XIV | no eres mi padre
—¡Isabella debes calmarte!— gritaba Venus corriendo escaleras arriba detrás de la castaña quien acababa de cerrar la puerta en la cara a Edward.
—¡Chicas! ¿Qué pasó?— corrió el hombre tras las chicas preocupado, Loralai estaba de turno y él no sabía cómo lidiar con problemas de amores.
—¡Tengo que irme de aquí!—grito la castaña.
—Iré contigo, no puedes irte así— le reclamo venus.
Ambas entraron a sus habitaciones a preparar sus maletas encontrándose con sus respectivo novios.
—¿Que pensará mama?— miro preocupada al peli negro— ¿puedo decirle?
Emmett suspiró y lo pensó un segundo.
—Si, supongo como sabe de nosotros podrías explicarle para ver si logra tranquilizar a Charlie— acaricio su mejilla tratando de calmarla, estaba preocupada no quería herir a Charlie y tampoco a su madre— buscaré mi auto, nos vemos fuera.
Venus abrió la puerta viendo cómo Bella entraba al baño a buscar sus cosas lanzándole las suyas a Venus.
—Tienen que explicarme qué pasó— grupo en hombre.
—Charlie, ella no está bien la cuidaré— trato de tranquilizarlo venus.
—¿te hizo algo?— pregunto a bella— ¿termino contigo o algo así?
—¡Yo termine con el!— cerró su puerta en la cara.
—No puedes irte así por así tu tampoco, ¿que le dire a tu madre?— dijo preocupado.
—No la dejare sola— negó con la cabeza—mamá lo entenderá.
—¡Pensé que este chico te gustaba, Bella!
—Me gusta, por eso tengo que irme— siguió reclamando la chica.
—Esperare abajo— sonrió tristemente a Charlie, quien la tomó por el brazo. No la dejaría ir tan fácil al menos no a esta hora y lo sabía tenía que decirle algo que no quisiera oír y aquella simple frase le partía el corazón— no eres mi padre, Charlie.
Le dolió como los mil demonios decirle aquello al hombre pues para ella si lo era, era su padre tanto como el de bella.
Bajo las escalera subiendo al asunto de copiloto del auto, sintió lágrimas bajar por sus ojos que limpió rápidamente cuando Bella subió al auto.
—Estaremos bien— apretó su mano la castaña, nunca la había visto así normalmente se encontraba en posiciones contrarias. Venus era fuerte, sarcástica y relajada,Bella era su total opuesta.
—Arranca, Bells.
[...]
—Detente— pidió Edward apareciendo en la ventana del auto, asustando a ambas chicas quienes hicieron lo pedido— el auto de atrás, es Emmett.
Venus abrió la puerta y corrió a este.
—bebé— susurró el chico arrancando el auto, veía lo rota que estaba la conocía demasiado.
—le dije que no es mi padre Emmett— sollozó, junto a él si se permitía romperse— desde que llegue ha sido lo más cercano a un padre que tuve en años, casi no veo al mío y le digo aquello.
—Te perdonará, te quiere demasiado— apretó su mano tratando de consolarla— ahora tenemos que llevarlas lo más lejos posible, el rastreador nos persigue.
Un fuerte ruido la asusto.
—Es Jasper, Thomas va arriba de la camioneta de bella y Jasper sobre esta— explicó— alice va en el auto de atrás.
Vio como pasaron frente al café carver y el pecho le dolió otra vez al ver a Angela, Eric, Jessica y hasta Mike. Se veían más que felices.
—Volverás a salvo.
[...]
Edward casi se lanza sobre Laurent quien los esperaba junto a Carlisle pero al parecer el hombre venía en paz.
—Esta no es mi batalla— fue lo primero que dijo— y estoy harto de los juegos de James, pero tiene unos sentidos inigualables. Es letal.
Dirigió su mirada a Venus quien se la mantuvo sin miedo alguno.
—No he visto nada parecido en mis trescientos años— solo que aquellas palabras no se referían solo a James— y la mujer, Victoria, no la subestimen.
Con eso salió de allí.
—Nuestra especie es difícil de matar— les recordó Jasper cuando estaban en el sótano.
—Pero no imposible— sonrió Thomas— no sería el primero que mate.
—Lo haremos pedazo y quemaremos sus restos— terminó de decir emmett abrazando a su novia.
—No me gusta la idea de matar a uno de nosotros, aunque sea un sadico como James— ahora hablo Carlisle.
Todos se movían de un lado a otro haciendo sus cosas aquello mareo un poco a Venus al punto que Emmett tuvo que sostenerla.
—Llevaré a Bella al sur— Edward interrumpió.
—No, no es estupido sabe que no las dejaremos— negó con la cabeza Emmett— tampoco las puedes separar, tienen más oportunidades de sobrevivir juntas y lo sabemos todos.
—Yo iré con ellas, Jasper y yo las llevaremos— se ofreció Alice— las protegeremos, lo prometo.
—¿puedes ocultar tus pensamientos?— pregunto el chico molesto a su hermana.
—¡Solo cállate de puta otra vez! — le gritó emmett— hazlo alice esta bien.
Bella se dirigió al auto junto a alice pero venus no pudo separarse de Emmett, le faltaba el aire.
—¡está teniendo un ataque!— grito Bella dando media vuelta.
Emmett abrió los ojos y tomó en inhalador de su mochila para colocarlo sobre la boca de la chica y presionarlo.
—tienes que calmarte cariño— susurro en su oído mientras la abrazaba, la ayudo a subir al auto y beso sus labios suavemente— eres lo mejor que me pasó en siglos, te amo
Venus solo acaricio la mejilla del chico.
—te amo— junto sus frente, para ella había una grande diferencia entre un "yo también" y un "te amo"
Emmett se alejó lanzando algunas prendas de Venus a Rosalie y Esme.
—Pónganse esto para esparcir el olor de Venus— pidió.
—las cosas de bella también— lanzó un abrigo a rosalie.
—por Venus lo hago sin dudarlo, pero por Bella ¿que es ella mío?— gruño la rubia.
—Rose— pidió la italiana desde el auto— es mi hermana, me importa y yo te importo a ti.
La chica comenzó a dar su brazo a torcer.
—Aparte Bella está con Edward, ambas son parte de esta familia y nosotros protegemos a nuestra familia— le entregó el abrigo de bella otra vez Carlisle.
[...]
—Y se que es repentino pero es lo mejor que pudimos pensar— dejó otra mensaje de voz a su madre la italiana— se que entenderás y te pido que tranquilices a Charlie.
Bella hacía lo mismo con su madre, Venus estaba aterrada por que de su padre enterarse tomaría el primer vuelo a casa que encontrara y pondría a la misma seguridad nacional a buscarla si era necesario.
Al llegar al hotel sufrió otro ataque de asma que sumió era por el estrés y presión que estaba sintiendo, esta vez fue Jasper quien tuvo que ayudarla.
Ahora estaba sentada en el piso mientras que bella estaba sobre la mesa, Phoenix no era el estado favorito de Venus por lo que estar allí también la estresaba un poco.
—¿que ves?— pregunto Jasper de inmediato al ver a alice tensarse.
Bella corrió hacia la pareja.
—Lo descubrió, el rastreador está cambiando rumbo— Jasper colocó un papel bajo las manos de la chica quien comenzó a dibujar— veo espejos.
—Edward dijo que las visiones no son siempre exactas— recordó Bella.
—Ve el destino de la gente mientras siguen su rumbo, si cambian de opinión la visión cambia— explicó Jasper.
Venus decidió levantarse del piso, ¿que diablos le pasaba? Ella no era una damisela en apuros que lloraba por las esquinas cuando su príncipe no llegaba, ella era el jodido príncipe.
Jasper sonrió da lado al sentir sus emociones subir.
—tus sentimientos me ponen de buen humor— le comento a la peli negra quien le devolvió la sonrisa.
—¿el rastreador va a un estudio de ballet?— interrumpió la conversación Bella al reconocer el dibujo.
—¿has estado ahí?— pregunto Venus refiriéndose al dibujo.
—De pequeña tome clases, mi escuela tenía un arco como ese— señaló una parte del dibujo.
—¿la escuela estaba en Phoenix?— preguntó ahora Jasper.
—Si.
El celular de Venus vibró y esta se alejó rápidamente.
—¿estás bien?— pregunto a Emmett.
—después de esto tendremos sexo, el mejor jodido sexo— suspiró frustrado causando una pequeña risa a Venus, sonrió al lograr su objetivo— estoy bien, bonita ¿tu cómo estás?
—tuve otro ataque peor me siento mejor.
—rose y esme regresaron a Forks a cuidar a tus padres, estamos yendo por ti. Tu y yo vamos a irnos solos y lejos— suspiro— los demás continuaren la cacería, necesito que estes a salvo.
—esta bien, hada madrina.
La risa de Emmett ante aquel apodo la calmó y este cerró el teléfono después.
Alice la miro con una pequeña sonrisa.
— te vi venir hace años, vi la felicidad que traerías contigo— fue lo que dijo antes de bajar al lobby junto a Jasper.
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