───CHAPTER NINE,  problema en la lista

        Los brazos de Powder se enredaron en su cuerpo, su brazo paso por los hombros de la menor antes de darle unas palmadas deteniéndose en la puerta de la ultima gota, pensando en solo irse y hablar con Silco sobre la situación.

───Deberías venir, casi te atrapan también───Hablo la pelirosa caminando a ella, miro a Powder haciendo una seña para que entrara y ella no se fue.

───Ve Pow, quiero hablar con Vi a solas───Le sonrió indicándole la puerta, Powder asintió finalmente tratando de darles una sonrisa, forzada antes de irse.

───No creo que sea buena idea, Vi.

───Estarás con nosotros, ademas, Vander de seguro querrá hablar contigo sobre esto───Vi tomo su hombro dando un apretón sonriendole───Ademas, no es para nada seguro que vayas sola a tu hogar. Estarás a salvo, estaremos todos bien.

Annika sonrió llevando su mano a la de Vi, terminando por asentir y entrar junto a la pelirosa al bar, las miradas de todos se plantaron en ustedes, viendo a Vander estar en medio de todos junto a Benzo, caminaron a los demás, abrazando a Powder de inmediato mirando a todos.

Era una disputa, por lo que paso en todo el distrito bajo y los accidentes ocasionados junto a las muertes. Annika pensó en irse cuando la mirada recelosa de tres tipos se poso en ella, aunque el agarre de Powder se hizo aun mas fuerte, inmovilizándola para que no se fuera y la dejara.

───Solo proteges a los niños───Intervino uno señalándolos con su cabeza, Annika sostuvo la mirada de Vander.

───Protejo a nuestra gente───Corrigió caminando a paso lento───Haría lo mismo con cualquiera de ustedes. Nos cuidamos el uno al otro, siempre ha sido así. Esto pasara, solo tenemos que estar juntos.

───No creo que suceda───Le murmuro a Vi quien asintió de vuelta.

───El Vander que conocí, el que construyo el subterráneo, no tendría miedo de pelear───La morena hablo mirando a Vander, Annika miro a un lado donde la sombra estaba recostada esperando.

───¿Parezco asustado?───Pregunto al llegar frente a ella.

───No. Pareces débil───Termino dando vuelta y llamando a los suyos, retirándose del bar.

───¿Porque no hace nada?.

───Nos encargamos de los vigilantes los cinco solos───Empezó haciendo movimientos con sus manos───Imagina todo lo que harían todos los carriles.

───Cielos, hasta Powder quiere pelear.

───¿La culpas de querer?───Pregunto cruzada de brazos.

───¿Porque no lo hacemos?.

───Yo no tengo problemas en hacerlo───Repuso caminando y viendo a las hermanas quedarse y mirar a Ekko, se acerco a ellas para lograr escuchar.

───Dilo, Ekko.

───De acuerdo. Vander tiene un trato con los vigilantes...

───¿Que trato?───Pregunto de inmediato mientras Annika retrocedía dos pasos mirando al hombre.

───Debo irme chicos───Termino bajando las escaleras con apuro dirigiéndose a la puerta trasera e ir con Silco.

Silco la miro con una ceja elevada, esperando a que siguiera hablando, Annika rodó los ojos abrazando sus piernas.

───No me quede por mas tiempo.

───Claro───Silco se acerco a ella, tomando su rostro y revisando las pequeñas heridas que tenia encima───¿No te hiciste mayor daño cierto?───Cuestiono mirando a un lado a uno de sus secuaces, quien busco unas cosas para sanar sus heridas.

───Nada grave, solo me duele el tobillo.

Silco asintió recibiendo las cosas y sanando las heridas de su rostro, miro por la ventana, toda la noche fuera de casa y la mañana ya estaba, no vería a sus sombras por unas horas, debido a que tuvieron que volver a su origen por temas desconocidos para ella, solo una se quedo y esa fue la mas pequeña.

───Según me informaron, Vander te va a proteger porque estabas con sus hijos───Menciono volviendo a verla a los ojos───Y van a buscarte por atacarlos.

───No pensé que todo pasaría───Admitió sonriendo nerviosa───No quise.

───Lo se, tienes mi protección y la de mis hombres, ahora tienes la de Vander y varios de los carriles.

───¿Eso es bueno?.

───Es muy bueno───Tardo en responder, Silco guardo las cosas sin mirarla se levanto dejándolas a un lado───Ademas, invite a uno de los vigilantes, es tiempo de nuevas cosas.

Annika asintió levantándose con cierto esfuerzo, Silco volvió a verla, constantemente a su tobillo.

───Puedo llamar a alguien para que revise tu tobillo.

───Estoy bien, solo necesito descansar.

───Bien, ve a descansar.

La castaña solo asintió caminando tratando de no poner fuerza a su tobillo dirigiéndose a su habitación, asustándose cuando al cerrarla la sombra estaba al frente de su rostro colgando con una cuerda de su propia materia del techo.

───¿Que te pasa?───Pregunto suspirando varias veces moviéndose hasta la cama.

| Estaba preocupada |

───¿Se puede saber el porque?.

| No, no puedes |

Bufo viendo a la sombra llegar hasta ella, viendo su tobillo y a ella.

| Puedo curarte |

───¿Puedes curarme?───Repitió viéndolo asentir, sonrió───Hazlo entonces pequeña.

La bruma se envolvió en su tobillo, una descarga recorrió toda su pierna mientras la niebla se hacia con toques azulados y verdosos hasta terminar, toco su tobillo y lo movió seguidamente, sonriendo al final y mirando a la sombra.

───No me duele───Tomo a la sombra entre sus brazos dando pequeños brincos en su lugar───Me curaste a la perfección───Celebro tumbándose en la cama, la sombra se acomodo en su pecho viéndola con sus ojos verdes a ella.

| Estoy feliz de eso |

───Gracias───Miro a la sombra quien sonrió mostrando sus colmillos───Descansa un rato, lo mereces.

La sombra cerro sus ojos, durmiendo mientras unos movimientos aparecían por la oscuridad, Annika miraba el techo pensando muy bien.

───Todos pagaran, yo me asegurare de eso───Se acomodo mejor en su lugar, tomando a la sombra y abrazándola sin cerrar los ojos.