Chapter 30:-

El silencio se había hecho dueño de aquella habitación, ambos mantenían una distancia justa y ni siquiera se dirigían la mirada, ella tenia miedo; él sentia... decepción.

-Por qué.-pronunció rompiendo el hielo.-por qué no me dijiste.

-... Ibas de camino hacia él hospital con Seulgi y no quise detenerte.-suspiró haciendo puños sus manos.-Jimin, todo sucedió muy rápido, y-yo... Estaba sola, no sabía que hacer.

-Llamarme, ¿qué te costaba? .-la atacó frustrado.-tengo responsabilidades, y esas son mis dos hijos.-ella se mantuvo en silencio.-¿sabes lo que me dijeron en recepción? .-Rosé negó.-que habías dicho que Minhwan no tenia padre, sino, que había sido un donador de esperma, ¿eso soy para ti?

-No lo entiendes.-chilló con los ojos cristalinos.-tenía que mentir, no podía decirles que tienes otra familia. ¡Seria totalmente absurdo!

-¿Absurdo? .-dijo para después reír.-es la realidad Roseanne.-peinó sus cabellos hacia atrás mientras se paseaba por la habitación.-al menos... No, ¿siquiera me ibas a informar de su nacimiento?

-... No.

-Ya veo.-asintió ante sus palabras.-supongo que ya no soy importante en tu vida.

-Ya eres padre, hazte cargo de tu hijo y se feliz.-comento bajando la mirada.

-¿Qué quieres decir con eso?

-No quiero compartirte Jimin, estoy harta de peleas y discusiones.-levanto la vista colocándola sobre el castaño.-en pocas palabras, te estoy dejando libre.

-Rosé...

-Si quieres puedes ver a Minhwan, eres su padre y estás en todo tu derecho. Pero, tú y yo... La única relación que quiero contigo es de padres.

-Si estás diciendo esto por mi hijo con Seulgi...

-Sí, es por ella.-afirmó.-tienes que estar con su hijo, forma una familia a su lado... La cual yo nunca podré darte.

-Ya me la has dado.-le dijo colocándose frente a la pelirroja. Ella desvío la mirada y suspiró con tristeza.

-Olvídate de nosotros, podemos salir adelante solos.-murmuró, a lo que Jimin negó.

-Creés qué podré hacerlo, sabiendo que acabo de ser padre hace solo unas horas atrás.-cuestionó sin creerle.-¿estás loca?

-Estoy en mis cinco sentidos, Park Jimin.-funfuño.

-¿Estás escapando de mí?

-Hacerlo es lo mejor para los dos.-musitó con voz quebradiza.-yo te amo, y quiero que seas feliz, es lo único que puedo proveerte.

-No quiero que lo hagas.-negó juntando sus frentes.-te necesito a mi lado, a los dos, ustedes son importantes para mí.

Rosé se mordió el labio evitando llorar frente a él. Jimin acuno el femenino rostro entre sus manos y la besó dulcemente, la pelirroja lo tomó por la nuca profundizándolo mientras lloraba.

-Te amo.-musitó sobre los labios del hombre.-gracias por llegar a mi vida.-este la miró y le regaló una tierna sonrisa.-me hiciste la mujer más feliz del mundo.

-Esto no es una despedida, mi amor.-dijo besándole los rojizos cabellos.-no pienses que me olvidaré de ustedes, sabes que no lo haré.

La chica lo abrazó con fuerza rodeándole el cuello, donde ocultó su rostro entre el hombro y hueco del cuello de Jimin para así derramar una que otra rebelde lágrima.

-N-no nos olvides, ¿s-si? .-pronunció apenas.

Él mayor la alejó mirando aquellos hipnotizantes ojos marrones, los cuales fueron su perdición en cuanto la vio por primera vez.

¿Cómo podía hacerlo? ¿cómo podría dejar ir a la mujer que tanto amaba?, nunca se lo perdonaría.

-Conocerte fue lo mejor que me sucedió en la vida.-musitó acariciándole las abultadas y sonrosadas mejillas.-hacerte mi mujer y que me dieras a nuestro hijo, me ha hecho el hombre más afortunado del universo.

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Cuando Jimin salió del cuarto, todos lo rodearon pidiendo una explicación, pero lo único que pudo hacer fue acercarse a Namjoon y llorar en su hombro mientras el mayor lo consoltaba dándole suaves y leves golpes en la espalda.

Ya nada seria lo mismo para los dos, ambos habían tomado la más dura decisión de su vida.

Te amo, mi hermosa flor

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Un año después...

-No puedo creer que mañana nuestro pequeño Min-ah esté de cumpleaños.-chilló Jisoo junto al niño que dormía dentro de la carriola.

-Hablando de ello, Jimin-ssi vendrá supongo, ¿no? .-cuestionó Jennie para después beber de su jugo de frutas.

-No estoy segura.-musitó colocando un mechón de cabello tras su oreja.-intenté contactarlo hace tres días, pero está de viaje. Me lo informó una de las chicas que cuidan de su hijo.

-Su hijo.-habló esta vez Lisa cargando al pequeño Jeon.-¿hace cuánto tiempo que no visita a Minhwan? Rosé, él cambió.

-Lis, no digas esas cosas Jimin sigue siendo él mismo, simplemente es... Él trabajo mucho y no tiene tiempo.-contradijo haciendo una mueca.

-Ro, no lo defiendas por favor. La última vez que lo vimos fue para la noche de año nuevo, y ya pasaron tres meses. 

-Bien, más tardé volveré hacer otro intento.-dijo en un murmullo.-lo siento chicas, pero ya debo irme.-sacó de su cartera unos cuantos billetes y los dejo sobre la mesa antes de incorporarse.-nos vemos mañana, adiós.-se despidió dejando al trió en un silencio molesto.

-Muy bien hecho, Lalisa.-ironizó Jennie aplaudiéndole.-como siempre dejando la atmósfera pesada.

-Lisa, no debiste de haber dicho eso. Sabes muy bien como le afecta esa situación.-le regañó Jisoo severamente.

-Lo siento, si. Sé que me pasó la mano, pero no quiero discutirlo ahora.-se incorporó imitando a la joven anterior.-mucho menos frente a niños.-señaló a su bebé dormido.

Finalmente se quedaron ambas Kim a solas, mientras estas suspiraban con pesadez y jugaban con las pajillas y los cubos de hielo en sus vasos de jugos.

-Lisa tiene razón.-pronunció llamando la atención de la mayor.-lo único que hizo Jimin ese día fue, pasar la noche con ella.

-Rosé lo ama, y haría cualquier cosa para estar aún que sea un tiempo corto con él.-dijo Jisoo con una leve comisura.

-Lo sabemos, y eso nos entristece y lástima a nuestra amiga.-continuó la morena.

-Ella ya esta muy grande para reconocer lo que hace. Rosé es quien debe dar la última pelea.-finalizó suspirando pesadamente.

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Durante la noche...

Rosé se hallaba sentada en su sofa de cuero de la sala principal. Minhwan ya estaba durmiendo mientras ella se desahogaba bebiendo una copa de vino y revisaba él último contacto de su teléfono celular.

Sin pensarlo dos veces, marco y espero a que la línea contraria aceptara la llamada.

Rosé...

Jimin-ah, y-yo...

Abre la puerta

¿Qué?

Tras pronunciar aquella incógnita, fue hacia la puerta del hogar y la abrió sorprendiéndose. Frente a ella estaba él hombre que amaba y era dueño de su corazón.

-Dijiste que estabas... .-no la dejó terminar ya que poseyó los rosados labios de la menor con pasión.

-Dejemos eso para después, primero debo ocuparme de un asunto que dejamos pendiente.-la alzó obligándola a que rodeara su cintura y cerro la puerta gracias a su pie.

Pronto se perdieron en los peldaños de la escalera del hogar. Torpemente ingresó junto ella a la habitación reconocida, y se dejo caer sobre la menor a medida que los besos se hacían más apasionados y exigentes.

-J-jimin, espera.-lo detuvo colocando sus palmas sobre él torso del mayor.-¿por qué ... ?

-Te responderé mañana.-susurró sobre los rosados labios de la pelirroja.-quiero tenerte entre mis brazos esta noche.

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Momo 🍑💕