—¡pensé que estabais muertas! ¿estás loca?— le grito alice quien estaba a un lado de bella mirándola— ¡por Dios!

—Hola para ti también, supongo— sonrió de lado.

—¡me espero ese tipo de locuras de bella! ¿Pero de ti?— se acercó a abrazarla recibiendo un abrazo algo tenso— te lo pido, sabes que yo nunca te dejaría si no hubiera sido por tu bien, no seas así conmigo.

La chica suspiró sabiendo que si todos s e habían ido había sido culpa de Edward y Emmett, sabía que debéis estar molesta pero toda su fuerza para no perdonar la guardaba para Emmett.

—te extrañe— la abrazo devuelta.

Las tres chicas se sentaron en el sofá sonriente, se sentía como los viejos tiempos solo había un problema Venus no era la misma de antes.

—No se de nadie que arriesgue su vida de manera mas estupida que ustedes dos — rió la de pelo corto ganándose una sonrisa de parte de Venus.

—yo solo sigo a la loca esta— bromeó señalando a bella— ¿como han estado ustedes?

—es difícil, Edward y Emmett no están con nosotros, también hacen falta ustedes — sonrió la chica— no hicimos esto por que quisimos, Vee.

—lo sé alice, lo sé.

—¿le dijiste a Edward?— preguntó Bella interrumpiendo la conversación.

—no se lo dije a ninguno de los dos, llaman una vez cada cierto tiempo— miro el suelo la chica— dicen que quieren estar solos.

—no me sorprende...— río con ironía la italiana.

—¿que es ese horrible olor a perro mojado?— pregunto alice de la nada.

—debo ser yo— rió Venus quitándose el abrigo de Paul— bueno Paul, también Jacob— señaló a Bella quien hacía lo mismo.

—¿quienes son esos?

—Paul Lahote y Jacob Black— especificó Venus.

—son algo así como hombres lobos— admito Bella.

—¡guardas secretos de manera excelente, hermanita!— le reclamo sarcástica la italiana, si bien confiaba en alice ciegamente no era un secreto suyo para compartir y tanto como no se había permitido decirle a Paul sobre Emmett, no estaba en ella decirle a los Cullen sobre los chicos de la reserva.

—¡chicas! Los hombres lobos son mala compañía— les reclamo la vampiro.

—habla por ti misma— gruño Paul entrando a la casa junto a Jacob— tenía que asegurarme de que estabas bien— la miro a los ojos sacándole una sonrisa.

—pensé que no podían protegernos aquí— hablo Bella confundida.

—supongo que nos da igual— respondió Jacob.

—Bueno yo no voy a hacerles daño— se defendió Alice.

—En eso tiene razón— se levantó del sofá Venus, sabía como era Paul y como podía reaccionar ante la mínima provocación involuntaria de la chica Cullen.

—Eres solo un Cullen inofensiva, habló de la chupasangre que intentó matarlas a ambas por vuestra culpa— ataco paul, Venus se colocó frente a él cosa que alice no dejó pasar por alto.

—¿victoria?— preguntó en total confusión la, al parecer los Cullen no tenían idea de que la chica estaba allí.

—si, ha estado por aquí— comentó Bella.

—No la he visto, tampoco vi cuando os sacaron del agua— miro a ambas chicas extrañada, hasta que se dio cuenta de que pasaba—¡no puedo veros a vosotros y a su banda de chuchos!— le reclamo a ambos chicos.

—no lo hagas enfadar alice— le dijo Venus refiriéndose al chico detrás de ella quien no hablaba pues sabía que si lo hacía las cosas terminaran muy mal.

—O las cosas se pondrán muy feas— siguió Jacob haciendo que bella se pudiera en medio de estos dos también.

—paren, por Dios— bella grito dándole una mirada a alice que la chica captó de inmediato.

—os daré un minuto— se acercó a la puerta de la casa.

—alice— la llamo Venus— no te vayas por favor, quiero hablar contigo— pidió pues extrañaba a su amiga.

—volveré desde que saquen a los perros— sonrió saliendo de la casa.

Jacob siguió a Bella hasta la cocina mientras Venus se mantenía en la sala junto a Paul.

—¿te irás con ella? ¿Iras tras el? — preguntó preocupado el chico.

—lo amo esta bien, no voy a negarlo— sonrió de lado— me costará tiempo superarlo completamente y que no se me acelere el corazón al verlo pero el se fue, el me dejó y para mi eso es suficiente para saber que no me merece, quiero darme una oportunidad contigo— acaricio su mejilla— pero no quiero prometerte nada, no quiero que sufras por lo tanto necesito que estés claro de mis sentimientos, me gustas pero amo a Emmett y creo que no es suficiente para ti, por lo tanto si decides no tratar lo entenderé completamente.

El chico le sonrió atrayéndola a él.

—el hecho de que seas tan honesta conmigo me es más que suficiente para saber que quiero tratar de tener algo contigo y si las cosas no van como queremos, podremos siempre ser amigos— beso sus labios suavemente— no quiero perderte pero tu felicidad va antes que nada y si no es conmigo, lo entenderé.

La chica lo abrazó fuertemente sintiendo su calor en volverla para comenzar a besarla con una sonrisa pero los gritos de bella y Jacob en la cocina los interrumpieron.

—¿quien era, Jacob?— gritaba la chica.

Venus se levantó para ver que pasaba cuando alice entró corriendo,

—¡Emmet y Edward piensan que estáis muertas!— informó la chica con una gran cara de preocupación.

—¿por que no me dejaste hablar con él?— grito la castaña a Jacob.

—¡bella!— la alejó del chico Venus mientras Paul se acerca a Jacob que parecía capaz de perder el control en cualquier momento.

—no tenemos tiempo, van hacia los Vulturis quieren morir también— tomo a bella por los hombros alice— tenemos que ir con ellos.

Bella asintió subiendo a buscar su mochila sin dudarlo y Venus solo miro a alice con duda, su ira le decía que dejara a Emmett hacer lo que quería ya no era su problema pero su moral, sus reglas de vida no se lo permitían pues no era su ex novio en este momento era el hermano de alice, el hijo de esme y era un chico que tenía una familia que estaría devastada si lo perdía, también sabía que ambas chicas juntas serían un desastre en Italia solas.

—maldita sea— gruño antes de subir a buscar sus cosas.

[...]

—lo hago por ellos, esto no significa nada— le susurro a Paul mientras lo abrazaba y el chico sonrió tristemente.

—no te mientas a ti misma, significa algo pero yo te estaré esperando, necesito que vuelvas ¿me escuchas?— colocó sus manos a ambos lados de la cara de la chica acariciando sus casi im notables pecas.

Mientras alice buscaba el auto y Jacob y Bella solo se gritaban, ellos estaban en su momento.

—volveré, lo prometo— beso sus labios cortamente antes de subir al auto.

—bien— susurro alice tratando de ignorar aquel beso y arrancando el auto directo al aéreo puerto.

[...]

—¿lo amas?— pregunto la de pelo corto cuando Bella se durmió.

—¿a quien?— preguntó confundida la chica.

—al lobo, ¿lo amas?

Venus miro por la ventana del avión para luego negar con la cabeza.

—le quiero alice, pero por desgracia amo a tu hermano y se que así será por un largo tiempo—la miro.

—¿por que estás con él entonces? Sabes que volverás con Emmett ¿no?— sonrió la chica.

—Alice, yo no soy Bella— río negando— tu hermano me destruyo completamente cuando me dejó en ese bosque, no creo que puedas imaginarte las cosas que me dijo y te seré sincera por más que odie admitirlo todavía tiene una oportunidad de recuperarme pero no será fácil, no voy a correr a sus brazos y decirle cuanto lo amo al verlo, hago esto por ustedes no por el.

Alice asintió pues se esperaba aquella respuesta de la chica, era testaruda y extremadamente fuerte, Emmett había cometido un error un error que Alice le ayudaría a enmendar así fuera lo último que hiciera.