. —comentó con obviedad. —Por cierto, ella es Edah, mi novia, será mi asistente personal y quiero que la orientes en todo sobre la empresa, ¿entendido?

La mujer asintió con nerviosismo y miró a Edah con una leve sonrisa.

—Mucho gusto señorita.

—El gusto es mío, Layla.

Ambas sonrieron.

—Bueno, entonces en un momento vendrá contigo, iremos a mi oficina.

—De acuerdo joven Jeon.

[...]

Jungkook pensaba en todo lo que ocurrió en su vida en tan solo una semana, conocer a Edah había dado un giro inesperado a su alrededor, nunca se había sentido tan inquieto con la presencia de una mujer, mucho menos que lo sacarán más de quicio de lo que ya hacían.

Había terminado de realizar sus labores, incluyendo el platicar con sus socios, ahora estaba absorto a su trabajo y concentrado en sus emociones.

—Jungkook, me dijo Layla que revisaras estos documentos.

El pelinegro volteó a verla con el ceño fruncido, no sabía cómo es que actuara con normalidad y para colmo, entrara a su oficina sin tocar.

—Cuando entres a mi oficina, hazme el favor de tocar y pedir permiso, no debes entrar así.

—Que tu no escuches no es mi problema Jeon, ahora volviendo a lo anterior, Layla me pidió que revisaras estos documentos y los planos que tienen ahí, por favor.

Este la miró al instante, era difícil tratar con ella y que no se dejara intimidar por él.

—¿Siempre eres así?

—¿A que te refieres?

—Olvidalo, gracias por traer los papeles, puedes quedarte un momento.

Ella río levemente lo que dejó confundido a Jungkook.

—¿Ahora soy tu payaso?

—No, pero me causa gracia tu actitud, es todo.

Jungkook soltó una risa sarcástica y tomó los documentos rozando levemente las manos de Edah con las suyas, la cercanía de ellos no era poca, por lo que al verse sentían una pequeña chispa que diera señal de que algo podía ocurrir entre ellos.

Más aún cuando una rubia los veía atentamente con furia, sin llegar a entrar por notar aquella tensión que surgía en la pareja.

Porque el amor puede surgir de distintas maneras, aunque el primer paso era la atracción y el enamoramiento.

Algo que estaba surgiendo en ello dos...

HOLAAAA
ESPERO LES GUSTE EL CAPÍTULO, JURO QUE TENGO UNA SONRISA DE IDIOTA AL ESCRIBIR ESTO JAJAJA, ES QUE NO SABEN LO QUE SE VIENE HERMOSAS.

DÉJENME EN LOS COMENTARIOS QUE CREEN QUE SUCEDA.

¿QUÉ PIENSAN DE LAS INTERACCIONES DE EDAH Y JUNGKOOK?

NOS LEEMOS PRONTO (MAÑANA), BESITOS 😘