Con la mirada de Granger fija en la de el, pudo apreciar sus ojos con detalle, eran de tonos cafés, algo claro en algunas partes hasta parecer dorados y en otras un café como chocolate, además de dilatados, era simplemente hermosos.

Al darse cuenta de ese pensamiento sus mejillas se calentaron un poco, sintiendose nervioso, como una marica, apartó la mirada rápidamente.

- Ya termine, toma Granger, nos vemos - dijo Draco con su tono cortante, además de su fría mirada dirigida a ella recuperando la compostura, entregándole rápidamente sus pergaminos y salir disparado por la puerta perdiéndose entre los pasillos, evitando escuchar alguna respuesta o objeción por parte de Granger.

Estaba jodido, ¡Maldicion! Esta muy jodido.

(...)

Ya adentrándose en las mazmorras, soltó un pesado suspiro para luego entrar a su habitación, ignorando por completo quien estuviese en la Sala común.

Se tumbó en su cama y durmió un rato, luego de oir a Pansy llamarlo, se sobresalto, medio adormilado.

-¿Que quieres Pansy?, ¿que haces aquí?, no puedes estar aquí- dijo entre despierto y dormido, refregandose con el dorso de su mano sus ojos para dejar de ver borrosos por el sueño.

Pansy esbozó una sonrisa para luego soltar-Eso es más que obvio que lo sé, pero necesito hablar contigo Draco y los chicos sobre "el asunto", no quiero malos entendidos- haciendo un ademán de comillas con los dedos.

-Esta bien, pero que sea rápido, tengo un sueño del demonio- dijo el rubio platino bostezando, además de su cabello desordenado.

-Bien, te espero en la sala común- dijo la pelinegra saliendo del marco de la puerta de la habitación, hacia la Sala común de Slytherin.

Draco se levantó con un bostezo, luego entró a su baño y lavo su rostro para despertarse por completo, luego salió dirigiéndose a la sala común.

Ya en la sala común, estaban Blaise y Theo en un sillón y en el de en frente esta Pansy, así que Draco se sentó a su lado.

-Bueno chicos, ustedes saben que siempre han sido mis amigos, casi que desde que estábamos en el útero- soltó una risa nerviosa y luego suspiro para continuar- El punto por el que están aquí es porque les tengo mucho aprecio y no quiero que me apoyen por obligación si no porque de verdad lo quieren hacer por iniciativa propia, bueno me estoy desviando demasiado, bueno, bueno, estoy enamorada de Harry, Harry Potter... - término de decir dejando un silencio sepulcral.

-¿Qué, tú qué? ¿Desde cuando?- dijo en un hilo de voz angustiada Blaise.

- Ya lo sabia, tranquila Pansy yo te apoyo- dijo Theo observandolos con tranquilidad, y una media sonrisa.

-Desde hace un mes he estado saliendo con Harry, gracias Theo- dijo tranquila, se levantó y le dio un abrazo a Theo, Blaise aun los veía con una cara horrorizada y pasmada.

-No hay de que, mi pequeña- dijo Theo correspondiendo el abrazo.

Soltó un suspiro Draco - Pans, sabes que siempre te apoyaré, aunque sea el maldito San Potter, pero te advierto si ese maldito te hace algo, no vivirá para contarlo- dijo muy serio mirándola fijamente, se levantó, beso la mejilla de Pansy -Si es tu decisión, te apoyaré, lo sabes-

-P-pero están hablando de el imbécil de Potter- soltó Blaise descolocado.

Pansy se acercó a Blaise y le acarició el hombro- Blaise, sí,estamos hablando de Harry Potter, sé que para ti fue más impactante, pero tienes que entenderlo yo no decidí enamorarme, solo pasó- dijo con una sonrisa reconfortante.

-¡Maldicion, Pans! No puedo digerir todo esto es...es una ¡mierda! - se levantó molesto, rápidamente se fue a su habitación cerrando la con un portazo.

Pansy comenzo a llorar silenciosamente, luego Theo se levanto y la abrazó, al igual que Draco para reconfortarla.

-Pans, ya sabes como es, no le des importancia, suponía que actuaría así o peor- dijo Theo.

-Si, tal vez se hubiera levantado para ir a a buscar a Potter y darle una paliza-dijo Draco con una risa perezosa.

Pansy se detuvo de llorar más, y les correspondió el abrazó.

-Bueno chicos, gracias por apoyarme, pero de verdad estoy muy cansada el día de hoy ha sido muy pesado para mí - dijo con media sonrisa.

Se acercó a Draco y Theo y a cada uno les dio un beso en la mejilla, para luego irse a su habitación.