+°•′ - Cᴀᴘɪᴛᴜʟᴏ 0 2 | Eɴᴛʀᴇ ʜᴜᴍᴏ;;

La noche cayó en el mundo, sus colores oscuros y la luz de la brillante luna llena eran algo que ocasionaba que varias personas la apreciarán con maravillosidad, era simplemente hermoso.

Pero no hermoso para esa pequeña niña, que descansaba plácidamente en el colchón desgastado en una enorme habitación. No era la única en esa habitación; varias mujeres también descansaban a su alrededor sumergidas en un tranquilo sueño, pero este fue interrumpido por el golpe seco de la puerta de madera corrediza siendo abierta y azotada. Algunas se levantaron sobresaltadas por el golpe.

— ¡Despierten! El sol cayó y nuestro trabajo a comenzado, no quiero a ninguna recibiendo a nuestros clientes ni un minuto tarde — La voz potente de la matriarca del clan terminó por levantar a todas. La pequeña niña restregó sus ojos con ambas manos aún somnolienta. — Hoy llegan clientes especiales, así que pónganse sus mejores ropas, esta noche será nuestra.... No quiero a nadie aquí en 20 minutos, si no, ya saben... — la matriarca salió de la habitación viendo como rápidamente las mujeres ordenaban la habitación y se colocaban sus ropas.

La niña con temor se dirigió rápidamente hacia el armario de gran tamaño, miró la gran cantidad de kimonos sin poder decidir por uno.

— ¡Rápido ___! No quieres ver a mamá enojada, ¿o si? — La mujer adulta empujó levemente a la niña tomando un kimono rojo, la niña negó repetidamente al escuchar lo último — Anda ponte esto y no quiero escusas...

— Si... — Su cuerpo rápidamente fue desnudado por sus pequeñas manos sin importarle que aún la habitación estaba llena de mujeres. Estas arreglaban sus kimonos dejando parte de su piel a la vista, tapando únicamente sus atributos. Pasó su mirada en las caras de sus familiares, algunas asqueadas, otras con una sonrisa coqueta y otras con miedo. Su hermana mayor se acercó a ella y tomó entre sus manos el kimono.

— Se que no te gusta esto ___, pero es nuestra obligación hacerlo... — La mujer abrió el kimono dejando a la vista la piel de la niña sin descubrir sus atributos sin desarrollar.

— Hermana... Yo no quiero esto — La mujer cerró sus ojos fuertemente al escuchar la voz entrecortada de la niña.

— Yo tampoco, pero no puedo hacer nada al respeto — La mujer acarició las mejillas de la niña. — Vamos...

Los días pasaron tan rápido como las corrientes de agua en los ríos que nunca se detenían. Después de aquella conversación con Shinobu, las cosas en la academia habían ido relativamente bien. Siendo estos los días en que entabló una pequeña relación amistosa con sus compañeros, siendo algunos más fuertes que otros, pero se llevaban bien y eso era lo importante.

El profesor titular, Shota Aizawa, hacía un muy buen trabajo en preparar a todos sus estudiantes a ser unos muy grandes héroes, eso lo tenía muy en claro, no obstante su pereza y  su falta de expresión era algo que deprimía y aterraba a los estudiantes, aunque sólo un poco, pero era algo que le caracterizaba.

Ahora siendo una estudiante infiltrada en la academia UA, tenía que admitir que todo era muy ajetreado. Y cada día más, se encontraba más apagada que de costumbre, y eso la preocupaba. Incluso si había descansado lo suficiente, en cuanto pisaba un pie afuera de su departamento era como si una onda de fuerza la golpeara y la debilitara, una cosa bien rara.

Ahora en ese momento su cuerpo adolorido y cansado se encontraba reposando en el colchón que era sorpresivamente suave. El día de hoy fue más agotador que de costumbre y sin pensar que casi moría por el cansancio.

Suspiró al recordar su pelea en la academia, siendo más específicos una actividad física que Aizawa planeó para fortalecer y conocer los quirk de cada uno de sus estudiantes. No negaba que fue muy emocionante e hizo que se divirtiera un poco, pero al tener esos síntomas en su cuerpo que desconocía, no fue muy bonito que digamos.

— ¡Oh! _____, tu traje es muy... dark — Con duda miro su traje en el espejo de los vestidores.

— ¿Está feo? — Volteó su mirada hacia los guantes flotantes, estos rápidamente se movieron.

– ¡No! — Negó rotundamente — La verdad está muy bonito, solo que tu estilo es completamente diferente al mío, pero está lindo  — Los gritos de Hagakure pareció llamar la atención de las demás chicas.

— Si, esta lindo, me encanta — Jirou extendió su mano hacia al frente con su pulgar arriba.

— Veo que eres de las personas que les gusta el negro, _____ — Momo cerró el casillero y fijó su mirada en la chica al lado a ella.

— Me gustan todos los colores, pero veo el negro más apropiado para atacar, por así decirlo... No se si me entienden — Reíste nerviosa mientras levantabas la mano para rascar tu nuca.

— Supongo que te refieres a que con el negro no revela muy detalladamente la posición de una persona que con un color llamativo, ¿no es así? kero — Nuevamente asintió señalando a Tsuyu con su dedo índice.

— ¡Exactamente! — Aunque su traje de cazadora dice algo completamente diferente a lo que está diciendo, simplemente le pareció muy bonito un traje que vio en una página de google y lo eligió como boceto de lo que quería para su "Traje de Héroe", así no mataría a su cerebro en crear uno para ella misma. Además, no es que su quirk sea tan "bueno" como para hacer un traje personalizado por ese propósito, como por ejemplo Uraraka Ochako. Si llevaba sus mejoras respecto algunas cosas de lo cual recalcó muy bien de lo que quería y de como debía hacer.

Se miró al espejo nuevamente, viendo que no se le olvidó nada de su traje en el pequeño compartimento. Sonrió, a simple vista si era exactamente igual a la imagen que recordaba de la página de google, pero ese traje, pesaba un montón. Tenía que admitirlo, ahora se arrepentía de pedir que le adicionaran pequeñas pesas en todo el traje, incluyendo hasta los zapatos. En su mente le era muy buena idea así trabajaba cada músculo de su cuerpo al tener peso extra, pero en ese instante no recordaba de su condición actual. Quería darse una cachetada interna a su "yo" del pasado por no pensar bien las cosas. Ahora se sentía más pesada que de costumbre.

— ¡_____ ya vámonos! — Dejó de mirarse en el espejo, dejó sus cosas en la banca y se dirigió hacia la puerta donde se situaba Mina observando cada movimiento de la femenina. — Te ves sexy

— Como la perra empoderada que soy  — Mina asintió estremeciendo cada parte de su cuerpo con emoción.

— ¡Así se habla! — Todas las chicas rieron ante la extraña conversación de las dos chicas detrás de ellas. Caminaron tranquilamente por el pasillo hasta el campo de entrenamiento donde ya se encontraban los demás chicos.

— ¡Oh! Deku-kun  — Uraraka se acercó hacía su amigo, quien se sobresaltó.

— ¡¿Deku?! — Soltaste una risilla ante la escena de ellos dos. Tal parece que Uraraka no sabe el porqué Bakugou Katsuki lo llama de esa manera. Miró su alrededor aún caminando, no estaban las chicas, estas se separaron y formaron los típicos grupos de amigos. Eran en estos momentos que el sentimiento de soledad se volvía más intenso que acostumbra sentir diariamente. Pegó su cara sobre una formida espalda, el impacto la hizo perder casi el equilibrio.

— ¡Oh! Lo siento eh... ¿___? — Miraste hacia arriba, por dicha era el cariñoso compañero Satou con quien chocó accidentalmente. — ¿Te encuentras bien?

— Sí, no te preocupes, Satou — Sonrió con amabilidad — Emm...¿puedo quedarme aquí? Las chicas formaron sus grupitos y no tengo con quien...

— ¡Claro que sí! Siempre estas bienvenida a hablar conmigo — El chico se señaló con el pulgar inflando su pecho. — Por cierto, me encanta tu traje, te hace ver muy ruda — La chica soltó una risilla ante la cálida personalidad del chico, era muy amigable, era una persona que valía la pena tener de amigo.

Continuaron alegremente su platica, siendo estos rodeados por un aura cálida permitiéndose conocer un poco más del otro.

A los pocos minutos, All might llegó, llenando de sorpresa y emoción a todos los estudiantes. Esta solo se quedó callada sin entender el porqué alaban tanto a una persona mortal, que con unos golpes también puede ser derrotado, pero bueno, no podía juzgar tanto a la sociedad de ahora, ella también alababa eufóricamente a personas que la rescataron de la oscuridad. Transcurrió la explicación de la dinámica que iban a realizar, esa como el juego de policías y ladrones, solo que este se daba a los puñetazos.

Para la sorpresa de todos - y también para tí - cuando seleccionaron a las parejas, le tocó con Bakugou Katsuki de pareja y estos dos siendo del grupo de "Villanos" en la dinámica. Sus contrincantes para su mala suerte era Izuku Midoriya y Uraraka Ochako, siendo el primero más problemático por la relación que a simple vista se llevaba mal entre él y su pareja de equipo.

Suspiró sin ganas, iba hacer un encuentro problemático. — Bueno, ¡nos vemos Satou! ¡Espero probar ese pastel que tanto me hablaste! — El chico sonrió y levantó su mano en señal de despedida.

— ¡Demuestra de lo que estas hecha, ____! — Soltó una risilla acercándose a su pareja de equipo. Este miraba a un punto en específico, que la verdad no se tomó la molestia de seguir, sabía que estaba metido en sus pensamientos por como se quedaba completamente parado sin mover una articulación. Sin evitarlo, su mirada viajó por todo el cuerpo del chico admirando su traje, lo que más resaltaba de este era sus granadas, eran geniales.

— ¡Me encanta tu traje! — Bakugou se sobresaltó un poco, ladeó su cabeza fijando su mirada confusa a la chica, rápidamente frunció su entrecejo.

— Pues claro que sí, extra ¡fui yo quien lo diseñó! — Una risilla juguetona salió de sus labios, Bakugou hizo una mueca y dejó de mirar la cara de la chica al lado de él. No sabía por qué, pero sentía la necesidad de alejarse de ella, pero no quería admitirlo, esa sensación le da curiosidad, ¿por qué su cuerpo reacciona de esa manera con ella?, puede que se muestre como un maliante e ignorante de lo que ocurre a su alrededor y talvez tengan razón, pero él tenía la costumbre de estudiar su entorno a cada rato y algo en ella no le daba buena espina. No sentía el complejo de superioridad con ella, más bien su simple presencia lo hacía  sentirse inferior a ella y eso claramente lo molestaba. Pero no diría nada, claro está, era un simple presentimiento, no debía juzgar sin antes tener las  pruebas suficientes.

— Tenemos que idear un plan —
La voz de la dueña de sus pensamientos lo trajo de vuelta a la realidad. Chasqueó la lengua, no quería cooperar, se le veía en la cara y la chica lo sabía.

— No me molestes, yo voy tras Deku — Comenzó a caminar sin importarle tu opinión.

Sonrió forzadamente y su ojo derecho tembló, cerró los ojos y sujeto con rapidez el brazo del chico antes de que se alejara más de ella. Este volteó y miró a la chica con cierta irritación.

— ¿¡Qué crees que haces!? — El grito del chico retumbó por toda su cabeza haciendo eco, un mareo la desconcertó un poco, pero pudo disimularlo a la perfección.

— Más bien, ¿Qué crees que estás haciendo tú, Bakugou?, te seré muy sincera, si en este encuentro contra Izuku Midoriya y Uraraka Ochako vas sin ningún plan y con el único pensamiento en tu mente es "voy a derrotar a Deku", no vas a lograr nada más que humillarte — El chico escaneó la cara de la chica, esta aún tenía sus ojos cerrados — Dices que eres el mejor de todos, pero lo único que haces es alzar tu ego con palabras que no tienen ninguna verdad, ahora entiendo el porqué todo el mundo te odia, Bakugou...

— Yo... a mi no me interesa las opiniones de los demás — Bakugou quitó su brazo del agarre de la chica. La chica sonrió nuevamente.

—  Eso es lo que dices, pero en realidad si te importa mucho las opiniones de las demás personas, te gusta mucho que alaben tus habilidades, ¿o me equivoco? — Bakugou quedó en silencio — Tienes que aprender por lo menos a comunicarte con los demás miembros de tu equipo, tener un plan, protegerles sus espaldas cuando estos estén vulnerables, por que con esas acciones lo que harás es ganar la admiración de los demás — Abriste los ojos fijándolos directamente en los rubíes ojos del chico. — ¿Quieres derrotar a Izuku Midoriya o como le dices, "Deku"? Pues si eso es lo correcto, tendremos que hacer un plan A y B, te lo aseguro con eso vas a ganarle a él y ser el mejor de todos — "por el momento", claro está, Bakugou puede ser bueno, pero las habilidades de los demás también son muy buenas y no le sorprendería que lo vayan a sobrepasar rápidamente — ¿Qué dices?

— ¿Estás segura que con tu "Plan" vaya a ganar? — Sonrió de lado, ya lo había enganchado.

— Si haces todo al pie de la letra, tal vez, tengamos en cuenta que Izuku es mucho de pensar, no me sorprendería que vaya a idear también un muy buen plan — Bakugou bufó — ¿me vas a decir que no? Eres el más cercano a Izuku que alguno de todos los de la clase, ya sabes como puede ser... Así que ten en cuenta que posiblemente vayamos a perder si no trabajamos en equipo — La chica miró tranquilamente al chico. Este asintió inconscientemente.

— Bueno, espero y no pierda por tu culpa, extra — Sonrió de lado. — Ahora dime que tienes en mente, pero ya...

— Bueno, pensaba en-...

— ¿Por qué no usas tu quirk? — Ladeaste la cabeza confundida.

— ¿Eh? — Bakugou rodó los ojos.

— ¿Por qué no usas tu quirk? No usas para nada tu quirk, solo dependes de tus habilidades físicas — La chica miró al suelo unos segundos para después mirar los ojos del chico.

— Es muy peligroso, además tiene más desventajas que ventajas — Bakugou soltó una risa burlona.

— Estás aquí para mejorar tu quirk, ¿No?, si no lo usas ¿Qué mejorarás? — Quedaste callada — Hablas de mi, pero también tienes cosas que mejorar de ti misma...

— Tienes razón, trataré de usarlo más seguido — "Maldito, también aplico lo mismo" Tal vez se equivocó solo un poco ante su punto de vista de Bakugou, este chico puede ser una bestia, pero no sólo con sus puños y explosiones puede atacar, también con sus palabras. Aunque en los dos casos, ambos estaban en lo correcto, tanto ella con él y él con ella —  Eres muy inteligente, además de estratégico, pero tu personalidad impulsiva lo arruina... Así que no hagas nada impulsivo que pueda arruinar tanto el plan A y B...

— ¡JA! Querrás decir que no arruines tu el plan — La chica sonrió de lado, alzó su mano dejándola extendida hacia el chico.

— Te prometo que ganaremos este combate — Bakugou miró la mano y después los ojos de la chica, chasqueó la lengua y golpeó su mano con la de la chica.

— Ahora dime lo que tienes en mente, extra —...

— ¡Que acaban de ver mis ojos! — Kirishima no dejaba de ver la pantalla donde se podía ver claramente como Bakugou y la chica hablaban sin problemas, aunque bueno, con una cuantas discusiones de parte de Bakugou. Está claro que no sabían de qué hablaban al respecto, pero se le veía muy bien la situación que se impresionaron.

— Parece que ____ sabe domar la bestia — Los guantes flotantes de Hagakure se movieron con emoción. — ¡Que interesante!

— No, creo que ____ ya tiene experiencia en relacionarse con personas con esa personalidad — Algunos miraron a Yaoyorozu quien tenía la mirada en la pantalla esperando el primer combate de la dinámica.

— Pero igual es impresionante... — Sin evitarlo Denki tragó saliva, tenía el presentimiento que este iba hacer el mejor combate que iba a presenciar en esa dinámica.

— Bien, ¡ese es el plan! — Entrelazaste tus dedos con emoción. Bakugou bufó en respuesta.

— ¡Bueno jóvenes, la batalla empieza ahora! — La chica se sobresaltó ante el eco de la voz que retumbaba por todo el lugar. Era All might, el símbolo de paz quien había hecho acto de presencia nuevamente.

Inevitablemente, volteó su cabeza hacia Bakugou, sorpresivamente este también la estaba mirando. Ambos asintieron en conjunto, Bakugou guardó la mascarilla en uno de sus bolsillos del pantalón.

— Esto se va a poner bueno — Ambos inflaron sus pechos con aire y después exhalarón. — Activa el micrófono — Bakugou se quejó, pero de igual manera como la chica, ambos activaron el pequeño aparato que llevaban en sus orejas. — Ahora espera hasta que yo dé la señal... — Arrodillándose en el suelo, colocó sus manos en el pavimentado del edificio. Toda su concentración se fue en las ondas de movimiento que podía sentir en las palmas de sus manos, todo su alrededor desapareció y se volvió negro. Frunció el entrecejo ante una punzada en la parte derecha de su cien, debía concentrarse y no pensar en el dolor que estaba sintiendo en ese preciso momento. Con mayor esfuerzo, logró ver todo el mundo sin necesidad de abrir los ojos. Todo estaba en blanco y negro pero podía ver perfectamente todo hasta a través de las paredes.

Rápidamente buscó a sus contrincantes en el edificio, no tenía mucho tiempo y cuanto más se esforzara más le dolía la cabeza, los halló con éxito. Abrió los ojos y una fuerte jaqueca la invadió, movió su cabeza un poco tratando de aliviar el dolor. — Bakugou están en el ultimo piso hacia la derecha — Bakugou no le importó en lo más mínimo como la chica sujetaba su cabeza con ambas manos, mientras parpadeaba varias veces. En cuanto escuchó las indicaciones, corrió hacía donde se ubicaban sus contrincantes. — Duele... — Fue lo único que escucho de parte tuya antes de cerrar la puerta y marcharse.

El sonido de sus zapatos cuando la suela chocaba contra el pavimento era lo único que se escuchaba en el pasillo.  Por fin, ya no sentía esa sensación de peligro y curiosidad que tenía con la chica, se sentía libre por alguna extraña razón. Dejó de correr para caminar sigilosamente, como si de un depredador que está apuntó de atacar a su presa se tratase. La chica le había prohibido rotundamente utilizar sus explosiones para impulsarse, cosa que lo molestó. Vale, puede que se vea como un estúpido, pero era muy inteligente y sabía que para tener que atacar de sorpresa no tenía que hacer ningún ruido que alertara a sus rivales, era pura lógica.

Bakugou se agachó un poco pegando su espalda contra la pared, escuchaba un par de voces que podía reconocer fácilmente - Bueno, la de Izuku únicamente - , ya los había encontrado.
Con cuidado sacó de sus ropas una pequeña botella de metal, su ceja tembló con frustración al no poder quitar el adhesivo por culpa de sus grandes guantes. Agudizó el oído lo más que pudo, las voces ya se estaban acercando mucho, no quería ser el responsable de que el plan se arruinara, no lo permitiría y mucho menos ver la cara de burla de la chica diciendo que ya sabía que él iba hacer el responsable de su propia derrota. Acercó con cuidado la botella a la boca, tenía en mente el recuerdo de la chica extendiendole la botella y advirtiéndole que debía tener sumo cuidado con este, y no acercarselo a la boca por la seguridad de él, pero bueno, Bakugou desayuna el peligro, no le importa lo más mínimo, tenía que ganar y ese era su único objetivo en ese momento.

Por fin, el papel que protegía al adhesivo salió, con rapidez pegó la botella en la pared, casi pegando al piso para que no la vieran con facilidad, por ultimo se coloco la mascarilla tapando tanto su boca como la nariz. Sonrió de lado al completar la primera y segunda fase de su parte del plan, ahora faltaba solo una y tenía toda la libertad de pelear a su antojo con Deku. Suspiró y ahora si, salió impulsado con sus explosiones hacia Izuku, inciando una discusión entre él y el pobre Izuku Midoriya.

— Bien Bakugou, mantenlo distante de la bomba y trata de que su puño no impacta con el techo o cualquier infraestructura del edificio — la voz de la molesta chica, según Bakugou, sonó advirtiéndole nuevamente la misma cosa.

— Va hacia ti — Bakugou miró de reojo como Uraraka corría lejos de la pelea entre ellos. Asentiste tratando de relajar tus brazos.

— Siguiente fase del plan y quedas libre — Bakugou parecía tener un poco de problemas, tenía su concentración en las dos personas, pero más en Uraraka, por el momento. Sonrió al mirar de reojo cómo Uraraka ya estaba a sólo unos 5 pasos de llegar a la esquina, presionó un pequeño interruptor que tenía en su mano antes de impulsarse hacía Deku.

La botella emitió un leve sonido y explotó, Uraraka se sobresaltó por el fuerte sonido de la botella. Abrió sus ojos con temor  al encontrarse con una inmensa cortina de humo que rápidamente inundaba todo el pasillo.

— ¿Humo? — Un dulce olor inundó sus fosas nasales, Izuku arrugó las cejas ante el extraño olor. Segundos después su mente hizo un "click",sus ojos se agrandarón y volteó su mirada hacia Uraraka — ¡Uraraka! ¡No respires el humo, puede ser gas para dormir! — Uraraka se tapó instintivamente la boca con ambas manos, cerró los ojos corriendo lo más que podía lejos de la cortina de humo. Confiaba de que Izuku podía hacer algo con él mismo en esa situación, no por nada estaba en la clase 1-A, incluso si ella se ofreció a darle parte de sus puntos.

Abrió poco a poco sus ojos, dejando de correr a medida que se alejaba del lugar donde se ubicaba Bakugou e Izuku. Esperaba que el humo o "gas para dormir" no vaya hacerle efecto tan rápido, no quería perder y decepcionar a su compañero de equipo. Incluso si se tapó la boca unos segundos después de que la bomba explotara, fue inevitable no respirar un poco. Debía mantener la calma, no iba hacer nada con alterarse en su situación. Su objetivo ahora es ir ante la "bomba" de los "villanos" , tenía que ganar tiempo para que Izuku hiciera parte de su plan, si es que no le afectó el humo. Frunció su entrecejo, iba hacer todo lo posible para ganar cueste lo que cueste.

— Primera fase completada — Bakugou esquivó el puño de Izuku que iba directo hacía su cara.

— ¡Bien! Siguiente paso... — Quería sonar normal, pero su cuerdas vocales no querían cooperar. Con su mano temblorosa apagó el micrófono, respiró con dificultad sosteniendo su vientre. — ¿Pero que me pasa?... — La jaqueca no se iba, era algo muy molesto para ella ¿Porqué razón su cuerpo actúa de esa manera? Sabía que repetía la misma pregunta una y otra vez desde que los síntomas aparecieron cuando comenzó a vivir en la ciudad. Tenía la opción de comentarle a un compañero de más confianza de su situación, solo para que este le diga el simplemente comentario que vaya al hospital o a la enfermería. Ellos no entenderían las consecuencias que podría sufrir ella si pisa un pie en el hospital.

Suspiró y caminó hacía la puerta de la habitación, recostó su espalda en la pared. Iba a olvidar su dolor, lo más importante en ese momento era ganar el combate y no se permitiría retrasarse solo por una simple jaqueca. Esperaría pacientemente a que Uraraka entrara a la habitación, de ese modo la atacará por atrás dedicándole una llave hasta que el efecto de su creación diera frutos. Un plan muy sencillo y rápido.

Uraraka abrió lentamente la puerta, algo que aprendió de la información que le proporcionó google es nunca bajar la guardia, en cualquier momento la podrían atacar y no podría hacer nada al respeto cuando eso ocurra. Detalló cada mínima cosa  de la habitación y a cada paso que daba sus pelos se erizaban y sospechosamente no había nadie en la habitación, cosa que hacía que sus nervios flotaran.

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— ¡Se aproxima una pelea entre mujeres! Veremos a Uraraka y a _____ en acción — Kirishima sonrió emocionado mientras veía detenidamente la pantalla.

— ¿Y sí apostamos quién ganará? — Denki sonrió de lado, tenía que admitirlo una parte de él decía que apostar con esto no era de hombres, pero tenía muchas esperanzas de que la primera mujer de la clase que se convirtió su amiga en tan poco tiempo ganara.

  — Apuesto por ____, estoy seguro que ella podrá — Sus ojos rojos chocaron con los miel de Denki, estaba muy determinado y tenía las esperanzas de que ella ganara o si no, su dinero del mes iba a ir a las mismas manos de Denki.

— Genial, apuesto por Uraraka —  Denki fijó nuevamente su mirada a la amplia pantalla.

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Uraraka tragó saliva, no iba a correr, sería una muy mala idea, posiblemente tengan una trampa cerca de la bomba y perdería en ese instante. No quería perder, no quería que por culpa de ella no ganaran. Una gran variedad de estrategias se creó en su mente, tenía qe actuar rápido o si no los efectos del humo la afectarían. Un escalofrío en su espalda la alertó, rápidamente se agachó colocando sus manos en el suelo asegurando que no golpeara su cuerpo por su mismo impulso. Por el rabillo del ojos miró como una pierna pasaba de largo. Ambas jaderon sorprendidas.

Increíblemente Uraraka logró esquivar su patada, incluso si no hizo demasiado ruido como para que esta reaccionara de esa manera. Sonrió de lado, fue su error no pensar en el potencial que tenía la chica en el combate. Ahora se sentía mal por subestimarla demasiado como para pensar que su combate con ella sólo duraría segundos.

Mientras tanto, Uraraka no pensó en que la iba a atacar por la espalda, fue pura coincidencia que esquivara él golpe de la chica. Frunció el entrecejo, ya había localizado a su objetivo y no iba a perderlo.

Apoyó todo su peso en sus brazos e impulsó su pierna hacia la cara de la chica. Una punzada en tu cabeza hizo que cerraras los ojos por unos segundos, era muy tarde para reaccionar y lo sabías. El tacón de Uraraka impacto contra  su mandíbula haciéndola impactar contra el pavimento.

— ¡Ah! — Un jadeo escapó de sus labios al sentir el impacto de ambos golpes. Uraraka mostró una mueca horrorizada, rápidamente se sentó.

— ¡Lo siento! No quise, yo — Levantó un dedo callándola. Uraraka llevó sus manos a su pecho preocupada.

— Estamos en un combate, no importa si somos amigas o simples conocidas, cuando estamos aquí en el campo de batalla somos rivales y esta batalla no afectará nuestra amistad después de todo — Con una simple sonrisa adolorida, pero que de igual manera transmitía cariño calmó a Uraraka. — Demuestra de lo que estás hecha, Uraraka. —.

— Bien, lo siento — Frunció el entrecejo decidida, tenía razón, en este momento eran rivales y no amigas, en este momento iban a demostrar una a la otra que podía hacer cada una en este combate. Y nada de esto afectaría a su amistad, por que esto es una pelea de práctica, una pelea para mejorar. Así que, empezó a correr hacía la bomba.

— Mierda... — Reaccionó más rápido está vez, tomó la bota de Uraraka con fuerza, la castaña perdió el equilibrio y cubrió su cara con los brazos tratando de amortiguar aunque sea un poco el golpe.

Aún sujetando la bota de Uraraka, dio una vuelta colocando sus pies a cada lado de la cabeza de la castaña quedando su cuerpo en una postura llamada "fuente" sobre Uraraka. La castaña jadeó al sentir tus piernas rodear su cuello y sujetar con fuerza sus piernas con tus brazos, dejándola inmóvil. Conocía esa posición, era una llave, pero en ese momento no recordaba cuál era su nombre. Está completamente  inmóvil de pies a cabeza, bueno, no completamente, le faltó inmovilizar la parte de su cuerpo más importante; sus brazos y manos.

Sintió como su cuerpo se elevaba, jadeo con frustración ¿Cómo pudo olvidar que Uraraka le quitaba la gravedad a todo? Otra punzada en tu cabeza, pero esta vez más fuerte que las anteriores, hicieron que soltaras a Uraraka librandola de tu llave. Cerró los ojos con fuerza y sujeto su cabeza con ambas manos, el dolor se hacía cada vez más insoportable. Tenías ganas de gritar del dolor.

Uraraka limpió su nariz y con las piernas temblorosas como si fueran más que una gelatina se levantó del suelo, podía escuchar como su compañera soltaba quejidos en el aire, pero no podía prestar atención cuando el camino hacía la bomba estaba libre. Negó rotundamente ante la idea de que Izuku hiciera parte de su plan, ya que este tuvo que haber hecho tal cosa desde ya hace un minuto y nada ha pasado. Por lo tanto, se aseguraría de hacerlo por su cuenta y de esa manera ambos ganarían.

Avanzó solo un pasó y toda su visión se volvió borrosa, ¡Ja, qué gracioso! Los efectos del humo estaban dando frutos en el suceso menos indicado, tenía que tocar la bomba ya, antes de que el gas hiciera de las suyas.

En el silencio de la habitación se escuchó el crujido de los escombro y vidrios rotos en el piso de abajo, estos acompañados del sonido retumbante de unas explosiones. Ambas sabían de quienes eran y debían actuar rápido.

— Deku... — Su estómago se revolvió y la sensación de querer vomitar la invadió. Era simplemente asqueroso.

Empezó a correr a duras penas hacia la bomba, cerró los ojos con fuerza, su visión borrosa se iba dividiendo en dos, veía doble y eso solo lograba marearla.

— No... ¡No quiero perder! — El grito de su compañera alertó a Uraraka. Frunciste el entrecejo forzando a tu cuerpo dar más de lo que podía hacer y como si tu vida dependiera de esto, recogiste la manga de tu capucha, desnudando tu brazo. Estiraste con fuerza tu brazo apuntandolo directo hacía Uraraka, estabas decidida; iba a usar su quirk.

De su brazo pronto una especie de brillos y  una banda extremadamente larga salió de él rumbo a Uraraka, la castaña a sólo unos cuantos centímetros de tocar la bomba sintió como su cuerpo fue cubierto por una especie de tela y una fuerza increíble la hizo salir disparada lejos de la bomba. Su cuerpo rodó por el piso hasta llegar al otro lado de la habitación y chocar contra la pared.

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– Ese es... — Anonadada, cubrió su boca con ambas manos. Momo no podía creerlo y los demás estaban contemblando atentamente la pantalla sin decir una sola palabra.

— Momo... ¿Ese no es tu quirk? — La azabache miró a Jirou. Los demás desviaron sus miradas de la pantalla hacia las dos chicas. Todos esperaban la respuesta de Momo, incluso si temían saber la respuesta.

— Si... Es mi quirk... —.

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Uraraka jadeó al sentir como el aire escapaba de sus pulmones, miró a duras penas como su rival tocaba su cuerpo haciendo que este cayera al suelo de espaldas sin ningún tipo de cuidado.

— ¡Oh! — Gimió de dolor ante el impacto, acarició con un solo brazo su espalda adolorida.

— Como... — Tosió — ¿Cómo podiste hacer eso? Cómo devolviste la gravedad a tu cuerpo sin... Mi quirk... — Ella misma respondió su pregunta, acongojada por su mismo descubrimiento, miró como poco a poco su rival iba levantándose del suelo. Estaba tan lastimada como ella. — ¿Copiaste mi quirk y el de Momo?

— Que comes que adivinas, Uraraka — Limpió la sangre que poco a poco iba saliendo tanto de su boca como de su nariz. La castaña se levantó del suelo apoyándose de la pared, su cabeza daba vueltas y sabía que no iba a durar mucho en combate.

— Incluso si tu quirk es copiar de otro quirk... Trataré de vencerte — Sonreíste de lado, Uraraka no iba a parar hasta que una de las dos caiga. Debía admitirlo, Uraraka es una chica con un gran potencial y determinación, una persona así merece rescatar a los demás y de eso estaba segura.

— ¿Vas a seguir incluso en la situación en la que estás? — Uraraka escupió la sangre de su boca y limpió su mejilla, tenía el entrecejo fruncido y adquirió una posición de ataque.

— No estás en una situación superior a la mía, ambas estamos en el mismo bote — Lo veía en sus ojos, Uraraka no jugaba con ella, Uraraka iba a ir con todo en esta pelea. Como deseaba también ir con todo contra ella, pero su cuerpo estaba más adolorido que de costumbre y sabía que iba a colapsar en cualquier momento por utilizar su quirk. No obstante, si su verdadera fuerza no está como lo estaba antes, de igual manera iba a pelear con las pocas energías que le quedaban.

Este ya no era una simple pelea para tocar la bomba y ganar, esto se convirtió en un combate de quién podía durar más en pie.

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— De repente el ambiente se puso tenso... — ¿Cómo no iba a ponerse tenso? Dos de sus compañeras actuaban tal y cómo si de verdad fueran rivales, debían admitirlo después de la revelación que hizo la misma Uraraka sobre el quirk de la peli___ y la confirmación de esta por lo dicho de la castaña. Todos estaban inquietos de como iba a terminar esto. Kirishima tragó saliva.

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El silencio, siempre acompañaba el inicio en las escenas de peleas y esta no era la excepción.

Uraraka fue la primera en actuar, corrió hacia la chica y estiró su brazo dirigiéndolo directo a tu cara. Dió un paso a la izquierda y esquivó el golpe, no obstante no contaba con que Uraraka golpeara su estómago con el otro brazo.

— ¡Ah! — Jadeo sosteniendo su vientre. Sonrió de lado — No sabía que eras buena en combate cuerpo a cuerpo, Uraraka — Frunció el entrecejo — Cada vez me sorprendes más... —.

— No soy tan buena en las peleas de corta distancia, estoy ejecutando lo que he aprendido antes de entrar a la academia y además, necesito dar todo de mi antes que de tu gas haga efecto — Levantó una ceja confundida.

— ¿Gas? — Uraraka miró atentamente su rival — Eso no era gas... —  Uraraka sintió el terror mismo, esperando a que las palabras que iba a decir su rival no fueran las que estaba pensando. — Eso era veneno...

— Qué...? — Un golpe en el vientre hizo que Uraraka retordeciera unos cuantos pasos hacía atrás. — ¡Ah! — Antes de que la golpeará nuevamente, Uraraka se sujeto de tus hombros dando una vuelta en el aire. Su cuerpo flotó nuevamente, chasqueó la lengua frustrada.

Sus pies tocaron el suelo y se tambaleó, tomó entre sus manos su cabeza. Uraraka estaba haciendo todo lo posible para que su cuerpo no se desplomara al suelo en ese momento. Su cabeza daba vueltas como si de una ruleta se tratara. Frunció el entrecejo, no podía hacer nada más que pelear cuerpo a cuerpo con la chica, no había ningún escombro que le diera la ventaja en esa pelea. Lo único que podía hacer era acercarse más a la chica y quitarle la gravedad para que pudiera ganar tiempo e ir a la bomba.  Y eso es lo que estaba haciendo.

Corriendo nuevamente a la bomba, tratando de hacer lo suficientemente rápida antes de que su rival usara de nuevo su quirk y en el peor de los casos, usar otro quirk más poderoso contra ella. Ahora estaba más nerviosa que antes sabiendo que lo que circulaba por su sistema respiratorio no era gas si no veneno.

En un reflejo rápido miró a la derecha y retrocedió su camino dando un salto. — ¡Wah! — Cubrió su rostro con ambos brazos en cuánto vio a su rival estrellar sin piedad alguna su pie contra en la pavimento. Miró atentamente el ambiente, dándose cuenta que no estaba la chica mas que un cráter y pedazos de piedras en el suelo. Tragó saliva al pensar que esa patada iba para ella y no para el pavimento. Tuvo una idea. Y esa idea ya la habías predecido, viste como Uraraka corría hacia las piedras sueltas y antes de que las tocara, activó otro quirk.

— ¿Qué? — Las piedras no se elevaban — ¡No puede ser! — Saltó nuevamente esquivando otro golpe. No era posible ¿o si?, quería pensar que eso era un sueño. Arrugó el entrecejo anonadada, ____ copió el quirk de su tutor; Aizawa Shota.  Y no necesitaba ser una experta como para darse cuenta de eso, era muy notorio.

— ¡Eres muy rápida y buena, ___! Pero, las consecuencias de copiar muchos quirk te afectará pronto — Se escuchó una carcajada de parte de la chica.

— Debo de decir que eres más fuerte de lo que pareces, Uraraka... Pero debes recordar algo más... — Uraraka parpadeó en silencio, esperando escuchar lo siguiente — El veneno también tiene sus consecuencias...

Y como si sus últimas palabras fueran un interruptor que encendió un desastre, una fuerte opresión en su cabeza la hizo gritar de dolor. Cayó de rodillas al suelo estremeciendose violentamente.

— No... No perderé ahora — Con un sólo golpe en la nuca, Uraraka cayó al suelo inconsciente.

— Lo siento, Uraraka... — Su respiración era entrecortada, desactivó el quirk de su tutor. Tan rápido como desactivó ese quirk, sangre salió de su boca y su piel se tornó blanca como la nieve del invierno.

— ¡¿Ya terminaste?! — Bakugou pateó la puerta justo en el momento en el que vió tu cuerpo caer al suelo justo a un lado de Uraraka. — ¿Ah? — Hizo una mueca y rodó los ojos.

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— Ganaron... — La apuesta desapareció, nadie decía nada. Estaban más que imprecionados con ese combate. Tanto con el de Bakugou que duró menos y con el de ____ que duró un poco más.

— Si... estuvo intenso.... — Mineta Tragó saliva.

— ¡El equipo de los villanos Ganan! — Habló All might a través del micrófono. — Llamen a los enfermeros, tenemos tres estudiantes inconscientes — Terminó de hablar y corrió junto con los demás estudiantes al edificio.

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Los rayos del sol traspasaban las cortinas blancas sin piedad, abrió los ojos con pesadez. El olor tan característico del hospital inundó sus fosas nasales.

— ¡Hospital! — Levantó rápidamente su torso sintiendo el terror del lugar en el que pensaba que estaba situada, lo único que logró conseguir fue un horrible mareo en su cabeza.

— ¡___! ¿Estas bien? — La dulce voz de Tsuyu la volvió a la realidad — No estamos en el hospital, tranquila... — Tsuyu dejó caer suavemente su mano encima de la suya. — ¿Te encuentras bien? Kero

— Si... Un poco decaída, pero bien... — Miró a su lado izquierdo encontrándose con Uraraka vendada casi de pies a cabeza al igual que Izuku, estos aún seguían inconscientes. — ¿Qué hora es?

— Son las 4:30 de la tarde — Recovery Girl entró a la enfermería. — Me sorprende que haya despierto hoy y no mañana o en dos días como tenía planeado.

— ¿Qué me pasó? — Era obvia la respuesta, pero aún así quería saber de boca de un experto en medicina.

— Tus niveles de azúcar y tu presión bajaron a escalones extremadamente peligrosos, tu cuerpo se encontraba en un estado de coma temporal, teníamos dictado que ibas a despertar mañana o en dos días y si la situación empeoraba dos semanas... Estas son las consecuencias al alcanzar tus limites tanto físicos como del quirk... — Bajaste la mirada preocupada. Recovery girl extendió un vaso a tu persona. Tomaste el vaso mirando su contenido. — Es agua azucarada, necesitas más azúcar en tu sistema y descansar lo suficiente... Tsuyu ya puedes irte — La jóven asintió y se despidió de las dos.

— Aizawa-sensei, All might-sensei, kero — Las mujeres miraron la entrada, los hombres entraron a la enfermería cerrando la puerta detrás de ellos.

— Al parecer ya despertaste... Recovery Girl, ¿Qué dices de los otros? — La anciana negó.

— Tienen pulso, pero no despiertan... —

— Y no lo harán hasta que tomen mi cura... — Los adultos miraron a la jóven, esta tenía sus ojos puestos en las dos personas en coma al lado de ella — Lo que tienen en su organismo es un veneno específicamente creado por mi... Les prohíbe utilizar sus quirk, además de que los somete a un coma... Un coma que no desaparecerá hasta qe tomén de mi remedio — La jóven apuntó a la silla donde descansaba su bolso. — Ahí esta el remedio, es un frasco color rojo... — Recovery Girl caminó hasta este y buscó el frasco que la joven dijo que había.

— Eso es peligroso y lo sabes — Aizawa se cruzó de brazos.

— La verdad es que no, como dije la persona que huele el veneno entrán en un estado de coma temporal nada más eso, bueno, aparte de vómitos, dolores de cabeza y pérdida de fuerza en sus articulaciones... Con mi remedio se evita todo eso, aparte de despertarlo rápido pueden estar como nuevos en cuanto abran los ojos... — Recovery mostró una botella — Sí, es esa...

— Eso no te permite utilizar eso aquí — Sus ojos chocaron con los de Aizawa.

— No volverá a pasar, lo prometo — Pero si permiten que sus estudiantes se maten unos a otros con tal de que ganen un dinámica y que sean reconocidos por los héroes tutores, en, fin la hipocresía de la UA.

— Bien... Señorita ____, nos podría decir todo lo que sabe de su quirk — Más que una pregunta sonó cómo una orden.

— Mi quirk se llama Visual Copy, y como dice su nombre puedo copiar visualmente cualquier quirk que quiera menos los que son físicos... O sea, no puedo copiar el quirk de Ojiro, Hagakure, Tsuyu, Iida, Aoyama, etcétera, ya que sus quirk ya son parte de sus cuerpos, por así decirlo, transmutaciones — Movió sus dedos imaginando estrellas — ... Mi quirk siempre está activo, o sea que todo el tiempo ando copiando quirk incluso cuando no quiero, ¡Pero esperen! No todo es lindo, solo puedo copiar 3 quirk al día...

—¿Al día?, pensé que eran minutos — Recovery Girl introdujo un poco del remedio en la introvenosa de los chicos.

— No, la duración en la que puedo copiar un quirk es un día o eso depende de cuanta energía tenga, pero naturalmente es un día... Algo que no me gusta de mi quirk es que pierdo energía cada vez que lo utilizo, si alcanzo mi límite, caigo inconsciente por horas y si sobrepaso más de lo que debería de mi límite, quedo en coma indifinidamente... Siempre ando comiendo golosinas por que son las únicas que me puede dar energía... — Por esa y por muchas más razones no le agrada su quirk, lo considera extremadamente peligroso tanto para las personas de su alrededor como para ella misma, y es por eso que depende más de sus habilidades físicas que de él.

Su quirk puede que sea muy envidiado por las personas ya que estas lo consideran "poderoso" y si lo es para que negarlo, pero como lo es de poderoso lo es de peligroso.

Las personas no tienen en cuenta que su quirk puede ser el posible causante de su propia muerte si llegara abusar mucho de él.

Su quirk es su pase directo a la muerte.

꒰ 7200 palabras ꒱ ೃ༄

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