៚ 03 : : CAPÍTULO TRES, acto uno

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ᘛ. FAMILIA SANO

LAS MENTIRAS PUEDEN SER MUY SENCILLAS de decir, también de pensar pero a la misma vez pueden ser muy fáciles de percibir o descubrir. Mentir no siempre debe de ser una opción y tampoco debe ser de diario porque una mentira puede causar mucho daño sin siquiera notarlo. Las mentiras no son buenas y no tienen justificación alguna, al menos cuando se busca causar mal pero que pasa cuando estás sirven para algo que relativamente es bueno.

¿Que pasa cuando se hace por una buena razón?

Seguiría siendo una mentira, sin embargo, cuando se hace por razones necesarias pierden peso.

Así que Satoru comenzó a inventar que se encontraba enferma.

Llevaba una semana completa en cama, al menos es lo que cree su jefe porque en realidad se encontraba sentada en una silla de un restaurante que no es de cinco estrellas pero que el ambiente es tan acogedor que le recuerda al amor de una familia.

Satoru nunca tuvo una cena familiar, pero está vez comenzaba a experimenar esa sensación de calor en el pecho, esa calidez que transmite una familia.

Y todo se debía a que habían coincidido en el mismo restaurante al cual habían ido dos amigos de Mikey. Sus nombres eran Keisuke Baji y Chifuyu Matsuno. Aunque al principio Baji se había mostrado distante y tosco con Satoru este término tomándole confianza.

Muy diferente al comportamiento de Chifuyu, el muchacho había sido más amable y empático con ella. Desde el principio se mostró caballeroso con sus persona dejando en contraste la gran diferencia que hay entre esos dos.

Aunque al principio había sido un poco incómodo para las cuatro o al menos para ella, la evolución termino siendo un éxito. Sus risas se podían escuchar por todo el restaurante aunque no estaba lleno los pocos comensales volteaban en su dirección.

Era una mesa con cuatro personas, las cuales reían y disfrutaban del buen tiempo. Un tiempo que parecía casi eterno pero que en el futuro sería recordado como de los mejores momentos compartidos.

El principal pensamiento de ella, gira en torno a lo agradables que son los amigos de Mikey. Se preguntó si habían más y si fuera así, también podría llevarse bien con ellos. Fue inesperado pero de un momento a otro la plática comenzó a fluir terminando en contar anécdotas graciosas del pasado.

──entonces, dices que intentaste bañar a un gato negro porque creíste que se volvería blanco.── señala Satoru con una sonrisa en el rostro. Casi se reía de solo decirlo.

Chifuyu estaba enrojecido hasta la nariz por la vergüenza.

Baji en cambio estaba riendo tan fuerte junto a Mikey.

──que puedo decir, pense que solo estaba sucio.── admite el de hebras rubias.── no pensé que fuera a ser un gato negro.

──cualquiera se daría cuenta que es un gato negro.── dice entre risas el pelinegro.

──dependiendo en las circunstancias en las que lo encontraste podría caber la duda .── menciona ella recordando, que algunos animales se ensucian muy rápido.── lo sé, porque tengo un hermano menor, que también lo intentó. En caso de él, el gato si estaba muy sucio.

Tras decir está palabra, Chifuyu aprovechó la situación para sacar a Baji de sus casillas un poco.

──oh escuchaste eso Baji.── masculla el rubio con una sonrisa divertida.── apuesto a que escribe mejor que tu.── agrega Chifuyu causando enojo en el mencionado.

Baji le dio una mala mirada al rubio cenizo.

Satoru ríe ligeramente.

Mientras que Mikey se encontraba en silencio, observando atentamente los gestos de la chica.

Le gustaba su sonrisa, cuando ella sonreía sus ojos se cerraban y aparecían dos pequeños oyuelos en sus mejillas.

Instintivamente Mikey sonríe también, verla sonreír le causaba una extraña sensación de felicidad en el pecho.

──a todo esto.── hablo Chifuyu.── ¿que eres de Mikey? ¿su hermana? ¿prima? algun familiar lejano.

──es mí novia.── responde con rapidez Mikey.

Chifuyu soltó el tenedor que tenía en la mano y Baji se ahogo con el agua que bebia en ese momento.

Satoru sonríe nerviosa.

Mikey en cambio, pasa sus brazos al rededor del torso de ella y descansa su cabeza en los pechos femeninos.

──¿desde cuándo tienes novia?── pregunta sin poder creerlo Keisuke.

──desde hace una semana.── confirma el rubio.

──entonces lo que dicen, es verdad.── murmura Chifuyu.

──¿que es lo que dicen?── pregunta Satoru intrigada por la mención.

──hace tiempo se comenzó a rumorear en la pandilla que Mikey tiene novia.── habla Matsuno limpiando el agua derramada en la mesa.── porque los vieron en el centro comercial. Pero se quedó como un rumor luego de no poderse confirmar nada.── agrego tomando aire.── le preguntan a Draken siempre si sabe algo pero se niega a decir palabra alguna sobre el tema.

Satoru bajo la mirada a la cabeza de Mikey el cual ahora descansaba sobre sus piernas.

Sus miradas se cruzan por un momento y aunque ella se siente inquieta por lo que apenas supo. Los ojos oscuros del rubio la tranquilizaron de momento.

──al menos sabemos que el rumor es cierto.── dice Baji pasándose el dorso de la mano por la boca.

──¿piensas presentarla ante la pandilla?── pregunta él otro rubio.

El silencio prevaleció por un largo rato en el cual se sintió un ligera tensión en el aire.

Al menos fue así hasta que Mikey se enderezó, su mirada se poso en sus dos compañeros. Los cuáles parecieron quedarse quietos al recibir aquella mirada.

Satoru se quedó casi con la boca abierta al ver ese comportamiento, sin duda alguna, le había sorprendido. Jamás imagino que Mikey tuviera ese control con una simple mirada.

Y tiene más sentido al ser el líder de una pandilla.

──no quiero que digan nada ¿entendieron?── ataja con un tono de voz severo.── la presentare cuando yo quiera, pero de momento la mantendré alejada de la ToMan.

──como mandé capitán.── habla casi al instante Chifuyu.

──hablo enserio Baji, no digas nada y menos a mis hermanas. Aún no se cómo presentarla.── habla de nuevo con ese tono hacia el pelinegro.

──tiks, como sea. No pensaba decir nada.── masculla el pelinegro con un tono divertido en la voz.

El ambiente se sintió un poco incómodo para Satoru, la joven no sabía que hacer o que decir.

De cierta forma le intrigaba conocer a los demás amigos de Mikey pero a la misma vez quería limitarse. Sobre todo porque tenía miedo que en algún punto, tenga que alejarse del rubio o que se enteraran que se está rodeado de pandilleros.

Aunque su carrera como prostituta la a llevado a conocer a los Yakuzas de Japón más emblemáticos y mucho más peligrosos que unos pandilleros. Prefiere que todo quede en el anonimato sobre todo porque sabía que su jefe era capaz de quitarle todo en un abrir y cerrar de ojos. Si llega a enterarse que todo esté tiempo le ha estado viendo la cara.

Pero mientras todo continúe como está, no tiene que preocuparse por nada.

Satoru regresa a la realidad al escuchar la voz de Keisuke colarse por sus oídos.

──deberias decirle a Megumi, a ella no se le escapa nada. No tardará en saberlo.── comento la voz de Baji.

──ya veré como decirle.── responde el rubio inflando sus mejillas. Haciendo un puchero.

──seguro le caerá bien a Emma.── agrega el pelinegro.── incluso a tu abuelo. Es más creo que se alegraría saber que no tienes la misma mala suerte que tu...

Las palabras de Keisuke son interrimpidas por el mismo, causando un silencio repentino entre ellos.

Mikey se mantuvo sereno, sin embargo, había algo inusual en su mirada una extraña tristeza apareció.

Satoru lo había notado, el ambiente cambio en su totalidad lo que antes era alegría se cubrió por un manto lugrebe que Chifuyu también percibió.

La pelinaranja y el rubio cenizo comparten miradas por un par de segundos. Ambos desconcen el tema el cual fue evitado por ambos chicos.

──Toru' vámonos.── habla el rubio cuando vuelve en si.

──oh esta bien.── responde ella extrañada por el comportamiento ajeno.── fue un gusto conocerlos chicos.── dice mientras se levanta y toma su bolso.── Baji, Chifuyu, espero verlos de nuevo.

──igual espero lo mismo Satoru.── dice Chifuyu sonriendo.

Baji se limita a mover la cabeza como despedida.

Mikey que ya se encontraba fuera del rincón de la mesa, cuando Satoru se paró a su lado la tomo de la mano bajo la antenta mirada de sus dos amigos.

Siguieron bajo la mirada de ambos hasta que desaparecieron por el lumbral de la puerta.

Ya afuera el frío de la noche golpea el cuerpo femenino y como reacción, la joven se abraza así misma frotando sus manos al rededor de sus brazos para crear un poco de calor.

──¿tienes frío?── pregunta él rubio al percatarse de la acción de ella.

──un poco.── responde.

Mikey solo llevaba consigo aquella chaqueta que utiliza cuando se reúne con sus compañeros de pandilla.

Sin dudarlo tomo la prenda que sacudió quitándole en el proceso el polvo, observo detenidamente buscado suciedad alguna, por suerte estaba impecable. Así que sin mediar palabra, se acerca a la chica y coloca la prenda al rededor de los hombros de la chica.

Satoru observa la chaqueta al ser más alta está le queda un poco pequeña pero es acogedora después de todo.

Incluso tiene el aroma de Mikey.

Un aroma masculino a pino o madera. Pero también percibe un ligero aroma dulce como a cereza, un poco inusual para una fragancia masculina pero sin duda refleja bastante bien la personalidad de Mikey.

──gracias.── murmura ella pasando sus brazos por las mangas.── ¿de dónde la sacaste?

──siempre la llevo a todos lados.── responde el rubio tomando los dos cascos.

Cuando el se voltea, su mirada se detiene en la figura femenina.

La chaqueta que le había brindado le quedaba a la perfección, se amoldaba tan bien a su cuerpo que la hacía lucir magnífica.

Dentro de Mikey se encendió una llama de calor, se preguntó que tan importante podría llegar a ser Satoru para su pandilla. Y el porque aún no le había dado un lugar propio de ella.

Cómo su novia.

Ella sería la reina de la ToMan.

──¿que tanto me ves?── pregunta ella alzando una ceja.

──me gusta como se te ve la chaqueta.── responde al acercarse y extenderle el casco.── me preguntó cómo te verías con el uniforme completo de la ToMan.

──oh no, ni se te ocurra.── habla ella apretando los labios.── no voy a vestir el uniforme. Una cosa es que haya aceptado ser tu novia y otra muy diferente que sea miembro de tu pandilla.── con rapidez mueve la cabeza con negación.

──no serías cualquiera del monton. Serías la reina.── aclaro tomándola de la mano.

Las mejillas de Satoru se encienden.

──aún así no lo quiero.── responde negándose a verlo. Sabe que si lo hace terminara convencida por el.

──piénsalo Toru', serás la reina de la ToMan.── murmura parándose de puntillas para poder alcanzar el oído de ella.── pero sobre todo, serás mí reina.── agrego.

Satoru maldice en voz baja.

Ese mí había estado de más sobre todo por el tono que utilizó.

En cada fibra de su cuerpo se había sentido un ligero temblor que le recorrió de pies a cabeza. El calor en sus mejillas aumento y en su estómago se aloja una nueva sensación.

Nervios.

Por primera vez, Satoru se siente nerviosa por la cercanía de un hombre que no tiene dobles intenciones con ella.

──la repuesta sigue siendo no.── responde tomado aire y calmar con ello sus nervios.── no me vas a convencer.

──yo creo que si.── insiste.── le diré a Mitsuya que se encargue de tu uniforme.

──¿que te hace creer que lo aceptaré?── voltea a verlo con una ceja enarcada.

──es solo un presentimiento.

Al estar ambos tan cerca, sus respiraciones se mezclan entre si.

Mikey siente la tentación de besarla, por unos segundos desea probar esos labios rojizos y carnosos.

De un momento a otro lo hizo.

No fue algo del otro mundo debido a que era un inexperto, solo había presionado sus labios sobre los de ella. Al alejarse se llevó consigo parte del labial granate que ella utiliza.

Satoru es incapaz de responder, la anterior acción ajena la había dejado sin palabras.

Sobre por por lo tierno que fue aquel beso que más bien fue una presión.

──vámonos a casa, tengo sueño.── se queja el rubio rascándose un ojo.

──eres un caso Mike.── niega ella divertida.── pero si tienes razón, debo volver a casa.

• ⚝ ◜🌿◝ ⚝ •

LOS BRAZOS DE LA CHICA RODEAN CON fuerza el torso del muchacho, su cabeza descansa sobre la nuca ajena mientras su mente le da vueltas al asunto. Aquella tarde Mikey había llegado a su departamento con la noticia de que conocería a la familia de él.

Al principio Satoru había creído que se trataba de una broma, pero se dio cuenta de que el chico hablaba enserio cuando no se rió cuando ella lo hizo. Menos cuando le dijo que no podía mentir una vez más.

Ahí se encontraba camino a casa de Manjiro a conocer a toda su familia.

Mikey le dijo sus hermanas le agradaría mucho y de paso su abuelo la vería como una nieta más. Por lo tanto no debería de preocuparse pero es difícil para ella hacerse a la idea, sobre todo cuando nunca tuvo que hacer algo similar.

De camino se la paso pensando en que pasaría si la familia se enterara de que trabaja. Al menos debía de ser sabía y pensar muy bien en lo que diría, porque encubrir un trabajo como el suyo es demasiado difícil.

Pero cree que es capaz de formular una mentira lo suficientemente buena para que nadie sospechara.

Aferrada al torso del rubio cierra los ojos recordando la primera vez que viajo con él. Su calidez sigue siendo la misma, la sensación de tranquilidad que emana cegandola hasta la médula. Se sentía como una manta tibia, se dejo llevar por el momento despreocupandose por lo que fuera a suceder.

──ya llegamos.── avisa el rubio al detener su vehículo.

──que rápido fue eso.── se colo la voz de Ichigo D'Angelo. Quien también fue invitado por el rubio.

Satoru se despegó del muchacho observó el frente de la casa, contaba con un lindo jardín, habían flores de lavanda, gardenia, tulipanes y violetas. En macetas cerca de la ventana habían otro tipo de plantas como helechos, más al fondo logro divisar lo que parecer ser un dojo y más haya había otro cuarto.

──tu casa es muy bonita.── murmura al bajarse de la motocicleta.

──tu departamento es mucho más lujoso.── comento el menor parándose en medio del camino.

──eso es verdad.── murmuró el rubio sacando las llaves del tanque.── andando nos esperan adentró.

Satoru asiente con la cabeza.

Mikey la toma de la mano, dándole un ligero apretón al verla preocupada. Se paró de puntillas y beso la mejilla de ella.

Según el consejo de Mitsuya a las chicas les gusta ese tipo de gestos cuando están nerviosas.

──no te preocupes, les caeras bien a mis hermanas y abuelo.── repite él cerca del oído ajeno.── por cierto mantendremos en secreto de que trabajas.

──¿estás de acuerdo?── murmura ella.

──es mejor que sea así, tal vez no puedan comprenderlo como yo.

──de acuerdo.

Ella le sonríe.

El rubio se aleja y recorren el camino el corto camino que les queda por delante.

Frente a la puerta no hay necesidad de tocar puesto que Mikey abre con sus propias llaves. El sonido de la cerradura pone los bellos de punta en la pelinaranja, y su corazón late a mil por hora cuando la puerta se abre.

Mikey no la a soltado en ningún momento, ingresa en la casa jalando consigo a Satoru quien a su vez jala a Ichigo hacia dentro.

──¡he vuelto!── exclama Mikey y su voz se escucha por todos lados.

──no hay que gritar ya te vi.── difere Emma saliendo de la sala de estar. Al ver la compañía de su hermano quedó con la boca abierta.── ¿quien es ella?

──ella es Satoru, mí novia.── indica sonriendo a más no poder.

──¿tu novia?── repite una nueva voz femenina que provenía de una albina.

──¿cuánto te pago?── pregunto la rubia.

Satoru estaba delante de dos chicas una albina y la otra rubia. Amabas realmente hermosas y con un parecido con Mikey.

──si ella es mí novia.── afirma de nuevo él.── Toru', ellas son Megumi mí hermana mayor y Emma mí hermana menor.── señaló a cada una de ellas.── Emma, Megumi, ella es Satoru.

──hola.── dice la mencionada alzando la mano.

Al principio la reacción de ambas hermanas fue silenció, sin embargo, cambió repentinamente a una de felicidad.

Las dos chicas se acercaron a la otra y comenzaron a hablarle, hacerle preguntas típicas al menos está era Emma quien se veía más emocionada que antes, daba pequeños saltos y los ojos le brillaban.

─

─sabia que Draken mentía cuando se negó a decirme la verdad.── murmura la albina de brazos cruzados.

──¿no estás enojada?── pregunta él rubio.

──no. De hecho solo estaba esperando este momento.── le sonríe para darle una palmada en la cabeza.── me alivia saber que es una chica la que te trae así y no algo malo.

──¿te cae bien ella?

──se ve que es agradable.── admite.

Mikey observa a la pelinaranja entrablar conversación con ella, detrás se encontraba Ichigo el cual era también bombardeado con las preguntas de Emma.

──por cierto, ¿quien es el niño?── preguntó la albina.

──es su hermano menor.

Antes de que Megumi pudiera decir algo más una presencia nueva llamo la atención de los presentes.

Por las escaleras venía un hombre de edad avanzada, el cual se dirige hacia donde se encuentran sus tres nietos junto a la visita.

Manjiro al notar la presencia de su abuelo se apresura a ir junto a Satoru la cual se había quedado a lado de Emma. Estando cerca entrelazó su mano con la femenina, notando en el proceso que la joven se encontraba nerviosa.

──Manjiro.── hablo el abuelo al ver a su nieto acompañado.

──abuelo.── responde el rubio vacilando con las palabras.── olvidé avisarte que traería a casa a mí novia. Ella es Satoru.── hablo enredándose con su propia lengua.

El mayor de la familia frunce ligeramente el entrecejo escanea con la mirada a la pelinaranja.

Satoru se limita a sonreír porque no quiere causar alguna situación tensa.

Los siguientes minutos fueron tensos, la sala se había quedado en completo silenció. Nadie decía nada incluso el zumbido de un mosquito se podría escuchar a la perfección.

──debo admitir que fue una sorpresa.── habla el mayor tocándose la nuca.── nunca imaginé que Manjiro traería una novia a casa.── agrego observando al antes mencionado. La hermana menor ríe en silencio.── he de decir que me ha sorprendido y no tengo palabras para decir, pero me alegra saber que tienes mejor suerte que Shinichiro.

──ya sabes lo que dicen abuelo, la suerte no es para cualquiera.── intervino la albina.

──tienes razón hija.── afirma el anciano.── me pareces una buena chica, ¿de dónde vienes?── pregunto hacia la pelinaranja.

Satoru lame sus labios antes de responder.

──de Roppongi, señor Sanō.── responde ella.

──ya veo, ¿que hay de tu familia?── pregunta.

──solo somos mí hermano menor y yo.── indicó al señalar a Ichigo sentado junto a Emma.── mí madre falleció hace unos años, nunca conocí a mí padre. Y mí otro hermano mayor a mí, no tengo idea de su paradero.── explico apretando ligeramente la mano de Manjiro.

──imagino que has trabajado para mantener a tu hermano y a ti.── puntualiza el hombre.

──y no se equivoca.── afirma ella.

──¿estudias también?── agrega.

──si, estudio en la universidad. Estudio la carrera de diseño.── dice mostrándose más confiada.

Nuevamente hubo silenció.

La tensión parece haber desaparecido sin embargo, aun se percibía un poco.

──no has tenido una vida fácil, por lo que me cuestas. Pero me alegra saber que has seguido luchando.── ataja el mayor. Su mirada se suavizó.── eres una buena chica, agradable y carismática a pesar de todo lo sucedido. Ya veo porque mi nieto te eligió.

──¿entonces que significaba?── pregunta Mikey impaciente.

──sigo sorprendido por todo esto, pero me alegra saber que mí nieto tiene a una buena mujer a lado.── señala el abuelo Sanō. Sus otras dos nietas escuchan curiosas.── eres bienvenida en la familia Satoru.

──gracias, señor Sanō.── vocifera con tranquilidad.

──no me digas señor, llámame abuelo.── corrige mostrando una agradable sonrisa.── y tu hermano también es bienvenido en la familia. Será bueno tener un niño entre nosotros, mis nietos han crecido y ya no quieren pasar tiempo conmigo.

──abuelo.── se queja Megumi.── perfectamente sabes que si pasamos tiempo conmigo.

──si, pero ya no es como antes.── señaló de nuevo. Sus nietos hicieron muecas, mientras los invitados sonríen.── ¿que esperamos? vamos a cenar, se have tarde y el hambre no es tregua.

──¡ay abuelo!── exclama Emma.── que exagerado eres.

Entre risas, dichos graciosos y palabras los hermanos D'Angelo son recibidos en la familia Sanō. Que a pesar de no ser perfecta le a abierto las puertas a los nuevos integrantes.

Ese día Mikey no solo había presentado a su novia, sus dos hermanas Megumi y Emma habían conseguido una nueva amiga y el abuelo Sanō dos nietos.

Sin duda alguna la llegada de los D'Angelo a la familia significaba cambios y nuevos ambientes. Tal vez llegaron inesperadamente pero estos llegarían para quedarse.

max's note's

la verdad ame mucho escribir la última parte del capítulo

en el siguiente veremos la integración de Satoru con el resto de amigos de Mikey y de paso con la ToMan

¿que les pareció?

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y si hablo por los lectores fantasma, no les cuesta darle a la estrellita y dejar un comentario aunque sea un emoji de corazón, es suficiente.

comenzaremos con la racha, porque si no luego se acomodan.

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hasta la próxima¡<3