𝙘𝙝𝙖𝙥𝙩𝙚𝙧 𝙚𝙞𝙜𝙝𝙩, the doubt of a truth







───CHAPTER EIGHT
la duda de una verdad






55 votos.




           Laisha pensó que las cosas cambiarían un poco mal cuando volvió a encontrarse con Rhaenyra al medio día, viendo su rostro sonriente y ropa que cubría hasta su cuello con sus damas atrás de ella.

Pensó que la ignoraría porque su deber como heredera estaba en otro lugar, con otra persona en su futuro, y Laisha estaba bien con eso, siempre supuso que sucedería.

Aun así, cuando Rhaenyra se guindo de su brazo como una niña caprichosa y hablaba con ella de forma tan animada y seductora, Laisha se sorprendió y no pudo seguir el hilo de su conversación.

Recientemente había pasado unos minutos con Alicent y la bebe Helaena en los jardines, notando seguidamente que Alicent trataba de mantener a Laisha cerca de sus hijos. Un intento de atraparla y convertirla en dama de alguno de sus hijos.

Y Rhaenyra había llegado para reclamar su atención con su rostro sonriente y engreído reflejado en desdén hacia la reina, tomando su brazo y obligándola a caminar a su lado con aparentes celos por la forma en la que apretaba su brazo.

Laisha se sintió bien al notar que las cosas no habían cambiado para mal, siendo la única excepción que Rhaenyra la había llevado a un sitio lleno de árboles y vegetación para reclamar sus labios en un beso posesivo y necesitado que no dudó en devolverle.

Su mano fue al cuello cubierto de Rhaenyra, destapándolo para ver las marcas que le había provocado en la noche, notando de inmediato la sonrisa satisfecha y orgullosa de su princesa.

───¿Tan alegre de que te marcara así?

───Disfruto de verlas y recordar que cumplí con mi cometido───Murmuró llevando su propia mano al costado del cuello de Laisha, tocando la piel sensible y morada.

───Ah, no me dejaste impune, pero saliste peor.

───Y es una delicia───Afirmó inclinándose de puntillas para volver a besarla───¿Vienes conmigo a comer?, hicieron dulces para mi y tengo el deseo de compartirlos contigo.

───La princesa quiere comer dulces conmigo, y eras muy recelosa.

───Si me vuelves a follar hoy seré más accesible con mis dulces───Susurró besándola antes de darse vuelta y caminar, Laisha parpadeó y sonrió divertida antes de seguirla, tomando una flor para fingir que le interesaba───Vamos, lady greyjoy, nuestros dulces esperan───Se rio caminando más rápido.

Cuando Laisha camino más rápido Sir Criston paró frente a Rhaenyra, murmurando algo preocupado y viendo los hombros de Rhaenyra bajar con desgano.

───¿Sucede algo?───Pregunto interesada, sir criston la saludo cordialmente.

───La reina quiere hablar conmigo───Dijo chillona, molesta por la interrupción de la mujer───Los dulces tendrán que esperar, ¿estarás ocupada el resto del día?

───Eh, lo dudo mucho, tal vez navegue un rato con mi lord hermano.

───Bien, te buscaré después, sir Criston acompañeme───Pidió avanzando con elegancia, Laisha noto el meneo de sus caderas provocativamente y sonrió cruzando sus brazos.

Pronto se dio media vuelta y caminó hasta ingresar a la fortaleza nuevamente.





Rhaenyra avanzó por el jardín del árbol de los dioses con altanería, su mirada de desprecio clavada en Alicent que la miraba con atención y mandíbula apretada.

Paro frente a ella con una pequeña sonrisa en sus labios rosados, enlazando sus manos en su vientre para mirarla fijamente.

───¿Qué pasó anoche?───Preguntó tosca.

───¿A que se refiere, mi reina?───Pregunto sarcástica, Alicent cerró sus ojos.

───Mi padre hizo acusaciones extremadamente preocupantes hacia tu persona───Hablo firme y molesta, Rhaenyra ladeo su cabeza recordando la noche y el placer───¿Estuviste con tu tío?

───¿Daemon?, se unió a mi en mi vuelo nocturno, tan pronto toque tierra en la montaña de Rhaenys lo eche, detesto verle el rostro───Afirmó con una sonrisa───Un ser tan despreciable... ¿Cómo permitiste que te tocara?

───Recuerdo que antes lo amabas y anhelabas casarte con él.

───El problema es que para mi, mi familia y mis amistades son importantes, si se traiciona mi confianza esa persona se muere para mí───Clavó la estaca viendo el rostro contraído de rabia de Alicent.

───Exijo como tu madrastra y reina que me cuentes absolutamente todo───Ordenó avanzando furiosa hasta ella, Rhaenyra puso su mano en medio de ambas.

───Eres solo la puta de mi padre y su carga de hijos, no eres importante, Alicent───Se encogió de hombros caminando hasta subir a la colina del árbol───Vole, él se unió, intentó acercarse a mi, lo mande a la mierda y volví a mi habitación para dormir plácidamente después de pasar horas espectaculares con Syrax.

───¿Solo eso?

───Tu padre me acuso, dejame adivinar: volar a altas horas de la noche, estar en la montaña de Rhaenys sola sin proteccion con mi tio...

───Que cojiste con Daemon en la montaña de Rhaenys, Rhaenyra───Grito furiosa, Rhaenyra ladeo su cabeza y arrugó su nariz con disgusto.

───Es la acusación más vil que han hecho en mi contra───Exclamó indignada, ofendida por la insinuación de siquiera besar a su tío cuando lo despreciaba tanto.

───¿Segura que lo es?, los targaryen tienen ciertas costumbres───Dijo con repleto desprecio a las tradiciones───Y Daemon no conoce límites, y tu siempre quisiste estar con el.

───Ah, despreciando a mi familia, es hermoso escucharla así, con su verdadera cara, su verdadera hipocresía y envidia hacia mi, tranquila, Alicent, deberías preocuparte por Aegon o por mi dulce hermana Helaena.

───Estás deshonrada, Rhaenyra; ningún lord querrá casarse contigo───Susurro con desprecio y burla.

───¿Por qué estás tan segura de que fui desflorada?, ¿te recuerdo a ti cuando tenías catorce años y Daemon se insinuó a que te subieras encima de él?, y ahora estas casada, con hijos.

───Exijo respeto, Rhaenyra, soy la reina.

───¿Debo repetir por que no mereces respeto y por que eres absolutamente nadie?───Pregunto insultante───Eres ridicula y una hipócrita, mi reina, que lastima que haya sido desflorada hace tanto, pero no significa que pase por lo mismo; no me cogería a mi tio por que lo detesto y por que eso enloquecería a mi padre, el cual respeto. Eso no pasó ni pasará.

───A mi padre el lord mano se le dijo...

───¿Que se le dijo al viejo de tu asqueroso padre?───Pregunto altanera───¿Él repartió tales calumnias hacia mi persona?. Yo soy la princesa, tengo sangre real en mis venas, vengo de una conquista continental, el cuestionar mi virtud y mi honradez es un alto acto de traición hacia mi, ¡hacia la corona!

───Yo no se específicamente que se le informo, pero él no me miente.

───¿Ah si?, ¿segura?, por que tu eres bastante mentirosa, y tu padre es igual, cual padre tal hija───Se burló viendo su expresión flaquear.

───Él se lo informo al rey, y yo los escuche.

───Así que... Me acusas de difamaciones, calumnias que escuchaste, una conversación que no deberías oir por que son asuntos de hombres───Chasqueo su lengua───Asi decias antes, ¿recuerdas?, cuando quería escuchar las conversaciones del imbécil de lord Jason y lord Tully: "son asuntos de hombres, nosotras no debemos escuchar"

───Soy la reina...

───La reina de los estúpidos, reina de nada, reina consorte, mujer que solo sirve para cargar hijos, en cambio, yo seré la reina, reinante, mi esposo será consorte; como tú, su único deber será darme hijos, no meterse en asuntos que no le incumben.

───Yo solo quiero ayudarte───La detuvo cuando la vio respirar y abrir la boca───Por nuestra antigua amistad que no deseo que se pierda.

───¿Que no quieres que se pierda?───Pregunto con burla, caminando hasta Alicent───Debiste pensarlo antes de meterte a la habitacion de mi padre en luto por la muerte de mi madre, la reina Aemma───Le sonrió antes de suspirar───Eche a Daemon de la montaña por que no soporto su presencia, si sigues dudando de mi virtud no importara, mi padre sabe que yo nunca le mentiría.

───¿En verdad?, has mentido en otras cosas, lo sabes.

───Pero no tan delicadas como mi preciada virtud.

───¿Me dices la verdad, Rhaenyra?, ¿no perdiste tu virtud con el?

───¿Debo seguir refutando sobre mi virtud?, llegaré con mi preciada flor hasta la noche de bodas. Aparte, nunca dejaría que Daemon me tocará, tu lo sabes, ¿no que eras mi amiga y lo sabías?

───Dioses, fuiste estúpida al dejarte llevar por la noche a solas con el───Insulto viendo a Rhaenyra reir.

───No es mi culpa que él me acosara, él debe pagar por ser un acosador.

Fue lo único que dijo antes de pasar a su lado y golpear su cuerpo con el de Alicent, apresurandose a salir en busca de los guardias que en la noche había echado, conociendo la maniobra de Otto, los sobornaria, pero ella se adelantaria con tal de no permitir que perdiera algo que le pertenecía.





Laisha había notado cierto revuelo en el palacio, los guardias de un lado a otro, las puertas del salón del trono selladas, sir Westerling demandando órdenes mientras ella se retiraba del palacio para ir a navegar unas horas con su hermano.

No preguntó, no le dio atención, solo siguió como como una marea tranquila.

Más tarde cuando volvió, encontró a una Rhaenyra conmocionada y furiosa caminando por el jardín en vueltas con sus doncellas preocupadas atrás de ella, no tardó más de dos minutos cuando Rhaenyra la vio y camino a ella tomando su brazo para irse con ella.

───¿Puedo preguntar qué mierda pasa?

───Mi padre sabe, el malnacido de Otto me ha tirado al fango───Murmuró furiosa.

───¿Saben que?───Pregunto preocupada, Rhaenyra la miro obvia.

───Eso, creen que fue mancillada, por mi tío───Anunció con asco, Laisha frunció el ceño.

───Ah, que lastima que no dijeron mi nombre.

───Admito que solo quise que dijeran tu nombre, pero mencionaron al malnacido de mi tío, igual salí ganando, fue exiliado y Otto perdió su puesto aquí───Se rió dándose la vuelta alegre, Laisha la siguió acostumbrándose a sus cambios de humor───Tu afortunadamente seguiras aqui a mi lado, y quien sabe, acompañándome en las lunas───Susurro con un guiño.

───¿Soy su desestresante?

───Diría que sí, pero eres de mi propiedad───Sedujo poniendo su mano en el pecho de ella───Así como yo soy tuya para siempre, tu eres mia por siempre.

───¿Que mas paso?───Preguntó con sospecha, Rhaenyra frunció el ceño antes de volver a caminar hasta la biblioteca, allí no serían especialmente vigiladas por unos minutos.

───Mi padre acabó con mi 'cortejo' y me casare con sir Laenor Velaryon, hijo de la serpiente marina───Murmuró con un suspiro───No me desagrada, mi primo tiene otros... Intereses───Susurro viendo───Y yo igual.

───¿Y qué harás?

───Seguir disfrutando de ti, y tu disfrutando de mi majestuosidad en mi cama───Susurro acercándose para besarla, Laisha se negó.

───¿Que pasara conmigo y mi hermano?, si se enteran de esto, podría ser el final de mi casa, no estoy dispuesta a pasar por un exilio en mis tierras, disfruto estar en los malditos mares furiosos en busca de tesoros.

───¿Me abandonaras?───Pregunto alejándose───¿Dejarás de ser mía?

───Si esto llega a descubrirse...

───¡Nadie descubre nada, Laisha!───Grito furiosa───No puedes embarazarme, eres mujer, ¡y te puse una excelente coartada por si acaso!, ¡eres mi pertenencia y yo procuro cuidar lo que me pertenece!

───Cómo proteges tu derecho al trono, como defiendes tu honor, manche tu honor, y podría ser que Otto lo sabe.

───Si esto es tener un honor manchado pues quiero que lo manches todos los malditos días en cada maldito minuto. Sería capaz de irme a Dragonstone contigo para tenerte.

───Ah, y crees que se permitiría.

───Si te nombro mi doncella, si.

───Ni lo pienses.

───Entonces te nombraré como mi aliada, con eso se me permitirá, podremos seguir. Me ocupe de los guardias, los soborne con bastantes monedas, puse una coartada para ambas en caso de que intenten insinuar algo entre nosotras por tu rumor───Murmuro acercándose a ella───El cual debo decir que adoro ese rumor, es delicioso.

───Si, anoche lo dejaste bastante claro.

Rhaenyra sonrió coqueta, sus escurridizas manos tomaron su jubón haciéndola encoger y quedar casi a la altura de su rostro.

───La biblioteca está sola y ya selle la puerta, ¿me follas aquí y ahora?

───Ah, me siento usada.

───Eres mia y yo soy tuya, aun cuando me case, seguiré anhelandote en mi cama, ¿tu no me anhelas?───Pregunto en un susurro, bajando su mano por su pecho, su estómago y bajando por su vientre───¿No anhelaras poseerme en las noches si te vas?, ¿que te pida mas y mas y dejarme sin palabras?, ¿no anhelaras mi compañia?───Preguntó alzando sus cejas, Laisha la sostuvo de la cintura apretandola contra su cuerpo.

───¿Nadie se enterara?

───Solo tu y yo, es todo lo que necesitamos───Afirmó justo antes de que Laisha reclamara sus labios y la sentara en la mesa con anhelo, Rhaenyra sonrió aportando en apartar la falda de su vestido recibiendo mordidas por parte de su amante.





Laisha no sabía si su dios estaba de acuerdo con lo que hacía. Ella, una parte del extenso mar, amante de la princesa que contiene fuego en su sangre y en su mirada.

Era hermoso, satisfactorio, pero dejaba de serlo cuando recordaba lo que vendría.

Rhaenyra estaba de viaje con su padre a Driftmark para discutir sobre el matrimonio de la misma con Laenor.

Laisha estaba a merced de Alicent, ¿ella perdió la oportunidad?, no.

Se le había acercado con una sonrisa alegre y una pequeña Helaena en brazos, hablándole sobre política e invitandola a comer los dulces de leche con chocolate en compañía de su otro hijo, Aegon.

Laisha no era estúpida, Alicent seguía buscando que se acercara más a los niños para que cediera a ser su doncella protectora. Así que declino la oferta invitandola a caminar por los jardines y seguir hablando sobre política.

Eso hasta que su hermano llegó para salvarla y volver a navegar juntos por dos semanas enteras desde la capital hasta más allá del dominio.

Al momento en que el rey y su hija llegaron, Alicent estaba ocupándose de mantener a Laisha con ella, hablando sobre la nueva mano de rey, Lord Strong y sus hijos, hablando sobre lo hermoso que estaba el día e incluso fingiendo estar mareada para que se quedara con ella.

No necesitaba que ella se acercara a Rhaenyra, porque ahora todo el odio que Rhaenyra le tenía era mutuo, la había llamado mentirosa cuando ella lo era aún más.

Laisha era su boleto de venganza, tenerla con ella, tenerla vistiendo el verde de su casa como aliada sería un golpe bajo para Rhaenyra por sus mentiras.

Por otro lado, Laisha estaba agotada de Alicent y sus niños, aparte de que le disgustaba grandemente ver a Aegon beber enormes cantidades de vino. Ella nunca les dio vino a sus hermanos cuando eran niños, al menos hasta que Dalton cumplió ocho años.

Así que cuando Dalton volvió con unos cuantos hijos de hierro y su pequeño hermano para la pronta boda, Laisha pudo respirar un poco más tranquila por tener todo su tiempo libre con ellos.

Rhaenyra se llevaba un par de horas y noches enteras con su compañía, sirviendo como el titulo que la heredera le dio a sabiendas de que no le agradaba, Laisha había empezado a creer que le gustaba molestarla con solo eso para obtener una reacción más beneficiosa.

Pero, el problema vino cuando los Velaryon llegaron a la capital, las noches se redujeron por las constantes sospechas de lord Corlys sobre su hijo, insistiendo en que debía pasar más tiempo con su futura esposa mientras que Laena Velarion era quien definitivamente se llevaba más tiempo.

Laisha se llevó la enorme sorpresa cuando una noche llegó a la habitación de Rhaenyra para ver a Laena sentada allí con Rhaenyra frente al fuego, su sorpresa se engrandeció cuando la heredera la había presentado como su amante.

Aun así, la joven Velaryon no reaccionó nada mal, en cambio se levanto y la abrazo admitiendo que su prima tenía buenos gustos y dejando en claro que su hermano no los tenía.

Le causó gracia, y fue algo extraño de ver, pero lo bueno vino cuando Rhaenyra se sento sobre ella despreocupadamente mientras hablaba con su prima, teniendo como único entretenimiento precisamente era tocar la cintura de su princesa y los detalles de su elaborado vestido, pensando en la belleza que cargaba consigo.

Laisha también noto que la reina Alicent actuaba raramente, no solo con la princesa, sino con ella también, tampoco fue que intentara acercarse a la reina para no perder 'su amistad' cuando una vez escuchó un pequeño mal trato que le dio como bofetada blanca a Rhaenyra.

Dalton se había acercado a ella después de minutos en la puerta, sentándose a su lado frente al fuego pensando en como iniciar una conversación sin sonar directo o tosco y provocar un dulce golpe por parte de su hermana.

───¿Te coges a la princesa?

Laisha lo miro de inmediato con seriedad, Dalton sonrió nervioso y rascando su nuca, cubriendo su cabeza de cualquier posible golpe.

───¿Por qué preguntas reverenda estupidez?

───Hay muchos rumores que dicen que la princesa no cogio con su tio pero si que se le vio ir a un pasillo distinto al de su habitación, y el paralelo a esta es hacia acá───Dijo lentamente───Así que...

───Mantengo una buena relación amistosa con ella, alianzas.

───Si, claro, y yo planeo tener una sola mujer.

───Dalton...

───¿Que paso hermana mia?, pensé que teníamos la suficiente confianza como para decirnos eso, aparte dijiste una vez que te gustaba una mujer, hermosa de aquí y por eso no viniste conmigo a Pyke.

───Ve a dormir, mañana es el banquete pre matrimonio.

───¿Por qué permites que se case, Laisha?, eres demasiado posesiva para el bien común.

───Por que soy su 'amiga'───Dijo en un tono disgustado, Dalton sonrió.

───Te la cogiste, y te la coges.

───Dalton───Advirtio.

───Siempre supe que tus encantos son enormes, pero la princesa... Ella es peor que tu en narcisismo, ¡y la conquistaste!

Laisha suspiro sin ver salida, su hermano era testarudo.

───Supongo que si.

───¡Dios ya lo admitiste!

───Por que eres igual a una patada en las pelotas, Dalton, eres insoportable.

───Y mira lo que obtengo por serlo───Sonrió victorioso───¿Cuando empezó?

───Supongo que inició en el viaje de cortejo de ella, solo coqueteos hasta que llegamos ella se empecinó en descubrir mi secretito con la condición de que me la cogiera.

───Increíble.

───Desde entonces es así.

───Te coges a la futura reina, lo que falta es que le plantes hijos───Se burloy Laisha nego.

───No puedo darle hijos, si pudiera ya le habría dado te de luna casi todas las noches... Mierda.

───¡¿Todas las noches?!

───Casi, todas las noches───Remarco viéndolo reír con fuerza, Laisha suspiro con fuerza.

───¡Por nuestro dios del mar, esto es mejor de lo que creí!

───Dalton has silencio de una vez, pueden escuchar.

───Tienes razón, no vas a poder darle hijos por que cogen todos los días.

───La descendencia de la casa queda en mano de ti y nuestro hermano.

───Que lamentable, hubiera gustado que Rhaenyra fuera mi cuñada.

───Si, en la muerte será───Murmuro volviendo a ver el fuego.

───¿Por qué no evitar su boda?, somos Greyjoy, tomala.

───Como si fuera tan fácil, prefiero ahorrarme ese problema, Dalton. Estoy bien con que se case.

───Laisha...───Susurro en un llamado sin creerle, no lo estaba mirando, era bastante obvio que no era así.

───Dije que estoy bien con que se case───Afirmó con más fuerza, mirándolo con disgusto que no iba hacia el───Ahora, hermano mío, ve a dormir, mañana es el banquete.





Bạn đang đọc truyện trên: AzTruyen.Top