Summer Johnsson 

—¿Entonces, puedo ir?— miré a mis padres con las manos juntas mientras les daba una mirada suplicante 

—Ya sabes que no me gusta que vayas a fiestas de noche— me respondió mi mamá mientras desayunaba una tostada con mermelada 

Les estaba pidiendo permiso a ambos ya que ni bien se termino de formar el grupo de WhatsApp de la matricula, se había organizado una fiesta de bienvenida para hoy en la noche, el detalle que había omitido es que seria en el estacionamiento de maestros del instituto, pero si no me querían dejar ir sola, menos me darían permiso si les decía eso a mis padres, y aun no tenia las agallas para escaparme 

—Solo es una fiesta de bienvenida— mentí, sabia muy bien que habría fogata, alcohol y cigarros, aunque a mi no se me daba eso, si yo estaba segura de no querer consumir nada, no tenia porque afectarme lo que hacían a mi alrededor— les prometo que no llegaré después de las once, al otro día tenemos clases, no podemos desvelarnos 

—Antes de las once.— me advirtió mi mamá, por lo cual asentí frenéticamente— me pasas la dirección para ir por ti 

Me atragante con el café, papá me dio unas palmaditas en la espalda, si mamá me iba a buscar, se me caería la mentira 

—No es necesario— murmuré mientras me limpiaba la boca con una servilleta— Finn me trae, su papá le dejo el auto 

—Esta bien— al menos fue fácil ocultar la mentira

Una vez que me termine mi café, me peine con un poco mas de ganas que otros días, el cabello ya me estaba creciendo, así que me hice un moño alto, me puse un par de collares y tomé mi sudadera, cuando estuve lista me subí al auto de mamá, ya que me daría un aventón antes de irse a su despacho 

Cuando llegue al insti, tuve esa sensación abrumadora que me daba cada vez que volvía de vacaciones, y exceptuando los nuevos arboles en las áreas verdes, todo estaba casi igual 

¿Como es que a todas las chicas les da tiempo de irse maquilladas perfectamente y yo apenas y llego despierta? 

Miré mi horario electrónico mientras buscaba mi salón para mi primera clase, que era de Historia, cuando encontré el edificio y me fijaba en las placas que estaban a un lado de la puerta, me di cuenta que dos personas conocidas estaban conversando en el pasillo, Bianca DiCarlo y Marko Davis

—Hola— los salude a ambos,

—Hola— me regresaron el saludo

Bianca iba con su ropa ancha como siempre y creo que tenia una nueva perforación en la nariz, mientras que Marko iba un poco diferente, el Marko que yo conocía siempre llevaba jeans y camisas abotonadas, este Marko iba con jeans holgados y una sudadera de AC/DC además de que iba despeinado y con unos lentes oscuros

—¿Aquí es la clase de Historia?— señale la puerta

—Si, aquí es, señorita— me respondió Marko con una voz que no parecía la de él— buenas... las tenga

Giré la cabeza al oír el tono de Marko, me sonrió de una manera que me hizo arrugar las cejas, termine ignorándolo y en su lugar pasé al salón, pero sentí su mirada clavada en mi nuca

Parece que a alguien le dio mucho frío en las vacaciones

Ya dentro del salón me dio mas confianza ver a Finn, Danna y Steel, Steel jugaba algo en su celular y Danna estaba sentada en el regazo de Finn obligándolo a tomarse fotos con ella 

—Buenos días veranito— estaba segura que Finn vio la oportunidad de escapar de las fotos cuando me vio, porque bajo el brazo de mi amiga para charlar conmigo 

—Hola— salude mientras dejaba mi mochila en mi banca 

—Pareces viuda— Steel se rio— y ni siquiera te haz casado 

—Extraño a Jae, es todo— admití— en fin, ¿irán a la fiesta del estacionamiento?

—Si, mi señora me arrastro para decir que si— Finn señaló a Danna que seguía en su regazo

—¿Vas a ir, verdad?

—Claro

Seguimos hablando de cualquier estupidez, y sabía que estas se incrementarían cuando vi llegar a Jack, le dio un beso a Steel y dejo su mochila en una banca junto a ella, pero luego miró acusatoriamente a Danna

—Danna, ¿te podrías mover de mi lugar?— le soltó Jack a Danna con un ligero tono de sarcasmo

—¿Eh?— pregunto Danna

—Donde estás sentada es mi lugar— hablo Jack señalando a Finn

—¿Ah si? Desde cuando— preguntó Danna mientras que acercaba mas a Finn hacía ella, casi le ponía los pechos en la cara y Finn ni disimulaba que lo estaba disfrutando

—Desde hoy— Jack le hizo una seña a Danna para que se moviera

Danna se levantó y Jack se sentó encima de Finn

—Ya me acostumbre— dijo Steel haciendo una mueca

Hice una mueca cuando vi acercarse a Marko y Bianca, venían tonteando, por lo cual él le dio una nalgada a la chica llena de perforaciones que hizo que le diera un zape y le soltará un insulto en italiano

Ahora me daba cuenta que mi pequeño enamoramiento con Marko ya se había esfumado

Una de las principales razones por las que Marko me gustaba en el pasado era por su actitud, como era de respetuoso y caballeroso, pero este nuevo Marko no me gustaba, además que también me gustaba como se vestía con sus camisas arremangadas, ahora no era que se viera mal, pero era extraño, ya no era mi tipo de chico

Deje de ver a Marko cuando vi otra cara conocida en la puerta, nos saludo con la mano y con una amplia sonrisa

Era Wyatt

—¡Ahhh!— grito Finn para luego levantarse rápido lo que causó que Jack terminará en el suelo

Danna y Steel estallaron en carcajadas cuando vieron a Jack en el suelo, mientras que yo me levanté para lanzarme a abrazar a Wyatt, Finn también, por lo que después de abrazarlo, lo llevamos a rastras a una banca cerca de nosotros

—Estoy emocionado— murmuro Wyatt mirando a su alrededor— mi anterior insti era de uniforme, ya quería usar mi ropa normal 

—Y nosotros nos encargaremos de integrarte— le aseguré

—Aunque aun sigo enojada contigo por tu boda— me dijo haciéndose el ofendido

—Pues te aguantas.

Nos tuvimos que callar porque el profesor de Historia había llegado y nos ordenó que tomáramos asiento antes de empezar a presentarse

(...)

Había sobrevivido olímpicamente al primer día de clase, solo quedaba un detalle, la especialidad 

Según el horario, tendríamos dos materias de especialidad de dos horas todos los días, los martes y jueves con la maestra Emma Roden, y los lunes, miércoles y viernes con el profesor Mariano Stenfield, o mejor dicho, Satanás 

Y llevábamos esperando media hora, y aun no aparecía Satanás

—No lo conozco y ya lo admiro— habló Wyatt— no llegar el primer día, ya es mi profe favorito

—No se confíen— me fui para atrás cuando oímos la voz cercana de Marko— Mariano nunca llega temprano, pero llega

Sentí que me estaba volviendo loca, porque este Marko no era el que vi en la mañana diciendo guarradas, era mi Marko, el que usaba sus camisas de botones con un par sueltos, el cabello peinado y que olía a desodorante de chico que nos dejaba suspirando a todos

—Yo ya me quiero ir— Jack hizo una rabieta— se acabo, si no llega en cinco....

—Buenas tardes.

Trague en seco cuando vi al profesor en la puerta, lo había visto un par de veces, me había dado asesorías de mi examen de Calculo, solo que ahora llevaba un traje negro, camisa negra sin corbata, su cabello negro rizado estaba despeinado y llevaba unos lentes oscuros, una taza de café en una mano y su maletín en la otra 

Por algo dicen que el diablo era el ángel mas hermoso...

Y creo que varias chicas estaban de acuerdo, de repente estábamos poniendo mucha atención a la clase

—Me presento, mi nombre es Mariano Stenfield— murmuró mientras dejaba con pesar el maletín en su escritorio— yo les voy una de sus materias de la especialidad de programación. Mi edad es un enigma, soy ingeniero en sistemas computacionales y softwares, tengo una maestría en pedagogía y un doble doctorado en sistemas operativos y desarrollo web 

Bueno, debíamos decirle doctor

—Pero, ustedes díganme Mariano— cuando se quitó los lentes, mostró que sus ojos eran azules y que tenia unas ojeras que no le quitaban lo atractivo— la mayoría debe conocerme por mi nombre de Satanás, y si me caen bien, pueden decirme Satanás a la cara, si los odio, solo podrán hacerlo en privado 

El profe sacó de su maletín su computadora

—Y la razón por la que llegue tarde, es que anoche tuve una fiesta, me emborrache, y ahorita tengo una resaca del infierno, así que no hablen tan fuerte— murmuró, pero la carcajada de Bianca resonó con fuerza en el salón 

—Vaya, otra vez se emborracha al inicio de clases— soltó la italiana con ironía 

—Enhorabuena, usted trae una nueva perforación— le respondió el profe a Bianca 

—Me sorprende que lo haya notado aun con la resaca— murmuró Bianca 

Dios mío, esa chica no le tenia miedo a la muerte, y creo que el resto de chicos se estaban dando cuenta 

—Pero usted no tiene resaca, escriba un algoritmo  para resolver un trinomio al cuadrado perfecto— el profe le extendió un plumón a Bianca, ella se levantó y la arrebató el plumón  

¿En que rayos me metí?

Bianca escribió lo que le pidió el profe en unos minutos y se fue a sentar con tranquilidad a su silla después de regresarle a Mariano su plumón, mientras que casi toda la clase miraba estupefactos el pizarrón, todos coincidíamos que no entendíamos un carajo

—Profe, ¿de donde rayos salió eso?— Finn alzó la mano mirando el pizarrón con confusión absoluta 

—Vaya, en mi clase tengo a Mike Wheeler— Finn hizo una sonrisa amplia ante las palabras del profe

—Hola— Finn saludo tímidamente

—Y también tengo a Freddy Freeman y Peter Quill— miró a Jack y Wyatt que se encogieron de hombros— interesante, ¿podría alguno de ustedes decirme que es la programación?

Y los tres se quedaron callados con los ojos abiertos 

Y en su lugar quienes alzaron la mano para responder fueron Bianca, Marko, y... ¿otro Marko?

Intercambie miradas entre los dos chicos pensando seriamente si me estaba quedando loca, el chico que estaba solo a unos metros de distancia era el Marko que conocía, él que fue mi amor platónico desde la secundaria, el otro Marko era extraño, la sudadera ancha, el cabello despeinado y se sentaba con desinterés 

—Marko, ¿te clonaron?— miré seriamente al chico azabache de camisa abotonada e intercalando miradas con el otro chico de la sudadera que era idéntico a él 

—Tengo un gemelo— respondió como si nada 

—Hola— el que ahora sabia era el gemelo de Marko, alzó la mano en forma de saludo— me llamo Oliver 

—Y entre los dos, quien sabe cual es el gemelo mas pesado— murmuro Mariano antes de soltar una risita

—Gracias porque ya iba a explotar— habló Finn lo que causó la risa de todo el salón

Y el resto de la clase se resumió a Mariano burlándose de los que no sabíamos que Marko Davis tenía un gemelo

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—Ellis