Jaeden Martell

27 de abril, el cumpleaños de Summer.

A Summer casi nunca le gustaba celebrar mucho sus cumpleaños, sobretodo después de que se entero a los 9 años que ese día fue el mismo que su padre se había ido, y aunque ahora sabíamos la verdad de eso, sabía que no iba a querer algo muy ostentoso, casi todos los años la llevaba a desayunar, la cosa mas grande que había hecho es haberla llevado al parque temático de Harry Potter 

Pero hoy es especial no había planeado nada, además de que mi tía Giane, Isabella y su padre le habían preparado una sorpresa, la iban a llevar a desayunar como era tradición, y luego me pidieron de favor que me desapareciera con ella toda la tarde hasta las ocho de la noche

Además de que tenía sueño, me tocó hacer solo el examen de Mariano, y había sido especialmente cruel, no solo nos mandó a hacer el examen solos, también nos puso un algoritmo super complicado que no entendí, solo escribí unas líneas de código y casi mande el .zip en blanco, mientras que Summer me dijo que me iba a contar sobre el examen que les puso Satanás en persona, pero ya me imaginaba que no les había puesto examen, desde que son sus favoritos, Mariano hace muchas mas diferencias y privilegios con esa secta 

—Hijo, ¿ya te vas al cumpleaños de Summer?— me pregunto mi madre que estaba haciendo algo en su computadora 

—Si— le respondí— me pidieron que distrajera a Summer hasta la noche

—Bueno, si te quedas con ella, me avisas— mamá me extendió una caja de regalo color rosa— es su regalo, se lo das

—Si, adiós mamá— me despedí de ella con un beso en la mejilla mientras salía de casa, solté un suspiro sabiendo que tendría que caminar 13 calles

Debería pedirle que me enseñe a conducir... 

Aparte esas ideas y mejor me dispuse a caminar

A los pocos minutos llegue a la casa de Summer, le llame a su madre para que abriera la puerta, me dijo que Summer aun seguía dormida y que querían despertarla solo hasta que todo estuviera listo 

—¿En serio sigue dormida?— pregunte hacía los padres de mi novia 

—Si, la floja lleva mas de 12 horas dormida— me dijo mi tía Giane

—Déjala, es el primer día que no se desvela haciendo tarea— murmuró el señor Johnsson el cual estaba decorando un pastel con brillitos de colores— además así nos da tiempo de terminar 

—Si, llevas desde las 6 de la mañana con ese pastel— mi tía Giane le habló en un tono de reclamo a su esposo

—Es el primer pastel que le hago a mi hija— el señor Johnsson dejo de decorar para mirarnos— me tome muy en serio este día, le puse mucho empeño a mi curso de repostería en la prisión 

—¡No recuerdes nada de eso hoy!— el señor Johnsson se quejó cuando su esposa lo pellizco

—El que estuvo en la cárcel fui yo, así que él que puede hacer bromas de mis traumas soy yo— la mirada que le dio mi tía Giane, hizo que el señor Johnsson hiciera un cierre imaginario sobre su boca y volviera al pastel 

—Bueno, creo que ya todo está listo— murmuró la madre de mi novia antes de dirigirse hacía a mí— hijo, ¿despiertas a Summer?

—Si— subí las escaleras con la caja con el moño dorado que contenía su regalo

Le iba a regalar unos tenis rosas de brillos como los que usaba Roger Taylor en los 70's y un peluche de un tejón

Entré a su habitación procurando no hacer ruido, estaba en su cama cubierta con su cobija hasta los hombros, estaba dándome la espalda y una de sus manos colgaba fuera de la cama, su cabello estaba esponjado y sus largas pestañas descansaban sobre sus ojos mientras respiraba con tranquilidad abrazando su almohada

Rodee su cama para verla mejor, deje el regalo de lado mientras me inclinaba dándole un beso en la boca que me respondió, sin embargo no abrió los ojos, pero si se le empezó a dibujar una sonrisa 

—¿Roger Taylor?— rodé los ojos al oírla balbucear el nombre de su amor imposible, pero aun en su sueño lucido, me tomó de la nuca para volverme a besar, le respondí el beso, pero cuando pego su frente con la mía y abrió los ojos, hizo un leve puchero— ah, eres tú 

—Si, soy yo— le dije con un deje de sarcasmo— no vayas a entusiasmarte mucho 

Ella rio antes de volverme a tomar de la nuca para besarme, le respondí el beso mientras mi mano rodeaba su cuello por unos segundos, nos separamos porque nos quedamos sin aire, mi mano se quedo acunando su rostro 

—Feliz cumpleaños, mi amor— le dije aun sosteniéndola de la mejilla— eres la única Tauro que soporto 

—¡Oye!— me manoteo mientras que me reía— criticar por los signos zodiacales es mío  

—Te tengo un regalo— le extendí la caja con el moño dorado— para ti 

—Oh por dios— miró con una sonrisa los converse en la caja— son los mismo que usaba Roger...

—Cuando ganaron disco de oro por A night at the opera— le complete la frase

—Gracias— dejo la caja de lado para abrazarme, le pase las manos por la espalda mientras ella me dejaba besos en toda la cara haciéndome reír— gracias por estar aquí 

—Pero arréglate que te tengo una sorpresa— me levante de su cama mientras le lanzaba unos pantalones y una camiseta con un dibujo de gatito

—Okey...

Summer se fue a cambiar al baño, mientras que yo abría la puerta de su habitación para que entraran sus padres, mi tía Giane llevaba un globo de helio que decía feliz cumpleaños y el señor Johnsson llevaba el pastel que estaba lleno de brillitos de colores 

—¿Oye viste mi...?

—¡Sorpresa!— Summer saltó en su sitio cuando vio a sus padres 

A pesar de que empezamos a cantar el feliz cumpleaños, ella no miraba a nadie mas que a su padre con el pastel en las manos, incluso se cubrió la boca con las manos para que no notara que estaba llorando 

La conocía muy bien como para saber lo que esto significaba para ella, como espero a su papá tantos años, está era la razón por la que no le gustaba sus cumpleaños, pero ahora lo tenía, y era tanto que lloraba

—Ay, mi niña— el señor Johnsson me paso el pastel antes de irse a abrazar a Summer 

Intercambie mirada con mi tía Giane que se veía muy feliz al verlos juntos. No iba a negar que cuando me enteré lo que le ocultó a Summer, me molesté un poco, pero no pude guardarle rencor, sobre todo porque la quería mucho, y Summer tenía mucha razón en admirar a su madre por lo fuerte que era por todo lo que había pasado en su vida, además de que ella había educado a una chica tan maravillosa como Summer y por eso siempre tendría mi respeto y cariño

—No te vuelvas a ir, por favor— Summer sollozo sin dejar de abrazar a su padre y sin dejar de llorar

—No lo haré— le respondió el señor Johnsson a su hija, él también lloraba 

Una vez que ambos dejaron de llorar un poco, se separaron, limpiaron sus lagrimas y mi tia Giane repitió que se debía de arreglar porque perderíamos la reservación en el restaurante 

Nos fuimos al restaurante, en el cual desayunamos con tranquilidad, hasta le trajeron otro pastel que decía feliz cumpleaños, Summer lo comió con una sonrisa después de que su mamá le sacara miles de fotos

Y después de pedir la cuenta, era el momento de distraer a Summer hasta las 8 de la noche 

Al parecer la secta se habían enterado que hoy era el cumpleaños de Summer, y se las arreglaron para organizarle una fiesta sorpresa en casa de los gemelos, al menos no era exclusivamente de ellos, invitaron a Danna, Finn, Jack, Wyatt y otros amigos de su clase de música. A mi solo me pidieron que llevara a Summer a las 2 de la tarde, y que les pasara una lista de posibles regalos para ella 

—Bueno, pues nosotros nos vamos— mi tía tomó su bolsa haciéndole un ademan a su esposo para que se levantara

—¿A donde van?— Summer veía confundida a sus padres

—A casa— respondió su madre— Jaeden dijo que tus amigos te tenían una sorpresa

—La secta— aclaré mientras bebía lo ultimo de mi vaso de agua

—Deja de decirle secta a mis amigos— me reclamó lanzándome la servilleta 

—¿Entonces que son?

—Las sirvientas de Mariano— nos corrigió— pero esta bien, acepto

—Con cuidado— su padre se acerco dejándole un beso en la frente— me la cuidas— me advirtió apuntándome con su índice 

—Si señor— le respondí ignorando la voz de advertencia que me daba cada vez que me veía 

—Diviértanse— su madre si se despidió de ambos con un beso en la mejilla 

Ambos se fueron secreteándose, supongo que algo tendrá que ver con la sorpresa para Summer, a mi no me querían decir nada y solo sabía que Issie también estaba involucrada

—Y ni siquiera nos dejaron el auto— Summer recargó el mentón en la mesa 

—Toca caminar— le sonreí levemente, ella me dio una mirada de pocos amigos al saber que la haría caminar, lo que tanto le gustaba 

—Tienes que aprender a conducir— me reclamo mientras que salíamos del restaurante 

—¿Quieres que mate a alguien?— agrande los ojos— enséñame, eres mi maestra

—Eso solo en Truck— rio cuando imite su voz de española— además, la ultima vez que jugamos, chocamos al mismo tiempo 

Nos reímos cuando recordamos la vez que fallamos como camioneros en un videojuego 

—Mejor vámonos a ver a tu secta— salimos del restaurante camino a la casa de los gemelos 

(...)

El camino a la casa de los Davis fue mas corto de lo que espere, pero Oliver me había pedido que llevara a Summer con los ojos tapados, y lo único que tenia para cubrirle los ojos era mi sudadera, la cual tenia que obligarla a tener el gorrito cubriendo sus ojos y ayudándole a caminar para que no se fuera a caer

—Me estoy mareando— me dijo entre risas

—Ya falta poco— le dije sin soltarle las manos para que pudiera seguir caminando

Cuando al fin llegamos a la casa de Oliver y Marko, uno de los gemelos salió a abrir la puerta, me hizo un ademan de que no hablara, y en su lugar empezamos a ayudar a Summer a que siguiera caminando cuidándola de los escalones de la entrada 

—Jae Jae, ya quítame esto de la cara, me duele la cabeza— me reclamo

—Ya falta poco— Oliver me hizo un ademán de que todo estaba lista, así que le baje la capucha de la cabeza 

—¡Sorpresa!— todos los invitados saltaron de sus escondites que eran detrás de los sofás y las paredes— ¡Feliz cumpleaños, Su!

—De las tres chifladas— Bianca y Lilia corrieron a abrazar a Summer apretujándose entre las tres 

—Oigan, derecho de antigüedad— Danna y Steel llegaron donde estaban las tres chifladas para apartar a las dos rubias y abrazar a Summer 

Todos empezaron a llenar de felicitaciones y abrazos a Summer, además de darles sus regalos, 

—Bueno, pero esto es una fiesta— Jack dio un par de aplausos antes de abrazar a Summer— veranito, un año menos de vida y cada vez más cerca de tu muerte

—Uff, solo 10 años más para el club de los 27— Summer hizo una mueca extraña mientras soltaba el abrazo de Jack 

—En fin, a comer— Oliver ni siquiera pregunto, ya tenía una rebanada de pizza en su mano— ¡y a jugar Zelda!

Eso sí me interesaba 

Oliver, Wyatt y yo tomamos asiento en los puff frente a la televisión de la sala esperando que Oliver encendiera su consola y pusiera el videojuego, mientras que el resto comía y empezaban a chismear 

—¡A beber!— gire la cabeza cuando vi como Bianca alzaba una botella empezando a hacer mezclas extrañas con bebidas energéticas y sodas

—Oye, con cuidado—  le advertí a Summer que tenía su vaso extendido hacía Bianca que lo llenaba casi hasta el tope 

—No pasa nada, mi amor— Summer le dio un trago a su vaso— tu juega con calma 

—Si, aquí somos tranquilas— murmuró Danna mientras le pasaba su vaso a Bianca

(...)

—En fin, ya es tarde— me levanté del puff donde estaba sentado— debemos irnos 

No había visto la hora, pero ya había anochecido, y era señal de que ya debíamos irnos para la sorpresa que los padres de Summer le tenían

—¿Así te la vas a llevar?— Oliver apareció con una lata de delaware en la mano

—¿Así como?— me empezó a entrar el pánico

—Mírala— Wyatt apunto del otro lado de la sala donde Summer, Bianca, Marko, Lilia, Danna y Jack estaban cantando karaoke en español 

Todos se notaban que estaban borrachos ya que estaban con el cabello alborotado y se reían de cualquier cosa que decían, y aun así seguían bebiendo mientras que Summer y Marko cantaban esa canción con toda la lentitud del mundo

—Eres secreto de amor...— Summer cantaba eso mientras se alborotaba el cabello 

—Delante de la gente no me mires, no suspires, no me llames, aunque me ames— Marko cantó mientras miraba a Summer— delante de la gente soy tu amigo, hoy te digo, que castigo

—Ay dios mío...—tragué en seco mientras buscaba mi celular para ver la hora, eran las 7:40— ¡tengo que bajarle la borrachera en 20 minutos!

—Tranquilo, quédense en el cuarto de huéspedes para que sus padres no la regañen— me dijo Oliver tranquilamente

—Debemos de regresar a las 8 

—Quedan más de doce horas 

—8 de la noche— aclaré

—Oh— Oliver le dio un trago a su lata— entonces si preocúpate 

—¿Cómo se lo bajamos?— Wyatt miro a los chicos en el sofá que se reían de algún chiste

—Yo que sé, tienen que dormir— Oliver se encogió de hombros

—No se les va a bajar en 20 minutos 

—Llama a sus padres— me sugirió Wyatt, lo miré mal, lo que menos quería es que ellos se enteraran— pues a su hermana

Tenía razón, saqué mi celular marcando el número de Issie y rogando que si me contestara porque esa mujer siempre tiene el teléfono en silencio 

—Issie— contestó al segundo tono, le hablaba desesperado— por favor, necesito tu ayuda 

—Estaba a punto de llamarte, mis papás pidieron que entretuvieras a Summer otro rato mas— me dijo tranquilamente

—Excelente— era bueno, tenía mas tiempo para hacer que se le bajara y que mi suegro no me odie por el resto de mi vida— pero también te necesito 

—Estoy viendo Got y va a pasar la boda roja, ten piedad de mi— casi podía adivinar la rabieta que estaba haciendo

—Issie...— le hablé cansado

—Vale, ¿Qué pasó?

—Summer anda borracha y si la llevo así a tu casa, nos apalean a los dos— le dije con la seriedad que eso significaba

—¿Miedo a mi papá?

—Por favor— le dije en tono de suplica

—Vale, pásame la dirección y voy 

—Gracias

Colgué el teléfono un poco más tranquilo, Issie tiene buenas ideas, ella nos puede salvar, tenía que confiar en mi cuñada

—Bueno, creo que podemos tenerlo todo controlado hasta que lleguen ellas— respire tranquilamente tratando de mantener la calma

—Si nos dejan...— Bianca tomó el micrófono en cuanto empezó otra canción en español— nos vamos a querer toda la vida...

—Llamaré también a la hermana de Bianca— Oliver saco su teléfono tecleando antes de ponérselo en la oreja

(...)

—Okey, todos los borrachos, las manos donde pueda verlas— Issie paso a la casa apenas Oliver abrió la puerta

—Y al finaaaal, ni hablaaaar, tú y yo ya no existimos...— Bianca y Summer sostenían el micrófono sentadas en el sillón mientras el resto gritaban detrás de ellas. Issie alzó ambas cejas al verlos, me encogí de hombros como respuesta— ¡nooooo, no quiero ser... esa mujer! ¡Ella se fue a un abismo, y tú no eres aquel que prometió... sería mi superhéroe! ¡Y que... todo acabó, no queda más, seremos dos extraños! ¡Yo te olvidaré, me olvidarás... hasta nunca!

—Bueno, los deje terminar, manos arriba— Issie empezó a aplaudir cuando la canción acabo, pero solo desató la risa de los chicos en el sillon 

—Yo no he chocado— Marko alzó las manos sonriendo con inocencia, por lo cual el resto del sillón estalló en carcajadas

—Al jardín, ustedes— ordenó la mayor

Empezaron a protestar, pero se callaron cuando vieron a la hermana de Bianca que también entró sin saludar y mirando al grupo: —¡todos al jardín, ya!

—Tori, no seas mamona— le dijo Bianca a su hermana

—¡Al jardín!— repitieron las dos mayores, por lo cual, los borrachos obedecieron a regañadientes yendo al jardín de la casa

—Muy bien, los que no puedan mantenerse en pie, levántense y formen una fila— ordenó Issie mientras le pasaba una botella de agua a cada uno en la fila que parpadeaban constantemente— ahora quiero que se tomen toda el agua de la botella, no me dejen ni una sola gota 

—Issie, estás loca— le dijo Summer

—Nada de Issie, Licenciada Johnsson— Issie mando a callar a su hermana

Los borrachos de la fila tomaron la botella de agua bebiéndola de jalón, Summer toma poca agua, ya que toma mas coca que otra cosa, por eso me sorprendió que se acabara la botella en un par de minutos 

—Muy bien— Issie miro a la hilera una vez que se acabaron las botellas de agua— ahora quiero que den 50 saltos de estrella

—¡¿Que?!

—Ya oyeron, 50 saltos de estrella— repitió la hermana de Bianca

—Cállate, Victoria— le dijo la italiana menor 

—Tienen razón, 50 son muy pocos— concordó Issie— 100 saltos de estrellas.

—Oigan, ustedes...

—100 saltos de estrella— las dos mayores se cruzaron de brazos, hasta Issie sacó un silbato haciéndolo sonar cada vez que ellos se quejaban 

No tuvieron más remedio que empezar a saltar tal como se lo ordenaron. Wyatt, Oliver, Steel y yo veíamos a Marko, Summer, Lilia, Danna, Bianca, y Jack saltando

—¿Cómo es que tú no estás borracha?— me gire a ver a Steel la cual comía una rebanada de pastel 

—Si te detienes a comer, el alcohol no se te sube— explico mientras le daba el último bocado a su rebanada de pastel— no se ustedes, pero yo me estoy divirtiendo mucho 

Tenía que admitir que yo también 

Issie y la hermana de Bianca se encargaba de que cada uno diera los saltos de estrella de manera correcta y si no, los ponía a repetirlos, cuando dejaron de reírse y en su lugar empezaron a maldecir a las dos chicas mayores, me di cuenta que si estaba funcionando y se les estaba bajando la borrachera 

—Ya no aguanto— Marko fue el primero en colapsar en el suelo con la respiración acelerada y tomando su pecho— soy programador, suficiente ejercicio por un año 

—Ay— Bianca fue la segunda en dejarse caer al pasto— te juro que voy a asfixiar mientras duermes, Victoria.

—¿Cómo están, niños?— Issie pregunto eso con una amplia sonrisa, sin embargo nadie sonreía

—Necesito ir al baño— Danna se levanto como pudo y corrió dentro de la casa 

—¿Ya se les bajó la borrachera?— pregunto la hermana de Bianca 

—Si— respondieron en un hilo y al unísono

—Bueno, entonces vámonos— Issie se acercó a Summer que respiraba pesadamente sentada en el pasto— tenemos que estar a las 10 en casa 

—¿No prefieres que te aviente por la ventana?— preguntó Summer aun tratando de regular su respiración 

—Me hace mal, gracias— Issie se inclinó para tomar a Summer del brazo y levantarla del pasto donde estaba sentado— Jaeden, trae su bolsa, nos vamos 

—Si— obedecí entrando a la casa para buscar la bolsa de Summer y llevarme una caja con todos sus regalos

Issie trajo el auto de sus padres, y después de ordenar que nos subiéramos, así lo hicimos, del otro lado vi como Bianca era arrastrada hacía otro auto por su hermana, y como Oliver solo nos despedía con la mano alzada 

—¿Qué tienes?— pregunte cuando Summer se acurrucó a mi lado escondiendo la cabeza en mi cuello

—Me duele mis brazos— me dijo en un puchero como niña chiquita, me reí mientras le dejaba un beso en el pelo

—Que bueno, por borracha— le dijo Issie desde el asiento del conductor 

—Tú no me quieres— murmuró Summer aun pegada a mi

—Si te quiero— le dijo Issie— es mas, pon cara sobria, porque entre nuestros progenitores y yo, te tenemos un regalo 

—Ajá

—En serio, hermana— Issie se dio la vuelta en cuanto llegamos a un semáforo— finge que no te acabas de tomar hasta el agua de los floreros y estarás bien  

El camino a casa fue silencioso, Summer casi se durmió con la cara pegada a mi cuello sin dejar de abrazarme, con todo el ejercicio que le había obligado a hacer Issie, pensé que estaría sudando, pero no, estaba fría, incluso cada tanto le checaba el pulso para asegurarme que estuviera respirando 

En cuanto cruzamos la puerta, Isabell pareció aliviada que sus padres aun no estuvieran en casa, y Summer, apenas y parpadeaba a su alrededor asimilando si lo que veía era real o no

—Me voy a dar un baño— murmuró mi novia

—¿Puedo ver?— bromee, pero ella giró dándome una mirada levemente furiosa— entendí 

Issie y yo esperamos en los sofás a que Summer bajara, pero mas rápido llegaron sus padres que ella

Y no llegaron solos 

El señor Johnsson venía manejando un mini-cooper convertible negro que tenía un gran moño color rojo

—Wow...— Issie y yo miramos el auto donde se bajaban sus padres

—¿Dónde está Summer?— preguntó el señor Johnsson con una gran sonrisa mientras bajaba del auto— que venga para que vea su regalo

—¿Ese es su regalo?— pregunto Issie señalando el auto, sus padres asintieron— que injusto, a mi no me regalaste un auto a mis 17 

—Te di a escoger entre Harvard y el auto, quisiste Harvard— le recordó mi tía Giane

—¿Puedo retractarme?— Issie torció los labios, sus padres negaron al mismo tiempo

—Traigan a Summer

—Voy por ella— corrí al interior de la casa 

Subí las escaleras esperando que no hubiera vomitado o hubiera prueba de la borrachera de la que acababa de salir, necesitaba estar sobria para tener la misma cara que yo tengo en estos momentos

—Summer— toque su puerta pero nada— Summer, baja, ya llegaron tus papás— de nuevo nada— voy a entrar 

Cuando abrí la puerta vi que se había quedado dormida con el teléfono en la mano y que en su celular se andaba repitiendo un edit de Roger Taylor en tik tok

Le quite el teléfono, al menos tenía la pijama y aun tenia el cabello húmedo, como parecía no querer moverse, le tome de la cintura para levantarla, por lo que quedo en mi hombro, y como siempre, casi no pesaba, sus manos colgaban en mi espalda al igual que su cabeza 

—¿La gravedad se volvió loca?— balbuceo lentamente, la voz no se notaba que seguía borracha

—Si, flaquita— le di unos golpecitos en la espalda mientras bajaba con ella las escaleras

—Oye, quiero dormir— me reclamó cuando terminamos de bajar las escaleras y la baje en el suelo

—Tus padres te tienen un regalo— le dije sosteniéndola de los hombros

—Oh cierto— parpadeo algo desorientada mientras tomaba su cabeza— no comí el pastel que me hizo mi papá, se veía muy rico 

—Vamos afuera— ignoré lo ultimo llevándola a la puerta 

—Quiero pastel

—Summie— ella rodó los ojos siguiéndome a la puerta

Cuando pasamos la puerta y vio el auto en la entrada, abrió los ojos de par en par;— oh dios mío...

Corrió hacía el auto con el gran moño rojo, pasó su mano por el cofre mirando a sus padres los cuales asintieron con una sonrisa, por lo cual ella soltó un grito a los segundos 

—¿Esto es mío, en serio?— el señor Johnsson le extendió la llave del auto

—Te debía 16 regalos de cumpleaños— le dijo el mayor— sé que no lo es todo, pero quise dártelo 

Summer se lanzó a los brazos de su padre como lo hizo en la mañana, él la levanto del suelo levemente sin dejar de abrazarla y darle un beso en la coronilla

—A mi también me debes 16 regalos— le di un pellizco a Isabell— ¡au!

—Ven— Summer tomó mi mano para llevarme al copiloto, sin embargo no me subí hasta que ella subió primero mirando todos los detalles del auto— ¡es precioso!

Ni siquiera me pregunto y encendió el auto, ella estaba maravillada con el motor, y como estaba tan emocionada y aceleraba más que de costumbre, me aferre al cinturón de seguridad con fuerza 

Me tuvo dando vueltas casi 15 minutos por toda la residencia, pero no tuve corazón para decirle que ya me quería ir a dormir, porque Summer estaba emocionada con su nuevo auto y no iba a haber algo que la detuviera 

O si hubo algo... que le dio hambre y sueño...

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—Ellis