XXXIV
Chapter 34:-
Siete meses después ...
-Familiares de Min Jennie.-pronuncio la enfermera acercándose al grupo en la sala de espera.
-Yo, yo soy su esposo.-se señalo temeroso.-¿salió todo bien?
-Felicidades señor Min, es un varón sano. Ambos están en buenas condiciones.-afirmo a lo que los restantes también lo felicitaron abrazándolo o golpeándole la espalda.
-Ya soy padre.-musito con una gran sonrisa dibujada en su rostro.
Mientras felicitaban al recientemente padre y familia, los demás también expresaban su felicidad entre ellos.
Cuando Rosé se separo de Lisa, para que esta abrazara a su novio, Park se volvió para ser envuelta en otros brazos, pero al darse cuenta de quien se trataba, ambos se miraron incómodos y dieron un paso al costado.
Claro, esto fue notorio para ciertos menores que lo único que pudieron hacer fue suspirar, y rogar que pronto acabasen con sus diferencias.
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Cafetería del hospital ...
-Me preguntó si sucedió algo entre estos dos.-comento Jungkook observando a Rosé y Jimin a la distancia.
-Al parecer sí.-asintió Jisoo moviendo su cabeza en afirmación.-los vi besarse en la cocina, cuando hicimos el baby shower en casa de Jennie.
-¡Es en serio! .-exclamó Lisa con sorpresa.-creí que, bueno, con la discusión que tuvieron aquella noche...
-Jimin fue un idiota, todos le advertimos que podría haber esa probabilidad. Él fue el único que creyó en las falsas palabras de Seulgi, hasta la misma Rosé sospechaba de ella.-reclamó Jin haciendo una mueca de disgusto.
-Esa mujer... Por dios, hizo tanto daño solo por el amor de un hombre.-negó Jisoo frustrada.-realmente me cuesta creer que nuestra Rosie ...
-Lo sabemos.-musitó Taehyung notando las palabras que quería decir.-pero noona, no te preocupes. Ahora nosotros somos su familia, ella nunca estará sola.
-Chicos, tenemos que ayudarlos. Ellos no pueden seguir así, tienen un hijo en común y les está haciendo daño al ser testigo como sus padres se odian.-comentó Hoseok con pesar.-Minhwan debe crecer en un círculo familiar y cálido.
-Hobi hyung tiene razón.-asintió Jungkook apoyándolo.-somos sus amigos, y ellos harían lo mismo por nosotros.-comento colocando su mirar en Lisa, quien afirmó a sus palabras.
-Tengo una idea, pero no sé si Rosé quiera aceptar.-pronunció la Tailandesa haciendo que todos los presentes la miraran.-Jungkook y Taehyung-ssi, ustedes también deben de ayudarme.
-¿Qué es? .-cuestiono Taehyung con interés.-yo quiero participar.
-Pues ... .-murmuró con una sonrisa boba en su rostro.
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Una semana después ...
-Por dios Lisa, ¿cómo quieres que me vaya de viaje? Dime, ¿con quién dejaré a Minhwan? .-le decía mientras la veía como la nombrada hacía sus maletas.-Lis, no voy a ir.-se negó.
-No puedes cancelarlo, ya está todo listo.-dijo triunfadora.-mañana a primera hora tomarás el avión.
-¡Acaso perdiste la cabeza! .-exclamo alterada.
-Claro que no, es lo mejor que puedes hacer.-comenzó a decir.-estás estresada y te hace falta tomar aire, distraerte.-finalizó tomándole el brazo y agitarlo levemente.
-Pero Lisa, no puedo ahora. Tengo mucho trabajo que hacer, sobretodo ahora que Joy tuvo a su bebé.
-Para eso está Sungjae, es el padre y tiene que estar presente en su vida.-señalo.-Aún así, no tiene nada de malo que faltes unos días al trabajo.-comentó sonriente.-vamos Rosie, solo será una semana. No es para tanto.
La pelirroja le miró en silencio mientras negaba. Finalmente acepto a regañadientes, para luego ayudar con su propia ropa al mismo tiempo en que Lisa la molestaba diciéndole que había tomado la mejor decisión de su vida, y que ese viaje le haría bien.
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Al dia siguiente ...
Isla Jeju
-Lisa, por favor, mantenerme al tanto de todo lo que sucede.-pidió mientras salía del taxi, ya que había llegado al hotel asignado por Manoban.-Jimin está en Busan con su madre, él cuida de Minhwan.-le decia yendo hacia el elevador del lugar.-Bien, cualquier cosa llámame. Nos vemos en una semana, saludos a los chicos de mi parte, adiós.
Corto la llamada en cuanto las compuertas del ascensor se abrían dejando ver frente a ella, a la persona que menos quería y se esperaba ver en aquél viaje.
-Jimin.-pronunció con sorpresa.-¡qué haces aquí! .-exigió saber con clara molestia.
-Hola, Ro.-saludo incómodo al momento en que se arrascaba la nuca con nerviosismo.
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-Sé que debes estar molesta, pero no sabía que estarías aquí.-se excusó mientras la veía pasearse de un lado para otro.-Chaeyoung, detente. Harás una zanja en él piso sí sigues así.-señalo con gracia.
-Dijiste que estabas en Busan con tu familia, que cuidarías de nuestro hijo y confíe en ti. Que tonta fui en hacerlo, sabía que algo no encajaba bien.-negó colocando sus manos sobre la cadera.-Lisa.-soltó.-ella está en todo esto, lo sabía demonios.
-Debes estar tranquila, nuestros amigos serían incapaces de hacerle daño a Minhwan.-le decía intentando calmar las aguas.-quizás, querían que estuviéramos a solas.
-¿Y tú piensas que estoy feliz por eso? .-cuestionó sarcástica.-no quiero estar en el mismo lugar que tu Jimin, lo nuestro se terminó hace mucho tiempo.
-Y lo sucedido aquella noche.-soltó sorprendiéndola.
-N-no sé a que te refieres.-negó desviando la mirada.
Jimin se incorporó del sofá que anteriormente utilizaba y se acercó a la menor, para así quedar frente a ella. Rosé evitaba a toda costa mirarlo, sabía que sí lo hacia, caería como una quinceañera enamorada ante sus encantos.
-Ro, por favor, los dos sabemos perfectamente que nuestros sentimientos son correspondidos.-murmuró, a lo que ella se mordió el labio nerviosa.-yo te amo, Rosie. Jamás te olvidaría, eres la dueña de mi corazón.
-Pues yo no.-lo encaró con los ojos rojos de lágrimas acumuladas.-no te necesito, ya no. Y lo único que nos une en nuestro hijo, nada más.
-Rosé ... .-murmuró dolido.
-Me rompiste él corazón, Jimin.-dijo con lágrimas deslizándose por sus abultadas mejillas.-Y no creo que puedas volver a repararlo. Ahora, será mejor que me vaya, necesito estar sola.
-Rosé, por favor.-suplico tomándola del antebrazo. La pelirroja se soltó del agarre y salió de la habitación compartida.
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Rosé llegó al cuarto reservado con la respiración agitada y con una horrible presión en su pecho.
Nunca pensó en decirle aquellas tan dolorosas palabras al hombre que tanto amaba, pero debía y quería alejarlo de su vida para evitar una desgracia.
-N-no soportaría perderte, Jimin-ah.-pronuncio con la voz quebradiza.-no a ti.-negó dolida.
Pronto se dejó deslizar por la madera hasta quedar sentada en él suelo, acercó sus piernas a su pecho y escondió su cabeza entre ellas.
Se quedó en aquella posición hasta que escuchó golpes y llamados insistentes a su espalda. Era Jimin, quien entre gritos le pedía que hablaran y lo dejara pasar, cosa que ella se negaba rotundamente.
Al cabo de media hora los gritos cesaron colocándola alerta. Sigilosamente entre abrió la puerta, encontrándose con el castaño apoyado sobre la pared contigua.
No siquiera tuvo la oportunidad de cerrarle la puerta en la cara, ya que él fue más rápido e ingresó a la femenina habitación junto a ella.
-Qué es lo que quieres.-dijo tajantemente.-¿quieres que todos se enteren de lo nuestro? Faltó que lo gritarás a los cuatro vientos, ¿estás loco?
-Si fuera así qué, ¿acaso estoy mintiendo? .-contradijo con el ceño fruncido.
-Eres muy molesto, Jimin.-reclamó chasqueando la lengua.
-Sé que hice mal en no creerte, pero entiendeme. Ese niño, el cual creí que era mi hijo estaba al borde de la muerte, no podía pensar con claridad.-le decía afligido.-perdoname, fui un idiota.
-Ah, ahora lo reconoces.-hablo sarcástica.
-Rosé, si necesitas tiempo y espacio, seré paciente.-la menor le miro sin comprender.-pero quiero que seas consiente que haré hasta lo imposible para volver a conquistarle.
Y tras hacer esa promesa, se volvió para nuevamente salir del cuarto. Cuando lo hizo, Rosé estiró su brazo con intensiones de detenerlo, pero no lo hizo, simplemente lo dejo ir quedándose a solas entre esas cuatro paredes.
Somos unos niños
en cuerpo de adultos
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Días después ...
-¿No has pensando en discutirlo con Jimin-ssi? .-cuestionó Lisa en la otra línea.-Rosé, son padre e hijo, no puedes separarlos así como así. Podría afectar a Minhwan.
-Debí de haberme ido hace mucho tiempo, pero con el embarazo de Jennie unnie, lo cancelé.-le decía mientras se paseaba por la habitación.-mañana regresaré a Seúl, así que quiero dejar todo listo antes de viajar a Australia.
-Sé que es tu decisión, pero insisto en que debes discutirlo con Jimin. Él no permitirá que te vayas así como así, él está pérdida mente enamorado de ti.
-Lo sé.-murmuró bajando la cabeza.-pero necesito un tiempo a solas y pensar.
-¿Y qué más necesitas pensar? .-río.-Amiga, si estuviera allí mismo te obligaría a que hables con él primero.
-Lisa, me tengo que ir. Después seguimos hablando, gracias por cuidar de Minhwan.
-¡Yah, Park Chaeyoung! No me dejes con la palabra en la boca, ¡Chaeyoung! .-le reclamaba fuertemente.
-Adiós Lisa, más tarde me comunico contigo.-le decía mientras seguía escuchando las quejas de la Tailandesa.-adiós.-finalizó aunque la contraria insistía entre reclamos.
Suspiró pesado y negó peinando sus cabellos hacia un lado. Luego se sentó sobre él colchón y quedó mirando un punto fijo en la habitación, mientras meditaba las palabras que había dicho Lisa antes.
-¿Debería quedarme o irme? .-pronuncio al aire.-no, yo debo irme junto a mi hijo, eso será lo mejor para todos.
Dicho esto se incorporó y fue hasta la puerta con intensiones de salir a tomar aire fresco, pero lo que menos pensó fue encontrarse con el mismísimo Park Jimin frente a frente.
-J-jimin, ¿q-qué haces aquí? .-pronuncio con temor.
-Venia a hacer las paces contigo, pero creo que ya no.-tiró la botella de vino lejos de ellos haciéndola saltar al hacerse añicos.-¡¿cuándo me dirías que te irás con Minhwan a Australia?! .-exigió saber tomándola de ambos brazos.
-¡Sueltame! .-se quitó las manos masculinas molesta y lo empujó con el ceño fruncido.-¡no tienes derecho a ... !
-¡¿Qué no tengo derecho?! ¡Es mi hijo, demonios! .-exclamó altanero.-sigues siendo la misma de hace un año atrás, eres una egoísta.
-No es así, permito que lo veas a menudo y viajes con él las veces que quieres. ¿Eso es ser egoísta para ti?
-No hablo de verlo, sino de tomar desiciones sin tomarme en cuenta.-Rosé se mordió el labio bajando la cabeza.-has lo que quieras, ya no me importa lo que hagas.-le resto importancia mientras negaba.-espero que cuando Minhwan pregunte por su padre puedas darle una respuesta creíble, porque yo no estaré en el panorama.
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Ya habían pasado más de tres horas y no salía de su habitación.
Se paseaba de un lado a otro mientras pensaba en lo sucedido hace un rato. La discusión con Jimin no había salido como ella quería, mucho menos sobre él tema de paternidad. Eso era algo que debían dejar en claro.
Finalmente abrió la puerta y salio casi corriendo por él corredor hasta llegar a los elevadores, y subir hasta él piso donde se hospedaba el castaño.
Una vez frente a la puerta, presionó una y otra vez hasta que esta misma fue abierta desde el interior. Jimin iba a abrir la boca para pedirle que se fuera, pero al verla agachase y colocarse de rodillas ante él lo dejo sin habla.
-P-perdoname.-suplico con un nudo en la garganta.-l-lo siento t-tanto, Jimin.
-Rosé, por favor, no hagas esto.-la ayudó a incorporarse antes de que alguien más los viera en esa vergonzosa escena.-ven, la gente pensará que estas loca.
Ya dentro del cuarto le entrego un vaso de agua para que se tranquilizara, cosa que ella aceptó temblando.
-Ni siquiera sé como comenzar para disculparme.-pronuncio suspirando.-te hice a un lado sin pensar en tus sentimientos.
-Rosé ...
-Si cometí ese error fue por una buena razón.
-Entonces dímelo, así podré entenderte.-dijo en un tono suave.
-Perdí a toda mi familia por culpa de unos locos dementes, y siendo tú eres lo único que me queda junto a nuestro hijo.-decía con la cabeza gacha.-nunca me perdonaría si corres con la misma desgracia.-sollozo.-algunas veces siento que estoy maldita.
-Chae.-la nombró tomándole delicadamente el rostro entre sus manos.-nunca permitiría que alguien te haga daño. Le hice la promesa a tu padre que siempre los protegería, y quiero cumplir mi palabra.-la menor se lanzó a su brazos al mismo tiempo que Jimin le correspondía abrazándola con sumo cariño.
-Te amo.-musitó con sus mejillas fuertemente sonrosadas.-te amo como no tienes idea, Park Jimin.
El mayor sonrió ampliamente ante la confesión de amor, que lo único que pudo hacer fue besarla como nunca lo había hecho.
Rosé tardo en corresponder el beso, más después de tal acto lo aceptó gustosa mientras ella lo abrazaba por el cuello y llevaba una de sus manos hasta la nuca masculina profundizándolo aún más.
Ni siquiera hubo necesidad de pensar cuando sus cuerpos ya estaban unidos y pronunciaban el nombre del otro entre gemidos.
Una vez consumado su amor, ambos cayeron rendidos y con la respiración agitada tras entregarse como muchas veces.
Rosé apoyo su mejilla en el torso del Park, en cuanto este le rodeo la cintura con sus fuertes brazos y después subía una de sus manos para acariciarle la larga y rojiza melena.
-Jimin-ah, debo decirte algo importante.-le murmuró tras darle un suave beso en la tibia piel.-y quiero que seas él primero en saberlo.
-¿Dime, qué es? .-pronuncio mientras intentaba regularizar su respiración.
-... Estoy embarazada.-termino de decir obligándolo a abrir sus marrones ojos estupefacto.
-¿E-estás qué ... ?
Rosé sonrió tímidamente contagiándolo.
Sorpresa, papi
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Momo 🍑💕
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