───CHAPTER THIRTY SIX,
el lado de una moneda

           ───Saquearon puertoespecia y prendieron en fuego marea alta hasta que se redujo a cenizas y con ello, los tesoros del oriente que acumulo Lord Corlys, aparte, perdimos un tercio de la flota Velaryon.

Laisha miro al maestre Gerardys comunicar lo sucedido con todo el consejo presente, un silencio sepulcral del cual nadie se dignaba a decir una palabra tras la devastadora noticia del fallecimiento del príncipe heredero Jacaerys y la segunda hija mujer, Elaera.

Rhaenyra se había fundido en una depresión. No permitía que nadie entrase a su habitación, ni siquiera a Laisha.

Realmente no podía culparla, Laisha no era capaz, habían perdido cuatro hijos ya, y había uno desaparecido, pero empezaban a darlo por muerto al no encontrar su cuerpo en el mar o en la orilla.

Desde ese día, apenas habían pasado dos semanas en los cuales Laisha tomó la regencia tras la aceptación ligera de Rhaenyra.

───¿Bajas económicas?

───Considerablemente altas, con Driftmark saqueado me temo que hemos perdido económicamente mucho.

───¿Y de nuestros hombres?

───... Muchos de los barcos Velaryon fueron acabados, los pocos de Greyjoy bajo su posesión siguen patrullando, tuvimos dos bajas de los mismos.

───¿Y la triarquía?───Pregunto nuevamente, esperando las respuestas de parte del maestre quien lo medito un poco.

───Fueron mucho más altas que las nuestras, mi señora, los jinetes de dragón hicieron bien su trabajo en Driftmark después del saqueo.

───Considero que oficialmente la triarquía no volverán a meter sus manos en este asunto, no después de las horrorosas bajas para ellos.

Lo único bueno.

Pero no lograba satisfacerla ni un poco.

───En las orillas del río vinomiel, se desencadenó una batalla, mi señora, entre Lord Ormund Hightower y las fuerzas unidas de Lord Thaddeus Rowan y Tom Flores.

───Pude enterarme de ello───Murmuró viendo a lord Celtigar───Mi hermano me lo comunicó en un cuervo, perdimos porque Tessarion y el príncipe Daeron aparecieron en la batalla.

───Tom Flores y Lord Owen Costayne murieron, Ser Alan Beesbury y Lord Alan Tarly fueron tomados prisioneros y Lord Rowan huyó al norte con los restos del ejército en busca de volver a fortalecerse.

Laisha sintió su mano sangrar al presionar la daga en su mano, viendo su propia sangre escurrir por su brazo hasta el codo con estoicismo.

───¿Algo más que deba saber, mis lores?───Pregunto viendo a sir Alfred asentir.

───El regente, Aemond, ha partido con sus fuerzas hacia Harrenhal para atacar al príncipe Daemon, por lo que mi comunicado tiene una pregunta: ¿Donde mierda está el príncipe Daemon con su ejército?, desde que se retiró de Dragonstone no dio pistas de vida.

La atención se desvió enteramente a ella, Laisha suspiro pesadamente, soltando la daga con su sangre y acomodándose como le placiera en el asiento.

───Enviaré un cuervo a sir Simon Strong, que informe al príncipe Daemon, él nos dará finalmente su respuesta───Afirmo levantándose de su asiento tras meditarlo, el resto hizo lo mismo───Se levanta la reunión, regresen a sus tareas.

Los vio retirarse poco a poco de la sala, dejándola sola con Aegon en la puerta esperándola.

───¿Que pasa, mi niño?───Preguntó preocupada, acercándose a él para agacharse y revisar su cuerpo.

───Sangre───Balbuceo su niño señalando su brazo, Laisha nego ocultando su brazo para alzarlo con el otro.

───No es nada, vamos a ver a tu hermana, veamos si logras subirle el ánimo───Murmuro caminando por los pasillos tibios, pero que se sentían sumamente fríos.

───Mi culpa───Murmuró ocultando su rostro en su cuello, Laisha nego.

───Nada de lo que pasó fue tu culpa, me siento aliviada de que estés aquí, mi niño.

Aegon se acurruco en su cuerpo, aliviando un poco a Laisha del cual pronto se desvaneció al ver a sir Baleror correr hacia ella.

───Su hermano, lord Dalton ha atacado las costas de las tierras del oeste, hace saqueos y desastres en nombre de la reina.

───Excelente───Suspiro pensativa───No perdamos el rastro, mi hermano ha prometido enviar cartas seguido para mantenerme informada de sus pases, no permitas que nadie mas que tu o yo leamos las cartas de el.

───Como ordene, mi señora───Se inclinó ante ella dándose media vuelta, Laisha quiso seguir con su camino hasta que el hombre se paró frente a ella.

───¿Sucede algo?

───Lamento su perdida, mi señora... Perdió cuatro hijos, con uno desaparecido... No imagino su dolor.

───La reina está devastada, pero esto la fortalecerá, estoy...

───No hablo solo de la reina, mi señora───Afirmó con una mirada comprensiva en ella, Laisha trago saliva sosteniendo a su hijo.

───Pienso que la madre quiere más a mis hijos que yo misma... Me los arrebata sin contemplaciones...

Aegon se acurrucó contra ella por sus palabras, casi como si quisiera darle el calor de un hijo y su amor.

───Le juró, protegere a la princesa Vaelys con mi vida junto la del príncipe Aegon. Morire por ambos de ser necesario, con tal de que usted o la reina no sigan sufriendo───Le prometió hincándose frente a ella, Laisha asintió.

───Le agradezco sus palabras, sir Baleror, la casa Blacktyder siempre ha sido un buen aliado de los Targaryen.

───Mi casa siempre responderá por la casa del dragón, nunca caemos, siempre en pie.

Baleror se levantó mirando a su señora, Laisha asintió y le permitió retirarse, viéndolo desaparecer por un pasillo.

───Bien, mi niño, vamos con tu hermana, te dejaré con ella e iré con tu madre───Susurro besando su frente retomando su camino.

Vaelys parecía muerta en vida, para preocupación de Laisha.

Jugaba y hablaba con Aegon, pero no lucía con esa felicidad y ánimo de interactuar que antes poseía... Su pequeña Vaelys estaba rota, resquebrajada con miles de pedazos fuera de su lugar.

Elinda le había comentado que hablaba sola y se golpeaba seguido en modo de regaño para después sentarse frente al fuego y abrazarse durante horas sin hacer nada.

Enloquecida de dolor por perder al hombre que amaba.

───¿Crees que se recupere?───Le pregunto a Elinda que dejó de servir el jugo de naranja para verla.

───Lo sabría responderle, mi señora... La princesa no muestra mejoría en estas dos semanas.

───Carajo...───Susurro con una mueca, acercándose lentamente hasta Vaelys y besando su cabeza───Mi dulce princesa.

───Madre───Susurro con una sonrisa entristecida, Laisha se sentó en el suelo frente a ellos, tomando un juguete y moviéndolo hacia el de Aegon, distrayendolo───¿Noticias de Vis?

───No lo hemos encontrado───Murmuró soltando aire.

───¿Crees que este...?───Trago saliva sintiendo escalofríos, Laisha nego.

───Está vivo, estoy segura... Puedo sentirlo───Murmuró tocando su pecho, tomando aire hondamente───Pero te alegrará saber que Jason Lannister fue herido mortalmente durante una batalla.

Vaelys sonrió, burlándose en silencio.

───El karma, su gemelo fue a buscar el apoyo de la triarquía... Espero que se muera lleno de dolor───Murmuró odiosa, sus ojos fijos en el fuego consternando a Laisha───El fuego es fascinante, puede consumir a miles, pero es... Un lugar seguro, un sitio digno.

───¿Por qué lo dices?

───Para los Targaryen, morir en batalla es un logro, una forma de demostrar la valentía, pero morir en el fuego... Es demostrar que eres digno de la casa.

───Es parecido a nosotros, a los Greyjoy───Murmuró moviendo su juguete al de Vaelys───Morir en el mar, en una batalla es un honor, el mayor que podrías recibir en tu lecho.

Vaelys le sonrió a Laisha.

───Siempre sentí que, soy mas mar que fuego, mamá───Murmuró soltando el juguete para acomodarse más cerca───Amo a Rhael, volar... Pero estar en el mar siempre me gusto mas.

───Eres digna hija mía───Murmuró acariciando su cabello───Igual a tu madre en apariencia, pero igual que yo en el resto.

───Estoy orgullosa de serlo───Sonrió triste de repente───Y Jace amaba que fueras nuestra madre, no veía a nadie mas siéndolo.

Laisha abrazo a Vaelys de costado, invitandola a recostarse encima de su pecho sin detener el juego con Aegon, tarareando la canción que solía cantarle a su niña cuando era una niña asustada.

Laisha no se asignaba a tocar la puerta de la habitación que compartía con Rhaenyra.

Lo intentó varias veces anteriores, en días antes, pero nunca recibió respuesta realmente, por lo que pensaba que sería lo mismo y casi optó por retirarse.

Pero necesitaban hablar, fortalecerse.

Sin pensar más su mano tocó la puerta, esperando por largos minutos en los que perdió la esperanza y se sintió estúpida, alejándose de la puerta para volver a la sala principal.

───Laisha.

La aludida se giro para ver a Rhaenyra abrir la puerta, su cuerpo vestido por un vestido rojo, pero lo que más llamó su atención fue su rostro cansado y marcado por el dolor.

No dudo en acercarse e ingresar a la habitación, cerrando la puerta y recibiendo con brazos abiertos a Rhaenyra.

Le permitió llorar y ella misma se lo permitió igualmente, repentinamente cansada de mantenerse fuerte cuando por dentro era un desastre.

───No podemos seguir perdiendo tiempo───Murmuró alejándose de Laisha, abrazándola aún───Debemos atacar.

───¿Atacar a quien?, ¿Naranjas y Gwayne?

───No───Negó inmediatamente, separándose completamente para tomar un papel y avanzar hasta ella───A King's landing, Aemond partió con Vhagar, la capital está sola───Susurro acercandose mas a ella, tomando su rostro entre sus manos───Debemos partir ahora, tu debes llegar conmigo.

───Dejaremos Dragonstone solo.

───Vaelys puede encargarse.

───Cariño, Vaelys esta todo menos capacitada para regir mientras no estamos.

───Ya me encargare de traerla de regreso───Aseguro solemne y calculadora───Sir Baleror se quedara con ella, la cuidara, escuche su promesa, Aegon tambien lo hara, partiremos solo Daemon, mi persona y tu con tus hombres, tomaremos la capital.

───¿Completamente segura?───Pregunto viéndola asentir───Organizare un plan entonces.

───Tomemos la capital ahora que están desprotegidos. No podemos perder tiempo, ni más de nuestros hijos.