MUN, LA SEÑORA CHUU Y NARI HABIAN IDO A LA CASA de la mujer y del niño mientras les borraban los recuerdos y acomodaban sus cosas, era media noche por lo que los tres se encontraban cuidado de la familia.

- Pronto irá a la escuela - hablo la señora Chuu llamado la atención de la pareja y Nari se acercó a ella arrodillandose a su lado mientras cubría con las mantas a la mujer - Será difícil que conviva con los demás niños después de todo lo que pasó, estoy preocupada

La castaña simplemente miro al pequeño quien dormía pacíficamente a pesar de lo que había pasado y suspiro teniendo un vago recuerdo de su infancia, Mun al notar eso se acercó a ambas mujeres arrodillandose del mismo modo que ellas.

- Conozco a unas personas muy buenas para ayudarlo a convivir y socializar, unos buenos maestros - respondio en un tono emocionado

Nari frunció el ceño ladeando su cabeza para observarlo con curiosidad conocía casi a todas las personas que Mun frecuentaba y no sabía de nadie con esas cualidades. El azabache soltó una baja risa mientras miraba a la señora Chuu con una sonrisa emocionada.

- Yo me encargaré - afirmó antes de mirar a Nari, inmediatamente con un brillo emocionado en sus ojos - ¿Quieres salir conmigo mañana?

La castaña sintió una oleada de emoción recorrerla al escuchar sus palabras, asintió inmediatamente amando el pensamiento de pasar tiempo con su persona favorita.

[...]

Cuando Mun dijo que quería invitarla a salir ella creyó que serían ambos chicos pero, estaba equivocada Joo-yeon y Ung-mil también estaban ahí, la de anteojos había comenzando un trabajó allí y aunque a Nari no le molestaba salir con los dos amigos ella esperaba un tiempo a solas con Mun.

Mientras comenzaba a comer sintió la mano de Mun sobre su muslo y le dirigío una mirada rápida antes de concentrarse en su comida. El contacto físico ya no era un problema con Nari, apesar del trauma lo había superado y ambos (más Mun) eran muy afectuosos, siempre habían abrazos, besos, toques sutiles en su relación que se sentían cómodos.

- Es un trabajo, solo deberán estar con ese niño y enseñarle español - comenzó Mun a explicar, la castaña salió de sus pensamientos mientras observaba a Joo-yeon acercarse a los tres

-Yo ya tengo un trabajo - respondió con una gran sonrisa mientras estiraba sus brazos mostrando su mandil del restaurante - Pero me gustaría otro

Nari sonrió mientras tomaba un pedazo de carne y se lo llevaba a la boca antes de soltar un leve tarareo.

- Bueno, definitivamente Joo-yeon es más capacitada para este trabajo - comento Nari con una leve sonrisa

- ¿¡Agh?! ¿¡Y que hay de mi Nari-yah?!

Ung-mil la miro con indignación, siendo seguido de las risas de Mun y Joo-yeon.

- no terminaste la preparatoria, además ella ya está en la carrera - murmuró la castaña antes de que Joo-yeon le extendiera la mano para chocar sus palmas, lo cual hicieron las dos mujeres

- ¡Pero puedo hacerlo mejor!

Ung-mil fue ignorado mientras el y Joo-yeon tomaban con sus palillos el último filete de pescado empanizado lo cual los llevo a una discusión.

- Oigan vamos, podemos pedir otra orden de...- Mun se interrumpió al tocar ambas manos de sus amigos y se quedó paralizado observandolos -¿¡Qué?!...¿¡Ustedes...están saliendo?!

Nari frunció el ceño mirando a su novio con curiosidad y sorpresa por sus palabras mientras observaba a Ung-mil y a Joo- yeon comenzar a hablar nerviosos intentando negar cualquier tipo de relación y aprovecho la distracción de los tres amigos para tomar el último pedazo de pescado empanizado.

-¡Ya no los contrataré!

Cuando Nari y Mun se despidieron de sus amigos comenzando a caminar por la ciudad observando las tiendas simplemente disfrutando de la compañía del otro, ambos tomados de la mano entrando al restaurante de fideos siendos recibidos por la señora Chuu, y una Hana molesta.

-¿Por qué tardaron tanto, tortolitos? ¡Es hora de pelar anchoas!

Ambos jóvenes dieron un par de pasos atras mientras la azabache se acercaba de manera intimidante a ambos, con un tazón de anchoas.

-¡yah, unnie! Deja que nos sentemos primero - exclamó la castaña mientras se escondía detrás de Mun envolviendo sus brazos alrededor de su cintura abrazándolo por detrás.

- ¡Ash! ¿Entonces que esperan para sentarse mocosos? -

Hana se acercó levantando juguetonamente su mano para tomar a Nari sin embargo Mun se movió junto a ella para protegerla y caminaron rápidamente hacia una mesa del restaurante sentándose en las sillas correspondientes.

- Hana no los asustes, dales la libertad de que salgan juntos al final se lo merecen -

La señora Chuu se acercó con un par de razones con anchoas y la pareja miro los Bowl con una expresión disgustada.

Un par de minutos los cuatro cazadores estaban pelando anchoas, Nari de mala gana y Mun con tranquilidad, de pronto Motak entro al lugar y se acercó a ellos con una mirada determinada

- ¿Observaron como detuve ese cuchillo? Woah fui genial - dijo con suspenso

Sin embargo nadie le estaba prestando atención cuando el mayor comenzó a moverse imitado los movimientos que había hecho la noche anterior para detener a los estafadores.

Nari soltó una baja risa cuando Motak intento levantar una anchoa con su telequinesis fallando en el intento cuando su nariz comenzó a sangrar por el esfuerzo.

-¿Por qué estamos haciendo más caldo? ¿No tenemos suficiente?- pregunto Hana

-Bueno, Minji comenzara a tener náuseas matutinas y el día del evento comía sin parar nuestros fideos entonces quiero hacerle más caldo - respondio la señora Chuu

- Ella me dijo que amaba nuestros fideos, dijo que el bebé iba a nacer con cada de fideo - comento Nari pelando una anchoa pequeña

Mun sonrió al escucharla, soltando una suave risa mientras pelaba anchoas y las otras dos mujeres asintieron con diversión.

- Será un pequeño milagro ese bebé

Los cuatro continuaron pelando anchoas ignorando a Motak quien aún intentaba levantar las anchoas del Bowl con su telequinesis en una mesa apartada.

[...]

El día había pasado tranquilo Nari estaba limpiando su habitación compartida con Hana mientras Mun simplemente se encontraba recostado en su cama mirando el techo.

-¿Te quedarás ahí?- pregunto Nari mientras le arrojaba un pequeño peluche sobresaltando al azabache

Mun se sentó en la cama mientras tomaba el peluche de felpa en sus manos y suspiro arrojandolo devuelta aunque siendo atrapado por la castaña.

- Estaba pensando, en qué deberías venir a mudarte conmigo - respondió en un tono agudo moviendo los brazos del peluche

Nari detuvo lo que estaba haciendo para mirarlo con sorpresa e incrédulidad, ladeó la cabeza mirándolo con extrañeza.

- ¿Hablas en serio? - susurro

-¿Por qué no hablaría en serio? -

Mun respondio en su tono normal de voz mientras se levantaba de la cama acercándose a ella, mientras la castaña se quedaba paralizada en su lugar.

-¿Por qué...? - murmuró mirándolo con vacilacion e incrédulidad

El azabache soltó una risa baja mientras envolvía sus brazos alrededor de su cintura abrazándola cerca mientras la miraba con una pequeña sonrisa en sus labios.

- Bueno...llevamos casi cuatro años juntos, y no se, solo fue un pensamiento que me llegó de repente - respondio con tranquilidad al notar su vacilacion y suspiro suavemente - no tiene que ser ahora, Nari solo cuando te sientas cómoda, estaría en cualquier lado contigo

La castaña lo miro con vulnerabilidad sintiendo sus emociones chocar entre ellas, estaba feliz, emocionada y un poco vacilante ya que mudarse juntos sería un gran paso, un cambio en su vida y en la de el.

Pero Mun no la dejo responder, el chico se inclinado hacia ella mientras juntaba sus labios contra los suyos en un beso tranquilo y lento, Nari correspondió el beso su corazón hinchandose de amor mientras el ambiente de la habitación se volvía íntimo para la pareja. El beso siguió su curso antes de que el azabache fuera el primero en separarse un poco juntando su frente contra la de ella.

- Quiero estar donde tu estés

Nari lo miro antes de reír suavemente bajando la mirada con timidez, conocía demasiado a Mun, y ella se había enamorado de cada parte de el y de su personalidad amorosa pero habían veces en las que el chico la dejaba sin palabras siendo un manojo de nervios.

Sin encambio Mun extendió su mano levantando la barbilla de Nari para hacer que lo mirara y volvio a inclinarse hacia ella para besarla nuevamente, sumergiendose en la intimidad del momento, aunque al sentir que el beso comenzaba a acalorarse la castaña se apartó de el recordando el lugar donde estaban.

El azabache la miro con un leve puchero en sus labios captando el mensaje mientras la abrazaba enterrando su rostro en el hueco de su cuello soltando un leve quejido.

- Entonces solo dame abrazos - se quejó suavemente

Nari puso los ojos en blanco juguetonamente mientras envolvía sus brazos alrededor de su cuello correspondiendo a su abrazo.

Ambos estaban tan distraídos, tan metidos en su mundo que sin darse cuenta que Hyun-wook había estado llamado a Nari una y otra vez, si no fue media hora después que la chica tomo su teléfono notando la urgencia en las llamadas e inmediatamente sintió un mal presentimiento.

- ¿Hyun-wook? ¿Dónde estás? - murmuro contra la bocina del teléfono

Nari estaba caminando de un lado a otro de la habitación mientras Mun la miraba con preocupacion, la castaña había intentado llamar a su hermano de vuelta varias veces pero no contestaba.

Sin embargo no fue hasta que Nari recibió una llamada de Hana, confundida se llevo el teléfono a la oreja solo para quedar perpleja.

Hyun-wook y Minji habían sido atacados

Sus pasos comenzaron a ser precisos, Mun y Hana iban detrás de ella intentando alcanzarla pero la castaña se había vuelto aún más rápida.

Doblando por los pasillos del hospital pudo verlo, Hyun-wook estaba junto a Ju-seok ambos hombres mirando el cristal frente a ellos con lágrimas, Nari llegó a su lado siento recibida por los brazos de su mellizo.

- Intenté detenerla, debí haberla convencido de que no fuéramos pero...- Hyun-wook fue interrumpido por el fuerte llanto del bombero

Ante la llegada de los dos cazadores, los cinco presentes se acercaron al cristal que los separaba de una Minji en mal estado, los doctores intentaron todo lo que pudieron al reanimarla pero fue en vano.

Minji había muerto, y los presentes se llenaron de varias emociones distintas, y cuando los mellizos creían que todo podía estar bien entendieron que la única familia que tenían eran ellos mismos.

En el funeral de Minji todos mostraron sus respetos, Ju seok estaba lleno de venganza, irá, resentimiento el odiaba lo que había pasado culpando indirectamente a varias personas mientras luchaba con su dolor.

Hyun-wook no podía mirar al bombero a los ojos, su propia culpa carcomiendo lo más profundo de el mientras lloraba en el altar de quién se había apoyado,Nari sin encambio presentó sus respetos y su tristeza.

Esa noche estuvo llena de sentimientos distintos puesto que habían llegado a perder una esperanza, una persona inocente y había sido un golpe fuerte para los cazadores, para cada uno de los corazones.

Pero mientras perdían a una persona, una nueva entraba a sus vidas

-Mucho gusto...soy el nuevo contador ¡Na jeok- bong!

Nari observo al chico con una expresión en blanco, la reunión había sido por un tema de importancia, ese nuevo chico ahora esta parte de su equipo y la castaña no sabía cómo sentirse. Observo a los demás presentarse excepto Hana, el chico miro a su unnie y luego la miro a ella.

-¿Cómo es que dos chicas tan bonitas hacen este trabajo? - pregunto acercándose a Nari

La castaña frunció el ceño levemente mientras daba un paso atrás, Mun instintivamente coloco su brazo alrededor de su cintura y el nuevo cazador los miro formando una O con sus labios entendiendo el gesto.

- Soy Nari, Shin Nari...mucho gusto

Na Jeok- bong tomo su mano con gusto balanceadola levemente en un gesto de saludo y sonrió con emoción antes de girarse para mirar a Hana acercándose a ella.

Motak soltó una risa extendiendo su brazo hacia Hana

-Ella es Doña actitud...doña Hana solo no la toques por qué ella muerde

El nuevo miembro hizo caso omiso a sus palabras en un intento de acercarse a Hana tocó su mano para poder quitarle el trapeador que la mujer estaba utilizando para limpiar, en cambio recibió un fuerte golpe en su pierna con el mismo objeto.

- Te lo dijimos - comento con diversión Mun

- Bueno ahora que estamos juntos todos podemos tomar una foto, por el nuevo miembro

- Eso es innecesario...- Nari fue arrastrada hacia el centro por su novio mientras se acomodaban detrás del presidente Choi

- la señora Chuu fue fotografa antes

- Vaya es por eso que se ve tan segura y profesional - Jeok- bong comento con admiración

Mientras todos se colocaban en sus posiciones frente a la cámara, a Nari y a Mun les llegó un Deja vu de la primera vez que se tomaron la foto como miembros oficiales de los cazadores y sonrieron ampliamente.

Era un nuevo inicio.