· · · 🥀 · · · · · · · · · ·

Spencer se cruzó de brazos para ver por la ventana de la oficina donde Cassandra se encuentra intentado descansar, ahora que el UnSub se había comunicado con ella no podía simplemente dejarla sola ya que era su próximo target.

—El UnSub mató a estas familias por que de alguna u otra forma se encontraban relacionados con Cassandra —señalo Rossi—, pero debió haber algo más.

—Quizá, Cassandra salió con ellos en algún punto de su vida —agregó Hotch—, lo cual fue el detonante del UnSub para atacar, el no poder tener lo que ellos sí.

—Pero, ¿asesinar a sus familiares también? —indagó JJ negando con su cabeza—. No encuentro una explicación.

—Es que no la hay —le dijo Rossi—, el UnSub está enfermo.

—Esquizofrenia —murmuró Spencer—, las voces en su cabeza le dicen que lo haga y él simplemente... obedece.

—Obsesión —prosiguió Derek.

—Y sabe pasar desapercibido —agregó Emily.

—Rossi encontró huellas entre los árboles frente a la casa de los Morrison —recordó Emily señalando al agente que asintió con su cabeza.

—No debe medir más de un metro ochenta y eran finas, por lo que debe ser delgado —respondió.

—Sabe de cerrajería, y de seguridad, la forma en la que abrió las puertas de todas las casas, simplemente debió ser un experto —corroboro JJ.

—Tenemos un perfil —señaló Derek.

—Esperen —pidió Spencer—, tengo que hablar con Cassandra —murmuró.

Derek le cuestionó alzando una ceja—. ¿Para qué?

—Tiene que decirnos más del grupo del sacerdote Philip —respondió carraspeando—, quizá descubramos algo más.

—Adelante, entonces.

—Emily necesito que vengas conmigo —pidió Spencer.

La agente Prentiss lo miró algo sorprendida—. ¿Eso por?

—Le preguntaré si alguna vez tuvo relaciones sexuales con Oliver, Noah, Elijah, Edward o Miles —respondió—, estoy seguro de que una presencia femenina le haría sentir un poco más cómoda.

Emily y Spencer entraron a la oficina sin hacer mucho ruido, Cassandra se encuentra recostada en el sillón y su mirada se encuentra fija en el techo, sin embargo, no se encuentra dormida, ya que hay pequeñas lágrimas que recorren sus mejillas, mientras parpadea rápidamente.

—Hola Cassandra —saludó con amabilidad Emily.

La chica se sentó lentamente y ladeo una sonrisa—. Hola —respondió sin ánimo alguno.

—¿Has intentado descansar? —preguntó Spencer acercándose al sillón.

Negó con su cabeza lentamente—. No puedo —susurró—, cierro los ojos y... puedo verlos... morir —aclaró, Emily tomó asiento a su lado, estiró su brazo y sujetó su mano con cariño.

Spencer aprovechó para acercar una silla y quedar frente a ellas.

—¿Te gustaría tomar un té? —preguntó Spencer.

Alzó los hombros sin saber qué decir—. Supongo —murmuró.

Spencer se acercó al dispensador de agua y Cassandra observó cada movimiento que hacía para preparar su té.

—¿Azúcar?

—No, gracias —respondió en voz baja.

Entregó al té a Cassandra quien bebió un poco y lo dejó en la pequeña mesa ratonera frente al sillón.

—Cassandra, tenemos que hacerte unas preguntas y esperamos que puedas respondernos —comenzó Emily hablando con voz tranquila.

—De acuerdo —susurró.

—Formaste parte del grupo de rescate para jóvenes del sacerdote Philip, ¿cierto? —le preguntó Spencer.

Cassandra bajo su cabeza y cubrió su rostro con sus manos. Ambos agentes compartieron mirada para regresar su vista a Cassandra, quien limpió pequeñas lágrimas.

—Sí —respondió con voz temblorosa.

—¿Te importaría hablarnos de eso?

Apretó sus labios e hizo sonar su garganta—. Si mal no recuerdo... entre cuando, cuanto tenía dieciséis años —respondió apretando su mandíbula—, yo... yo...

—¿Eras adicta?

Asintió con su cabeza—. Sí, fumaba marihuana y consumía LSD —murmuró con una mueca, relamió sus labios y tomó un poco de aire—. Lo siento, es solo que... fue una etapa muy, muy difícil en mi vida y no suelo hablar de ello.

—Descuida, puedes tomarte tu tiempo —le hizo saber Spencer.

Tomó un poco de té y se enderezó mientras juntaba sus manos, parpadeo un par de veces para alzar su cabeza y ver a Spencer.

—Fui adicta y solía vandalizar la escuela —confesó—, la gente en esos días cuestionaba el arte —agregó en voz muy baja, haciendo que Emily y Spencer sonrieran un poco.

—¿Cómo encontraste el grupo?

—Mi madre —murmuró—, ella... cuando se dio cuenta que consumía drogas, una de sus amigas le dijo que su sobrino estaba en un grupo de un sacerdote y... bueno, entre —alzó los hombros con una mueca y frotó sus ojos.

—¿Estabas de acuerdo en asistir? —preguntó Spencer—. ¿Algunas vez te quejaste de estar ahí?

—Con John —respondió—, el también fumaba marihuana e inhalaba cocaína —carraspeó algo incómoda y cubrió su rostro apenada—. Lo siento, es solo que teníamos todo menos la atención de nuestro padres.

Emily acarició la espalda de Cassandra en señal de apoyo, la dejo sollozar y cuando estuvo lista, Spencer le proporcionó un pañuelo que aceptó agradeciendo en voz baja.

—¿A qué edad dejaste de asistir al grupo? —preguntó Spencer relamiendo sus labios.

—A los dieciocho —respondió—, cuando me aceptaron en la universidad deje de asistir al grupo.

—Y, ese anillo que tienes —señaló Emily—. Es de castidad, ¿cierto?, ¿se los dan en el grupo al dejar de asistir?

Cassandra apretó sus labios, soltó lo que parecía ser una pequeña risa burlona.

—No es de castidad —murmuró—, parece y luce como uno, pero no lo es.

Spencer frunció un poco el ceño—. Le llaman pudicitiam, ¿no? —preguntó confundido Spencer—, es pureza, en latín.

—Sí, pero pureza de alma, no de mantenerte virgen hasta el matrimonio —aclaró haciendo que Emily y Spencer compartieran miradas, lo cual Cassandra noto—, al portar este anillo recuerdo todos los actos que cometí, recuerdo el mal que cause y la forma en la que me lastimaba a mí misma al consumir drogas —explicó suspirando pesadamente.

—Pureza —susurró Emily.

—Todos piensan que es de castidad —confesó—. En realidad, yo también creía que lo era, hasta que lo obtuve y el sacerdote me explico su significado —Casandra soltó un bostezo sin poder evitarlo y tallo sus ojos—. Lo siento —se disculpó.

—¿Quieres descansar?

—No, no —murmuró—. ¿A qué viene todo esto? —preguntó algo confundida.

—Casandra —habló con voz suave Emily—, creemos que el asesino formó parte de ese grupo.

Cassandra quedó perpleja al escuchar las palabras de Emily y pasó su mirada de Spencer a Emily sin poder creerlo.

—¿Qué? N-no, no, imposible, no puede ser —negó con su cabeza repentinas veces.

Spencer sacó unas fotografías de la carpeta—. ¿Los conoces a ellos?

Casandra abrió su boca y alzó su mirada parpadeando rápidamente—. ¿Uno de ellos mató a mi familia? —preguntó con voz entrecortada.

—No, Casandra —respondió en voz Spencer—. Ellos... ellos están muertos —aclaró en un susurró, pero con claridad.

Ahogó un grito y cubrió su boca cerrando sus ojos—. Los mató un antiguo miembro del grupo del sacerdote Philip —explicó Emily.

Sollozó viendo las imágenes de los chicos y cerró sus ojos fuertemente.

—Es importante que nos digas si tuviste algún tipo de relación con ellos mientras estaban en rehabilitación —pidió Spencer.

Cassandra asintió—. Estábamos en la misma comunidad —dijo sin despegar la vista de las fotografías.

—¿Comunidad? —preguntó Emily.

—Nos dividían por miembros de familia —aclaró limpiando sus lágrimas—, al formar parte del grupo tu familia también se veía involucrada, por lo que había comunidades. Se dividían según la cantidad de familia que tienes por que facilitaba la forma de relación y comprensión —explicó acariciando su frente.

—¿Cuántas comunidades había en la tuya?

Señaló a los cinco chicos—. Ellos y yo éramos los únicos con familias de cinco integrantes —susurró.

—¿Podían relacionarse con las demás comunidades? —preguntó curioso Spencer.

Respondió asintiendo con su cabeza—. Sí, pero eso era una vez que se iban tus padres, cuando estábamos en talleres o en sesiones, solo los... jóvenes adictos.

—Entonces, la relación que tenías con ellos es que fuiste su compañera de comunidad —dijo Emily mirando a Spencer—. ¿Solo eso?

Casandra negó mordiendo su labio.

—No... yo... hum... —pareció pensarlo unos segundos y jugó con sus manos nerviosa.

—Tuviste relaciones con ellos —susurró Spencer.

Asintió lentamente y tomó su té para darle un sorbo.

—¿Con todos?

—No fue al mismo tiempo —aclaró abriendo sus ojos—, pero... sí, tuv-tuve relaciones con ellos —explicó.

—¿Fueron forzadas? —cuestionó Spencer.

—No —respondió bastante segura, pero se veía ligeramente apenada.

—Descuida, es completamente normal —aseguró Emily—. ¿Alguien dentro del grupo sabía que te involucraste con ellos íntimamente? —negó con su cabeza—. ¿John?

—Los hubiera golpeado —respondió sincera—, es como un hermano para mi —susurró—, pero, no, nadie... con todos fue... fue algo cuidadoso y... —alzó los hombros sin saber qué decir.

Alzo los hombros sin saber que decir y Spencer dejo las fotografías en las mesas.

—¿Mantuviste contacto con todos?

—Sí —respondió—. Oliver estudia... —cerró sus ojos y apretó sus labios—, estudiaba en Nueva York —se corrigió—, no había hablado con él en una semana, pero sabía que vendría a Virginia —ladeo una mueca y Emily apretó su mandíbula.

—Lo mataron hace una semana —informó haciendo que Cassandra retuviera un poco de aire.

—¿Por qué? —preguntó en voz baja—, ¿por qué los mata?, ¿por qué a todos?

—El UnSub debió tener celos de ellos ya que pudieron involucrarse contigo —explicó Spencer.

—Es por eso que no podemos dejarte sola —agregó Emily—, él te quiere a ti —susurró.

—Sí... si el me quiere a mi, ¿por que no solo tomarme a mí y dejar a todos vivos? —preguntó con el ceño fruncido.

—Para él, ellos formaban una amenaza —señaló Emily—, tenía que deshacerse de ellos para poder vivir la fantasía de que estaría contigo sin que nadie... se interpusiera en su camino.

—¿Por eso mato a mi familia? —preguntó con voz entrecortada—. ¿Porque ellos se interpondrían en su camino?

—Me temo que sí, Cassandra —respondió Spencer con una pequeña mueca.

Se apoyó en sus rodilla y Spencer se inclinó, estiró su mano para tomar la de Cassandra y Emily alzó una ceja ladeando sus labios ligeramente sorprendida.

—Cassandra, lo atraparemos —susurró—, tenemos el perfil y lo daremos a conocer a todos en Virginia para comenzar a buscarlo, ahora lo importante es mantenerte a salvo —le hizo saber, acariciando su muñeca.

—¿Cómo? —preguntó en voz baja.

—Nos contactamos con los Campbell y...

Cassandra interrumpió a Emily.

—No voy a ir con ellos —respondió con firmeza, separando su mano de la de Spencer—, mataron a mi familia por el hecho de que creían que se "interponen" —hizo comillas con sus dedos—, en su camino y no puedo ponerlos en riesgo a ellos también.

—Habrá policías patrullando las veinticuatro horas —aseguró Spencer.

—No iré —repitió—, me quedaré aquí —se cruzó de brazos mirando por la ventana.

—No puedes Casandra, es una estación de policías —le dijo Emily con una mueca.

—Métanme en una celda, entonces —propuso alzando los hombros—, pero no expondré a más personas —puntualizó.

—No se puede quedar aquí —negó Derek.

—Es terca, Derek —murmuró Emily—, está segura de que todo esto es por su culpa y no quiere exponer a más personas.

Spencer llevó una mano a su sien—. Nosotros ya estamos expuestos —murmuró.

—¿Qué propones? —preguntó Hotch ladeando su cabeza.

—Que se hospede en el mismo hotel que nosotros —respondió—, el UnSub no atacará un lugar público donde siempre hay luz —aclaró—, podemos poner un oficial al inicio del pasillo y en el lobby.

—¿Y propones que se quede contigo?

—¡Emily! —le reprimió.

—Lo siento Spencer, pero es que es muy obvio que estás muy involucrado —murmuró con una pequeña sonrisa.

Derek Morgan realmente estaba tragándose las palabras que no tiene que decir porque por el momento, él es líder del equipo.

—Dejando de lado el comentario de Emily, es buena idea lo que dice Spencer —señaló Derek mirando a Hotch—, podemos hacer que nos den una habitación más, y procuramos dejarla alrededor de las nuestras.

—Las paredes son ligeras por lo que si grita podremos escucharla —agregó Rossi.

—Suena como un plan.

—Iré a informarle —dijo Spencer parándose, bajo la atenta mirada de todos—. Oh... Derek puede hacerlo, sí, Derek le informará —murmuró sentándose nuevamente.

Emily caminó hasta Spencer y le dio dos palmaditas en los hombros.

—No digas lo que tienes planeado decir —le advirtió entre dientes.

—No iba a decir nada —aseguró sonriente.

Habían tardado en convencer a Cassandra para que accediera a quedarse en el mismo hotel que ellos, ya que no era solo el hecho de que expusiera a los huéspedes, sino que era el hotel de su tío Ewan, pero al final de cuentas, tras hablar con él y asegurarle que no causaría riesgo a los huéspedes, terminó por acceder en quedarse ahí y ser vigilada no solo por policías, sino también por los agentes del FBI.

Por eso mismo, en la suburban negra iban cuatro personas, tres de ellos agentes del FBI y Cassandra Morrison, quien viste un rompevientos del FBI para hacerla pasar por una.

Soltó un bostezo pegando su mejilla al siento, viendo el perfil del Dr. Reid.

—¿No eres muy joven para ser doctor? —preguntó en un susurró algo adormilada.

—¿Perdón? —preguntó al no escucharle.

—¿No eres muy joven para ser doctor? —volvió a preguntar, esta vez un poco más alto, haciendo que Derek y Emily compartieran miradas divertidas.

—Ah... sí, supongo —murmuró alzando los hombros.

—¿Eres un genio, no? —bostezo cubriendo su boca—. Internet lo dice —Emily tuvo que cubrir su boca para no reír.

—Algo así —contestó sonriendo un poco.

—¿Si te preguntó algo lo responderías?

—Lo intentaría, sí.

Casandra ladeo una sonrisa—. ¿Cuántos tipos de dinosaurios hay?

Spencer soltó una risita sin poder evitarlo—. Bueno, se estima que un aproximado de setecientos a novecientos dinosaurios, pero en realidad no se sabe con exactitud ya que los arqueólogos continúan encontrando nuevos fósiles que impide saberlo.

Cassandra sonrió cerrando sus ojos—. Me gustan los dinosaurios.

—¿Sabías que los pájaros actuales evolucionaron de los dinosaurios?

—¿En serio? —preguntó asombrada.

—Sí, es genial, ¿no?

—Definitivamente —respondió sonriendo—, dime más —pidió picoteándole su brazo.

Spencer bajó su mirada hasta las manos de Cassandra que le volvieron a picotear el brazo y sonrió un poco.

—Oh, la palabra dinosaurio viene del griego "deinos" que significa terrible y "sauros" que significa lagartija, así que dinosaurio significa terrible lagartija.

—Suena como el nombre de una banda de rock muy mala —ambos soltaron una risita y Casandra se enderezo viendo el hotel.

—¿Todo bien? —preguntó Derek mirando por el retrovisor.

—Cuando... —lo pensó por unos momento y sonrió algo nostálgica—, cuando era pequeña y papá se encontraba vendiendo una casa, nos hospedabamos aquí en lo que papá compraba una nueva casa —sus ojos brillaron ante aquel recuerdo y Emily la miró con algo de ternura—. Conozco muy bien el hotel —susurró.

—Cassandra, no puedes confiar en nadie, ¿entendido? —asintió lentamente y sintió nervios al ver como Derek aparcaba en la entrada.

—Ponte la gorra —pidió amablemente Spencer.

Obedeció sin decir palabra alguna y cuando Derek le abrió la puerta caminó delante de él mientras mantenía su cabeza agachada, más aun así, pudo identificar policías en la entrada del hotel.

—¿Cassandra? ¿Cassandra?

Alzó su cabeza para ver a un hombre pelirrojo con rasgos similares a los de John, Casandra apuró sus pasos hacía el hombre para darle un fuerte abrazo.

—Me alegra tanto verte, ¿estás bien, hija? —preguntó separándose de ella y tomándola de las mejillas.

—Estoy bien, tío —murmuró afirmando con su cabeza.

—Bien, bien, me alegra que estés bien —sus ojos se cristalizaron y la tomó firmeza—, tu tía Nancy llegará de Washington en unas horas, ¿de acuerdo?, ella quiere verte —asintió lentamente y observó a los agentes del FBi—. ¿Ustedes son los agentes que llevan el caso?

—Así es señor, SSA Reid, Prentiss y Derek Morgan —presentó—, estaremos vigilando de Casandra las veinticuatro horas —aseguró.

—Bien, cualquier cosa por favor díganme, si quiere que cierre el hotel, lo haré...

—Tío —murmuró Cassandra en voz baja.

—No, Cassandra, yo prometí a tu padre cuidarte con mi vida si algo les llegaba a pasar —le hizo saber con lágrimas en sus ojos—, y aunque seas mayor de edad, cumpliré mi promesa, ¿de acuerdo?

—Gracias señor Campbell, pero lo mejor es que mantenga el hotel abierto, haremos como si nada está pasando y si le preguntan el motivo por el cual los policías se encuentran ahí es para reforzar la seguridad debido a lo sucedido —él asintió con su cabeza—, cualquier noticia se la haremos saber —aseguró Derek.

—Esta es la llave de su habitación, queda justo en frente de la de... —saco un papel del bolsillo de su saco—. Spencer Reid, eres tú, ¿correcto?

—Así es —respondió asintiendo con su cabeza.

—Y de lado tiene la de Jennifer Jareau y Derek Morgan —continuó.

—Perfecto, gracias. Será mejor apurarnos Casandra, tenemos que descansar.

—Ah, y, nos gustaría tener las copias de seguridad de la habitación —informó Emily antes de avanzar.

—Las copias, claro, un momento —se apresuró para caminar a la recepción, donde busco entre unos armarios y llegó entregando cuatro copias más.

—¿Nadie más tiene estas copias? —preguntó Derek.

—No, una debería ser de la ama de llaves, se dan dos a los huéspedes (en caso que sean dos) y dos que tenemos de repuesto.

—De acuerdo, andando.

Casandra se sentó en la cama mirando a los agentes del FBI.

—Cualquier cosa por favor háblanos —pidió Emily.

—De acuerdo —murmuró—, ¿se van a ir? —preguntó en voz baja.

—Hay policías en los pasillos —le hizo saber Spencer.

—No confío de ellos —confesó.

—Puedes hacerlo —aseguró Derek.

—No, me dijiste que no confiará en nadie —Derek ladeo una sonrisa y asintió lentamente.

—Puedo quedarme fuera de la habitación —murmuró Spencer a Derek.

—Sí, creo que ella también quiere que te quedes —le dijo en voz muy baja—. Cassandra, ¿te parece si Spencer se queda junto con los policías?

Alzó los hombros bostezando—. Confió un poco más en él —admitió.

—Bien, tenemos la lista de nombres que nos diste sobre los miembros del grupo y la iremos reduciendo, ¿de acuerdo? —asintió lentamente y Cassandra bostezo—. Descansa, por favor —pidió.

—Lo intentaré —balbuceó.

—Vendré un poco más tarde a traerte algo de comida —le informó Emily.

—Estaré afuera por cualquier cosa —ella asintió lentamente a lo dicho por Spencer y una vez que salieron, se recostó en la cama abrazando la almohada.

Pero no importaba para qué lado se girara, ella simplemente no podía dormir a pesar de estar muriendo de sueño. Se paro algo frustrada y abrió la puerta lentamente.

En la puerta frente a su habitación, se encuentra en el piso Spencer se con un libro en sus manos, pero al ver las calcetas con puntos morados y negros que Cassandra tenía puestas y al verla parada frente a él, se paró de un brinco.

Jadeo un poco por el movimiento brusco.

—¿Estás bien? —se preguntaron al mismo tiempo.

—Oh, estoy bien —respondieron nuevamente al mismo tiempo.

—¿Ocurre algo? —volvió a preguntar Spencer.

—¿Crees que puedas estar conmigo? —preguntó en voz baja, algo apenada.

—¿Con-contigo? —señalo la habitación, Cassandra asintió.

—Siento como si alguien me estuviera viendo —admitió.

—Es tu subconsciente haciéndo una mala jugada...

—¿Eso es un sí? —preguntó tallando sus ojos.

Spencer ladeo una sonrisa—. Sí.

La siguió dentro de la habitación y la observó acostarse en la cama, Spencer camino a la silla al lado de la cama y Casandra se acomodó para quedar del mismo lado de Spencer.

—¿Puedes hablar? —Preguntó en voz baja.

—¿Qué quieres que diga?

—Lo que sea —susurró—, solo ... habla, habla ... de dinosaurios, o ... o del cielo o las estrellas —pidió en voz baja.

—Bueno, te puedo contar cómo es que cayó el meteorito en la tierra dando por terminada la era de los dinosaurios.

Cassandra sonrió.

—Eso suena entretenido.

Nota de autora:

No me hablen estoy llorando por que Cassandra y Spencer necesitan protección.

Raza yo no soy Spencer y no tengo un IQ de 187, por lo que todo lo saco de san google a-

Lots of love, Cici x