06
PASTELITOS ESPECIALES
SI NO FUERA PORQUE IZZIE NO ESTABA LESIONADA, SE HUBIERA MUERTO DESANGRADA CON EL TIEMPO QUE TARDÓ LA AMBULANCIA EN LLEGAR. Por suerte cuando llegó la subieron y la llevaron al hospital mientras yo iba en la camioneta. Pensaba en como era que el podía ser capaz de frenar una camioneta con su mano, no era posible.
- Eres un idiota hijo de Thanos, maldito burro asqueroso, casi atropellas a mi hermana, salame andante, cara de huevo alienígena - Insulte a Tyler mientras entraba a la sala donde estaba mi hermana con una enfermera a su lado
- Lo siento, no tuve el control - Se disculpó desesperado
- El control de tus huevos vas a perder cuando los cuelgue en la repisa de mi habitación, imbécil - Seguí caminando hasta estar a un lado de Izzie
- Esta bien, no me sucedió nada - Intentó tranquilizarme
- Es obvio que no te sucedió nada, si ese raro con cabello electrocutado paró la camioneta con su mano como si tuviese el traje de Tony - Bufe tomando una silla y colocandome a su lado
- No entiendo cuando hablas así - Murmuró viéndome confusa
Antes de que pudiese contestar, la puerta de la sala se abrió con fuerza, mostrando a papá con un rostro pintado en preocupación que se transformó en alivio al ver a Izzie en buen estado.
- estoy bien, papá, calmate - Lo tranquilizó
- Bella, lo siento en serio, trate de parar - Siguió Tyler viéndola arrepentido pero Izzie negó despreocupada
- No, créeme que no está bien - Le dió una mirada al chico que yo seguía mirando de mala manera
- No fue su culpa - Siguió, pero parecía lo menos afectada que podría estar al casi morir, si yo estuviese en su lugar estaría dramatizando
- Pudo haberte matado ¿Lo entiendes? - Siguió mi papá
- Si, pero no fue así - Lo miró más sería
- Quitale la licencia, eres el sheriff - Lo señale de mala manera, el me vió dudoso para girarse a Tyler
- Despidete de tú licencia - Le sonreí burlona pero el sólo me miró de mala manera
Las puertas de la sala fueron abiertas nuevamente por alguien más, levanté la cabeza levemente para ver al intruso.
- Oí que la hija del jefe esta aquí
¿Saben que se oyó luego?
Mi trasero golpeando el suelo.
Al ver a ese apuesto doctor literalmente por estar mal sentada me caí de la silla, llamando la atención de casi todos en la sala. Que vergüenza.
- Leo - Mi papá se acercó a ayudarme, me levanté limpiando mi pantalón mientras sonreía como si nada hubiese pasado
- Lo siento, creo que la gravedad se presionó contra mi cuerpo - Reí nerviosa
Podía jurar que era como Jasper pero años mayor, tenía piel igual de pálida que todos los Cullen, mismos ojos dorados que combinaban con su corto cabello. La camisa del uniforme de trabajo le quedaba genial, más esa bata que lo hacía lucir muy sexy.
- ¿Estas bien? - Levanté la mirada para ver esos perfectos orbes, podría jurar que Clint disfrazado de Cupido acaba de lanzarme una flecha en la frente. Su voz era tan pacífica
- Si, lo siento - Me disculpe sentándose nuevamente, el le pidió los papeles a la enfermera regalandome una perfecta sonrisa
- Isabella - Veía los papeles mirándome de reojo lo que me hacía mis piernas flaquear
- Bella - Corrigió viéndome burlona, pero yo sólo le saque la lengua para seguir viendo al doctor
- Bueno, Bella, esa caída fue fuerte, ¿Cómo te sientes? - No podía evitar darle una pequeña sonrisa coqueta
Angela tenía razón, todos los Cullen eran perfectamente apuestos, y no mentía cuando dije que de que me quedaba con los Cullen, me quedaba.
- Bien - Respondió simplemente
- Mira aquí - Pusó una linterna mientras movía su dedo - Podrías experimentar estres postraumático o desorientación, tus signos vitales estan bien - bajó la linterna - Y no hay lesión en la cabeza, creo que vas a estar bien
Tyler intento volver a disculparse con Izzie pero papá cerró la cortina como si eso hiciese algún cambio.
- Si a mi me duele la cabeza ¿Me atenderla usted, doctor Cullen? - Sonreí aún más coqueta, Charlie me vió de mala manera para golpear mi nuca - Auch
- Si, la atendería yo - Rió un poco, por Dios, este hombre debía ser el Derek Shepard o Mark sloan de Forks
- A ella no le duele nada - Se apresuró a decir mi papá - ¿No tienes hambre? ¿Por qué no vas a la cafetería - Me preguntó viéndome serio
- No, estoy bien - Asenti sentándome a un lado de Izzie para estar más cerca del doctor que escribía en unos papeles
- Pudo ser peor si Edward no estuviera ahí, el me salvó - Comentó Izzie después de unos segundos a lo que yo sólo me golpee la frente mentalmente ¿Quién rayos cuenta eso esperando a que le crean?
- ¿Edward, tú muchacho? - Le preguntó al doctor que miró de reojo, se notaba incómodo
- Si fue muy increíble, como llegó tan rápido, no estaba cerca de mi - Contó para luego verme - Tú lo viste
Gracias Izzie, hundeme contigo al lodo, no pasa nada. Ambos hombres me vieron, uno con desconfianza y el otro algo incómodo. El doctor Cullen era el segundo pero yo sólo le di una pequeña sonrisa.
- ¿Volviste a hacerlo? - Me preguntó papá de mala manera
- A mi no me veas - Me giré a Charlie - Esta vez no le di de mis pastelitos especiales
- ¿Qué? No, tú lo viste, no estoy drogada - Nos miró de mala manera
- Como que ahora si quiero ir a la cafetería, papá - Me levanté - ¿Viene doctor Cullen? Creo que me duele la cabeza - Dramatize haciendo que mi papá me vea mal
- Claro, debo ver a otros pacientes
Salimos caminando bajo ambas miradas desconcertadas, pero yo sólo me centre en ver el piso mientras evitaba mirar al apuesto doctor. Él abrió la puerta dejándome pasar primero así que le di una pequeña sonrisa agradecida.
- Podría decirme dónde queda la cafetería - Pregunté viendo por los pasillos
- Puedo acompañarte, me queda de paso - Sugirió a lo que asentí empezando a caminar detrás de el - Así que Leona Swan
- Así es, un nombre raro, lo sé - Reí un poco
- Bueno, Carlisle no es un nombre común - Siguió mi risa - Mis hijos me han hablado de ti
- Espero que cosas buenas, son chicos muy amables, además de divertidos - Admiti esquivando a las enfermeras - Lamento lo de Izzie, no debió decir lo de Edward
El me miró de reojo algo nervioso se podía notar pero lo disfrazaba con una pequeña sonrisa mientras doblabamos en una esquina.
- Izzie no es ciega, tampoco estaba drogada porque yo también lo vi, doctor Cullen - Llegamos a la cafetería mientras el me veía fijamente - Pero dígale a Edward que si quiere frenar una camioneta con su mano, que no lo haga delante de toda una escuela, alguien más pudo verlo y las cosas serían muy distintas - Me aleje entrando a la cafetería
Sentía su mirada en mi nuca, pero no me molestaba. Tampoco el hecho de que él raro con pelo duro haya frenado ese vehículo, soy una chica adicta a los cómics de ciencia ficción, de fantasía también, soy una persona de mente abierta. Sólo me daba un poco de miedo porque nunca llegue a pensar que fuera real, pero si lo es, debo admitir que es muy cool.
Debía admitir que la coca cola se estaba haciendo una adicción para mi, era una bebida tan poco saludable pero tan deliciosa. Marina y Allison empezaron con esa misma adicción también, así que las tres compramos unas latas de la bebida mientras caminábamos por la nublado ciudad de Forks.
- Entonces... El paró la camioneta con su mano - Murmuró confusa Marina
- Te dije que no estaba loca - Allison dijo que también lo había visto - Yo lo vi, pero tú te empeñabas en decir que estaba drogada - Bufó tomando un trago
- Mi papá también creyó que Isabella se drogó, pensó que otra vez le había dado de mis pasteles especiales - Seguimos caminando mientras esquivabamos a las pocas personas
- ¿Drogaste a tú hermana? - Se burló Alli
- Oh, claro que si, recuerdo ese día
Nos giramos al escuchar ese comentario. Al darme la vuelta estaba Jared con una sonrisa divertida lo que me hizo chillar de emoción mientras corría a abrazarlo, salté sobre él envolviendo los piernas en su cintura, el me cargó por las piernas mientras daba vueltas. Detrás de el había dos chicos más que no preste atención ya que estaban a dos metros más o menos.
¿Por qué Jared sabía de eso? Fácil, porque cuando teníamos dieciséis fuimos a una fiesta de la Push, ambos la habíamos pasado genial, habíamos hecho amigos además de obtener varios contactos, entre esos, a un chico que tenía planta de marihuana, nosotros nunca habíamos probado, pero la curiosidad nos picó a ambos así que le pedimos un poco para hacer esos pasteles con los que podías ver hasta las constelaciones.
Cuestión que cuando terminamos de hacerlos, Izzie había ido a buscarme a Forks con mamá, ella tenía quince, tomó un pastel pensando que era un simple postre con chips de chocolate. Treinta minutos después, Jared y yo entramos a la casa, viendo a Izzie que estaba bailando sobre la mesa sin música y mis padres viéndola de mala manera. Ambos tuvimos casi nos morimos de un ataque al corazón cuando vimos que no había quedado ni un solo pastel de al menos veinte que habíamos hecho.
- ¡Hicieron pasteles de droga y se lo dieron a Bella! - Gritó mi madre
- En realidad eran para nosotros pero ella los comió, ¡No tenía porque comerse lo que es mio! - Defendí
- En realidad, señora Higginbotham, el efecto se le va a pasar en unas horas - Intentó tranquilizar mi mejor amigo
- ¿Horas? ¡Tiene quince, no puede estar drogada por horas, Jared! - Se cruzó de brazos viéndolos de mala manera
- Y nosotros tenemos dieciséis, no es mucha diferencia - Murmuré aguandantome la risa al ver a mi hermana intentar atrapar algo en el aire
- ¡Pero de ustedes me lo esperaba! - Nos dimos una mirada indignada pero luego nos encogimos de hombros sabiendo que tenía razón
Fue un gran día, luego de eso, Izzie se había comido una gran cantidad de milanesas al tener hambre, también había dormido más de lo que nunca durmió. Pero a Jared y a mi no nos dejaron vernos por una semana como castigo.
- ¿Cómo has estado, pequeña morocha? - Preguntó sin bajarme - No nos hemos visto desde que me avisaste que viniste al pueblo, eso fue hace una semana y media, Leo, una semana en la que no te dignaste a verme
- Lo sé, lo siento, es que estuve ocupada - Me baje de un salto para girarme a las chicas que veían la escena divertidas - Jared, ellas son Allison y Marina, chicas, él es Jared Cameron, mi mejor amigo
Antes de que pudiesen decir algo, el morocho cayó de rodillas lo que nos asustó, pero el sólo veía fijamente a Marina, me preocupé e hize el amague de agacharme a su lado, pero antes de poder hacerlo, los otros dos muchachos que venían con Jared se acercaron con sonrisas burlonas.
- Discúlpenlo - Contestó el más intimidante ayudándole a reincorporarse
- ¿Esta bien? - Preguntó Marina tomándome del brazo
- Si, sólo está cansado - Respondió el otro también ayudándolo
- Sabía que Leo era rara, pero no que su mejor amigo también lo era - Se burló la otra pelirroja provocando que la mire de mala manera, se ve que el otro chico iba a hacer un comentario pero quedó viendo fijamente a Allison
- ¿Paul? - Preguntó el otro chico, pero el recién nombrado repitió la acción de mi mejor amigo, cayendo de rodillas viendo a McGarrett
Entre las tres compartimos miradas confusas pero él chico que aún seguía de pie bufó entre divertido y cansado levantando a ambos chicos. Nos miró con una sonrisa de disculpa.
- Los vemos luego - Murmuró Allison tomando nuestros brazo a para alejarnos de allí
Yo sólo mire a mi mejor amigo saludandolo con la mano y una mueca confusa. Luego hablaría con él. Caminamos apresuradas hasta doblar la esquina donde volvimos a mirarnos confusas para simplemente luego reír. Qué raros.
Bạn đang đọc truyện trên: AzTruyen.Top