❝BELLA EN CASA❞

                  LOS DÍAS pasaban entre lindos momentos con los Cullen. Ahora verdaderamente felices. Jazz estaba conmigo constantemente, lo cual no me molestaba para nada, me sentía hipnotizada por tremendo hombre. Claro, ahora sí andábamos juntos y no como idiotas ignorandose. Algo que PJ encontraba muy divertido.

Sin embargo, yo le devolvía las malas bromas ya que él andaba a los besos con Alice como todos esperábamos.

Jasper me ayudó demasiado con mi, autocontrol, al ser el más nuevo en la dieta, me contaba sus métodos más efectivos a modo de vista personal. El gran tip antiinstintovampirico fue el de la distracción. Oler su perfume me calmaba.

Y al ver mí avance, Carlisle me dio más acceso a una libertad. Aún que no fue la mejor idea creo yo.

Hoy se suponía vendría Bella, todos estaban de acuerdo menos Edward, pero yo lo entendía perfectamente. Ni en mis pesadillas pondría a mi tua cantante cerca de neófitos. Mas lo obligaron a dejarla venir, sino tendría que esperar años a que la humana vuelva a pisar la casa... Algo que no nos disgustaba a los neófitos y Rose. Por distintas razones claro.

Alice buscaría a Bella para que el resto preparare la casa, tratando de anticiparse a cualquier accidente. Como un programa para bebés pero para neofitos. Me adentré a la sala con Jasper agarrado de mi cintura; ya toda la familia sabía de nuestra relación.

Todo gracias a Alice quien nos atacó con preguntas la vez que llegamos del lado. Ella había visto la visión y no aguantó, estalló de felicidad gritándolo en toda la casa, para cuando volvimos ya todos sabían.

Edward estaba sentado en la banca del piano con la menor de la familia sentada a su lado. Una vez me adentre en su campo de visión, en los ojos de Bree se asomó un brillo y en los de Edward burla, desconcertandome al no saber que pasaba.

—Mi pequeña ahijada, dice que sabes cantar, que te parece si mientras esperamos la llegada de Bella, demuestras lo que sabes hacer en el campo musical —Habló con una sonrisa ladina, no entendía que le causaba burla.

—No creo que sea buena idea —murmuró Jasper.

—Vamos, mamá tú puedes demostrarle que eres una genia cantando, le mostré las canciones que me contabas en mis primeros días contigo para relajarme.

Ahí fue cuando entendí la burla de Edward. Días antes yo me había burlado de él, le dije que en vano tenía un piano si no lo tocaba, a lo que él me había respondido que al menos sabía lo que era un piano. Típicas discusiones nuestras.

—De acuerdo —Accedi desinteresada, tenía que buscar la manera de relajarme sin abusar del don de Jasper.

La pequeña Bree se apresuró a sentarse en el suelo al lado del piano, con piernas cruzadas, Jasper se alejó hasta apoyarse en el marco de la entrada, no entendía su falta de fé en mis cuerdas vocales.

Edward sonrió y me dejó lugar en el banco del piano.

Me dio un asentimiento de cabeza para luego empezar a tocar.

Mientras el tocaba el piano, yo lo acompañaba cantando.

Una vez acabamos, nos dimos cuenta del resto de las personas que se hicieron presentes, pues estábamos tan sumergidos en el canto que no nos dimos cuenta de que Bella ya había llegado y con ella la mayoría de los Cullen.

—Si no fuéramos vampiros, hubiéramos hecho un gran dúo en los escenarios —Habló Edward, sonriendo encantado.

—Concuerdo. Pero yo hubiera brillado más que tu. Soy mucho más cool.

Al ser vampiros no podíamos tener un perfil alto, eso significaba evitar el sueño de ser famosos. No podríamos tener un gran perfil, las cuentas bancarias las usábamos a nombre de "Nuestros nietos" pero éramos nosotros mismos. Desventajas de ser un chupasangre inmortal.

Nos levantamos y Edward se dirigío a saludar a su prometida, en ese momento Jasper se acercó a mi, me rodeó en un abrazo, besando mi frente, y sobre esta misma susurró ‘No tenía idea de que la mujer que me trae loco cantará así’.

—Hay muchas cosas que no sabe de mi Mayor Whitlock. —Sonreí con un aire de seguridad —Oa, soné muy misteriosa. Soné hot. Rawr.

El soltó una risilla, divertido. Pero pronto se puso recto y entendí que Bella se acercaría. Bree también vino y se posicionó del otro lado de Jasper, abrazandolo por la espalda. PJ apareció en un parpadeo a un lado de Alice, abrazandola por la espalda.

—Un gusto poder conocerte oficialmente Isabella —Hablé lo más segura y humilde posible.

—El gusto es mio, dime Bella, por favor  —murmuró tímida.

—De acuerdo, soy Valeria Jane, este pequeño demonio es Bree. —La señalé, mientras ella le dedicaba una sonrisa amigable —Aquel rubio con ojos de cazador es PJ y bueno a Jasper ya lo conoces.

—Si bueno, Jasper el dia de mi cumpleaños casi me chupa la sangre, es irónico que sea el quien te ayude con tú autocontrol. —Supuse que lo quiso decir en modo de broma aún qué que no lo tome así. Aún así solté un suspiro divertido.

—Bueno creo que es el más indicado a darme dicho consejo para no cometer el mismo error, como dice el dicho "El que no conoce la historia está condenado a repetirla" —Hablé igual divertida.

Para aligerar la tensión cambiaron el tema.

—Bueno, con la familia decidimos que sería bueno que Valeria, PJ y Bree pasarán tiempo con tú olor para que sea más fácil el hacer presencia en lugares con personas, o simplemente contigo —Habló Jasper. Bella jamás lo había escuchado hablar tanto en una sola frase. Ya notaba la diferencia que estaba haciendo Valeria.

—Claro está que no tienen que ser amigas, sólo tienen que estar en la misma habitación para que ellas se relajen ante tú sangre —Le siguió Edward.

Bella se notaba incómoda, Bree estaba nerviosa, y yo estaba tensa. PJ parecía en las nubes. Su olor era más fuerte que el de la señora que se había caído y ni siquiera estaba sangrando.

—Pero si seremos amigas —negó Bree —La única forma de que no lo seamos es si no le gusta Queen porque PJ se enojaría.

—si te gusta ¿No? —preguntó rápidamente el rubio.

—si, me gusta.

Jasper nos mandó una ola de calma a todos los presentes, aveces lo hacía ya que a él lo abrumaban los sentimientos de las personas. E incluso le afectaban. Lo último que quería era que la sed de nosotros tres le provoque a él.

—Bueno... Bella, ¿Te gustaría ver una película? así estamos contigo pero no necesariamente concentradas en ti... o en tú... olor —Susurre lo último, era bastante complicado para mi. Jasper aferró más su mano a mi cintura en señal de apoyo.

—De acuerdo —susurró, pero gracias a nuestro oído pudimos escuchar. —¿Qué vemos?

—¡Veamos la Sirenita! —Gritó la menor apenas Bella termino de hablar. Varios reímos, la querida Bree estaba desarrollando una obsesión por la película.

Nos sentamos en la sala, PJ se sentó en el suelo con Alice como garrapata, Edward en un sillón individual con Bella en su regazo, Bree en el otro sillón individual, mientras mi querido rubio y yo en el gran sofá, el sentado a un lado mío pero mis piernas sobre las suyas, con su mano en mi cintura, y mi nariz en su cuello, oliendo su dulce olor para evitar oler a Bella.

Sabía que eso provocaba a Jasper, pero necesitaba hacerlo para no matar a la compañera del cobrizo.

El rubio aferraba su mano en mi cintura para que parará, pero no podía hacerlo, pero cuando no me di cuenta deje de hacerlo por la humana y me di cuenta que lo hacía por un poco de lujuria, y ese sentimiento le llegaba a Jasper haciendo que este se pueda controlar menos, ya que mi lujuria hacía despertar la suya.

Edward escuchando los pensamientos de su hermano se rio por lo bajo, sabiendo que los míos sólo eran sobre no atacar a Bella.

—Oigan, no es por aguafiestas pero Jasper ¿podrías pensar otra cosa? es que con Bella sin poder leer sus pensamientos, Bree concentrada en la película, PJ pensando en playboy, Alice en PJ y Valeria pensando en controlarse, es como si fueran vacíos y los que más destacan son los tuyos, sin ofender, pero es incómodo leer esos —Sonrió socarrón.

—¿En qué piensas? —Me aleje de su cuello para mirarlo con una sonrisa traviesa.

—No querrás saber —Me respondió con una sonrisa ladina, juguetón.

Bree había dejado de prestar atención a la película desde que su padrino habló, Bella había entendido la referencia de Edward, y por eso tenía una sonrisa de cómplice.

PJ comenzó a reír y Alice solo blanqueó los ojos, limando sus uñas y diciendo los diálogos de la película.

Los mayores nos reímos por lo bajo, mientras Bree nos miraba con el ceño fruncido.

—¿De qué hablan?.

—Oh, no hablamos de nada, mejor dicho no pensamos en nada —Le contestó a Bree, Bella.

Edward se rio por el chiste, pero el resto sólo la miramos con la ceja alzada. Chiste muy malo.

Terminamos de ver la película, pero Jasper me agarró en brazos y corrió a velocidad vampirica a la habitación de arriba, tenía los ojos oscuros de la lujuria. Se colocó encima mió llenandome de besos.

—Que estemos arriba no significa que no escuchen, Bree será menor pero tiene oído de vampiro. —alejé su rostro.

Él sólo gruño y siguió con lo suyo, me encantaría seguirle el juego, pero no era correcto.

Con fuerza de voluntad, nos cambie de posición quedando yo arriba.

—Mayor Whitlock, debe controlarse, no podemos hacer nada.

Sus ojos volvieron a su color dorado y su cuerpo se relajó. Se sentó conmigo aún encima.

—Bien...

—vamos abajo, Bella aún no se fue y tengo que seguir en presencia de ella.

Nos separamos y bajamos agarrados de la mano. Ellos seguían en la misma posición, al parecer Bree había puesto la segunda película de la Sirenita.

                      LUEGO DE pasar la tarde pegada a Jasper por pasar tiempo con Bella, me fui separando poco a poco, intentando que su olor me llegue pero no tanto. Ibamos con un buen avance, a la más chica le costaba, pero el estar concentrada en algo, en este caso la película, le ayudaba. PJ parecía garrapata a Alice.

Era impresionante lo fuerte que era su olor sin ser mi tua cantante, o estar lastimada. Los chicos me explicaron que de seguro era por su posible don vampirico.

Al día siguiente la humana no vino, me habían dado tiempo para descansar mi cuerpo ya que estaba tenso del esfuerzo, fui de caza, al día siguiente Bella volveria a venir para seguir acostumbrandome.

Los siguientes días fueron iguales, hasta que ya se hizo menos tenso el olor, pero aún así necesitaba la presencia del Mayor Whitlock conmigo para relajarme, sino sería más complicado de lo que ya era.

Poco a poco empezaba hasta tener cortas charlas con la humana, incluso Bree, pero seguíamos distantes. PJ se mantenía callado, me divertía la imagen que de seguro Bella tenía de él, cuando en verdad PJ era un payaso.

Nos tenía fé. En verdad pensaba que podíamos controlarnos, que superaríamos aquello. Eso me daba esperanzas, algo que creí perdido.

Locamente, pensar en mí humanidad, me hacía estar todo el día pensando en mí abuela. ¿Qué habría pasado con ella?