Chapter20:-

-Me alegró que hayáis asistido.

-Realmente no tenía mucho entusiasmo de verte, sólo lo hice porque eres el padre de mi hijo. Nada más.

-Chaeyoung, no seáis así conmigo. Me duele cuando habláis de ese modo.

-¿Para qué querías que viniera?

-Quiero estar en la vida de mí hijo. Necesitó saber de él, y también de ti.-tomó la pequeña y delicada mano de la fémina sosteniéndola fuertemente.-Ustedes dos son lo más importante para mí en estos momentos. Yo moriría si algo malo les sucediera.

-Podrás saber de él, también ir a los controles y... Tal vez cuando sea el momento de dar a luz, pero Daehyun será su padre.

-¡Park Chaeyoung!

-Ya te lo había dicho anteriormente, que seáis el padre no significa nada. Mi hijo llevará el apellidó de Daehyun, te gusté o no.

-¡También es mi hijo! ¡No puedes tomar decisines sin mi consentimiento, mujer!

-¡La decisión ya esta tomada, lo tomas o lo dejas!

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-Ya dejarme, puedo caminar sola.-se quejó empujandolo levemente.

-No, no puedes. Te desmayasteis en el café, aún estáis demasiado débil, no te comportéis como una infante Chaeyoung. Solamente quiero ayudar.

-Sos tan molesto, Park Jimin.-suspiró pesadamente desviando la mirada del castaño.-Lo mejor que puedo hacer en estos momentos es irme, ya te dije lo que tenía que decir.

-Yo no he terminado aún contigo, Rosé.

-Lástima, porque yo sí.

Jimin suspiró pesadamente rodando los ojos cansado.

-Ven.-la tomó fuertemente del brazo arrastrándola hasta alejarse lo máximo del público de esa tarde.

-¡Jimin, me lastimas! ¡Park Jimin, sueltame ahora mismo! ¡¡Jimin-ah!!

-Escucharme atentamente, Park Chaeyoung. Si no quieres que la justicia tome nuestra situación, será mejor que ambos nos coloquemos de acuerdo.

-¿Es una maldita amenaza?

-Verlo como quieras, yo no daré mi brazo a torcer por lo que es mío por derecho.

-Perdisteis la cabeza al parecer. Para ti todo es fácil, pero no lo es Jimin, saldríamos lastimados si alguien se da cuenta de...

-¿Que ése niño es mío? Me da igual lo que los demás piensen, Roseanne.

-¡A mí no! ¡Yo soy una mujer casada, que está esperando un hijo de otro hombre! ¿Cómo creés que nos mirarán cuando se sepa la verdad?

-Eres una cobarde y egoísta.

-¿Perdón?

-Solamente estás pensando en ti como siempre.

-¡Yah, Park Jimin!

-¿A caso estoy mintiendo?

-Sabéis que no es verdad, es por nosotros.

-¿Nosotros? ¿Quienes, tú, yo y nuestro hijo? O él idiota de tu marido.

-Eres un cabeza dura, lo sabías.

-Aún no me respondes.

-¡Te quiero, y es por tu bien! .-exclamó alterada. Apretó los puños y bajo la cabeza dolida.-¿Por qué no puedes entender q-que... .-sollozó colocándolo alerta.

-Rosé...

-No puedo vivir sin ti, te sigo amando Jimin.-lo miró a los ojos. Estos estaban cristalinos por las amenazantes lágrimas que querían salir.-Me niego a dejarte ir, no puedo dejar de pensar en ti. Te amo Jimin-ah.

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-Necesitaba tanto estar contigo, hermosa.-besó profundamente los labios rosados de la joven tomándola por la nuca.
Rosé sonrió entre medio abriendo un poco más la boca, permitiéndole que hiciera lo que quisiese con ella.

-¿Qué estamos haciendo, Jimin?

-¿Aún no lo sabés? Se llama amor, Roseanne.

-Estas con mi prima, no puedo hacerle esto.-negó siendo observada por el castaño.-Lo siento, pero esté fue nuestro último adiós.-lo besó casta mente para después incorporarse y comenzar a vestirse.

-Rosé, yo... .-trato de decir, pero ella lo detuvo.

-Olvida lo que sucedió hoy, porque nunca se volverá a repetir.

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Dos semanas después...

-Te miráis hermosa con tu embarazó, Chaeng. Él padre de ésta criatura debe estar orgulloso de ser lo, ¿verdad querido hijo?

-Sí, madre. Chaeyoung y yo estamos emocionados y encantados con nuestro pequeño hijo.-sonrió colocándole su mano sobre él vientre de la pelirroja.-Solamente quiero que llegué él día en que este niño nazca y pueda cargarlo en mis brazos.

La señora le sonrió a ambos mientras asentía lentamente.

-Y, ¿Ya han pensado en algún nombre?

-Púes...

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-Dios, eso fue tan... Incómodo y molestó.-dijo él pelinegro mientras conducía y mantenía la mirada fija en la carretera.

-¿Hay que decirlo de esa manera? De todas formas, ella es tu madre y debía saber del bebé.

-Me harta está mentira.

-¿Entonces para qué me hicisteis esta propuesta? Yo misma podía sola, tú quisisteis hacerte cargo de mi hijo, no entiendo tu cambió Daehyun.

-Estoy aburrido de colocar una cara que realmente no quiero. Tengo que fingir que entre nosotros no sucedió nada, que nuestro matrimonio sigue en perfecto orden, que tú no me fuiste infiel y quedaste embarazada de tu amante.-le decía con voz molesta.-De eso estoy cansado, de ser él idiota que su mujer lo engañó.

-Lo siento.-dijo suavemente.-No sabía como te sentías.

-¿Lo siento, creés que diciendo aquélla estúpida palabra solucionarás algo? ¡No seáis tonta, Rosé!

-Perdonadme.-murmuró cabizbaja.-Lo único que te pido es... Perdón. Yo soy la causante de todo esto, fue mi culpa el no colocarte atención, preferí salir y conocer el mundo de manera distinta, pero me equivoque como siempre lo hago.-decía con la mirada puesta en sus píes.-Yo te fui infiel y rompí nuestros votos matrimoniales, además de quedar embarazada de otro hombre.

-Rosé...

-N-nunca quise que algo así sucediera, quería romper de raíz aquélla relación, pero... .-jadeo entre sollozos. Lágrimas ya corrían por sus mejillas las cuales mojaban su vestido.-Perdonadme.

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Padre de mi hijo

-¿Como se encuentra nuestro hijo?

-Él está creciendo sana y fuertemente.

-¿Has estado llorando? ¿Quién te hizo llorar, debería golpearlo por hacerte eso?

-No es necesario, nadie me ha hecho llorar. Son cosas tuyas.

-Puedo reconocer fácilmente tu tono de voz y cuando mientes, Park Chaeyoung.

-Jimin-ssi...

-Quiero verte, necesitó tenerte entre mis brazos y tocarte para que suspires mi nombre al momento de ser uno.

-... Y-yo..., estoy ocupada en estos momentos. No digáis incoherencias, mejor terminemos esto. Adiós.

-Te amo.

-Gracias por todo.

-¿A que te refieres con eso?

-A lo hermoso que tuvimos y tenemos en común, nuestro bebé.

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Al día siguiente...

-¡Buenas tardes! ¿Señora Park, está en casa? ¿Suegra? .-preguntaba mientras paseaba por la sala del hogar.-No entiendo, me dijo que viniera pero no está.

-¿Buscáis a alguien, guapo? .-cuestionó Seulgi desde las escaleras de la planta alta.

-¿Q-qué hacéis aquí y así vestida? .-la señaló.

Sólo vestía una bata de seda negra la cual dejaba marcar sus curvas y delantera.

-A ti, primor.

-Está chica.-negó con una sonrisa grande y lujuriosa.

-Te estaré esperando, si subes, te encontrarás con algo delicioso.-le dio la espalda y seguido se quitó la bata dejándole a la vista su trasero respingado.

-Provocadora.-se quitó la playera y la lanzó al suelo con agilidad para subir rápidamente los peldaños y perderse en la oscuridad del pasillo.

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-Madre, lamentó la tardanza. Fui con las chicas a una tienda para comprarle cosas al bebé.

-No os preocupéis, no había llegado hace mucho.-sonrió dulcemente.-Te tengo una sorpresa.

-¿Una sorpresa? .-dijo confundida.

-Sí.-asintió para después mirar por encima del hombro de la pelirroja. Ella ladeó su cabeza un poco, encontrándose con la mirada y presencia de quién menos quería ver en esos momentos.

-J-Jimin-ssi.-tartamudeó con sorpresa.

-Tanto tiempo.

-Madre, ¿qué significa esto, acaso estáis de su lado?

-Ustedes dos tienen una conversación pendiente. Roseanne, escucharlo, es por él bien de los tres.

-Yo no tengo nada que hablar con éste hombre. Él ya sabe perfectamente mis planes, si los quiere puede o no tomarlos.

-¡Park Chaeyoung! .-exclamaron al unísono asustando a la menor. Ella suspiró pesadamente y asintió en silencio rendida.

-Supongo que estarás presenté, ¿no?

-Lamento decirte que no, pero sólo te llamé para que los dos pudiesen conversar.-juntó sus manos pidiéndole perdón.-Nos vemos él fin de semana. Adiós.

-¡Madre! .-la mujer se despido del castaño con una sonrisa sincera y finalmente se retiró del lugar dejándolos a solas.-Está señora. Eish... Dios, santo.

-Estáis refunfuñando sola, pueden pensar que estás loca. Será mejor que cierres la boca y tomes asiento para poder hablar civilizada mente.

Rosé detuvo sus maldiciones para después darle una mirada de odió. Él mayor ni siquiera se inmutó en aquélla mirada.

-Te estoy odiando en estos momentos, Park Jimin.

-Sabéis perfectamente que no es cierto. Tú me amáis, no lo puedes negar, hermosa.

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-¿Pero que es esto... .-dijo la mujer entrando a la sala de su propia casa.
Tomo la playera observándola detalladamente. No esto no era de su marido, era muy juvenil para él.

Guió su mirada hasta los escalones de la escalera, y ahí también habían prendas, las cuales les hacían un camino hasta la segunda planta.

Comenzó a subir en silenció, entre sospechas y curiosidad. La puerta de la exhabitación de Rosé se encontraba entreabierta, empujó la madera suavemente y sus ojos se agrandaron al ver aquélla horrible escena.

-¡¡Qué significa esto!! .-gritó fuertemente asustando a los dos.

Los amantes se detuvieron en lo que hacían, y miraron con espantó a la reciente llegada.

-S-suegra.

-Tía.

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Momo 🍑💕