𝟎𝟗: regreso
Klaus miró al doble que estaba dormida a su lado, nuevamente había estado con Elena, no iba a negarlo, le gustaba estar con la doppelganger, entendía bien a los hermanos Salvatore que estaban interesados en Elena.
Klaus sonrió imaginando la cara de los Salvatore si veían a Elena con él en la cama.
Se mueren. Pensó Klaus riéndose mentalmente, de solo imaginar sus caras le daba ganas de reírse.
Con sus dedos acarició la espalda de Elena que estaba descubierta en ese momento, le gustaba la suavidad que tenía su piel.
─ Amor, despierta ─ Klaus intentó despertarla de su sueño, aunque le gustaba estar en la cama con ella, tenían que levantarse. Después de todos los híbridos que había convertido, pretendía regresar nuevamente a Mystic Falls con Elena.
Elena hizo un ruido con sus labios despertando al escuchar la voz de Klaus.
Klaus…
Había vuelto a caer en las garras de Klaus.
Elena se sentó rápidamente en la cama mirándolo mientras se cubría con la sábana.
─ ¡Klaus! ─ dijo Elena.
─ Hola mí amor ─ Klaus le sonrió.
Elena no podía creer la estupidez que había hecho de nuevo al involucrarse sexualmente por segunda vez con Klaus.
Después de caer nuevamente ante Klaus, Elena estaba completamente convencida de que sufría del Síndrome de Estocolmo, de lo contrario no había explicación para lo que estaba sintiendo, no era algo normal, no después de todo lo que Klaus le había hecho.
─ ¡Todo ésto es tu culpa! ─ lo culpó Elena levantándose de la cama con la sábana cubriendo su cuerpo, prefería echarle toda la culpa a Klaus a hacerse responsable de sus propios actos ─ ¡Ésto es tu culpa!.
Klaus frunció su entrecejo pero después formó una sonrisa mirando a la doppelganger con diversión al escucharla.
─ ¿Y por qué? ─ preguntó Klaus ─ bien que te gustó cuando te…
─ ¡Klaus! ─ Elena lo interrumpió al darse cuenta de lo que iba a decir, eso la avergonzó.
─ Es la verdad, no te hagas la santa que eres muy cuestionable ─ dijo Klaus.
─ Pues tu no eres mejor ─ reclamó Elena.
Klaus sonrió.
─ Ya lo sé pero yo no finjo ser una buena persona como tú ─ expuso Klaus.
Elena frunció su entrecejo al escucharlo, lo admitía, ella no era una santa, tenía cosas seguramente cuestionables pero tampoco era mala al nivel de Klaus.
─ Yo no finjo ser buena persona, es algo natural en mí, no mató por diversión ni le arruinó la vida a las personas como tú lo haces ─ soltó la doble.
Klaus se levantó de la cama haciendo que Elena desviará su mirada de él al verlo completamente desnudo.
─ Si tus amigos y los Salvatore nos vieran de está forma ¿Qué les dirías Elena?, ¿Les dirías qué yo te obligué o la verdad de que me correspondiste?, ¿la segunda opción no sería algo bueno para tu reputación verdad?, tus amigos, tu hermano y los hermanos Salvatore se sentirían traicionados, todo lo que hicieron por ti para librarte de mí de nada valió porque te metiste con el enemigo ─ dijo Klaus.
Elena meditó las palabras de Klaus, en cierto punto él tenía la razón, si tuviera que pasar por una situación así no sabría que responderle a sus amigos y a su hermano, la opción de culpar a Klaus de todo sería una buena idea pero no se sentiría bien con ella misma al saber que la verdad era otra.
Klaus sonrió de costado al ver que Elena no pudo responder a su pregunta, salió de la habitación metiéndose al baño para darse una ducha dejándola pensando ahí.
Elena miró el paisaje en silencio por la ventana del auto mientras Klaus manejaba a su lado, en ocasiones, él volteaba para verla pero no le decía nada para evitar discusiones, no habían hablado desde la última conversación que tuvieron después de despertar.
─ ¿A dónde vamos? ─ preguntó Elena.
La doble creía que Klaus la estaba llevando a otra parte para buscar más licántropos y así convertirlos en híbridos con su sangre.
─ Mystic Falls ─ respondió Klaus, ya tenía una manada grande de híbridos, no necesitaba a más por el momento, dejaría que Elena siguiera con su vida humana y cuando necesitará de su sangre de nuevo, volvería a sacarle para crear a más híbridos.
Elena despegó su mirada de la ventana del auto al oír la respuesta de Klaus, por un momento pensó que él estaba bromeando.
─ ¿De verdad? ─ preguntó Elena.
─ Si ─ asintió Klaus.
Elena no pudo evitar sonreír, por fin volvería de nuevo a Mystic Falls, extrañaba a su hermano, a sus amigos y a los Salvatore.
Después de esa pequeña conversación no hablaron hasta que llegaron a una estación de servicio, Klaus detuvo el auto para cargar combustible para llegar a Mystic Falls, Elena aprovechó ésto para ir al baño, a diferencia de otras veces no pensaba escapar ya que Klaus la llevaría a donde tanto quería ir.
Mientras orinaba con tranquilidad, Elena miró en dirección del bote de basura que estaba ahí viendo una toalla femenina, ésto la hizo fruncir su ceño, recién en ese momento recordó que no le había bajado su periodo menstrual, ésto era algo raro a menos de que estuviera embarazada algo que era imposible porque solo había estado con Klaus desde que terminó con Stefan meses atrás, al ser un vampiro, Klaus no podía dejarla embarazada, era algo imposible para él.
Al saber ésto, Elena creyó que se trataba del estrés que le había generado todo ese asunto y por esa razón no le había venido su periodo, también sabía que podía ser alguna enfermedad que le pudo dar en ese tiempo pero ella se sentía bien físicamente por lo que dudaba de que estuviera enferma.
Después de unos minutos en el cubículo del baño, salió acercándose al lavamanos que había allí lavándose mientras pensaba, inevitablemente estaba preocupada.
─ Elena ─ Klaus tocó la puerta del baño con impaciencia por su tardanza.
Elena suspiró al escuchar la voz de Klaus al otro lado de la puerta, con sus manos lavó un poco su cara mirándose en el espejo delante de ella, luego salió del baño.
─ Ya estoy lista ─ dijo Elena.
─ Menos mal, pensé que te quedarías a vivir en el baño ─ murmuró Klaus.
Elena rodó sus ojos al escucharlo, sin embargo no dijo nada para evitar discusiones con él, caminó de regreso al auto en silencio pensando en el por qué no le había venido su periodo menstrual como debía hacerlo.
El viaje a Mystic Falls había sido largo por la carretera, Elena y Klaus no habían hablado nada entre ellos, se mantuvieron en silencio todo el trayecto mientras pensaban en diferentes cosas cada uno.
Cuando Elena vio el cartel de Mystic Falls soltó un suspiro, sabía que su vida no volvería a ser la misma de antes cuando sabía de lo sobrenatural y debía fingir ante los demás ser una humana normal, ahora debía agregarle el hecho de que era consciente de todo lo que vivió con Klaus en el tiempo que tuvo con él.
Todo había cambiado. Ya nada era igual.
No importaba cuánto fingiera con sus amigos y su hermano que todo estaba bien, nada lo estaba, no después de todo lo que pasó pero ellos no tenían que saberlo.
Su moral, sus principios, todo lo había tirado a la basura por causa de Klaus. Lo peor de todo era que una parte dentro de su ser no se arrepentía de nada.
Tendría que aprender a vivir con su vida fingiendo que nada pasó con Klaus.
─ Bienvenida a tu casa de nuevo ─ dijo Klaus deteniendo el auto en la casa Gilbert.
Elena suspiró, apretó sus manos mirando su hogar con nerviosismo.
─ Adiós ─ se despidió Elena mirando al original mientras abría la puerta del auto.
Klaus le sonrió.
─ Ésto no es una despedida, no me iré de aquí y te librarás tan fácil de mí ─ aclaró él.
─ Lo sé, no tengo tanta suerte para que eso suceda ─ mencionó Elena saliendo del auto.
Klaus se rió al escucharla, se quedó ahí hasta que la vio entrar en la casa, luego manejó el auto hasta donde sería su nuevo hogar de ahora en adelante, Klaus suspiró sabiendo que la reunión con sus hermanos sería complicada cuando los despertará después de haberlos tenido neutralizados.
¡ 𝐂𝐀𝐏𝐈́𝐓𝐔𝐋𝐎 𝟗 !
Después de mil años vuelvo a actualizar nuevamente está historia, perdón por la demora.
El híbrido y la doppelganger están de regreso en Mystic Falls.
¿Qué les pareció?
Bạn đang đọc truyện trên: AzTruyen.Top