CAPÍTULO DIEZ
ALGO BUENO

☾

DESPUÉS DE LUCHAR CONTRA LOS cazadores, Melanie decidió volver a casa en lugar de quedarse de nuevo en casa de Scott, echando de menos la comodidad de su propia cama mientras Scott y Kira tenían una cita nocturna de celebración.

Teniendo en cuenta que llegó a su casa a la una de la madrugada, Melanie trepó por la ventana para entrar, no quería molestar a sus padres.

La habitación de Melanie estaba completamente a oscuras, sin ninguna luz encendida. Se inclinó hacia la mesita de noche que tenía junto a la ventana. Cuando encendió la luz, vio de reojo a alguien de pie en medio de la habitación.

Melanie gritó, haciendo aparecer su katana entre las manos. Giró las manos hacia atrás, dispuesta a golpear al intruso hasta que saliera a la luz.

—¡No me golpees! No me golpees—,gritó Liam, sacudiendo rápidamente la cabeza, haciendo que Melanie soltara la katana y tratara de recuperar el aliento.

—¡Qué demonios, Liam! ¡Es la una de la madrugada!—susurró Melanie y Liam sacudió la cabeza, caminando hacia Melanie.

—Lo siento. Lo siento. Es que... Sigo viendo a los Berserkers y necesitaba a alguien cerca. Pensé que no te importaría que entrara y esperara hasta que llegaras—.

Melanie lo miró con tristeza antes de asentir.—Um... Sí.—Melanie se frotó los ojos y torpemente juntó los labios en una línea, mirando alrededor de la habitación.—Bueno, puedes ponerte cómoda o lo que sea. Yo voy a cambiarme, porque dormir con ropa ensangrentada no es lo mío—.

Liam ni siquiera la dejó terminar, murmurando un 'woah' en voz baja, bajó la vista hacia su camisa y se dio cuenta inmediatamente de la sangre y el agujero que tenía. Corrió hacia ella, mirándola a los ojos y a la sangre.—¿Estás bien?—

Melanie se rió, asintiendo con la cabeza.—Oh, estoy bien. Sólo me han disparado—.

Liam se quedó boquiabierto, mirándola a los ojos.—¿Te dispararon?—Melanie soltó un pequeño zumbido, levantando el borde de su camisa para mostrar el lugar donde una vez recibió el disparo, ahora perfectamente curado.

—Estoy bien. ¿Lo ves?—,Liam respiró hondo antes de asentir lentamente con la cabeza.

Melanie tomó su pijama, salió de su habitación y se cambió rápidamente en el baño. Cuando volvió a entrar, vio a Liam tirado en el suelo con su propia cobija y almohada en el suelo. Melanie lo miró como si estuviera loco, negando con la cabeza.—¿Qué estás haciendo?—

Liam la miró lentamente.—Eh, acostándome...—.Melanie levantó las cejas, cruzándose de brazos.

—¿Y estás cómodo?—Liam resopló ante su pregunta.

—La verdad es que no—.

Melanie asintió, dándole una patada en los pies cuando pasó junto a él para llegar a su cama.—Eso es lo que yo pensaba. Levántate—.Liam frunció el ceño y se giró hacia Melanie.

—¿Qué?—Melanie frunció las cejas, señalándole la almohada y la cobija.

—No voy a dejar que duermas en el suelo de madera. Ven aquí. Hay espacio—.

Liam se levantó lentamente del suelo, dando pasos lentos hacia la cama de Melanie, como si fuera peligroso. Melanie pone los ojos en blanco.—No voy a morderte. Además, ¿no eres tú el hombre lobo de los dos?—.Liam le lanzó una mirada de 'en serio' ante la que Melanie se limitó a encogerse de hombros. Cuando se subió a la cama, Melanie se giró hacia él.—Tú no sueltas pelo, ¿verdad?—.preguntó Melanie bromeando, pero Liam arrugó la cara.

—¿Qué?—Melanie suspiró, poniendo los ojos en blanco.

—Era una broma de lobos. Olvídalo—.

Se dio la vuelta, quedando de espaldas a Liam, mientras éste se giraba para quedar de espaldas a ella. Melanie cerró los ojos con la esperanza de quedarse dormida, pero en lugar de eso, permaneció despierta por los murmullos de Liam.

—No es real. No es real. No es real—.

Melanie frunció el ceño y miró alrededor de su habitación antes de que sus ojos se posaran en la maceta que tenía sobre la mesita de noche. Inmediatamente sonrió, le vino una idea a la cabeza, se acercó a la planta, apoyó la mano justo encima y cerró los ojos.

Imaginó que la planta crecía y se hacía lo bastante larga como para rodear la cabecera de su cama y abrirse paso hasta el lado de Liam.

Liam abrió los ojos e inmediatamente se le abrieron de par en par mirando la planta antes de darse la vuelta para mirar a Melanie.—¿Qué es eso?—Melanie se dio la vuelta, apoyando la cabeza en la almohada mientras sonreía a Liam.

—Es eucalipto. Elimina la energía negativa. Así que ya no verás a los Berserkers—.

Liam sonrió a Melanie, dejando escapar una risa entrecortada.—Eres increíble, Mel—.

Melanie soltó una risita ante sus palabras, subiendo más la manta mientras ponía los ojos en blanco.—Algo bueno, espero—.Liam sonrió, asintiendo con la cabeza.

—Sí, definitivamente algo bueno—.

Melanie sonrió ante sus palabras, cerrando los ojos para irse a dormir, pero no sin sentir un pequeño revoloteo en el estómago ante las palabras de Liam.

•••

—Bueno, esto es oro—.Belle soltó una risita, de pie junto a Melanie y Liam en la cama de Melanie, haciendo una foto de los dos que habían acabado abrazados el uno contra el otro. Los brazos de Liam rodeaban la cintura de Melanie, el pecho de él se apretaba contra la espalda de ella y sus piernas se enredaban.

Liam fue el primero de los dos en despertarse, se dio cuenta al instante de la posición en la que estaban él y Melanie y se quedó así. Belle sonrió con satisfacción, aclarándose la garganta. Liam levantó la vista, sus ojos se abrieron de par en par al ver a Belle, haciendo que soltara a Melanie, alejándose de ella de un salto y volviendo a su lado de la cama. Belle volvió a aclararse la garganta, lo que hizo que Liam la mirara y pusiera los ojos en blanco al verla sonreír.—Ni una palabra—.

Belle lo miró con los ojos entrecerrados, sin tener tiempo de decir nada cuando Melanie empezó a despertarse. Melanie se frotó los ojos, mirando a Belle e inmediatamente gimiendo.—Belle, mi madre ya te ha dicho que no te pares en mi cama—.

Belle suspiró, sentándose frente a Melanie y Liam, este último actuando como si acabara de despertarse. Belle puso los ojos en blanco y miró a Liam de un lado a otro.—Hoy tenemos entrenamiento temprano. Tenemos que irnos—.

Liam gimió, bajándose de la cama de Melanie.—Bueno, probablemente debería irme a casa. Necesito algo de ropa, pero las veré en la escuela—.Melanie soltó un pequeño tarareo, asintiendo con la cabeza, haciendo sonreír a Liam. Se giró hacia Belle, que tenía una sonrisa burlona en la cara. Liam la fulminó con la mirada y se dirigió hacia la puerta de Melanie.

—¿Liam?—exclamó Melanie, haciendo que Liam se paralizara y se diera la vuelta para mirarla. Melanie apretó los labios y señaló la ventana.—Probablemente deberías usar la ventana—.

Liam asintió rápidamente con la cabeza y volvió a despedirse de las chicas antes de salir por la ventana.

•••

—Está bien, Belle. Sólo le decimos al entrenador que Kira podría llegar un poco tarde. De todas formas, está en la banca, así que no importará mucho—.Melanie le dijo a Belle mientras entraban lentamente en el vestidor de los chicos para ir a la oficina del entrenador.

Kira no había llegado a casa esa noche, pero Melanie no le dio mucha importancia teniendo en cuenta que ocurría a menudo cuando Kira y Scott tenían citas nocturnas, Kira se quedaba a dormir en casa de Scott en lugar de ir a casa.

—¿Quién no debe llegar tarde?—Se oyó la voz de Finstocks cuando las chicas doblaron por uno de los pasillos de los casilleros, topándose con las espaldas de Stiles y Liam.

—Scott—.dijo Liam haciendo que Belle se encogiera mientras Melanie se aclaraba la garganta.

—Y Kira—.

Los chicos se giraron al oír la voz de Melanie. Suspirando porque Kira también llegaría tarde, Stiles se pasó una mano por la cara, girándose de nuevo hacia el entrenador.—Puede que lleguen un poco tarde—.

—Un poco tarde sigue siendo tarde. ¿Qué están haciendo?—Preguntó el entrenador, girándose primero hacia Melanie, que levantó las manos en señal de rendición mientras Stiles se aclaraba la garganta.

—Están haciendo algo que hará que lleguen un poco tarde—.

—Scott y Kira, ¿qué podrían estar haciendo ahora mismo que sea más importante que jugar este partido?—.volvió a preguntar el entrenador y Melanie ahogó una carcajada, apretando la cabeza contra la parte posterior del hombro de Stiles para que el entrenador no la oyera. Liam contuvo una sonrisa, al oír levemente la risa de Melanie. Belle suspiró, frunciendo el ceño mientras negaba con la cabeza.

—Ay, entrenador—.

•••

—Aún no llegan—.murmuró Liam entre Stiles y Melanie. Stiles suspiró y puso los ojos en blanco mientras se giraba hacia Liam.

—Dime, ¿qué está pasando? ¿Estás nervioso por la luna llena?—

Liam apretó los labios en una línea, mirando hacia la luna. Belle, desde el otro lado de Stiles, negó lentamente con la cabeza.—Faltan 24 horas—.

—Liam, vas a estar bien. ¿De acuerdo? Sólo intenta no perder el control con nadie—.dijo Melanie y Liam asintió, mirándola con ojos preocupados.

—¿No estás preocupada?—

Melanie le dedicó una pequeña sonrisa, negando con la cabeza.—No.—Liam suspiró, girándose hacia Belle.

—Belle, ¿estás...?

—Paso—.murmuró Belle. Liam puso los ojos en blanco y se giró hacia Stiles, que suspiró.

—Sí, tal vez. Solo un poco preocupado. Un poco—.

—Vamos a perder sin él—.Liam murmuró y Melanie asintió con la cabeza. Stiles se giró hacia los dos adolescentes, negando con la cabeza.

—No, claro que no. Podemos ser igual de buenos sin Scott. He estado practicando. Déjenme decirles algo. Soy bueno. Muy bueno—.

Belle resopló ante eso, ajustándose las almohadillas de portero.—¿Quieres apostar por eso, Stilinski?—Stiles apretó la mandíbula, girándose hacia Belle y entrecerrando los ojos.

—De acuerdo, Parker. —

•••

No habían pasado ni cinco minutos de partido y Stiles se las había arreglado para meter la pata de todas las maneras posibles. Melanie suspiró cuando un grupo de chicos de Devenford embistió a Stiles, tirándolo al suelo.

Melanie corrió hacia Stiles, extendiendo el brazo para ayudarlo a levantarse mientras Liam corría hacia ellos.—Voy a llamar a Scott de nuevo—.

Belle soltó un fuerte silbido desde la portería y Stiles suspiró.—Y te daré diez dólares cuando acabe el partido—.Murmuró Stiles, sabiendo que Belle podía oírlo. Ella sonrió, lanzando un pulgar hacia arriba en el aire mientras el árbitro hacía sonar su silbato, haciendo que el juego se detuviera.

Stiles corrió hacia su mochila del gimnasio, llamando a Scott mientras Melanie llamaba a Kira. Después de llamar cuatro veces y no obtener respuesta, Melanie se giró hacia Stiles, sacudiendo la cabeza mientras Stiles hacía lo mismo. Los dos suspiraron y caminaron hacia las gradas, junto a Belle y Liam.—Oye, ninguno de los dos contesta—.murmuró Stiles antes de sacudir la cabeza.—Debí ir a ver qué pasa—.

Stiles se levantó y Melanie se quedó helada al instante.—¿Te vas? Qué le vamos a decir al entrenador?—.

Stiles dejó escapar una risita seca, palmeando el hombro de Melanie mientras negaba con la cabeza.—Eh, no le digas nada. ¿Sí?—

Stiles se giró hacia Belle y Liam, notando la mirada de preocupación de los chicos. Stiles suspiró.—Liam, vas a estar bien, tranquilo. Si estás preocupado, Mel y Belle están aquí—.Liam apretó la mandíbula, mirando a Stiles y asintió, haciendo que Stiles asintiera, dándoles a los tres una última mirada antes de irse con su padre.

Melanie suspiró, poniéndose el casco mientras se giraba hacia Belle.—Al menos tenemos que intentar ganar—.Belle ladeó la cabeza, aspirando una bocanada de aire.

—¿Intentar?—Belle cerró el puño para que Melanie se lo chocara. Melanie se rió y chocó el puño con el de Belle.

—A intentarlo—.

•••

Beacon Hills no ganó el partido contra la preparatoria Devenford.

Melanie y Belle estaban en los vestidores; Belle tumbada de espaldas en uno de los bancos mientras Melanie se volvía a poner su ropa normal cuando sonó el teléfono de Belle.

Belle gimió, poniéndose el guante de lacrosse sobre los ojos mientras le lanzaba el teléfono sin pensar a Melanie, que chilló, sin esperar que le lanzara el teléfono, pero lo atrapó de todos modos.

Melanie se tensó cuando el nombre de Stiles apareció en el teléfono, contestó rápidamente.—¿Todo bien?—

Belle levantó las cejas mirando a Melanie, quitándose el guante de la cara mientras escuchaba la llamada.—Scott y Kira están en México—.Dijo rápidamente Stiles, haciendo que Belle se quedara boquiabierta.

—Joder, ¿otra vez nos dejaron por México?—.

Stiles puso los ojos en blanco, oyendo débilmente la voz de Belle.—Secuestrados Belle. Los secuestraron—.Belle hizo un gesto de dolor al oír las palabras mientras Melanie se quedaba paralizada.—Iremos por ustedes y luego los dejaré en casa de Mel para que consigan algo con el aroma de Kira y luego nos reuniremos de nuevo en casa de Scott. ¿De acuerdo?—

—De acuerdo.—Melanie asintió y Stiles colgó rápidamente. Melanie se giró hacia Belle, que empezaba a incorporarse.—¿Lista para irnos?—preguntó Melanie y Belle asintió de inmediato.

Pero ninguna de las dos se dio cuenta de que cierto beta con problemas de ira las estaba escuchando desde fuera de los casilleros y que las seguiría.