CAPÍTULO DIECISÉIS
NO ME CONOCES EN ABSOLUTO

A Tessa no le pareció nada raro que Lyla y Diggle volvieran a casarse después de haberse divorciado años atrás. Ellos eran ese tipo de pareja que a pesar de las dificultades siempre conseguían volver al otro, y ahora tenían una hija en común, simplemente parecía correcto volver a casarse.

Y lo bueno de estar saliendo con un chico era no tener que ir sola a la boda, y, por suerte, Jay tenía el día libre, así que después de preparase y de que él la fuera a recoger, se adentraron la sala de bodas donde los invitados se encontraban.

—Hey—sonreí Tessa al ver a Oliver y a John—

—Gracias por venir—le dice Diggle con una sonrisa—Vienes acompañada.

—Oh, si.

—Encantado. Jay Halstead—se presenta el chico estrechándole la mano—

—John Diggle—le sonríe él—Si le haces daño nunca encontrarán tu cádaver.

Ante sus palabras, Jay ríe nervioso mientras que Tessa rueda los ojos.

—Si, perdonadme—sonríe Diggel cuando su teléfono comienza a sonar—

—Eres inspector de policía ¿cierto?—le pregunta Oliver a Jay, una vez su amigo se a alejado de ellos—

—Si, así es. Trabajo con Lance.

—Entonces serás un buen policía—sonreí Felicity al llegar a su lado junto a su acompañante—Felicity Smoak, un placer.

—Lo mismo digo—sonríe Jay—

—Ray Palmer—habla el hombre junto a Felicity—Tú debes de ser Tessa Merlyn.

—La misma—sonreí la castaña—Me alegra saber que Felicity habla de mi. Todo cosas buenas, espero.

Ray asiente y sonríe.

—Que raro ¿no?—habla entonces mirando a Oliver—No nos vemos en cinco meses y ahora dos veces en dos semanas.

—Si, me alegro de verte Ray—le responde Oliver con cortesía—

—Lo mismo digo.

—Era Lyla—habla Diggle volviendo a su lado mientras cuelga su teléfono—Un amigo suyo, Rick, iba a oficiar la ceremonia, pero le han enviado a Sudán.

—¿No tienes pastor?—le pregunta Oliver confuso—

—No.

—Vale, sacaremos un certificado online—propone Felicity—Solo necesito wifi y tres minutos. No es que quiera oficiarla yo, aunque si quieres sería un honor.

—Oh, yo también puedo—habla Ray—Soy pastor. Es una larga historia.

—Genial, solucionado—sonríe Tessa—

Diggle asiente y observa a Ray con sorpresa.

Aunque la ceremonia había sido preciosa, el banquete y el baile se habían visto interrumpidos por la noticia de que Arrow había vuelto a matar. Debido a eso, Laurel, Ray y Jay tuvieron que irse a una rueda de prensa con la alcaldesa y el Capital de policía, Quentin Lance. Mientras que los demás se fueron directos a la guarida para verla a través de las noticias.

—Ha habido ocho víctimas en total atravesadas con flechas—habla Lance en la rueda de prensa—Sin embrago, una escapó y tenemos su testimonio.

—Aunque no hay nadie que lo corrobore—habla Laurel a su lado—Así que la fiscalía del distrito va a continuar investigando antes de presentar cargos.

—¿Entonces que pasa? ¿Está implicado Arrow o no?—cuestiona una periodista—

—Todavía no estamos seguros—le responde la alcaldesa—Ahora va ha hablar el señor Palmer.

—Cuesta mucho olvidar todo lo que ha echo Arrow por esta ciudad—habla Ray a su lado—Pero es igual de difícil ignorar las pruebas que le señalan. En cualquier caso, necesitamos detener a Arrow y traerle, sino como testigo, como imputado.

—Yo... no sabía que fuera ha hacer esto—murmura Felicity sorprendida por las palabras de su actual pareja—

—Y voy a dedicar mis sustanciosos recursos a asegurarme de que sea apresado—termina de hablar Ray—

Oliver suspira frustrado y apaga la pantalla.

—Habla con Lance y dile que no fuiste tú—propone Roy—

—Mi palabra no tiene mucha validez para él—le responde—

—Entonces buscad al culpable—propone Lyla—Averiguad quien hace esto y por qué.

—Ya sabemos quien es—habla Felicity—La Liga de Asesinos.

—A Ra's al Ghul no le gusta ser rechazado—asume Diggel—

—Quiere forzarme a aceptar—suspira Oliver con frustración—Quiere volver a la ciudad contra mi para que su oferta sea más atractiva.

—¿Su oferta de qué?—pregunta Tessa con confusión—

—De ser su heredero—le responde Oliver—De convertirme en el nuevo Ra's al Ghul.

—Ya claro, porque eso tiene sentido—suspira ella—No se porque me sorprendo ya.

Felicity no dejaba de investigar mientras que Tessa y Oliver entrenaban la lucha con espadas, lo cual era divertido, pues Tessa solía acabar ganando cada duelo.

—¿Hay algo?—pregunta Oliver cansado de perder—

—He entrado en las cámaras de tráfico, en los cajeros, en el teléfono de Emergencias y en la radio policial—responde Felicity—Ni rastro del Arrow malo.

—Los Halcones van a recibir un gran cargamento de drogas. Toda la banda estará allí—anuncia Roy entrando a la guarida—Eso es justo la clase de cosa que perseguiría el falso Arrow.

—Necesitamos otro nombre para él—comenta Tessa—

—¿Cuando ocurriera?—cuestiona Oliver ignorando su comentario—

—Ya mismo—responde Roy—Me cambiare.

—Roy, esto es la Liga—le recuerda Oliver—Iré solo.

Él asiente y comparte una mirada con Felicity mientras Tessa rueda los ojos frustrada por no poder acompañarle. Estaba empezando a cansarse de la sobreprotección de Oliver hacia ella.

Desde que la gente creía que Arrow era un asesino, Tessa no había podido quedar con Jay, pues tenía mucho trabajo, así que ella se pasaba la mayor parte de su tiempo en la guarida. Pero esa tarde se sorprendió al ver a Oliver ya allí.

—Oye, no te pregunte, ¿Ra's al Ghul soltó a mi padre por la oferta que te hizo?—le pregunta mientras se quita la chaqueta—

—Si—suspira Oliver—Pero no te preocupes por Malcolm, está con Thea. Esta herido pero vivo.

—No me preocupo por él—le asegura ella—Me preocupo por Thea. ¿Como se te ocurre dejarle con ella?

—Tenemos problemas más importantes—se queja mirado dos flechas—Mira esto.

Tessa suspira y se acerca a él con confusión.

—¿Que pasa?

—Esta flecha es nuestra—le señala una—Y esta es de la Liga.

—No veo la diferencia—admite Tessa—

—No. No la hay. Son idénticas.

—Lo sabe—habla Felicity con nerviosismo al entrar en la guarida—Dios, lo sabe. El año pasado, los del Mirakuro mataron a la novia de Ray. Y ahora él quiere proteger la ciudad, así que creo un traje con tecnología militar y quiere meterte en la cárcel. Ha usado mi software para encontrarte y escanear tus facciones. Y ahora sabe que tú eres Arrow y se lo dirá a la poli.

—¿Palmer sabe que soy Arrow?—le pregunta sorprendido. Felicity asiente entre lágrimas—¿Y cree que su misión es proteger la ciudad? ¡¿Cuando me lo ibas a decir?!

—Ollie deberías tranquilizarte un poco—murmura Tessa al ver la cara de Felicity—

—Hoy todo el mundo me gritan—murmura la rubia—Oye, eso no importa. Lo importante es que va a contarle a la policía quien eres.

—Espera, ¿Has dicho que Ray ha creado un súper-traje?—le pregunta Tessa recordando su explicación—Es alucinante.

Oliver se da la vuelta y le dedica una mirada asesina.

—Digo, horrible y arriesgado—se corrige con rapidez—

—Debe de estar camino de la comisaría—vuelve ha hablar Felicity—¿Que vamos ha hacer?

—Llamar a Laurel—propone Tessa—Ella lo arreglará.

—Si, haz eso—acepta Oliver—

Felicity asiente y coge su teléfono con rapidez.

Laurel había dio a la comisaría e impedido que Ray pudiese hablar con nadie. Pero todos sabían que eso no iba a quedarse ahí, así que Tessa decidió ir a Tecnologías Palmer a la mañana siguiente.

—Tessa Merlyn—sonríe Ray Palmer al verla entrar en su despacho—¿O prefieres Wonder Star?

—¿Súper-traje?—pregunta ella cruzándose de brazos e ignorando su pregunta—

—Prefiero Atom—admite él—Debo admitir que me sorprendió ver tu nombre en mi agenda esta mañana. Pensé que si alguien iba a venir a amenazarme sería el propio Oliver.

—Yo no vengo a amenazarte—le asegura ella—Laurel Lance me llamo.

—Ya, Black Canary—suspira él—Ella intento callarme, pero sin resultado.

—Oliver no mató a esas personas—le asegura Tessa con seriedad—

—Eso dice Felicity—comenta él—Alguien le suplanto ¿no? No me gusta eso.

Se levanta de su escritorio y camina hacia ella.

—Cinco años en una isla desierta, algo así te cambia. Habrá sido difícil, si no imposible, para Oliver conservar la cordura durante esos años.

—Felicity te dijo la verdad—insiste ella—Deberías confiar en ella.

—Su imagen de Oliver esta confusa a causa de sus sentimientos—apunta Ray—Ella no ve a Oliver tal y como es.

—Mira, Ray, me caes bien, de verdad—le dice Tessa acercándose a él—Pero no conoces en absoluto a Oliver ni a ninguna de las personas que crees tener caladas. Ninguno de nosotros va a matarte, pero te recomiendo que seas mas listo. Tú no tienes ni idea de a qué se enfrenta esta ciudad.

—¿A tu padre por ejemplo?—le pregunta él—

—La punta de un iceberg muy grande, Palmer. Créeme.

Después de su charla con Ray, Tessa recibió un mensaje de Felicity para que fuera a la guarida a prepararse y luego a una fábrica conde habían echo una llama de emergencias. Sin embrago, en aquel lugar no parecía estar pasando nada.

—Aquí no hay nadie—se queja Roy al ver a Oliver acercarse a ellos—

En ese instante Ray aparece en el lugar con su súper-traje, el cual le permite volar.

—Estaréis defraudados. Siento no que haya nadie a quien matar—les dice—Veréis, yo falseé esa llamada a Emergencias.

—Palmer—se queja Oliver—

—Os diría que tenéis derechos pero no soy policía.

Estira su brazo y les dispara con una especié de rayo atómico, pero ellos consiguen esquivarlo. Tessa da una voltereta y al volver a estar en posición, tensa su arco y le lanza una flecha a Ray, pero esta no le hace nada.

Ray baja al suelo y cuando Roy va a atacarle él le dispara con su rayo atómico dándole de lleno y lanzándole hacia otro lado.

Oliver defiende a su compañero lanzándole una flecha a Ray, pero él se eleva en el aire y al volver volando, empuja a Oliver al suelo.

—Se acabó—asegura listo para volver a disparar—

—No, no lo ha echo—habla Tessa colocándose frente a Oliver—

Ray dispara y ella une sus brazaletes poniendo sus muñecas en forma de cruz, lo que hace que el rayo atómico de Ray rebote y le dé de lleno a él.

Oliver se levanta con cuidado y se acerca a Ray, quien intenta levantarse con dificultad, pues su traje se había estropeado por el impacto.

—Si fuera como tú crees, te mataría a ahora mismo—le dice apuntándole con su arco—Te dijimos que nos dejarás en paz. Y no nos has echo caso.

—Mátame, adelante. Así Felicity verá la clase de hombre que eres—le responde Ray—

—Yo no tengo nada que demostrarle—le asegura Oliver bajando su arma y guardando su flecha—Pero tú si.

Estira su mano y le ayuda a levantarse.

—Te ha elegido a ti. Confía en ella.

—Hey—sonríe Jay al ver a Tessa entrar en la comisaría—¿Que tal tu día?

—Raro—admite ella—No tan ajetreado como el tuyo, supongo. ¿Estas listo?

—Si—asiente colocándose su chaqueta—Había pensado que podríamos ir a tomar algo, pero antes tengo que ir a la oficina de la alcaldesa un momento.

—Claro, ¿Puedo ir?—le pregunta con interés—

—Si, no creo que haya problema—admite él—Vamos.

Estira su mano hacia ella y Tessa no duda en cogérsela con una sonrisa. Jay le devuelve el gesto y la acerca hacia su pecho para depositar un beso cariñoso en su cabeza.

Juntos y de la mano caminan hacia la alcaldía y de allí hasta el despacho de la alcaldesa, donde separan sus manos y Tessa se queda al margen de la conversación.

—Se de buena tinta que no ha sido él—habla Ray Palmer—

—Un momento, Ray—le pide la alcaldesa—¿Me estas diciendo que Arrow es inocente?

—De estos crímenes, si—aclara él—Le han tendido una trampa.

—Deberíamos informar a la prensa—habla Jay—

—¿De qué?—le pregunta Quentin incrédulo—¿De que el ricachón a cambiado de opinión?

—Capitán, creo que está dejando que sus sentimientos personales por Arrow nublen su juicio—le dice Laurel con molestia—

—Puede que vea las cosas más claras de lo que las he visto en años.

—¡Está bien, ya basta!—les pide la alcaldesa—Estoy harta de esta...

Una flecha es disparada desde otro edificio, atraviesa la ventana y se clava en el corazón de la alcaldesa, quien cae al suelo muerta.

Jay saca su pistola con rapidez y apunta hacia la ventana con la esperanza de ver al tirador y disparar mientras que el resto de presentes en el lugar comienza a moverse nerviosos para llamar a los de seguridad y emergencias.

Entonces otra flecha es disparada hacia Tessa, pero ella consigue pararla con su brazalete. Jay responde a los disparos pero se queda congelado al ver los brazaletes de la chica.

—Tú... eres...—murmura confuso—

—Si, si, ya lo hablaremos—le dice ella empujándole para ponerle a cubierto—

—Soy el Capitan Lance—habla Quentin al coger su teléfono—Disparos en el Ayuntamiento. El sospechoso huye. Necesito a la científica y una ambulancia.

Cuando los disparos cesan Tessa desactiva sus brazaletes y estos vuelven a su forma natural de pulseras metálicas.

—¿Estáis bien?—pregunta Laurel acercándose a ella y a Jay—

—Si—suspira Tessa—

—Él no—habla Jay acercándose a Ray con rapidez, pues el hombre tenía una flecha clavada en el pecho—