Skylar

—Bienvenida, hermanita—Le dice Klaus a Rebekah cuándo ingresamos en "La habitación roja de la tortura" según Stefan

—¿Es un truco?—Pregunta desconfiada —¿Cómo sabes que es de los cinco? ¿Dónde está su tatuaje?

—Los tatuajes son invisibles cómo los pasados—Explica con obviedad—Vamos a cenar—Muy a su pesar, Rebekah sigue a su hermano al igual que nosotros a la sala dónde la mesa está preparada y una chica está sirviendo la comida, la cuál es pollo con vegetales—Gracias, mi cielo—Le dice a una de sus muchas sirvientas antes de que esta se retirara de la habitación—Y gracias al consejo por quemar toda la verbena, mi vida es mucho más facil—Klaus y Stefan comienzan a comer pero ni Rebekah y yo estamos comiendo, no porque no luzca delicioso porque es todo lo contrario sinó porque no es lo que quiero comer, sigo con ganas de comer una dona de chocolate pero Stefan y Rebekah no me dejaron comprar una porque "Es hora de la cena y eso no es saludable" ¡Son tan molestos! Soy inmortal, ¿Que es lo peor que me puede pasar por comer una dona?—Coman

—No hasta que tenga mi dona—Digo completamente seria pero eso parece divertirle—Quiero una dona de chocolate y otra mantequilla de maní con crema batida

—Te compreré la tienda entera pero come—Ordena y yo sonrío complacida antes de llevarme un bocado a la boca—Rebekah, come tus vegetales

—No hasta que te disculpes—Dice molesta

—¿Por cual indiscreción?—Pregunta inocente—Ha habido demasiadas

—Me gritaste y me golpeaste.

—Tiraste la sangre de Elena, ya no puedo hacer más híbridos.

—Pero tu asumiste las cosas.

—Eso es lo que hacen los hermanos, linda—Dice obvio

—¿Pueden dejar de pelear por una vez en su vida? Quiero cenar en paz—Exclamo irritada—¿Klaus no tienes algo que quieras decirle a tu hermana?

—Perdón—Murmura de mala gana, cómo cuándo un niño es obligado a disculparse con su hermano—A veces olvido lo delicada que eres, ¿Me disculpas?

—Voy a tener que considerarlo—Es lo justo pero mo puedo evitar rodar los ojos, es una lucha fraternal interminable la de ellos

—Perfecto, ¿Por qué no me cuentas sobre el cazador de Rebekah?—Pide Stefan

—Claro, se llamaba Alexander y...—Comienza a contar pero lo interrumpo

—¿Era un idiota? Porque eso confirmaría mi teoria de que todos los Alexander son idiotas—No tengo nada en contra de los Alexander solo que una de las personas que más me lastimó se llamaba así

—De hecho, era un gran chico, si olvidabas sus defectos: Buscaba criaturas de la noche, por lo que nos sentiamos muy seguros con nuestros anillos solares—Nos cuenta mientras se lleva un bocado a la boca—El nos dijo que solo eran cinco, vinculados por el fuego y el aliento de una bruja para destruir a los vampiros, decían poseer el arma máxima para la destrucción de los vampiros y que aunque no lo lograran, había un plan b, una chica, tanto las brujas vivas y muertas planeaban la llegada de una criatura extremadamente poderosa a la que denominaban "Trihibrida" por ser la primera combinación de las tres especies existentes—Termina de decir para luego mirarme con una sonrisa ladeada—Esa fué la primera vez que escuché sobre ti, aunque no me agradaste mucho que digamos

—No te culpo, cuándo no tenía memoria tampoco me agradabas mucho—Me sincero—Tu reputación te precede—Cómo es usual, me pierdo en sus preciosos ojos azules al mismo tiempo que sonrío cómo tonta enamorada

—¿Y de eso se trata?—Interrumpe el ojiverde nuetra "Batalla de miradas"—¿De un arma?

—No es cualquier arma—Asegura la rubia

—Rebekah, no te me adelantes—Ordena el híbrido

—¿Y por qué un arma es la respuesta a mis plegarias?—Ninguno responde, lo que parece frustrarlo—Evitemonos el teatro y lleguemos al punto, ¿Quieren?

—Aun no, porque para encontrar el arma hay que resolver el rompecabezas, que creo que desapareció—Dice mirando a su hermana cln fastidio

—¿Qué rompecabezas?—Pregunta confundido el ojiverde

—El tatuaje—Afirmo y Klaus asiente—¿Es un mapa no es así?

—Eso es lo que más me gusta de ti, amor, no eres solo una cara bonita—Me dice y no puedo evitar sonreír—Es un mapa que nos guiará al tesoro

—Si no logramos ver el tatuaje no sirve de nada—Dice obvia la Original

—Nosotros no podemos verlo pero alguien más si, ¿Podrías decirle a los híbridos que lo traigan?—Le pide a una de sus muchas sirvientas y ella asiente antes a salir de la habitación—Estaba tan desesperado por describir el secreto de su tatuaje que mencionó que solo otra persona puede verlo—Justo cuándo termima de decir esa oración, dos hombres entran con Jeremy Gilbert. Stefan, al ver esto corre a velocidad vampírica para rescatarlo pero Klaus se pone frente a el—No lo hagas—Dice completamente serio—Tenemos suerte que el joven Jeremy sea un gran artista

—Ni pienses que voy a ayudarte—Dice molesto y el hibrido le quita su anillo que casualmente es lo único que podría evitar que permanezca muerto

—Temo que si lo harás—Dice obvio para luego guardar el anillo en su bolsillo—Asegúrense de que tenga lo adecuado para dibujar el tatuaje—Les pide a sus híbridos y estos asienten para luego llevarse al moreno nuevamente—Siéntate y terminemos de cenar, una vez que Jeremy cumpla su función, volverá sano y salvo a su hogar 

—Dine más sobre el tatuaje—Exige el castaño sentándose es su lugar nuevamente

—El novio de mi hermana no nos quería decir nada, Rebekah sin embargo fué muy amable e investigó, ¿No es cierto?—Ella no dice nada, solo baja la mirada con evidente dolor por todos los recuerdos que inundan su mente—El nos tendió una trampa esa noche, junto con sus hermanos nos pusieron a dormir

—¿Y yo cómo iba a saberlo?—Pregunta con obviedad

—Salud—Klaus levanta su copa de vino con molestia—Por la habilidad de mi hermana para elegir hombres

—O por tu habilidad de ser un idiota cuándo se trata de ella—Murmuro rodando los ojos y el me mira mal

—Creí que las dagas no servian contigo por tener sangre de lobo—Dice confundido Stefan

—Así es, y es por eso que en ese mismo instante los maté a todos, aunque las promesas de Alexander han estado presentes en el corazón de mi hermana hasta el día de hoy, ¿No es así?—Pregunta molesto y ella no dice nada—¡Vamos, Rebekah diles! Diles a donde te dijo que el tatuaje guía, ¿Cual es esta arma que es capaz de destruir a la especie vampiro?

—Una cura, dijo que había una cura—Confiesa y Klaus se levanta de la mesa, comienza a caminar bajo mi mirada incrédula y la de Stefan

—No hay cura para el vampirismo—Niega Stefan en completo shock

—Es la verdad, Stefan—Asegura Bekah levantandose también

—¿Entonces por que no la has encontrado?—Le pregunto confundida a Klaus mientras imito la acción de los vampiros, lamentablemente tengo que dejar mi plato de comida para acercarme al rubio

—Porque cuando los cazadores perecieron esa noche, las marcas también desaparecieron—Explica—El mapa también se perdió, la hermandad de los cinco se extinguió y por 900 años no hubo ni un solo susurro de otro hasta que nuestro amigo apareció

—Ya tenemos el mapa, ¿Ahora que hacemos?—Pregunta interesada la ojiazul

—No pluralices—Repite las mismas palabras que ella le dijo esta mañana—Tu no eres de fiar, hermanita, le diras el secreto al primer hombre que te hable bonito—Se burla—Es patético, ¿O no? Cómo siempre entrega el corazón a cualquier hombre que le muestre afecto, uno pensaria que ya aprendió debido a los eternos engaños y decepciones

—¡No aprendo, me quedo contigo y dejo que me quites cada momento de felicidad en mi vida!—Exclama dolida—Al menos me fué mejor que a Finn—Dice irónica para luego volternos a ver a mi y Stefan—Klaus le dejó la daga porque se cansó de sus juicios

—No, Finn es un tonto, es más interesante dentro de su sarcófago.

—Tu buscas la cura para Elena, ¿No es así?—Acusa molesta y lo miro mal, era lógico que quisiera a su máquina de híbridos pero me molesta muchísimo que piense más en ella que en su propia hermana, quién estoy completa y absolutamente segura que daría lo que sea para ser humana, tener hijos y un esposo que la ame—Para poder producir más híbridos, por eso trajiste a Stefan, porque sabes que te va a ayudar aun cuándo sabes que te odia—El no dice nada y eso confirma su teoría—¡Atragantate con tu cura, Klaus!—Grita furiosa antes de salir de la casa seguida por mi