—¡Nos vemos mañana, Yerin! —Se despidió el pelinegro saliendo de la empresa agitando su mano hacia su secretaria que se despidió de igual manera para ir hacia su casa.

La noche ya había consumido el día en las calles de corea por lo que los trabajadores ahora se dirigían a su casa para descansar o seguir trabajando.

Jungkook el presidente de la compañía "G. C. J" fundada por sus padres nuevamente había tenido unas grandes jornadas de trabajo por lo que salir más tarde era común hacia los trabajadores de la empresa y hasta para el mismo Jungkook que extrañaba demasiado su casa y más a su hermoso novio que de seguro lo estaba esperando con la cena en la mesa para después de un baño irse a la cama a dormir.

Aflojo levemente su corbata cuando estuvo adentro de su auto y miro su celular antes de arrancar notando que no tenía ningún mensaje de su pareja, un pequeño puchero se formó en sus labios para abandonar el celular en el asiento del copiloto y darle marcha al auto.

Las calles estaban oscuras y frías sin nadie transitando en ella, pero uno que otro auto y autobuses de personas que se dirigían a sus casas.

Jungkook manejaba tranquilamente sin darse cuenta de que un auto color rojo lo seguía de cerca listo para interceptar.

El pelinegro noto por el espejo retrovisor al auto y no sospecho nada hasta que tomo una curva y el auto continuaba siguiéndolo.

—Demonios... —Musito empezando a sentir miedo.

El auto rojo hizo un estruendoso sonido al aumentar la velocidad y quedar enfrente de él de Jungkook obligándolo a que frenara abruptamente.

Los ojos de Jungkook se abrieron enormemente al ver como del auto salía un chico con un pasamontañas en la cabeza y se acercaba a él.

El pelinegro vio el arma en su mano y sabía que si se quedaba en su auto no iba a pasar nada bueno así que salió de este a toda velocidad sin importarle nada para correr lo más lejos dejando la puerta abierta con solo una mentalidad y era huir de ahí.

Grave error.

Entro a un callejón desolado sin camino al que escapar.

Jungkook topo con la pared y miro a todos lados con desesperación intentado hallar una salida o una vía para escalar.

Escucho una risa...

El hombre se encontraba a pasos de él con el cuchillo en manos.

—Por matarte me darán mucho dinero —Escucho que hablaba a través del pasamontañas con voz distorsionada por la tela.

Jungkook estaba ahogado en terror, no tenía salida, no sabía que pasaría o si iba a salir vivo de ahí.

Cerro lo ojos esperando lo peor y segundos después un disparo se escuchó obligándolo a abrir los ojos.

Lo primero que vio fue el cuerpo del hombre desplomándose al suelo dejando a la vista atrás de él un chico con la pistola alzada hacia la nuca del contrario que ya se encontraba muerto en el suelo.

Jungkook aterrorizado miro al chico de la máscara con unas letras en la mejilla escritas de dorado y negro.

"MOCHI" y en la otra mejilla una "P" grabada en dorado.

El enmascarado ladeo la cabeza al ver al castaño que lo miraba con terror viviente y llevo uno de sus dedos a sus labios que estaban debajo de la máscara.

"Shhh"

Fue lo único que escucho Jungkook para ver como el hombre se daba vuelta y se alejaba dejándolo ahí solo viendo el cuerpo inerte del hombre en el suelo con un charco de sangre a su alrededor.

Mientras el pelinegro intentaba salir de su trance el enmascarado guardaba el arma y arreglaba sus cabellos ya que al escuchar el aviso de que su pareja estaba el peligro no dudo ni un segundo en salir corriendo para socorrerlo.

Nuevamente.

—¿Quién fue? —Dijo enojado Jimin conduciendo lo más rápido a su casa.

—Fue mandado por su socio Lee, lo mando a matar con un sanguinario cualquiera —La voz de Taehyung resonó en su celular.

—¿Por qué mierda quería matar a Jungkook?

—Fácil, al eliminar a Jungkook el proyecto nuevo quedaría en su autoría y las ganancias se irían hacia su cuenta bancaria, por eso lo hizo.

Jimin trono su cuello aun con la rabia y ganas de golpear a ese maldito hasta matarlo.

—Dame su dirección en estos momentos para mañana encargarme de él —Demando estacionando el auto y saliendo lo más rápido posible con sus cosas en manos y el celular en su oreja y hombro.

—Wow, espera ahí, Jimin —Dijo sorprendido —¿Por qué razón te tomarías el tiempo de matarlo?

—Si su plan de matar a mi pareja fallo no descansara hasta que se cumpla, no le importa cuantos sanguinarios mueran, él quiere a Jungkook fuera de esto así que me encargare de él. Qué pena la verdad ya que se veía una gran persona —Levanto su hombro sin interés introduciendo las llaves en la cerradura para correr y arreglar todo como si estuviera en su casa desde hace rato.

—Eso tiene lógica... bueno buscare su dirección y su horario para facilitarte las cosas en la nueva casería de venados —Se despidió para colgar.

Jimin solo dejo el celular a un lado de su cama donde vio como en el costado de su pantalón aún se encontraba la pistola que con tanta rapidez había recogido para salvar a su pareja.

Le saco las municiones y las oculto en la parte baja de la cama donde al día siguiente recogería para dejarla de nuevo en su lugar.

Desarreglo su cabello intentado calmar su enojo y camino hasta la cocina para preparar la cena antes de que un Jungkook traumado llegara.

Jimin abandono todo cuando recibió el aviso de que un auto rojo estaba siguiendo a Jungkook, tomo sus llaves, el arma y la máscara para entrar al auto y conducir lo más rápido a la dirección que le había dado Taehyung en tiempo real. Casi le da un infarto cuando ve como el auto de Jungkook se había detenido y pensó lo peor cuando llego y vio la puerta abierta.

Por suerte llego justo a tiempo para solo jalar el gatillo y acabar con la vida de la persona que habían contratado. Se sintió pésimo cuando vio los ojos de Jungkook llenos de terror y no se imaginó el miedo que pudo haber pasado y sumándole que presencio como mataban a alguien frente a sus ojos debió de haber sido traumático.

Miro su ropa y se dio cuenta como pequeñas manchas de sangre la adornaban y se maldijo por el gran error que había cometido.

¿Y si Jungkook reconocía su ropa con la del asesino?

Iba a estar en muchos problemas.

Se quito su ropa que consistía en un pantalón negro y una camisa de vestir completamente blanca que ahora estaba adornada de puntitos rojos.

Termino de quitar su ropa y la oculto en una mochila donde estaban las mayorías de cosas que ocupaba en el trabajo.

Se vistió lo más rápido con otra ropa más holgada y completamente limpia.

Suspiro de alivio cuando escucho como apenas Jungkook llegaba a la casa al escuchar el motor del auto.

Una sonrisa se plasmó en su rostro como si no pasara nada y bajo al piso de abajo esperando para recibir a su pareja.

Jungkook entro bastante desconcertado y con la mirada perdida.

—Amor —Dijo alegre Jimin recibiéndolo con un abrazo que apenas Jungkook correspondió.

—Hola... —Murmuro en voz baja.

Un puchero se generó en el rostro de Jimin.

—¿Pasa algo? —Fijo sus ojitos de cachorro hacia arriba captando la mirada del más alto.

Este negó.

—No pasa nada, amor...

Jimin asintió no muy convenció, pero aun así beso castamente los labios de Jungkook y camino hacia la cocina.

—¡Tuve mucho trabajo en la clínica y apenas llegué! —Grito desde la cocina apurado en preparar la comida —¡¿Que tal te fue?!

Jungkook dejo sus cosas en el sillón y retiro su saco dejándolo en este mismo de igual manera.

—Me fue bien, tuvimos uno que otros problemas con el proyecto nuevo, pero todo se arregló —Camino a pasos lentos hacia donde estaba el peligris viéndolo cocinar —¿En qué te ayudo?

Jimin señalo las verduras.

Jungkook asintió y remango su camisa para empezar ayudar a su pareja después de lavar sus manos.

El peligris lo miraba de reojo una que otra vez notando lo tenso que estaba y el miedo con el que tomaba el cuchillo.

Rodo los ojos levemente.

¿Cómo es posible que se allá puesto así solo por una muerte? Pensó Jimin hasta que recordó que Jungkook es una persona normal y cualquiera que nunca había visto un asesinato ante sus ojos.

Muy diferente a Jimin que a los 10 años cometió su primer asesinato a mano armada.

Fue criado para matar.

Terminaron de preparar la comida y empezaron a comer en un silencio cómodo para Jimin e incómodo para Jungkook por estar sumido en los pensamientos que tenía su mente que le daba una mala jugada recordando el momento que había pasado.

Jimin miro como aun Jungkook seguía debatiendo muchas cosas.

Suspiro duramente y levanto su plato ya vacío dejándolo en el lavaplatos, mañana se encargaría de lavarlos.

—Voy a bañarme y me iré a dormir, estoy muy cansado —Dijo con una pequeña sonrisa dejando un beso en la mejilla de Jungkook que lo hizo despertar ocasionando que solo asintiera.

Jungkook se quedó completamente ido y trago fuertemente saliva sabiendo que desde ese día esa perturbadora imagen seguiría en su mente.

Sin pensar que no sería el único asesinato que presenciaría.

Y tampoco el último que su novio cometería por él.

Solo por él...

Bebé traumando UnU

Jiminshi no va a dejar que le hagan daño a su novio :3 

Bueno aquí el primer capitulo sjjsjs

Espero que les haya gustado :3 <3

Los amooo

Bye~