CHAPTER 02.
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❛un nuevo trabajo❜

LOS TRES SALIMOS DE LA SALA DE CINE, habíamos decido ir a los premier un cine el cual Josh y yo frecuentabamos muy seguido.

Hablábamos de la película, de un momento a otro desapareció Drake quien tal vez había ido detrás de alguna chica, nada sorprendente pero que aún así me había sentir un poco mal, tal vez porque no era esa chica.

Josh se acercó a quien parecía un trabajador del cine, con el cabello un poco largo y un chaleco rojo.

- Lamento interrumpir - hablo mi amigo a lo que el trabajador lo miro - Quería decirle que está es una gran sala de cine, la película era fantástica y el sonido estrepitoso.

Asentí dándole la razón - Además de que las palomitas estaban deliciosas - Hablé - Pero el portavasos del asiento G8 estaba un poco flojo

El hombre hablo - Bueno entonces cuando termine la función traeré mi caja de herramientas y lo arreglaré - Asentí, el hombre parece bastante sereno - Con tanto dolor y sufrimiento en el mundo, ¡Me tengo que preocupar por arreglar portavasos para que las niñas malcriadas como tú no se les caiga su refresco! - Grito el hombre quien ya no parecía tan tranquilo.

- Pero tomamos ponche - Hablo Josh pero el hombre volvió a gritar, ahora parecía que estaba loco.

- Pues duti fruti, ¡Renunció!

El hombre que parecía que tenía problemas de irá se quitó su chaleco rojo y se lo tiro en la cara a Josh.

- ¿Que le pasa? - Pregunté

- No lo se, creo que está loco - Respondió Josh

- Creo que ya lo note.

Un hombre se acercó a mi amigo - Disculpa, ¿Dónde está la sala siete?

- No trabajamos aquí - Respondí

- Pero venimos cada semana - Respondió Josh, quien siempre era más amable que yo - Así que está a la izquierda en la tercera puerta.

Después de que el señor se alejara se acercó una mujer de mediana edad y de tez morena a nosotros.

- ¿Alguno de ustedes trabaja aquí? - Pregunto a mi que ambos negamos - ¿Entonces de dónde sacaron eso?

- Un hombre que parecía estar loco nos lo dio, dijo que renunciaba - hable a lo que Josh me secundo

- Si, le dijimos que había un portavasos flojo y nos llamó malcriados.

- Esperen - Nos interrumpió la mujer - ¿Lograron que el loco Steve renunciará?

- ¿Usted contrato a hombre llamado loco Steve?

- Si, pero es una larga historia - Respondió - Intenté despedirlo pero está loco, ¿Alguno tiene empleo? - Ambos negamos - ¿Quieren uno? - Ambos asentimos. - Bueno están contratados.

- ¡¿Que?¡ - Gritamos ambos un poco confundidos

- Ustedes solo trabajen - Dijo la señora mientras nos daba unos chalecos rojos a ambos para después irse.

¿Por que de repente una señora le daría trabajo de la nada a dos adolescentes de dieciséis años?

Josh y yo nos miramos, ambos nos colocamos los chalecos, parece que ahora tenemos un trabajo.

Después de nuestro primer día de trabajo Josh y yo regresamos a casa, muy probablemente me quedaría otra vez a dormir en la suya pues papá otra vez estaba en casa y no soportaba verlo.

También habíamos recibido nuestro primer pago, no era mucho pero para un par de adolescentes lo era así que un poco antes de llegar a casa terminamos en una tienda de electrónicos en la cual estuvimos un buen rato mirando cosas

- ¿Qué opinas Rosie? - Pregunto Josh acercándose a mi mostrando un ipod - Le caben como treinta mil canciones

Sonreí pues vi a mi mejor amigo emocionado por un iPod - Deberías de comprarlo, ¿Te alcanza?

- Si, con lo que Helen nos dio es perfecto - El sonrió sobresaltado sus tiernas y regordetas mejillas - ¿Tú que comprarás?

- No me decido aún - Respondí mirando la vitrina, moría por la cámara digital que estaba ahí pero tal vez tendría que esperar más por ella. - Un teléfono no, no creo necesitarlo pero tal vez este aparato

Josh río

-¿Y eso que hace?

- Mira, dice que mide tu latitud y longitud - Respondí

- ¿Sabes que es eso Rosie? - Pregunto Josh mirando el empaque del aparato

- No, pero suena interesante

Cuando llegamos a casa fuimos directamente a la habitación que Josh compartía con Drake, en serio espero que esté en otro lado y no ahí.

Bueno ahí estaba, mirando televisión.

A veces me preguntaba cómo era que me podía gustar el, si era guapo y talentoso pero cuando lo conocías bien era un desastre total.

Bueno, igual no tengo tanto problema con el desastre, creo.

Al llegar a la habitación Josh se sentó en el sillón naranja mientras que Drake en el rojo que aunque fuera de dos piezas no pensaba sentarme ahí, así que me senté en el gris frente a Josh

-¿Qué es eso? - Pregunto Drake cuando vio las bolsas con lo que ambos habíamos comprado.

- Hoy nos dieron nuestro primer sueldo así que decidimos comprar cosas como este iPod, mira - Respondió Josh

- ¡Wow!, a eso le caben como treinta mil canciones - Dijo Drake sorprendido - ¿Y esa bolsa Rose?, ¿También compraste algo?

- Oh, si, se supone que es un aparato que mide tu latitud y longitud - Respondí pasándole la bolsa café a Drake con las manos un poco temblorosas esperando que el no notará eso.

- ¿Qué es eso? - Pregunto

- No tengo idea, pero suena bien - Respondí

Drake dejó la bolsa en la mesa junto a la de Josh

- Igual no pienso trabajar para conseguir eso, prefiero ganar dinero a la antigua

- ¿Y como es eso? - Pregunté intrigada

- Vendiendo las cosas de Josh en internet - Josh río

- Se que no harías eso - Dijo Josh mientras tomaba el control para encender la radio - Drake, ¿Dónde esta mi radio?

- En Wisconsin

Drake y yo reímos, ¿Cómo era posible que estuviera enamorada de alguien como el?

No tenía idea.

Josh y yo seguimos trabajando en el cine después de algunos días, ambos habíamos sido asignados por Helen para estar en la taquilla.

En ese momento entro Drake con una chica nueva como cada semana o menos, a veces eso me hacía sentir un poco mal pero intentaba ignorar todo con respecto a eso y Joshie mi amigo era una gran ayuda, siempre estaba ahí dándome aliento, por eso lo quería tanto.

- Hola Rose, danos dos entradas - Hablo Drake, yo solo asentí concentrándome en la computadora para darles sus boletos

- Serían veinte - Respondí a lo que Drake hizo unos ojos de perrito

- Yo quiero palomitas - Hablo la chica yendo hacia otro lado

- Te ofrezco cinco y unas gomitas

Rodé los ojos, por mucho que me gustara no podía permitirme perder mi trabajo - No Drake, deberías de buscar un trabajo

Josh quien estaba al lado mío le tendió el dinero a Drake

- Toma, pero que sea la última vez

Drake le agradeció mientras la chica regresaba

- Drake, quiero unas palomitas grandes por favor - Hablo con una chillona voz la chica

- ¿Se puede? - Pregunto a lo que Josh le dio más dinero y ambos se fueron

"Dreik quiri inis pilimitis grindis pirfivir"

Al día siguiente Helen ya le había dado empleo de Drake pues parecía que lo adoraba y ahora estaba junto con el detrás del mostrador mientras Josh limpiaba los baños

Llegó Helen con un trapeador para hablar con Drake - Oye Drake - Hablo la mujer pero el chico la interrumpió

- Helen, luces fantástica - Interrumpió como una estrategia para evitar hacer ese trabajo y a mi me dio tiempo de salir del mostrador, también evitando el trabajo - ¿Adelgazaste? - Pregunto el chico

- Si, ¿Se nota? - Respondió la mujer alagada

- Claro que sí

Para ese entonces ya me había alejado lo suficiente como para que Helen no me diera el trabajo pero vi como después de eso le daba el trapeador a Josh quien apenas iba llegando.

Sentí un poco de pena por el pero tampoco quería ir a limpiar vómito.

Después de unos pocos días trabajando ahí, Drake había conseguido ser el asistente de Helen y el chaleco dorado.

Eso tenía totalmente molesto a Josh pues creía que su trabajo no era recompensado.

Mientras tanto a mi me daba igual aquel chaleco pues solo quería lo que me pagan, estaba pensando en volver a tomar fotografías lo cual era algo que había dejado hace un tiempo, pero no era tan mala así que podría retomarlo.

Aún así sabía lo importante que era ese chaleco dorado para Josh y lo noté más cuando llegue a casa y lo vi jugando con un dinosaurio fingiendo ser el y una botella de catsup fingiendo ser Helen.

- Josh, eres el mejor empleado que he tenido - Hablo mi amigo imitando con una voz chillona a nuestra jefa - De ahora en adelante serás mi asistente personal y tendrás tu propio chaleco dorado

Yo solo lo miraba, pues parecía que aún no me había notado.

- Vaya y es de mi talla - Hablo ahora fingiendo una voz gruesa

- Pensé que habías dejado de jugar con las cosas - Hable, asuntándolo

- Si, pero es que Helen solo reconoce a Drake

- Bueno, es que es muy lindo - Respondí

- No empieces - Hablo Josh - Si vas a hablar de lo lindo que es Drake mejor me voy.

- No, no es eso - Respondí - Ósea si es lindo pero creo que deberías intentar algo que te resalte con Helen

- ¿Cómo que?

- Recuerdas que las palomitas no se están vendiendo bien - Hable a lo que Josh asintió - Bueno, deberías hacer algo con eso

- Tienes razón Rosie, ¡eres una genia! - Hablo Josh emocionado para después abrazarme

Un abrazo de Josh nunca estaba de más.

Al día siguiente parecía que Josh ya tenía una idea pues había puesto un montón de cajas de palomitas al rededor de el mostrador

En ese momento llegó Drake a donde estábamos ambos e hizo la pregunta que yo también le quiera hacer a mi mejor amigo

- ¿Qué es todo esto?

- Tú solo observa y aprende - Respondió Josh

Posteriormente Josh comenzó a hablarle a quienes estaban en todo el cine

- Oigan todos - Hablo pero la mayoría de la gente no ignoro - ¡Todos levanten la antena! - Grito esta vez llamando la atención de todos.

Josh siguió hablando - Dentro de estos botes de palomitas hay una pelota dorada y quién la consiga tendrá todo un año gratis de cine.

Sonaba como una buena idea hasta que las personas se comenzaron a abalanzar a nosotros peleándose por los botes de palomitas.

- ¿Cuándo aprendo? - Hablo Drake

Fue hasta que llegaron los paramédicos que todo se calmo pero los tres habíamos terminado en el suelo y llenos de palomitas

- De seguro Helen va a despedirme - Hablo Josh decepcionado

- Tranquilo - Toque su hombro intentando darle ánimos - Conseguirás un empleo en otro lado

- Pero no hay nada mejor que trabajar en la industria del cien - Respondió - Helen a a matarme

- Tal vez ni lo noté-- hablo está vez Drake a lo que yo asentí

- ¡Quién sea el encargado de este desastre venga a mi oficina ahora! - Llegó Helen gritando

Josh suspiro rendido para ir con ella

Cuando se fue Drake se acercó a mi

- ¿Crees que debería decirle a Helen que fui yo? - Hablo, buscando un consejo

- Si estás seguro diciéndole hazlo - Respondí - Se que te será fácil conseguir otro pero Josh ama demasiado este, estará triste si lo pierde.

En ese momento el chico sonrió, una sonrisa linda por cierto.

- Gracias Rose, espérame aquí - Dijo para después ir tras Josh

Esperan, ¿dijo que lo esperará?

Mis mejillas no tardaron en tornarse rojizas.

No paso mucho tiempo para Drake saliera

- ¿Qué paso adentro? - Pregunté

- Josh se quedó con el trabajo - Sonreí - Así que vamos a casa

- ¿Vamos?, ¿Ambos? - El asintió

- Si - Respondió como si fuese algo obvio - O ¿Tienes más trabajo?

Negué rápidamente

- Si vamos a casa

- Bien, te llevaré a casa - Habló - Toma un chocolate - Dijo mirando la pila que anteriormente yo había acomodado

- ¿Enserio? - Pregunté un poco consternada y nerviosa pues ambos no salíamos sostener mucha conversación

- Sí - Respondió mientras el tomaba uno y me extendía otro

- Gracias Drake.

El camino a casa fue bastante relajado a diferencia de la vez que fuimos juntos al concierto pues conversamos un poco más.

- ¿Seguirás trabajando en el cine? - Pregunto Drake

- Si, tal vez por un tiempo - Respondí - Estoy ganando un poco bien y podré comprar cosas para tomar fotografías.

- ¿Tomas fotografías? - Pregunto el -No sabía eso

- Sí, pero lo deje -Solté un suspiro - Papá se deshizo de mi cámara.

El asintió entendiendo

Después de eso seguimos caminando a casa mientras hablamos de algunas cosas, no era mucho pero estaba feliz con eso.

Me sentía feliz estando cerca de el.

adivinen quien cambio la narrativa a último momento pq la otra no le gusto ✋😫

espero les haya gustado, creo que voy bien creando un poco más de interacción lmao, espero.

-cottonhobi ✨
Palabras: 1964
[Primera publicación: 26/05/21]

(sin editar)