CHAPTER THIRTY SIX
el conducto de ventilación

          POV ANAKIN

CASI ME CONGELO CUANDO VI A UNO DE LOS SERES DE ASPECTO muy espantoso arremetiendo contra mí, pero mi instinto de supervivencia se disparó y levanté la mano, empujándolo contra la pared del fondo, antes de que cayera al suelo con un fuerte chillido similar al de un insecto.

Agarré mi sable de luz y observé cómo se levantaba lentamente, pero sin mirar en mi dirección. Miró hacia un pasillo diferente y movió la cabeza como si estuviera tratando de encontrar algo. Y en el momento en que encendí mi sable de luz, su cabeza se giró en mi dirección y gruñó.

A mí, me estaba buscando, pero no puede verme, así que se desvía de sus otros sentidos. Lo cual será beneficioso para mí, porque ahora entiendo su debilidad.

Tan pronto como comenzó a correr en mi dirección, apagué mi sable de luz y salté. Salté lo suficientemente alto como para agarrarme de una de las luces del techo y me quedé allí mientras levantaba las piernas y miraba a la criatura que se detuvo en el lugar exacto en el que yo estaba.

Esperé mientras avanzaba antes de bajar lentamente detrás de él, preparándome para un ataque sorpresa que espero sea fatal. Pero quién sabe de qué es capaz esta criatura, razón por la cual decidí tomar la opción de sigilo.

El sonido que hizo mientras me buscaba era el de un clic, y me acerqué lentamente con pasos silenciosos mientras sostenía mi sable de luz con fuerza en mi mano. Cuanto más me acercaba a él, más comencé a ver cómo se veía realmente y era algo que nunca había visto antes. Y he visto muchas criaturas y especies diferentes durante mi tiempo como Jedi, por lo que encontrarme con algo nuevo era asombroso.

Levanté mi sable de luz y apunté el extremo por el que saldría la hoja en la parte posterior de su cabeza. Y justo cuando estaba a punto de encenderlo, se oyó un crujido en uno de mis pasos y la criatura se dio la vuelta para mirarme. Cuando giró, su gran garra salió y golpeó el sable de luz de mi mano antes de agarrarme del cuello y levantarme del suelo.

Jadeé por aire mientras trataba de soltar su fuerte agarre, pero fallé, era demasiado fuerte y podía sentir que mi cabeza se mareaba. Me tiró al suelo y se cernió sobre mí mientras acercaba su cara a la mía. Comenzó a hacer ese chasquido nuevamente cuando lo que parecía ser una larga lengua se deslizó fuera de su boca.

Que mierda de verdad..

Moví mi cabeza de un lado a otro y pateé mis piernas furiosamente para liberarme y evitar la lengua que se dirigía a mi boca. Para que dejara de moverme, otra garra rasgó la parte delantera de mi túnica y expuso mi torso. Luego colocó su garra índice justo en el medio de mi pecho, antes de presionar lentamente hacia abajo, cortando las capas externas de mi piel. Y sé que yo también estaba sangrando porque podía sentir la sangre corriendo por mi pecho.

Estaba luchando contra un grito de dolor cuando su lengua se movió alrededor de mi boca cerrada antes de llegar a mi nariz. Tenía una idea de lo que estaba tratando de hacer en este momento, y me revolvió el estómago.

—¡Anakin!— Escuché un grito desde el final del pasillo, seguido de pasos apresurados. Y antes de darme cuenta, pude respirar de nuevo.

Obi-Wan había venido corriendo en mi ayuda y usó su sable de luz para atravesar a la criatura, cortándola por la mitad desde la cintura. Se cayó con una mitad cayendo a mi derecha y la otra a mi izquierda.

Jadeé por aire y llevé mi mano a mi pecho donde podía sentir la espesa sangre cubriendo mi piel. Afortunadamente fue un pequeño pinchazo y nada fatal, pero aun así dolía como el infierno.

Momentos después, mi antiguo mentor entró en mi campo de visión con pánico en los ojos, —Anakin, ¿estás bien?— Preguntó mientras aplicaba presión a la herida punzante.

—Demonios, no—, tosí antes de entrecerrar los ojos por el dolor mientras intentaba levantarme, —Esa cosa trató de besarme.

Suspiró mientras me empujaba hacia abajo para evitar que me pusiera de pie, —Parece que tu humor todavía está intacto, eso es una buena señal—, quitó la presión de la herida para poder verla mejor, antes de dar un suspiro de alivio. , —No es profundo, así que estarás bien- — Sus palabras fueron interrumpidas por un fuerte chillido, seguido de que lo levantaran lejos de mí y lo arrojaran unos metros por el mismo monstruo que ambos juramos que acababa de matar.

Pero ahora estaba completo de nuevo, sin marcas en su cuerpo que mostraran que el ataque de Obi-Wan ocurrió.

—¡Obi-Wan!— Me senté con pánico e hice una mueca por el dolor en mi pecho. Vi a Obi-Wan rodando por el suelo antes de detenerse cuando nuestro atacante se acercó a él en una posición de gateo que le daría escalofríos a cualquiera.

Obi-Wan levantó la mano para usar la fuerza para empujar a la criatura que estaba a apenas un metro de él, pero no pasó nada, —¿Qué?— Pronunció con incredulidad justo cuando dio un salto en el aire, preparándose para aterrizar sobre él como lo había hecho sobre mí.

—¡Aléjate de él!— Grité lo suficientemente fuerte como para que mi voz rebotara en todas las paredes del pasillo. Y antes de darme cuenta, estaba en el aire y yo ni siquiera movía un dedo.

Solo había hecho esto una vez antes, donde todo lo que necesitaba era pura voluntad y una mirada que podría matar para usar la fuerza sobre mi enemigo. Pero lo que me confundió fue por qué Obi-Wan no podía hacer nada con la fuerza, pero yo sí.

Lentamente me puse de pie, manteniendo mi mirada en el ser que se retorcía y chillaba en el aire, —Tú no perteneces aquí—, incliné mi cabeza hacia un lado y el pasillo, o tal vez incluso todo el templo, comenzó a temblar.

Sus gritos se hicieron más fuertes, —Anakin—, escuché que me llamaban por mi nombre, sé que lo escuché, pero no lo reconocí mientras miraba lo que intentaba no solo matarme a mí sino también a Nova y a Obi-Wan, tiembla de dolor —¡Anakin!

Finalmente salí de cualquier trance en el que estaba y parpadeé, causando que el monstruo cayera al suelo antes de que rápidamente se alejara trepando por la pared y desapareciendo a través de un conducto de ventilación más rápido de lo que podía comprender. Lancé mi mirada a Obi-Wan quien tenía una mirada de nerviosismo, —¿Por qué diablos me detuviste?— Grité: —Podría haberlo matado.

Lentamente sacudió la cabeza mientras se ponía de pie, —No sé qué es lo que acabo de sentir viniendo de ti, pero no quiero volver a sentirlo nunca más.

Aparté la mirada de él y no dije nada mientras extendía la mano y llamé a mi sable de luz antes de volver a ponerlo en mi cinturón. No tenía nada que decir sobre lo que acabo de hacer, principalmente porque no lo sé. Ni siquiera lo entiendo.

Luego miré el conducto de ventilación por el que pasaba y salté lo suficientemente alto como para agarrarme de la repisa, —Regresa al ala médica y vigila a nuestras padawans, volveré—. Dije mientras me levantaba.

—Si realmente crees que voy a dejar que sigas esa cosa solo-

—Vamos a hacerlo—, espeté mientras giraba la cabeza para mirarlo por el rabillo del ojo, —claramente eres impotente contra eso, ni siquiera pudiste usar la fuerza, y mucho menos tu sable de luz. Pero yo puedo, así que voy tras eso—. Aunque no tengo idea por qué solo puedo lastimarlo pero quién sabe, tal vez venga con el título elegido. Esa es una teoría al menos.

Me metí por completo y me encogí por el estado de la ventilación que parecía estar cubierta de algo viscoso, lo que supongo que es por la piel de la cosa.

Tan pronto como comencé a gatear y me adentré unos metros, sentí que algo me agarraba el pie e instantáneamente reaccioné pateando hacia atrás. Escuché a Obi-Wan gritar y me giré para ver que no había escuchado y se unió a mí en dicho respiradero. Se estaba tapando la nariz y vi un tinte rojo a través de la oscuridad, —¿Qué demonios-?

—Eres peor que mi molesta padawan—. Gemí con los dientes apretados antes de mirar hacia adelante y gatear para seguir el rastro de baba.

No necesitaba mirarlo para saber que estaba poniendo los ojos en blanco. —Di tus tonterías todo lo que quieras, pero has llegado a preocuparte por ella.

Mi pecho se apretó cuando pensé en ella y comencé a preguntarme si todavía estaba bien, —Cállate antes de que te patee de nuevo.

Pov Nova

Lentamente, abrí los ojos a una habitación semioscura que estaba iluminada solo por unas pocas lámparas, —Anakin—, murmuré su nombre mientras giraba la cabeza hacia un lado, antes de hacer una pausa y gemir de dolor cuando sentí un dolor agudo en un lado de mi cuello, —¿Qué diablos...? —¿Qué diablos pasó?

Pasaron segundos antes de que alguien apareciera en mi visión borrosa. Era una mujer de piel azul, no tardé mucho en reconocerla como la Maestra Secura, —Padawan Wicko, qué bueno verte despierta, ¿cómo te sientes?

—Me duele el cuello—, gemí, —Y no puedo recordar nada, ¿cómo llegué aquí?— Miré a mi derecha para ver a mi mejor amiga en una cama no muy lejos de mí, sus ojos estaban cerrados y estaba en un sueño profundo. Parecía pacífica.

La Maestra Secura colocó una cálida mano en mi mejilla, —Te golpearon con un dardo tranquilizante, así que es normal que te sientas como te sientes ahora, pero te sentirás mejor una vez que el efecto de la droga desaparezca—. me informó en un tono tranquilo. Eso explicaría por qué me sentía tan atontada y no completamente despierta.

Entonces lo que dijo finalmente me golpeó y me invadió la confusión, —¿Por qué me drogaron?

—Skywalker te lo explicará todo más tarde cuando estés bien. Pero por ahora, ¿hay algo que pueda conseguirte?

Asentí, —Mi maestro, ¿dónde está?— Lo último que recuerdo es buscarlo, antes de que todo se oscureciera. Pero basado en las palabras de la Maestra Secura, mucho más ha sucedido entre ahora y entonces, y aunque mi mente curiosa estaba ansiosa por saber. También estaba demasiado fuera de sí para presionar por obtener información, solo me recordé a mí misma que eventualmente obtendría mis respuestas.

—Fuera, encontrando lo que sea que te hizo esto—. Se enderezó después de quitar la palma de mi mejilla.

Fruncí el ceño mientras observaba su figura caminar hacia la cama de Ahsoka, —¿Qué quieres decir?

—Algo está suelto en el templo y los atacó a ustedes, Padawans—, me informó mientras colocaba su mano sobre la frente de Ashoka, —No estamos seguros de qué es, solo que no es algo que hayamos enfrentado antes.

La adrenalina me golpeó como un deslizador que se aproxima y rápidamente me senté, ignorando los dolores alrededor de mi cuerpo, —Entonces tengo que ir a ayudarlo.

La Maestra Secura desvió su mirada hacia mí y sacudió la cabeza, —Padawan Wicko, tu maestra dio instrucciones estrictas de que no salgas de esta habitación hasta que él regrese.

Por supuesto que exigiría eso como si fuera una damisela en apuros que necesita su salvación. Bueno, un día voy a ser yo quien lo salve, y ese puede ser hoy, —Está bien, pero-

—Sin peros, escucharás a tu maestro—. Dijo ella en un tono duro.

—Bien—, gemí molesta mientras me recostaba contra la cabecera de metal de la cama. Levanté mi mano y toqué mi cuello de nuevo, sintiendo el vendaje que estaba allí de cualquier herida que me infligieran. Luego mis ojos se dirigieron al baño y se me ocurrió una idea: —Maestra Secura, necesito usar el baño—. Le dije con una sonrisa inocente.

Sin apartar la mirada de Ahsoka, señaló la puerta del baño, —Por ahí, y ten cuidado, todavía estás débil y no quiero que te caigas y te golpees la cabeza.

—Tendré cuidado,— saqué mis piernas de la cama y me puse de pie. Tuve que agarrarme a la cama por un momento para calmar mi mareo, pero una vez que me sentí bien, caminé hacia el baño.

Después de cerrar la puerta detrás de mí, abrí el fregadero y me eché agua en la cara para ayudarme a despertarme más. Luego, una vez que apagué el fregadero, miré hacia un lugar cerca del techo y vi lo único que sabía que estaría aquí: el conducto de ventilación.

¿Podrían hacerme dos favores? Uno sería ir a darle like al vídeo que es un adelanto al fanfic del que hablé en el que el interés amoroso era interpretado por Hayden Christensen. Usuario: spidersilver.wp (tik tok)

Y el otro sería ir a votar al apartado de gráficos.

Por cierto el ser es como un demogorgon pero está hecho de una sustancio viscosa como el mindflayer.