Millie Bronze estaba esperando su vuelo de regreso a su residencia. Solo pasó el fin de semana por unas cosas que tenía que arreglar en relación con su trabajo.

Su atención se desvío hacía una voz conocida pues este se oía discutiendo con uno de los empleados del aeropuerto -Señor, no podemos otorgarle la entrada- detienen.

-Tengo que hablar con una de las pasajeras del vuelo!- insistía aquella voz.

La castaña se acerca -Esta bien. Él es mi amigo- sale del area de espera para poder hablar con Bruno Guimarães. -Woah! No esperaba verte más- se le escapa decir.

El futbolista sonríe desviando sus ojos de Millie -Menos mal que te alcancé- inicia diciendo.

-Acaso viniste corriendo has acá?- sentía lastima por Bruno.

-De alguna u otra manera tenía que evitar que te fueras, no?- poco a poco recuperaba su respiración.

Millie fruncía el ceño -Y eso?

Ya una vez mejor, Bruno aclara su garganta -No puedo dejarte ir- buscaba con exactitud que decirle -Desde aquella vez que nos conocimos no sales de mi cabeza, Millie. Mierda, te deseo más que nada en este mundo de mierda. Tu elegancia y toque me tienen rendido ante ti- confiesa ganándose el corazón de la castaña.

-Oh, Bruno...

-Te pido que me des una oportunidad. Millie, te prometo que no te fallaré- toma las manos de la ojiazul.

Acaso era lo correcto? Y si solo estaba actuando? Y si era asi, por qué lo haría? Que mosco le había picado a Bruno Guimarães para que actuara de este modo?

-Bruno, yo no...

-"Pasajeros del vuelo a Newcastle favor de abordar..."- anunciaban el vuelo de Millie.

-Te lo ruego, Millie. Estoy dispuesto a arriesgar todo por ti- insiste desesperado Bruno.

Los ojos cafés del brasileño fue el punto clave para que Millie aceptara quedarse más tiempo en Lyon -Prométeme que nada de esto saldrá mal- pide.

Bruno le otorga una sonrisa de confianza -Te aseguro que te protegeré de todo aquel que quiera hacerte daño. Estas bajo mi cuidado- acaricia la mejilla de Millie haciendo que aquello sea su debilidad a partir de ahora.

-Esta bien. Hagamos esto- Millie también tenia otros planes y esta situación parecía que le vendría bien para iniciar aquello planes.

Conforme pasaban los días, Millie se veía con Bruno quien le consiguió un lugar donde quedarse para que se pudieran ver todas las noches y así fortalecer su relación.

Millie tenia que confesar que Bruno no era su tipo de chico, pero este logró buscar la manera de que Millie fuera suya y vaya que fue efectivo sus métodos.

La reunión organizada por el mejor amigo de Bruno se acercaba. El brasileño la invitó a que fuera con él -Lorena me va a matar- Millie lo besa en corto y se incorpora del sillón.

-Tu no te preocupes por Rena- alcanza a tomarla de la mano y la jala hacia él para solo intensificar el beso que tenían pendiente. Millie se pierde en los carnosos labios de su novio subiendo de nivel el amor.

Aún así algo que seguía picando su curiosidad era de que si Bruno seguía acostándose con Lorena. Tenia sus dudas si Bruno nomas la estaba usando o si aún sentía algo por la rubia. Si algo detestaba era de que la estuvieran usando, y no quería que fuera el caso porque no quería vengarse por el cariño que ya le tiene al futbolista.

-Hablo enserio- Millie se separa en definitiva -Es obvio que Lorena estará ahí. Aún no terminas con ella- al escuchar aquello, Bruno desvía la mirada -Por qué sigues con ella? Por qué no la terminas? Por qué quieres ocultar lo nuestro?

Una vez de pensar bien las cosas, Bruno habla -Y qué es lo que deseas?

Millie se sorprende ante la pregunta. Si le decía exactamente lo que quería, estaba segura que Bruno no se lo concedería o más bien estuviese de acuerdo con ella -Si te lo digo, no me lo cumplirás.

Se pone a espaldas de él para evitar contacto visual. Bruno se acerca a Millie y la toma de la mano -Pruébame- reta.

La castaña se gira quedando muy cerca del rostro del brasileño -Quiero que te mudes conmigo. Que seamos felices sin necesidad de ocultarlo. Fue divertido mientras duró, pero ya quiero salir de las sombras- pide.

Guimarães acaricia con su pulgar los suaves labios que Millie posee para después pasear su mano hasta la mejilla de esta. Con eso bastó para que confiara ciegamente en el deportista de talla mundial -Como usted diga- la besa para sellar su promesa.

Millie obtuvo lo que siempre quizo.

Y así fue. Ambos se presentaron como pareja oficial confirmando la ruptura con Lorena Vitória. Al principio, Millie se mostró fuerte durante la reunión, pero una vez que Lorena los "felicitó" sintió terror al conocer a quien fue su amiga alguna vez.

Bruno la abrazó de manera protectora -No dejaré que Rena se interponga entre nosotros- resalta una vez que la rubia se había ido.

-Temo que esto es solo el comienzo- confiesa Millie.

-Dijiste Newcastle, cierto?- relaja con una sonrisa -Muy bien. Pues que se cumpla lo más pronto.

Con eso, a mediados de Enero, el brasileño había llegado a un acuerdo con el equipo de la Premier League, Newcastle United F.C. para estar mas cerca del nuevo amor de su vida. Millie se sentía como si estuviera viviendo en un sueño, con esto solo quedaba la confirmación de que Bruno era el indicado para ella.

Los primeros días la ojiazul estaba todavía procesando el hecho de que por primera vez se sentía victoriosa ya que esta vez logró salirse con la suya después de tanto tiempo cargar la mala suerte como si fuera una maldición.

Logró olvidarse de todas las malas vibras que recibía mientras estaba en Lyon. Bruno jamás la dejó e incluso su confianza en él fue creciendo más.

Hasta que Lorena llegó a Inglaterra.