𝖗𝖆𝖈𝖎𝖓𝖌 𝖙𝖔 𝖘𝖎𝖝𝖙𝖞

¿Cuántos días han pasado? Seulgi ni puede decir con claridad en que día está, solo sabe que se ha sentido como una eternidad desde la última vez en que Joohyun la vio a los ojos.

La pelinegra ha evitado a su mayor a toda costa, tomando un camino diferente al instituto y otro al regresar a casa, Sooyoung a su lado asegurándose que una cabellera castaña y chaqueta de cuero no se atraviese por "casualidad".

A la menor le gustaría decir que ha podido cargar con el dolor sin problema alguno, pero en las noches todo se nubla a su alrededor por las lágrimas que empañan sus ojos, quiere volver a sentirse segura entre los brazos de Seulgi. Aunque lo único que la mayor le ha hecho sentir es dolor los últimos días.

Le gustaría regresar con Seulgi y al mismo tiempo quiere olvidarla, no soporta la idea de que ya no esté en su vida pero tampoco quiere que lo esté luego de sus palabras. Está confundida porque ama a Seulgi y se odia por hacerlo, su inocente corazón está empeñado en ver el lado bueno de la mayor aunque le duela y sepa que está mal. Sin embargo, una herida que constantemente sangra el recuerdo de las palabras de Seulgi me recuerdan que aunque la ame, nada será igual.

Así se debe sentir amar a la persona equivocada, ¿No?, cómo un jodido infierno.

La situación para Seulgi no es muy distinta. Es una misma clase de dolor aunque la causa sea ligeramente distinta.

Se equivocó, de eso no tiene duda. Se hirió a sí misma tratando de herir a Joohyun, lastimo a lo único bueno que había en su vida, pero no sabía qué más hacer. Pensó que ignorarla solo por unas horas sería suficiente y después la volvería a llamar, pero cuando sintió a la pelinegra sobre ella, el pánico y el medio fueron los primeros en atacar.

Seulgi ahora llora por los gritos de su padre y por la ausencia de Joohyun a su lado.

ㅡ¿La has visto? ㅡes lo primero que pregunta Seulgi al Wendy sentarse a su lado.

La rubia se ha convertido en sus ojos sobre Joohyun desde que le explicó todo lo que sucedía entre ellas y sobre el padre de Seulgi.

ㅡSeul... ㅡWendy se rasca nerviosa la nuca, imagina su reacción y no es una imagen muy bonita. ㅡJoohyun está en las mesas de atrás, pero no hagas un escándalo por lo que vayas a ver, por favor.

Voltea confundida a donde apunta Wendy y la mano que se guardaba en el bolsillo de su chaqueta se aprieta en un puño con tanta fuerza hasta el punto de quebrar los caramelos de fresa que guarda allí para su pequeña amante cómo desde su primer intercambio.

Celos, enojo, pero más que todo es tristeza. Seulgi era la única que tenía permitido besar a Joohyun, ahora esa chica le robaba el privilegio.

ㅡ¡Seulgi, no! ㅡla rubia intenta detenerla, pero ya es muy tarde.

Sus pasos son agigantados hasta llegar a esa mesa donde todos la ven con un poco de terror, menos las dos pelinegras que están en el centro, una la mira con desprecio y la otra con expectativa.

De la mente de Seulgi se borra las pocas palabras que tenía pensadas decirle a Joohyun, no puede digerir que alguien más la haya besado y mucho menos que ahora están tomadas de manos.

¿Pudo conseguir a alguien más? ¿Tan pronto?

ㅡ¿Qué quieres, Kang? ㅡSooyoung no escatima en ser la primera en atacar.

ㅡJoohyun, ¿Podemos hablar?

La forma tan suave que Seulgi la nombra deja a los demás algo fuera de lugar, están acostumbrados a que la mayor hable con una voz fuerte pero con Joohyun es distinta.

Es algo que nadie más había notado, pero bastante obvio. Además de Wendy, Joohyun era la única que podía tocarla, la única que podía hablarle dulcemente, la única a la cual le permitía acercarse más allá de la distancia de su brazo y no amenazarla de golpearla en el proceso.

Todos creían saber cuál era la naturaleza de esa extraña relación, un crush no correspondido. Pero no podían estar más equivocados.

Joohyun vacila y siente que su nueva -¿compañera?- aprieta el agarre de su mano como señal de apoyo. Seulgi no pudo llegar en peor momento.

Ahora que conseguía un poco de paz, momentánea porque caía otra vez en el agujero que Seulgi le había dejado en la mitad del pecho, pero funcionaba durante dulces minutos. Sin embargo, ir con ella sería la oportunidad perfecta para finalmente dejar ir lo que ha retenido durante tantas madrugadas en vela.

ㅡ¿Primero la rechazas al frente de todos y ahora vienes por ella? ㅡSooyoung está a la defensiva de su amiga, no va a permitir que la vuelvan a lastimar.

ㅡCállate, Park. ㅡespeta la castaña y a la nombrada no le queda de otra que obedecer, Seulgi sigue siendo su mayor. ㅡ¿Podemos? ㅡle tiende su mano a la chica que parece querer quebrarse.

Largos segundos pasan antes de que la mano de Joohyun finalmente se consiga con la de Seulgi ante la mirada de todos. Sus manos entrelazándose inconscientemente porque se habían acostumbrado a eso cada vez que palmeaban a la otra.

ㅡHyun, lo prometiste. ㅡla pelinegra más alta le susurra al oído antes de que se levante.

ㅡY la mantengo, y justo por eso tengo que hablar con ella.

Van de la mano a pesar de los intentos fallido de Joohyun por soltarse, Seulgi había extrañado mucho su tacto y no la dejaría escapar tan fácil. Necesita ese contacto, la ayuda a liberar un poco toda presión que ha caído sobre sus hombres los últimos días.

Su padre ahora le proporciona una buena ronda de insultos casi a diario solo para recordarle que debe seguir sus órdenes y comportarse. Haciendo recalco especial en el hecho de que no debe ser como su madre.

Cruzan el jardín y llegan a ese abandonado sitio con un inmenso roble dando sombra suficiente, sentándose en la rota banca que está debajo del árbol.

Seulgi piensa las mil y un maneras en la que podría disculparse y decirle la verdad, que es el miedo que siente por su padre lo que la ha hecho actuar así, que la ama y lo hace como nunca más lo hará en esta vida. Quiere abrir por completo su corazón a su Joohyun.

Mientras, la pálida ya tiene las palabras que quiere decir en la punta de la lengua. Tantas noches sin dormir le han dado respuesta.

ㅡLo siento, Hyunnie. ㅡSeulgi suena tan rota e indefensa. ㅡNo debí hacer eso y no sabes lo mucho que me arrepiento.

Joohyun quiere reír ante la nueva actitud de la castaña, hace dos semanas la destrozaba hasta el alma y ahora llora pidiéndole perdón pero solo puede asentir con amargura, no le hará eso a Seulgi.

No quiere actuar como ella lo hizo. Cruel y sin sensibilidad alguna.

ㅡ Sí... Yo también me arrepiento. ㅡla menor toma un profundo respiro antes de seguir. ㅡMe arrepiento de haberte perseguido, me arrepiento de haberte creído todo lo que dijiste la noche anterior, dijiste que todo cambiaría pero no lo hizo como me habías prometido.

La paz que naturalmente Joohyun transmite aterra por completo a Seulgi. Su corazón es el que ahora se rompe, sintiendo esa punzante y dolorosa molestia en su pecho y el nudo en su garganta.

Joohyun logra hacer que Seulgi suelte su mano, solo provocando un jadeo de dolor a la mayor. Un sonido tan frágil que parece causar el mismo efecto en la pelinegra.

Está marcando un momento del cual no hay vuelta atrás.

ㅡHyunnie, no digas eso, ㅡintenta tomar la mano de la pelinegra otra vez pero esta no lo permite. ㅡsé que soy una estúpida pero debes escucharme, te prometo que no tienes nada de qué arrepentirte.

ㅡ¿Cuántas promesas más debo creerte?, han sido muchas y no has podido con la primera.

Su enojo la toma por un momento, pero al subir su mirada y ver a quién creía el amor de su vida llorar como si las lágrimas fueran nunca fueran a acabarse logra apaciguarla un poco. Enojarse solo hará de esto un mal momento, aunque ya es el peor, quiere irse con la paz de que no hubo alteración alguna.

Las dos están rotas, pero Joohyun no quiere romperse en más pequeñas piezas.

ㅡEstá vez tendrás que escucharme primero, ¿De acuerdo?

Joohyun toma a la mayor por las mejillas admirando cada extensión de su cara y llenando sus pulmones del dulce olor a tabaco que emana.

Cómo ama su aroma tan tóxico para ella, le gustaría poder llevarlo consigo para no tener que necesitarlo más nunca, es su adicción más grande luego de la atención de Seulgi. Pero como toda persona con una adicción debe ser rehabilitada.

ㅡEres el amor que quiero pero no el que me merezco, te he esperado y estuve dispuesta a esperarte toda una vida, pero esa mañana me quedó claro que todo fue una ilusión que tuve de niña enamorada. ㅡsus heridas son tan profundas que sangran a través de las lágrimas que comienzan a formarse en sus lindos ojos. ㅡMe lastimaste más de lo que imaginas con ese simple empujón y debo sanar de eso... Sanar lejos de ti.

Ambos llantos ahora forman una armonía de dolor, resentimiento, y arrepentimiento. Ya no hay dulces ni cigarros que puedan ayudarlas.

Terminar algo que nunca comenzó puede ser peor que darle fin a algo que sí tuvo inicio.

Es cerrar un libro al leer su primera oración, sin dar oportunidad de que la historia que se da detrás de esa hoja pueda ser conocida.

No hay lindos recuerdos porque nunca se hicieron, no hay algo con lo cual quedarse después porque no hubo nada desde un principio y tener que decirle adiós a eso duele por no poder experimentar todas las probabilidades que su unión pudo haber arrojado y les hubiese gustado vivir.

Alguien una vez dijo «los amores cobardes no llegan a amores ni a historias, se quedan allí»*. Tiene bastante razón.

ㅡ¿Y crees que Byulyi podrá darte el amor que mereces? ㅡal nombrarla Seulgi ve los labios de Joohyun recordando cómo hace minutos se acoplaban a los de la de cabellera morada.

ㅡNo, no lo creo pero me gustaría intentarlo.

Otra daga más para el corazón de Seulgi, quien se ha dejado caer por completo en las manos de Joohyun, está abrazándola aunque sepa que deberá soltarla pronto de una vez por todas.

Tuvo que haber prestado atención a los rumores que rodean a la mayor, alejarse desde un principio y no caer hasta lo más profundo por su adorable sonrisa que solo ella conoce. Sin embargo, no se arrepiente del todo, todavía la ama y lo seguirá haciendo aún después de esto, es su primer amor y es algo que no puede cambiar.

El primer amor es el que más perdura porque es una conexión más pura e inocente, toda una experiencia risueña, la que marca a una persona de por vida y la cual siempre querrá volver a vivir aunque ya no haya forma de hacerlo por lo perfecta que pareció ser ante un inexperto corazón.

Al terminar acaba con esas ilusiones de cuentos de hadas, dejando expuesta una de las verdades más grandes. Amar se puede convertir en dolor en cuestión de un par de palabras.

ㅡTú eres el amor que yo quiero, aunque...

ㅡAunque no soy el que mereces. ㅡesa verdad golpea a ambas más de lo que debía.

Joohyun intenta levantarse pero Seulgi se aferra a su cintura en el momento en que logra ponerse de pie.

ㅡNo te vayas, quédate conmigo hasta que tengas que regresar a casa. ㅡla mayor implora contra la suave tela del vestido de Joohyun. ㅡNo quiero que sea tan pronto.

La pelinegra solo le sonríe con ternura y peina su cabello moviendo su cabeza hacia arriba para que la vea. Su gran Seulgibear ahora luce tan pequeña.

ㅡNo puedo, me están esperando allá afuera. ㅡse agacha un poco para quedar a la altura de Seulgi y rebusca algo entre los bolsillos de su vestido.

Sin mostrar que es abre una de las manos de las castaña, deja el objeto y hace que la cierre otra vez en un puño, besando su dorso. Lo había guardado para dárselo en algún momento.

ㅡEspero que consigas a alguien más que te regale encendedores, Seullie-boo.

Joohyun logra safarse del agarre del otro brazo de Seulgi y la deja sola bajo la sombra de ese gran árbol, llenando el tranquilo lugar de sus sollozos.

El miedo a su padre que oculta entre su actitud ahora le ha quitado a quien más quiere.

Abre la mano y un sollozo desgarrador escapa de su garganta. Es el encendedor rosa que Joohyun quería regalarle ese día, tenía sus iniciales grabadas a un lado, pensó que la castaña nunca lo perdería si hacía eso porque sería especial para ella.

ㅡNo quiero que nadie más me regale encendedores si tengo este ahora.

Qué les pareció??? Díganme la verdad.

Sí me creían pendeja por shippear a Irene con Jackson, a Seulgi con JB, a Wendy con Suga, a Joy con Chanyeol y a Yerim con Jaehyun ahora les vengo con Byulrene.

Es que desde el último episodio del LevelUp, Byul molestando a Irene e Irene pidiéndole ayuda a Byul yo quedé tipo: "les presento mi nuevo ship prohibido".

Espero les esté gustando la historia.

*: Es una línea de la trova Óleo De Mujer Con Sombrero de Silvio Rodríguez.

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