Izumi Midoriya estaba parada frente a las enormes puertas de la Academia U.A. Sus manos temblaban ligeramente mientras sostenía sus papeles de inscripción. El examen para entrar a la escuela de héroes más prestigiosa del país iba a comenzar.

Izumi: ¿De verdad estoy lista para esto?

Pensó, recordando todas las veces que Katsuki y sus amigas le decían que no estaba hecha para ser heroína.

Pero entonces, sus pensamientos se dirigieron hacia Tn, el chico que la había ayudado en la cafetería la última vez. Era increíblemente apuesto y su naturaleza dominante la había impresionado profundamente. Aunque su amabilidad la sorprendió por completo, Izumi no pudo evitar admirarlo desde la distancia.

Izumi: No debería pensar en él... nunca se fijaría en alguien como yo...

Pensó con tristeza.

Decidiendo enfocarse en el examen, respiró profundamente y dio un paso adelante. Pero para su sorpresa, un murmullo suave le llegó a los oídos y giró la cabeza solo para ver a Tn caminando cerca de la entrada. Su corazón latió con fuerza.

Mientras Tn Caminaba por la Entrada de U.A.

Tn avanzaba con seguridad, su presencia atrayendo miradas curiosas de los futuros héroes que se encontraban allí. Mientras observaba su entorno, una chica chocó accidentalmente contra él, tropezando sin querer.

Ochaco: ¡Ah, lo siento mucho! Estoy tan nerviosa que no estaba mirando por dónde iba.

Dijo la chica, levantando la mirada para encontrarse con los ojos de Tn.

Tn: Tranquila.

Respondió Tn con una media sonrisa confiada.

Tn: ¿Nerviosa por el examen, supongo?

La chica asintió frenéticamente.

Ochaco: Sí, es solo que... esta es mi oportunidad de oro y no quiero arruinarlo.

Ochaco Uraraka

Se presentó, extendiendo la mano tímidamente pero con una sonrisa cálida. Tn la miró por un momento, evaluándola. Ella tenía una energía magnética, con una chispa de determinación en sus ojos marrones. Extendió su mano y estrechó la de ella firmemente.

Tn: Tn.

Respondió con un tono carismático.

Ochaco: Encantada de conocerte, Tn.

Los ojos de Ochaco brillaban con emoción al mirarlo.

Ochaco: Espero que ambos podamos entrar... aunque parece que tienes esa confianza natural.

Tn: La confianza es parte del truco.

Comentó Tn con una sonrisa sarcástica pero amigable, notando cómo ella se sonrojaba ligeramente.

Tn: ¿Y tú, qué esperas lograr en U.A.?

Ochaco: Quiero ser una heroína para ayudar a mi familia.

Respondió Ochaco con una sonrisa genuina.

Ochaco: ¿Y tú, Tn? ¿Por qué quieres ser héroe?

Tn: Hay varias razones.

Comenzó Tn, su voz baja y atractiva.

Tn: Pero principalmente, porque quiero demostrar que puedo ser el mejor. Ser un héroe es más que solo un trabajo; es una responsabilidad, y alguien tiene que poner el estándar.

Ochaco quedó impresionada por la franqueza y la confianza de Tn.

Ochaco: Suena como un desafío emocionante. ¿Crees que podríamos ser amigos?

Preguntó, un poco más atrevida ahora.

Tn: ¿Amigos? Claro.

Dijo Tn, sin perder el ritmo.

Tn: Aunque no me sorprendería si terminaras queriendo más.

Ochaco se sonrojó intensamente, pero no pudo evitar reírse.

Ochaco: Eres directo, ¿no?

Tn: Siempre.

Dijo Tn con una sonrisa encantadora.

Tn: Y hablando de amistades, siempre es bueno tener aliados fuertes en la academia.

Volviendo a Izumi.

Desde la distancia, Izumi observó la interacción entre Tn y Ochaco. Ver cómo Tn se desenvolvía con tanta confianza y carisma solo aumentaba su admiración por él, pero también profundizaba su inseguridad.

Izumi: Nunca podría competir con alguien como ella, es tan encantadora...

Pensó sintiendo un nudo en la garganta.

Sin embargo, la interacción de Tn también la inspiró.

Izumi: Si Tn puede ser tan seguro de sí mismo, ¿por qué no puedo intentarlo yo?

Murmuró, apretando los puños.

Izumi: Tal vez, si trabajo lo suficiente, puedo llegar a su nivel y hacer nuevas amistades, quizás incluso acercarme lo suficiente a él...

Izumi respiró hondo de nuevo y se obligó a caminar hacia la entrada, decidida a no dejar que sus inseguridades la detuvieran más.

Izumi: Este es solo el comienzo, y tengo que dar lo mejor de mí.

Pensó mientras cruzaba las puertas con determinación renovada.

La motivación duró poco...

Izumi avanzaba por la entrada de U.A. con nerviosismo, tratando de enfocar sus pensamientos en el examen que tenía por delante. Sin embargo, su mente no podía dejar de divagar hacia la imagen de Tn, recordando la manera en que había sonreído a Ochaco. Justo en ese momento, perdida en sus pensamientos, no se dio cuenta de una pequeña piedra en el camino y tropezó torpemente.

Izumi: Ay, no...

Murmuró, sintiendo que perdía el equilibrio, pero antes de que pudiera tocar el suelo, sintió unas manos firmes sujetándola por los hombros, estabilizándola.

Tn: ¿Estás bien?

La voz profunda y familiar de Tn resonó en sus oídos. Izumi levantó la mirada rápidamente, encontrándose con sus penetrantes ojos bicolores. Su corazón latió violentamente en su pecho, y el rubor cubrió sus mejillas.

Izumi: ¡T-Tn! L-lo siento mucho, soy tan t-torpe...

Balbuceó, aun sintiendo la calidez de sus manos en sus hombros.

Tn: No te preocupes.

Respondió Tn con una sonrisa segura.

Tn: A veces pasa. Solo ten cuidado, ¿vale?

Izumi: ¡Sí, claro! ¡Gracias por salvarme!

Izumi forzó una sonrisa, tratando de no desmayarse del nerviosismo.

Desde la Perspectiva de Tn.

Tn observó a Izumi con curiosidad mientras ella se apresuraba a disculparse. Había algo en su vulnerabilidad que despertaba su interés.

Tn: Es la chica de la cafetería.

Recordó. Antes de que pudiera decir algo más, notó que Ochaco se acercaba, observando la escena.

Ochaco: Oye, ¿todo bien aquí?

Preguntó Ochaco, mirando primero a Tn y luego a Izumi con una expresión preocupada.

Tn: Sí, todo bien. Solo fue un pequeño tropezón.

Respondió Tn desenfadadamente, apartando las manos de los hombros de Izumi una vez que estuvo segura.

Ochaco: ¡Qué bueno! Soy Ochaco Uraraka.

Se presentó Ochaco con una sonrisa cálida, extendiendo la mano hacia Izumi.

Izumi: Y-yo soy Izumi Midoriya.

Respondió Izumi con timidez, aceptando el apretón de manos y tratando de recuperar la compostura.

Izumi: Encantada de conocerte.

Ochaco: Lo mismo digo.

Dijo Ochaco alegremente.

Ochaco: Vaya, creo que todos estamos un poco nerviosos por el examen, ¿verdad? ¿Qué te parece si nos apoyamos mutuamente?

Izumi sintió una calidez reconfortante al escuchar las palabras de Ochaco.

Izumi: Sí, s-sería genial.

Respondió con una sonrisa tímida.

Tn: Bueno, ya que estamos formando un pequeño equipo aquí.

Intervino Tn, su tono amigable pero dominante.

Tn: ¿Qué tal si hacemos una breve pausa antes de entrar? Podríamos hablar un poco más sobre nuestras motivaciones.

Ochaco: ¡Me parece una excelente idea!

Respondió Ochaco rápidamente, encantada con la sugerencia.

Ochaco: Sabes, Tn, me impresiona lo fácil que haces que cualquier situación se sienta... tranquila.

Tn: Gracias.

Dijo Tn con una sonrisa coqueta.

Tn: Es parte del encanto.

Guiñó un ojo a Ochaco, quien no pudo evitar sonrojarse ligeramente. Izumi observaba la interacción con interés y un poco de envidia.

Tn: ¿Y tú, Izumi?

Preguntó Tn, desviando su atención hacia ella.

Tn: ¿Qué te motiva a querer ser una heroína?

Izumi se sintió atrapada por la mirada de Tn, pero intentó reunir el valor suficiente para responder.

Izumi: Quiero... quiero salvar a la gente con una sonrisa, como hizo All Might. Siempre he admirado su valentía y fuerza.

Ochaco: Eso suena increíble.

Dijo Ochaco, con admiración genuina en su voz.

Ochaco: Estoy segura de que podrás lograrlo.

Izumi: Gracias.

Respondió Izumi, sonrojándose nuevamente. Jamás había recibido tanto apoyo de personas fuera de su madre.

Tn: Es bueno tener objetivos claros.

Comentó Tn.

Tn: Bueno, parece que estamos formando un gran equipo aquí. Debemos entrar con la mentalidad de que ya somos héroes en entrenamiento.

Ochaco asintió con entusiasmo.

Ochaco: ¡Sí! Podemos hacerlo. Estoy segura de que con esa actitud, todos pasaremos el examen.

Izumi se sintió un poco más segura viendo el respaldo y la determinación de los otros dos. Quizás, solo quizás, podría encontrar su lugar en U.A y quién sabe, algún día ganar la confianza para estar junto a Tn de una manera más cercana.

Desde la Perspectiva de Izumi.

Izumi, aún sonrojada, caminaba junto a Ochaco y Tn hacia el campo de pruebas. No podía evitar sentirse agradecida y al mismo tiempo abrumada por la presencia de Tn, quien parecía tan seguro y calmado en comparación con su propio torbellino de nerviosismo.

Mientras caminaban, Izumi notó algunos pequeños gestos de Tn hacia Ochaco: leves toques en el brazo al hablar, miradas prolongadas que parecían penetrar más allá de la superficie. Cada uno de estos gestos hacía que Ochaco sonriera o se sonrojara, claramente afectada por la atención que recibía. Aun así, Izumi notaba algo más oscuro debajo de esas acciones. Había una facilidad fría en cómo Tn controlaba la interacción, como si entendiera exactamente cómo manipular los sentimientos de los demás.

Por su parte, Tn apenas había notado la incomodidad de Izumi tras el tropezón. Para él, todo se trataba de mantener el control, tener a la gente a su alrededor en la palma de su mano. La vulnerabilidad de Izumi y la energía burbujeante de Ochaco eran atractivas a su manera, dos personalidades que podía moldear y manejar a su antojo.

Tn: Uraraka.

Llamó Tn mientras caminaban, deteniéndose ligeramente para que solo ella pudiera escuchar sus palabras.

Tn: Haces que el nerviosismo antes del examen sea casi inexistente.

Dijo en un tono suave pero firme, dejando que su voz cargara una mezcla de admiración y control.

Ochaco se volvió hacia él con una sonrisa radiante, claramente afectada por sus palabras.

Ochaco: ¡Oh, gracias, Tn! Tú también haces que todo sea más fácil.

Respondió, sus mejillas tomando un leve tono rosado.

Izumi observó esta interacción desde su lugar, sintiendo una mezcla de envidia y admiración. Sabía, en el fondo, que Tn tenía una manera de capturar la atención de cualquiera sin mostrar una sola emoción verdadera. Era fascinante y aterrador al mismo tiempo.

Al llegar al campo de pruebas, Tn se volvió hacia ambas chicas, sus ojos bicolores brillando con una intensidad que hacía difícil mirar hacia otro lado.

Tn: Escuchen.

Dijo con voz firme.

Tn: No importa cuán difícil sea el examen, lo que importa es nuestra determinación. Izumi, Ochaco, sé que ambas tienen lo necesario para destacar. Sigamos adelante, y salgamos de aquí con la confianza de que somos los mejores.

Izumi y Ochaco: ¡Sí!

Respondieron al unísono, sintiéndose inexplicablemente empoderadas por sus palabras.

Izumi, aún con su corazón latiendo fuerte, sintió una chispa de esperanza y determinación dentro de ella.

Izumi: Quizás con el tiempo, Tn también podría verme de una manera diferente...

Pensó, aunque su habitual baja autoestima la hacía dudar de inmediato.

Se prepararon para el inicio del examen, con Tn en el centro, exhibiendo una confianza inquebrantable y el control frío de alguien que sabía que el destino de aquellos a su alrededor le pertenecía. Izumi y Ochaco, sin saberlo, ya empezaban a caer bajo su influencia, cada una desde su propia perspectiva.

CONTINUARÁ.