CAPITULO TRES
PINKY PROMISE

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Me di la vuelta y vi a Riddle ahí de pie. Abrí la boca para hablar, pero no me salió nada.—¿Te comió la lengua el gato?—,preguntó, con una sonrisa de satisfacción dibujándose en sus labios.

Draco se aclaró la garganta.—Ella iba a decir que te invitamos a nuestro grupo—.

Levantó una ceja.—¿Grupo?—,se rió un poco.—¿Qué significaba eso siquiera?—.

Pansy suspiró.—¿No es obvio? Un grupo de amigos—.

—Oh, eran esa clase de personas. Draco, no sabía que solo salías con chicas—.Rodeé los hombros de Draco con mi brazo.—Draco sale con chicas—.

Draco suspiró.—No es como ellas, en realidad no son tan malas—.

Levantó una ceja.—Sí, lo dudo. Pasó—.

Draco gimió.—Oh vamos, fui el único chico aquí y fue agotador—.

Pansy suspiró.—Deja de quejarte—.Se giró para mirarme.—Rory...— Riddle la interrumpió.

—Rory—,repitió.—Bonito nombre... pero creo que Ángel te queda mejor, ¿no crees?—.

Intenté hablar, intenté decir algo, pero una vez más no salió nada. Lily fue la que habló por mí.—No. En realidad, es Aurora para ti. Hasta que la conozcas mejor porque estás en este grupo, te guste o no—.Se cruzó de brazos y tuvo una expresión de firmeza escrita en toda la cara.

—¡Lily!—,grité.

Sonrió con suficiencia.—Ustedes, el grupo de chicas, parecen bastante exigentes—.

—Exigentes es decir poco—.Draco murmuró.

Pansy le dio un codazo en el brazo a Draco.—También vamos a invitar a Theodore—, informó Pansy.

Riddle asintió y sus ojos se encontraron con los míos.—De acuerdo.—

Lily sonrió.—¿Entonces te unes?—.

—Sí, supongo que sí.—

Todos mis amigos sonrieron, rieron y asintieron ante nuestro nuevo miembro. Todos menos yo. No entendía cómo era la única que encontraba un problema en él. Tenía secretos, lo sabía. Y por mucho que quisiera averiguar cuáles eran, no podía. Tenía que alejarme de él. Pase lo que pase.

☆彡

Habían pasado un par de horas y ahora estaba sentada en la sala común de Hufflepuff con Lily.—Oye... mira, perdón, sé que no querías esto, pero tienes que confiar en mí con esto—,me dijo suavemente.

Me giré para mirarla y sonreí.—Está bien... es que...—.

Lily me abrazó.—Lo sé... lo sé. Pero Mattheo es diferente... simplemente lo sé—.

Cómo murió mi madre es algo que nunca quiero recordar. Pero fue asesinada. Por un antiguo mortífago. Supongo que por eso estaba tan en contra de Riddle.

—Lily... no confío en él—.

Ella sonrió y apoyó su cabeza en mi hombro.—Lo sé... pero tú confías en mí, ¿verdad?—.

Sonreí suavemente.—Sí... lo hago—.

—Entonces eso es lo que importa. Confía en mí—.

La miré.—Por favor, dime que no estás haciendo de casamentera otra vez—.

Una sonrisa pícara se dibujó en sus labios.—¡Puedo sentirlo! Tengo un don y lo sabes—.

Suspiré.—Pero... ¿Mattheo Riddle... y yo? No—.

Ella gimió.—Escucha. Yo tenía razón sobre Blaise Zabini y Luna Lovegood, ellos siguen juntos hasta el día de hoy y han pasado cuanto.... ¿5 años?—

Sacudí la cabeza.—No soy... de las que salen con alguien—.

—¿Cómo lo sabes? Nunca tuviste novio, ni siquiera tuviste una cita—.

Suspiré.—Lo sentía en mis huesos—.

Nos reímos y caímos del sofá.—Ow—,me reí.

Oí un carraspeo.—Bueno, esto es interesante...—Levanté la vista y vi a Cedric ahí de pie.

—Oh... hola—,murmuré. Temía ver a Cedric. Todavía estaba enojada con él por haber decidido participar en el Torneo de los Tres Magos. Era muy peligroso, y no podía perderlo a él también.

—Nosotros—Me señaló a mí y luego a sí mismo.—Tenemos que hablar. Lo antes posible—.

Suspiré y me giré hacia Lily, que asintió y ambas nos levantamos del suelo.—Sí, sí—,murmuré.

Me alejé de Lily, saludándola con la mano y lanzándole un beso. Una vez que Cedric y yo nos quedamos solos, él empezó a hablar inmediatamente.—¿Qué demonios te dije?—.

Me crucé de brazos.—¿De qué estás hablando?—.

—Mattheo. Por qué me acabo de enterar de que ahora está en tu 'grupo'. Te dije que te alejaras de él.—

—¿Por qué te importa?—,pregunté, negando con la cabeza.

Él soltó un suspiro.—¿Quieres morir? ¿Igual que mamá? Porque francamente es exactamente hacia donde te diriges—.

Permanecí en silencio.—Aurora—.

Aparté la mirada de él.—Deja de mencionarla—.

—No me dejaste otra opción—.

Finalmente hice contacto visual.—¿Y qué hay de ti, eh? Te unes a este torneo de mierda. Puedes morir—.

Suspiró enfadado.—Cumplo 18 en un mes. Soy prácticamente un adulto y tú acabas de cumplir 16 hace una semana. Esto no es lo mismo, especialmente cuando este tipo es el hijo de Voldemort—.

—No digas su nombre—

—¿Qué, Voldemort? Madura—.

Sacudí la cabeza.—Eres increíble—.

—No hables con él—.

Me burlé.—No te estoy escuchando—.

Cedric entrecerró los ojos mirándome.—Aurora Louise...—.

—No. Estoy cansada de que me traten como a una niña pequeña, sé cuidarme sola—.

—Pero eres una niña pequeña—.Suspiró suavemente mirando hacia arriba mientras soltaba un suspiro.—Eres mi hermanita—.

Permanecí en silencio.—Crecí Ceddie. Tienes que aceptarlo. Estaré bien—.

—No. Le prometí...—,hizo una pausa y tomó aire.—Le prometí a mamá que siempre cuidaría de ti. Sobre todo, desde que papá no... no está bien—.

Sacudí la cabeza y me rodeé el cuerpo con los brazos.—Está bien. Confío en ti. Pero te juro por Merlín que si alguna vez te toca...—.

Lo interrumpí.—Lo sé, lo sé—.Sonreí suavemente y él abrió los brazos. Lo abracé fuerte.—Odio cuando peleamos—,susurró.

—Yo también... yo también.—

Nos separamos y Cedric sonrió.—Okay... yo también seguiré en el Torneo de los Tres Magos—.

Suspiré:—Ten cuidado. Y prométeme que estarás bien. Y que saldrás de ahí vivo—.

Sonrió:—Te lo prometo—.Extendió su meñique y yo entrelacé nuestros meñiques.

—Pinky promise...—susurré.