XXXIII. Tear Me To Pieces


CAPÍTULO TREINTA Y TRES
HAZME PEDAZOS



—¿Ya podemos salir?—pregunta Jesse—

—¡No!—responden Harry y Joe antes de colgar la llamada—

—Algo parpadea aquí—comenta Joe al mirar uno de los ordenadores—

Harry se acerca a él y observa la alerta.

—Viene de la comisaría—anuncia—

—Es Caitlin—confirma Joe—

—¿Qué pasa con ella?—pregunta Tessa entrando en el cortex junto a Barry—

—Envía un mensaje. "Rupture va a atacar Jitters esta noche"—lee Jay—Hay que darse precisa.

Tessa suelta la mano de Barry y se acerca al ordenador para mirar el mensaje de su amiga.

—¿Que vas a hacer campeón?—le pregunta Henry a su hijo, lo que hace que Tessa pose su mirada en él—

Tessa no conocía a Henry Allen, y era raro conocerle el mismo día que ella y Barry se declaraban sus sentimientos, pero no había tiempo para pensar en eso. Tenían que hacer algo y parar al metahumano que actuaría bajo las órdenes de Zoom al atacar el lugar donde se refugiaban la policía de Central City.

—Tener a Flash es la mejor forma de parar a Zoom y a todos los metas que envíe—admite Barry mirándoles a todos—Pero escuchad, hasta que sepamos seguro si explotar el acelerador funcionará, es demasiado arriesgado. No solo para mi, para toda la ciudad. Habrá muchísima gente que se verá afectada si la explosión no se contiene.

—Si, pero Allen...—habla Harry—

—Ya vale, Wells—le interrumpe—Perdona, pero he tomado mi decisión. Lo siento. Tendremos que hacer esto sin la ayuda de Flash.

—Entonces supongo que es mi turno—suspira Tessa llamando la atención de todos—

—¿De qué hablas?—pregunta Jay—Has perdido tu fuerza.

—No, no lo he hecho—niega ella con seguridad—No del todo. Puede que no recuerde la técnica, pero mi cuerpo recuerda los movimientos.

—Hablas de memoria muscular—asume Harry a su lado. Tessa asiente—Es la única solución, así que...

—No, no—niega Barry acercándose a ella—Es peligroso.

—Puedo hacerlo—le asegura ella—Confía en mi. Soy hija de Malcolm Merlyn, puedo con un estupido metahumano.

—¡Wonder Star al rescate!—exclama Cisco entrando al cortex—Genial, te traeré el traje y las armas. Pero... no machaques a Rupture ¿Vale? Es un metahumano, pero tiene la cara de mi hermano.

—Está bien—asiente ella—


Las miradas de los agentes de policía estaban posadas en ella. Algunas eran de desconfianza, otras simplemente intentaban averiguar su identidad aprovechando que no llevaba ninguna máscara y otros simplemente admiraban sus armas y su traje sintiéndose aliviados de no enfrentarse solos a Zoom y sus metahumanos.

—Todo está preparado—anuncia Barry llegando a su lado—¿Seguro que éste es el mejor plan?

—Puedo hacerlo—le asegura ella cerrando los ojos para concentrarse—Solo necesito dejar la mente en blanco y mi cuerpo lo hará todo.

—Defensa no ataque ¿cierto?—le pregunta—

—Si—suspira—Pero aún tengo esto.

Levanta su mano e ilumina el polvo de estrellas.

—Puedo dormirle, cegarle... Es bastante útil—sonríe—

—¿Crees que mi decisión es correcta?—inquiere nervioso—

—No lo sé—admite ella—Pero lo sea o no, es tu decisión y deberás vivir con ello.

—Ya—suspira bajando mirada—

—¿Estáis listos?—les pregunta Joe situándose a su lado—

—Listos—afirma Tessa—

Barry asiente y deposita un suave beso sobre la frente de Tessa, lo cual no pasa desapercibido para Joe.

Los policías pasan por su lado y se resguardan tras la barra. Jay llega a su lado y entrelaza su mano con la suya para darle apoyo antes de alejarse de ella junto a Joe y el jefe de policía Singh.

—¿Lista, Tess?—pregunta Cisco a través de las comunicaciones—

—Si, lo estoy—le asegura ella observando la puerta de la cafetería—Ya está aquí.

Rupture usa su guadaña mágica y rompe las puertas acristaladas del local, pero Tessa se queda quieta como si nada hubiese pasado. Rupture la observa e inclina su cabeza confuso.

—Bienvenido—le saluda Tessa—¿Te apetece un café?

—Buscó a la policía—aclara él con molestia—

—Lo siento, no puedo dejar que los toques—le dice—

Rupture hace girar su guadaña y con ella le dispara una especie de rayo de luz. Tessa lo esquiva y se acerca a él con la intención de quitarle el arma de las manos, pero él le pega una patada en el abdomen, lo que la lanza lejos.

Tessa se levanta con rapidez y cierra sus ojos para concentrarse mientras Rupture prepara de nuevo su guadaña para dispararle.

Mente en blanco y sólo pensando en su familia y amigos, Thea, Tommy, Sara, Oliver y Barry, Tessa esquiva su disparo, le pega una patada y lleva su mano hacia sus ojos para usar el polvo de estrellas y cegarle.

Joe y Singh salen de detrás de la barra y disparan sus pistolas anti metahumanos contra él, lo que le aturde lo suficiente para que Jay le ponga unas esposas.

—¿Nos buscabas a nosotros?—le pregunta—Espero que te guste la soledad, porque en la cárcel no estarás con nadie.

—Lo tenemos—anuncia Joe por la radio—Todo ha ido bien.

Cisco y Barry comparten una mirada y sonríen orgullosos de Tessa, quien a pesar de sus dificultades para pelear se las había arreglado para parar a Rupture sin apenas llevarse un golpe.

Sin embrago en ese instante Zoom llega al lugar haciendo que todos se ponga alerta.

—Graba bien esto—exige Zoom mirando al único periodista del lugar, quien sujetaba una cámara sobre sus hombros—

—¿Pero que...?—murmura Cisco al ver las imágenes—

—Tienen que salir de ahí—dice Barry con nerviosismo—

—¡Todo el mundo fuera!—grita Joe con desesperación, pero nadie es lo bastante rápido para hacerle caso—

Zoom hace uso de su velocidad y rompe el cuello de todos los presentes, a excepción de Joe, Jay, Tessa, Singh y Rupture.

—Te avísese de lo que pasaría si me desobedecías—habla Zoom mientras sujeta a Tessa del cuello—

—¡Jay, para!—exclama Barry entrando de nuevo al Jitters—¡Para! Ya has demostrado tu fuerza.

—Todavía no del todo—niega él—

Lanza a Tessa contra la pared y sujeta a Rupture contra una de las mesas.

—Eres aún más decepcionante que tu hermano—le dice antes de matarle—

Barry corre hacia Tessa mientras que Zoom camina hasta la cámara del periodista y comienza a grabarse para que todo el mundo vea su mensaje.

—Central City, el Flash que veis en vuestras calles es falso—anuncia—Un holograma diseñado para daros esperanza. Pero ya no hay más esperanza. Ya no hay más Flash. Ya no hay nadie que pueda proteger vuestra ciudad de mi.

Sujeta la cámara y posa su mirada en Singh.

—Dígale al resto de sus hombres, Capitán, que sus días de policía han terminado—le ordena antes de mirar a Barry, quien sujeta a Tessa para ayudarla a levantarse—Y vosotros, solo estáis vivos gracias a Caitlin. Como volváis a intentar algo así, mis sentimientos por ella no me impedirán mataros. Y cualquier resto de esta ciudad.


—Va más rápido de lo que iba en mi Tierra—comenta Harry—

—¿Y ahora qué?—le pregunta Iris—

—Reclutará a todos los metahumanos que encuentre y les obligara a seguirlo.

—¿Cuantos pueden quedar?—pregunta Joe—Hemos vencido a la mayoría.

—No, ni mucho menos—le asegura Harry mostrándoles una lista de nombres en la pantalla principal del cortex—Estos son la mayoría de los matahumanos de mi mundo. Al menos los conocidos. La explosión del acelerador fue contenida en mi Tierra, eso no pasó aquí.

—¿Por qué no conocemos a más metahumanos aquí?—inquiere Jay—

—Por Flash—señala Tessa mirando a Barry, quien se encuentra a su lado con cara pensativa—

—Pero ahora que saben que ya no está...—habla Iris—

—Saldrán de debajo de las piedras—completa Cisco—

—Eso no lo sabemos—habla Henry Allen—

—¿Qué más necesitáis?—cuestiona Harry con frustración—Dije que reclutaría metahumanos y lo ha hecho. Dije que mataría a esos agentes y también lo ha hecho. ¿Qué más necesitáis?

—Lo haré—habla Barry llamando la atención de todos—Quiero hacerlo.

—Barry...—murmura Tessa a su lado—

—Uno de los agentes que ha matado Zoom tenía un hijo de la edad que tenía yo cuando mataron a mi madre—habla él—Y ahora, otro niño tiene que crecer sin uno de sus padres porque Flash no estaba ahí para parar a ese monstruo. Deje a esta ciudad desprotegida al darle mis poderes a Zoom. Le permití dominar este mundo. Necesito recuperarlos. Así que hagámoslo. Explotemos el acelerador de partículas.

Harry le mira y asiente de acuerdo con su decisión.


—Es una mala idea, es una horrible idea—comenta Tessa caminando por los pasillos de los laboratorios—

—Tessa...—murmura Barry—

—No, no. No intentes convencerme—niega ella con frustración—Es una mala idea. ¿Y si no sale bien? ¿Y si te pasa algo? Barry, he tendió suficientes pérdidas en mi vida, no puedo perderte a ti.

Barry suspira y frena en seco para sujetarla de las mejillas y hacer que le mire a los ojos.

—No lo harás—le asegura—No me perderás.

—Eso no lo sabes—se queja intentando retener sus lágrimas—

Barry la mira sin saber que decir, pues ella tenía razón, no podía saberlo. La atrae hacia él y deposita un suave beso en sus labios.

—Confía en mi—le pide entrelazando su mano con la de ella—

Tessa suspira y aprieta su agarre para adentrarse en la sala donde se llevaría a cabo el plan. Una vez dentro, las miradas de todos se posan en ellos y en sus manos entrelazadas, pero pronto la atención vuelve a la máquina que Harry estaba preparando con la ayuda de Cisco.

—Y... ¿Cómo funciona esto?—pregunta Iris—

—Es una versión abreviada del acelerador que construyó el Wells malo, pero Harry esta aislando la antimateria y la energía oscura para dirigirla hacia Barry en vez de a toda la ciudad—le responde Cisco—

—Bien, no necesitamos más metahumanos sueltos por Central City—comenta Joe—

—Entonces... Barry se mete ahí, lo encendéis y... ¿Ya está?—pregunta Tessa con nerviosismo—

—Si—asiente Harry mirándola—No. No exactamente. Además de recrear lo que pasó con la explosión del acelerador también hay que recrear lo que le pasó a Barry.

—Que me de un rayo—asume él—

—Eso es.

—¿Pero como piensas hacerlo?—inquiere Iris—No está lloviendo.

—Bueno, Ramon ¿Tienes la varita?—pregunta Harry hacia el latino—

—¿La que hice para Weather Wizard?—cuestiona él con confusión—

—No, la de la convención de Harry Potter—le responde con sarcasmo—Si claro, la que hiciste para Weather Wizard.

—¿Como sabes lo de la convención?

—Coge la varita y sube a la azotea—le pide Harry—

—¿Por qué allí?—pregunta Jay—

—Necesitamos un pararrayos—contesta—Y ese, Ramon, vas a ser tú.

—Genial—suspira asustado—

Sale de la sala y después de recoger la varita de su taller sube hasta la azotea mientras Barry se mete en la máquina de Harry.

—Ya he llegado—anuncia Cisco por comunicaciones—No había subido nunca. Creo que veo mi casa desde aquí.

—Ve directo a la antena, Ramon—le ordena Harry—Y cuando te dé la señal vas a crear una tormenta eléctrica justo encima.

—¿Y tendré que quedarme en medio de una tormenta?

—De verdad, Ramon, la posibilidad de que te caiga un rayo es mínima.

—Ya, no si eres tú el que lo provoca—comenta él—

—Solo necesitamos que un rayo caiga sobre la antena que está conectada con la sala de la brecha, donde está Barry—le explica—Tú hazlo.

—Si, yo lo hago—suspira el latino—Mozart, ten mucho cuidado, Cisco Ramon va a dirigir algo muy feo.

Tessa sonríe ante su comentario, pero la voz de Harry hace que su atención vuelva a Barry.

—Vas a notar los grilletes, pero son necesarios—explica Harry hacia el velocista—

—¿Estas bien?—le pregunta Joe—

—Si. ¿Y tú?—le pregunta Barry. Joe no responde—Todo irá bien, Joe.

Él asiente y se aleja de él, entonces la atención de Barry recae sobre Tessa, quien le observa preocupada, pero aún así se las arregla para dedicarle una leve sonrisa tranquilizadora.

—Confío en ti—le dice mirándole a los ojos odiando no poder acercarse a él y besarle—Y pase lo que pase, estaré aquí, a tu lado.

Barry la mira y asiente con una leve sonrisa.

—Tessa—la llama en un susurro—Te amo.

Ella también le amaba, lo hacia, pero esas dos palabras la dejaron completamente congelada. Así que con una simple pequeña sonrisa se da la vuelta y se aleja de él para reunirse con los demás junto a los monitores mientras lleva su mano hacia su collar, intentando así tranquilizarse.

—Hijo—habla Henry mirando a Barry a los ojos—No tienes porque hacer esto si no quieres hacerlo.

—Ser Flash es lo mejor para mi—le dice con los ojos llorosos—Y si no tengo mi velocidad nunca más seré esa persona. Tengo que hacerlo.

—Está bien.

—¿Preparado, Allen?—inquiere Harry. Barry asiente en respuesta—Muy bien. Vamos haya.

Las puertas de cristal se cierran para aislar a Barry mientras Wells comienza a recrear todo lo que pasó la noche que Barry consiguió sus poderes.

—¡Ramon!—exclama—Prepárate. Voy a ponerle las sustancias químicas.

Activa las inyecciones y entonces Barry comienza a quejarse de dolor.

—¿Por qué le haces eso?—pregunta Tessa con preocupación—

—La noche en que Barry fue alcanzado por el rayo estaba analizando huellas dactilares. Estos compuestos entraron en su sangre entonces y lo van a hacer ahora—le responde Harry—

—¿Es que se los estas inyectando?—cuestiona incrédula—

—Tengo que recrear todo lo que le pasó a Barry aquella noche.

—Estoy bien, Tessa—habla Barry mirándola a los ojos—Estoy bien.

—Aguanta, Barry—le pide Joe—

—Está entrando en shock—anuncia Henry mirando los signos vitales de su hijo—

—Ya casi está, ya casi está—asegura Harry—¿Preparado, Ramon?

—Preparado—asegura elevando la varita hacia el cielo—¡Expecto Patronum! Santo cielo, funciona.

Tessa aprieta su agarre en su colgante cuando el rayo alcanza a Barry y la explosión tiene lugar. La materia oscura le envuelve y entonces su cuerpo comienza a descomponerse como si de polvo se tratara.

La materia oscura explora y atraviesa las puertas de cristal haciendo que todos los presentes caigan al suelo mientras la materia alcanza a Jesse y Wally, los cuales se las habían apañado para salir de la sala del tiempo.

—A funcionado—habla Cisco entrando en la sala—¿Estáis bien? ¿Que ha pasado?

—No, no, no, no—niega Tessa con desesperación—¡Barry!

Su grito lleno de dolor y rabia deja a todos aún más en shock.

Barry estaba muerto.

—¿Qué le has hecho a mi hijo?—exige saber Henry—

Harry le mira sin saber que decir, pero en ese instante Zoom llega al lugar y sujeta lo único que queda del traje de Flash entre sus manos.

—¿Pensabais que podíais devolverle a Flash su velocidad?—les pregunta incrédulo—Bien hecho, habéis conseguido matarle.

Suelta el traje y vuelve a desaparecer.

Tessa niega desesperada y se da la vuelta buscando los brazos de su mejor amigo. Jay la rodea en un abrazo y la deja llorar sobre su hombro mientras Cisco se acerca a la máquina.

Si Tessa no lo creía antes, ahora seguro que si. Cada persona a la que amaba acababa muerta, y ni Barry pudo escapar de esa maldición.

Bạn đang đọc truyện trên: AzTruyen.Top