Hayley había huido de Sabine en repetidas veces que está la fue a ver a la mansión hasta que llegó un punto dónde ya no pudo hacerlo.

─ ¿Por qué escapas de mí? ─ le había preguntado la bruja cuando pudo verla después de unos días que Hayley la evitará.

A Hayley le hubiera gustado responderle con la verdad pero no lo haría, sabía que eso sería ventajoso para Sabine y no quería eso.

─ No me agradan las brujas ─ murmuró Hayley.

Sus palabras no eran del todo mentiras, no le gustaba para nada las brujas del aquelarre de Nueva Orleans. Sobre todo las que la secuestraron y la tuvieron raptada por unos días.

Sabine intentó sonreír pero le salió una mueca al escucharla.

─ No debes tener miedo de mí, no te haré nada, soy amiga de Sophie ─ dijo Sabine.

Hayley evitó poner sus ojos en blanco al escucharla ya que sus palabras no la fortalecían.

─ ¿Para qué me buscas tanto? ─ preguntó Hayley intentando deshacerse rápido de Sabine.

A Hayley no le gustaba tenerla cerca de ella sabiendo quién era en realidad la supuesta Sabine.

─ Vine para que supieras el sexo del bebé, puedo decírtelo ─ comentó Sabine.

Hayley se tensó un poco al escucharla ya que no le convenía para nada que Sabine viera eso al saber que tendría una visión que le causaría muchos problemas a ella y a Hope.

─ Se supone que no puedes hacer magia, Marcel lo sabrá ─ dijo Hayley.

La bruja sonrió.

─ Conozco un truco de mi abuela, no hace falta hacer magia ─ aseguró Sabine caminando hacia ella.

Hayley se movió incómoda, y más al estar sola en la mansión con Sabine.

─ No es necesario, prefiero que sea sorpresa, me gustaría eso ─ murmuró la loba.

Sabine levantó sus cejas al escucharla decir eso.

─ ¿De verdad?, ¿No te da curiosidad? ─ preguntó la bruja.

Hayley negó con su cabeza.

─ No, quiero que sea sorpresa, si tú ves el sexo de mi bebé ya no lo será ─ dijo Hayley.

Sabine suspiró asistiendo al ver que Hayley se negaba a que ella viera el sexo del bebé.

─ Está bien, si eso quieres ─ aceptó Sabine alejándose.

Hayley festejó mentalmente al ver que Sabine no insistió más en el tema.

[...]

Los días habían pasado rápidos, se hacían demasiado largos para Hayley en la mansión donde pasaba el día mayormente sola ya que Klaus estaba con Marcel intentando sacarle información mientras que Rebekah seguía buscando a Elijah.

Lo único que distrajo a Hayley en la mansión esos días fueron unos libros que había sacado del baúl de la habitación de Elijah pero cuando terminó de leer los libros todo volvió a ser igual de aburrido que antes.

Por esa razón Hayley había escapado de la mansión al ya no aguantar más tiempo metida ahí.

Le importaba muy poco si Klaus se enojaba con ella por hacer eso sin su permiso pero ya no podía estar encerrada más tiempo.

Hayley tuvo mucho cuidado cuando salió de la casa, sabía que era peligro y debía cuidarse mucho ya que los licántropos no eran permitidos en el barrio francés gracias a una regla impuesta por Marcel.

No estuvo por los lugares que hubiera querido por causa de los vampiros que andaban por el barrio pero logró ver algunas cosas.

Estuvo máximo una hora solamente afuera disfrutando un poco el aire puro y de ver a más personas que no fueran Klaus y Rebekah.

Cuando volvió a la casa de nuevo fue el problema, Klaus estaba demasiado furioso esperándola.

Al volver de una de sus tantas charlas con Marcel, Klaus se había dado con la mansión vacía sin Hayley, eso le había preocupado y molestando al saber que ella se había ido gracias a una nota que dejó en la mesa de la sala. Rápidamente había llamado a Rebekah para que la buscará por el barrio mientras que él la esperaba en la mansión por si volvía de nuevo.

─ ¿Cómo se te ocurre irte sin avisar, tienes acaso una idea de lo que pudo pasar si algún vampiro de Marcel te llevaba con él? ─ gruñó Klaus molesto apenas Hayley entró al lugar.

Rebekah no estaba ahí para mala suerte de Hayley ya que era la única que sabía que podía darle una ayuda en todo eso.

Ver a Klaus tan molesto la asustó al saber que eso no era bueno, no era una buena combinación ver a Klaus enojado.

─ No me pasó nada, ningún vampiro me vio, Klaus ─ le dijo segura Hayley.

Klaus se le acercó a dónde ella estaba parada, su cara demostraba mucha molestia con Hayley.

─ ¿Ninguno te vio?, bien entonces dime, ¿cómo carajos Marcel supo que una licántropo embarazada andaba por el barrio francés? ─ preguntó Klaus.

Klaus había estado con Marcel cuando recibió la llamada de uno de sus vampiros diciéndole sobre una loba, al principio Klaus no pensó que sería Hayley al creer que ella no sería tan tonta para salir sola de la casa pero cuando fue a la mansión a comprobar que ella estuviera ahí no la encontró, solo la nota que dejó.

Eso realmente lo había molestado demasiado.

Hayley al escucharlo se sorprendió bastante porque pensó que nadie la había visto, soltó un suspiro de frustración al ver que no podía hacer nada sin que alguien la quisiera matar.

─ Estaba harta de estar encerrada aquí, tú te la pasas casi todo el maldito día con Marcel, y Rebekah buscando a Elijah al cuál por cierto tú se lo entregaste a Marcel, estoy harta de todo esto Klaus ─ dijo molesta Hayley.

Hayley realmente odiaba todo eso, pasó de tener una vida humana tranquila a vivir una vida que no era de ella.

─ ¡Ahora resulta que la señorita está harta de esto! ─ gruñó Klaus.

Hayley lo miró furiosa ya que para Klaus era fácil todo pero las cosas no eran así para ella que estaba embarazada y encerrada.

─ ¡Púdrete, maldito idiota! ─ soltó Hayley antes de irse en dirección de su habitación.

Klaus gruñó muy molesto al escucharla, nadie le hablaba de esa forma y seguía con vida, si hasta el momento no había matado a Hayley era por su hijo, sin embargo no dejó pasar la falta de respeto de Hayley hacía él. Con su velocidad de vampiro, Klaus se puso delante de Hayley antes de que ella entrará a su habitación.

─ ¡No te atrevas a faltarme de nuevo el respeto! ─ advirtió Klaus con seriedad.

─ Si quieres matarme adelante, no me importa pero nunca voy a tener respeto hacia una persona tan idiota e insufrible como tú ─ le dijo Hayley.

A Hayley ya todo le importaba muy poco, por la única que sentía pena era por Hope si es que no nacía por sí Klaus la mataba antes de tiempo al faltarle el respeto.

Cuando veía 'The Originals' a Hayley le gustaba el personaje de Klaus con todos y sus traumas sin embargo estar ahí y vivir con él era como estar en una película de terror.

Momentos como ese era donde deseaba volver a su antigua vida con su madre. Ya no quería seguir ahí. Era demasiado para ella todo eso, no aguantaría más tiempo si seguía de esa manera.

Klaus empujó a Hayley a la pared sosteniendo su cuello con una mano, Hayley intentó zafarse pero la fuerza de él era mucho mayor que la de ella.

─ Nunca más te atrevas a volver a hablarme de esa manera ─ dijo Klaus soltando su agarre de Hayley.

Hayley tosió intentando recuperar su respiración, Klaus por otra parte le dio una última mirada antes de irse enojado dejando a Hayley ahí.

Ella se arrodilló en el piso apretando sus labios para no decir nada mientras que sus ojos se llenaron de lágrimas sin poder evitarlo.

¡CAPÍTULO 5!

Hola, aquí les dejo la actualización de esta historia, espero que les guste. ❤️

¿Qué les pareció?.

Hayley la está pasando muy mal con su vida en ese mundo, y la actitud de Klaus no ayuda en nada.