Summer Johnsson 

Había disfrutado el fin de semana, pero fue tan corto, tenia que volver al insti, sobretodo porque Mariano se estaba poniendo peor, desde que dio los equipos, cada día dejaba tarea, exposición, ensayo, lo que sea

 Y había rumores de que hoy pediría el primer adelanto del proyecto 

Bueno, a esa deducción llegaron los gemelos, casi al mismo tiempo me había enterado que la razón por la que ellos y Bianca le hablaran con tanta confianza a Satanás, era porque les dio clases en primer año, por lo cual se sabían sus mañas, y también era la confirmación de que nos pediría un adelanto del proyecto 

Proyecto que no habíamos empezado  

Y sabía que Mariano no se tentaría el corazón porque llego temprano, me había dado cuenta que solo llegaba temprano los días que nos quería ver sufrir, así que llego hasta silbando y con sus lentes oscuros de resaca

Se supone que él era el profe, y salía mas de fiesta que todos los que estamos en este salón, ni parecía que tenía esposa

—Hola, niños— Mariano saludo con un tono excesivamente agudo, en cambio, nadie sonreía— por sus caras, deduzco que ya saben lo que haremos hoy 

—Satanás saldrá a la luz— murmuré sin pensar, pero al segundo me arrepentí

Todos me miraban con la boca abierta, ahora recordé que nos había advertido que solo le podríamos decir Satanás si le caemos bien, hasta ahora nadie que no fuera Bianca y los gemelos lo había llamado así directamente, pero yo, no sabía si le caía bien,  y decirle Satanás sin preguntar era casi firmar mi sentencia de reprobada 

—Vaya, al fin salió la valiente en decirme Satanás— Mariano se rio mientras me miraba fijamente, me intimido mucho, mis mejillas se pusieron rojas y apreté los puños por encima de la mesa— pero tuvo suerte, Summer, usted me cae bien. 

Solté la gran respiración que contenía... pero a la vez, me puse mas roja que baje la cabeza... así que le caigo bien

—¿Qué paso?— Mariano volcó los ojos cuando Finn alzó la mano

—¿Yo le caigo bien?— preguntó haciendo un gesto extraño

—Eso depende— Mariano cruzó los brazos sin dejar de ver a Finn— si me dice que va a pasar en la cuarta temporada de Stranger Things 

Finn se levantó de su banca ante la mirada de todos, camino hasta el escritorio y empezó a secretearse con Mariano... creo que a varios de la clase, incluyéndome, se nos alteraron los nervios, al ver como duraban secreteándose y como el profe abría la boca con cada cosa que le decía Finn 

—¿En serio?— Mariano arrugó las cejas 

—En serio.— repitió Finn 

—Mas le vale que mi pareja favorita siga junta— Mariano le dio un empujón a Finn para alejarlo de él— en fin, si me cae bien. 

Finn sonrió ante la ultima palabra del profe, el resto del salón quiso empezar a preocupar, pero antes, Mariano chistó mandándolos a callar a todos 

—Quiero el adelanto para mañana— los quejidos y las muecas no tardaron en aparecer— solo de la documentación, la aplicación no puedo verla hasta el día de la exposición, quiero por lo menos un 10% de adelanto, y no, no cuenta la portada ni la introducción, quiero más, quiero un abstract, casos de uso, diagramas de flujo, acuerdo de privacidad, y todo eso

Mis planes de dormir toda la tarde se acaban de ir al carajo

—Parece que estamos en la universidad— una voz de un chico se quejo en el fondo del salón

—¿No sabían que doy clases también en la UCLA?— la mayoría abrió los ojos completamente consternados— de hecho, tengo el gusto de darle clases a las dos hermanas DiCarlo— su mirada cayó en Bianca

—Mi hermana se titula el próximo año— le dijo Bianca mientras dejaba caer su lápiz al lado— y ya no esta en su dictadura

—Es una lastima, quisiera poner a llorar a las dos hermanas juntas— Mariano se rio abiertamente

—Usted me acaba de quitar todas las ganas de estudiar en la UCLA— le reclamó Danna

—De nada— Mariano alzó el pulgar— en fin, pónganse a trabajar, el día es largo

El profe saco su teléfono, pero eso no fue lo que mas nos sorprendió, sino que por el reflejo de la ventana a su lado, se veía perfectamente que el profe estaba jugando Minecraft

—Profe, ¿quisiera un día jugar con nosotros?— preguntó Jack hacía Mariano, solo levanto la vista del celular con la ceja alzada— me alejo...

—Niñas— Oliver nos dio una mirada cansada— tenemos que volver a reunirnos 

—Adivino, ¿en tu casa?— Steel soltó con sarcasmo mientras recargaba el mentón en el pupitre

—Si— nos respondió tajante 

—No es justo— me cruce de brazos

—Si, ¿pero quien va a hacer el 75% del proyecto?— Oliver se cruzo de brazos imitando mi gesto 

—Tú— Lilia se acercó a Oliver pasándole los brazos por el cuello para acercarse y dejarle un  beso, me rasque un lado del cuello viendo a otro lado menos a ellos— mi amor...

—No voy a hacer tú parte del trabajo.— Oliver miró a Lilia con los ojos entrecerrados, ella soltó todo el agarre que tenía sobre él

—Ya, tirano— hice un gesto sin importancia— en tu casa saliendo de clases

—Y más te vale que nos alimentes— le advirtió Steel, pero él solo le dio el avionazo 

(...)

—¿Hablamos mas tarde?— Jaeden me hizo un pequeño puchero mientras me agarraba la cintura y y yo le rodeaba el cuello con las manos. Nos estábamos despidiendo antes de que cada uno siguiera su camino, en su caso, a Bianca se le acabo lo benevolente, y los obligo a reunirse para el proyecto 

—Si— le di un beso corto, lo cual le siguieron como diez mas, no me quería ir, sobretodo porque sabía que Oliver me gritaría el resto de la tarde si algo no salía como él quería 

—Te amo— me dio un beso esta vez mas largo, nos despegamos a los pocos segundos pegando nuestras frentes 

—También te amo— le di otro beso mientras le sostenía las mejillas— te juro que voy a pensar lo del próximo fin de semana 

—Okey— me sonrió de regreso

El próximo fin de semana iban a fumigar la escuela, por lo cual tendríamos dos días libres, así que Jaeden me había invitado a Baja California, en otras circunstancias diría que si sin dudar, pero ahora tenía una gran responsabilidad con mi equipo, y no solo era la especialidad, tenía tarea de otras materias, debía de pensarlo

—Ya, malditos derrama miel— Steel me jalo por el cuello de la mochila para que empezara a caminar 

—¡Oye!— proteste, pero no me soltó 

—Te estamos esperando hace 10 minutos— me dijo, pues Oliver, Lilia y Krestin ya estaban en la puerta

—Pudieron irse y los alcanzaba 

—Si tú eres la única con auto 

—Touché

Salude a los tres chicos restantes, no tuve mas remedio que llevarlos en el auto de mi papá, sino fuera porque tengo mucha flojera de caminar, hubiera dejado de traer auto con tal de no ser la chofer personal de este quipo

La casa de Oliver seguía igual, solo que nos aseguro que esta vez no estaba su mamá ya que le tocaba trabajar hasta tarde, por lo cual entramos sin saludar a su casa 

—Siéntense donde puedan— Oliver tiro su mochila al suelo antes de dejarse caer al sillón 

Steel se fue el refrigerador, Lilia y yo sacamos nuestras laptops de la mochila y Krestin solo se dedico a ver su celular en el sillón 

—Oye, era mi manzana— Oliver protesto al ver a Steel con una manzana roja en la mano

—Era— Steel le dio otro mordisco 

—Aprovechada.

No pudimos seguir tonteando ya que se escucho el sonido de la cerca de la entrada abriéndose, lo que nos hizo alarmarnos, se supone que su mamá no vendría hasta tarde, él nos hizo una seña de que nos escondiéramos, mientras tomaba un arreglo de metal que parecía un ángel y lo alzaba para defenderse si fuera necesario

La puerta se abrió al mismo tiempo que Oliver tiraba el arreglo hacía la puerta, lo que desencadeno un grito que conocía a la perfección al igual que Steel 

Marko, Danna, Finn, Jack y el otro chico que no conocía de su equipo estaban en la puerta, Jack estaba colgado del brazo de Marko, y cuando todos nos vimos, arrugamos las cejas completamente confundidos

—¡¿Que demonios haces tú aquí, Fred?!— grito Oliver hacia la puerta

—Venimos a hacer la documentación— respondió Marko

《Esto se va a poner feo...》

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—Ellis