Summer Johnsson 

Me quede llorando como una hora dentro de Betty, a este punto mi auto iba a oler a lágrimas

Mi teléfono sonó haciendo que me esperanzara, pero cuando vi el numero de Marko, lo volví a guardar, no quería hablar con nadie mas que con Jaeden. Mis lagrimas pararon, o tal vez ya se me habían acabado, así que después de tratar de respirar, me di aire con las manos para tomar fuerzas para entrar a mi casa 

Cuando al fin sentí que podía hacer algo mas que llorar, tomé mi mochila saliendo de mi auto y tratando de respirar con regularidad

Cuando abrí la puerta de mi casa ahí estaban mis papás y mi hermana. Mi papá tenía su mandil mientras movía algo en la estufa, mi mamá estaba sentada en la mesa con su computadora al frente y mi hermana estaba en frente de mi mamá de rodillas, mientras cargaba algo entre sus brazos

—Deja que se quedé— mi hermana me estaba dando la espalda mientras le rogaba algo a mamá

—Ya tienes a la coneja, ¿para que quieres un pato?— hablo mi mamá

En eso me di cuenta que lo que traía Isabella en sus brazos era un pato... espera, ¿Cómo porque un pato?

—Mira Summer— me habló mi hermana girándose, en sus brazos tenía un pato blanco de talvez unos 30 cm que tenía los ojos cerrados. Era algo dramático ver a mi hermana con el traje que usaba en sus practicas y cargando un pato— ahora tenemos un pato

—¿De dónde sacaste al pato?— parpadee con confusión al ver al animal en brazos de Issie

—Es que Nick me invitó a la plaza a dar la vuelta, y lo vi en una tienda de mascotas— explico mientras abrazaba al pato— en el momento que lo cargue y lo arrope en mis brazos de madre luchona sabía que su lugar era aquí

—El pato no se va a quedar— habló mi mamá tajante

—Mami, mira que lindo es— Isabella levantó al pato para mostrárselo a mis papás— Di hola pato. Hola amigos patos— en lo último tuve la impresión que Isabella quiso darle una voz al pato

—¿Tú que opinas?— le pregunto mi mamá a mi papá

—Pues ya compró el pato, y tenemos espacio para que corra en el Jardín— habló mi papá que removía algo en la estufa— déjalo que se quede, esta bonito 

—Y en navidad cenamos pato a la naranja— bromee mientras tomaba asiento

—¡Gusana!— Issie me miro horrorizada cuando sugerí hacer cena a su nueva mascota, así que la abrazó protectoramente

—Esta bien, el pato se queda— habló mi mamá, Issie celebro mientras le desordenaba las plumas al animal antes de dar una vuelta aún con el pato entre los brazos

—La comida ya está lista— aviso mi papá mientras apagaba la estufa

—A veces tengo miedo cuando papá cocina— hablo Isabell mientras dejaba al pato en el suelo, el cual huyó a quien sabe dónde

—El poder está en el traje— hablo mi papá señalando el mandil antes de empezar a servir la comida. Las tres extendimos nuestro plato, por lo cual papá nos empezó a servir su famosa carne al horno— oye, ¿estas bien?— me pregunto mi papá una vez termino de servir, me levantó la barbilla y me veía a los ojos

Tenía los ojos rojos e irritados de tanto llorar, además que tenía la cara roja de tanto que me talle para quitarme las lágrimas de la cara

—Si, es que me dio gripa— conteste nerviosa mientras apartaba el rostro de su agarre

—Pará mí que Jaeden te ganó en Call of duty— rió mi hermana

En el momento que escuche el nombre de Jaeden sentí de nuevo ganas de llorar, pero no podía hacerlo aquí porque mis papás comenzarían a preguntar, y lo que menos quería era repetir en voz alta el error que acabo de cometer

—Papá, no tengo hambre— me levanté de la silla y camine rumbo a las escaleras, me veían extrañados— tengo sueño, iré a dormir un rato

—Bueno, si te sientes peor, nos dices para llevarte al doctor— me dijo mi mamá, ya me sentía lo suficientemente mal 

Camine a pasos gigantes hasta mi habitación, donde volvió a sacar mis lagrimas acumuladas en la soledad de mis cuatro paredes

—Soy lo peor que existe— jale de mi cabello con odio— soy lo peor que existe, él menos que nadie se merecía esto

—Hola amiga pato— oí una voz chillona en la puerta de mi habitación, me mostró al pato antes de asomarse ella

—Isabell— la susodicha asomó la cabeza— hoy no estoy bien, ¿te podrías ir?

—Esta bien— me dijo mientras cerraba la puerta

—Gracias

De nuevo la puerta se volvió a abrir, solo que ahora era un trapo blanco agitándose en señal de paz

—Venir en paz, ser amigo— mi hermana rio mientras pasaba a nuestra habitación

—Isabell, ¿no entiendes? Quiero que te largues para que pueda llorar a gusto— le dije ya enojada

—Oye entiendo que tus videojuegos son importantes para ti, pero no te puedes poner así solo porque tu novio te ganó— me vio con una pizca de vergüenza como si esto solo se tratara de un videojuego

Ya no aguante más y me solté a llorar sin importar que mi hermana estuviera ahí, me cubrí los ojos y la boca sollozando lentamente

—Bueno ya no digo nada de tu videojuego de cuadritos— las palabras de Isabella hicieron que llorara más— si quieres dejo de criticar a tus europeos y a Minecraft pero deja de llorar

Isabella puso su mano en mi hombro acercándose con cautela, lo único que hice fue abrazarla mientras mi llanto se incrementaba y me aferraba a ella

—¿Qué pasó?— me preguntó mientras sobaba mi espalda

—Soy una puta, una zorra. Me odio— dije entre sollozos

Isabella solo siguió abrazándome mientras me acariciaba el cabello para calmarme 

Le conté todo a mi hermana, el beso, Lilia, que Jaeden nos vio y que termino conmigo, claro, exceptuando algunos detalles, detalles que solo tenían que ver con Lilia y conmigo, y que no le iba a decir a nadie por mas dolida que esté

Issie me escucho sin interrumpirme ni una sola vez, nos subimos a su cama en la litera y en todo el rato ella me veía sin decir nada mientras que yo le contaba y lloraba cada nada, me hubiera hecho bolita para llorar a gusto, pero mi hermana me manoteaba y me obligaba a seguirle contando

—¿Estas consiente que hiciste mal?— me pregunto una vez que le termine de contar

—Claro, me merezco su odio, que me diga todo lo que quiera decirme— dije mientras me sobaba la nariz pues aun tenía algo de ganas de llorar— pero no tienes idea de cuánto lo amo

—Ese amor no es justificación para hacerle daño— me dijo viéndome seriamente— así como ese amor no es una razón para hacer que te perdoné

—¿Qué voy a hacer sin él?— de nuevo habían vuelto las ganas de llorar, sorbe de mi nariz para no seguir llorando

—Te quiero hermana, pero no te voy a justificar cuando tu tuviste la culpa. Hubieras pensado eso antes— me dijo mientras hacía una mueca

Isabella tenía razón, era una estúpida que había perdido lo que amaba y eso lo iba a lamentar toda la vida... Jaeden jamás me iba a perdonar...

Ahora si me dejo hacerme bolita en su cama... pero otra vez se me habían secado las lagrimas, Issie se hizo bolita a mi lado, me abrazo y nos quedamos ahí en silencio, por mas que sabía que me tenía un pequeño rencor por lo que había hecho

(...)

Jaeden Martell

Ya me había cansado de llorar, toda la tarde me la pase llorando por Summer, pensé en todas las posibilidades, en que esto llevara tiempo y que solo fuera muy ingenuo, pero algo me decía que no, pero aunque fuera la primera vez, esa maldita imagen no salía de mi cabeza

No había comido nada en todo el día, hasta en la noche que me dio hambre solo se me ocurrió bajar a la cocina a buscar algo, tome la mantequilla de maní y una cuchara para volver y seguir llorando mientras veía nuestras fotos

Pero el sonido de la televisión me distrajo, mi mama estaba en el sillón viendo algún reality show mientras comía una manzana

Toda la tarde tenía el pensamiento que podría decirle lo que pasó, le tenía confianza a mi mamá pero no quería contarle todo, siempre me aconsejaba, pero no le quería decir nada para no dañar la imagen que tiene de Summer

Mi mamá desde siempre había considerado a Summer como su hija y no tenía el corazón para dañar esa imágen que tiene de ella desde que era una niña...

—Hijo, ¿no iba a venir Summer?— me preguntó, de nuevo sentía mi corazón oprimirse— dijiste que la ibas a invitar a jugar

—Tenía cosas que hacer con su proyecto— mentí mientras me llevaba la cuchara a la boca— no creo que pueda venir en estos días, estará muy ocupada por el proyecto final, es muy importante para ella

—Ok— mamá me miró algo dudosa

Deja la mantequilla de maní en la mesa y de nuevo subí a mi habitación para que no se le ocurriera empezar a interrogarme y me terminara sacando la verdad

Cuando volví a mi habitación, volví a tomar mi bola de beisbol y mi guante jugando a pegarla en la pared y atraparla en un bucle algo extraño, esperaba hacer algo mas que llorar

Toda la tarde lo único que había hecho era rebotar una pelota de béisbol a la pared y de nuevo lo volví a hacer, solo que ahora con más rabia, rebote la pelota otra vez en la pared hasta que mi mirada se dirigió a la foto que tenía en mi mesita de noche

Esa foto en realidad era una captura del día que me case con Summer en Minecraft, la había enmarcado y la tenía en mi mesita de noche

Puras mentiras, debimos poner en los votos que nunca nos traicionaríamos, porque era lo que me acababa de hacer, con ese pensamiento en mi cabeza, mi mano se hizo puño tomando con mas fuerza la pelota, la lance hacía la foto lo que causó que se rompiera y terminará en el suelo

—¿Qué pasó? ¿Estás bien?— me pregunto mi mamá desde abajo

—Sí— conteste sin dejar de mirar el marco roto en el suelo— solo se me cayó un vaso

Deje de mirar la foto y camine rumbo a la puerta pero antes de salir de nuevo miraba ese marco roto en el suelo

Camine hacia la foto y la tomé sin importarme que me cortaba con los cristales mas pequeños que estaban rotos, no me importaba el marco, me importaba esa foto

—Lo peor es que, aún te amo— dije mientras veía fijamente esa foto deseando volver al instante donde me decía que me amaba

La iba a arrugar pero no podía, la desdoble antes que se arruinara y la volví a mirar fijamente

—Aún te amo...

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Bb's espero que ya se les haya pasado las ganas de matarme jajajja ok no :v

Les quiero decir con dolor que solo le quedan 10 capítulos más de esta cochinada sin impacto :/

Pero weno no se me pongan tristes, soy como John Deacon después de la muerte de Freddie ok no :"v

-Ellis