La mañana llegó y con eso el rubio Omega despertó con las inmensas ganas de vomitar, no dudo en ponerse de pie y correr al baño mientras su esposo aún dormía plácidamente.

Vómito hasta el alma con los fuertes mareos que azotaban su cuerpo. Si bien ya tenía semanas desde que sucedió lo de su marca y el lazo que lo unió a su alfa, sabía que esto pasaría más no tan fuerte como lo estaba sintiendo.

Se puso de pie con las piernas temblando, bajo la llave y fue al lavabo para enjuagar su rostro, pero otro mareo hizo tambalear que no pudo sostenerse de nada cayendo al frío piso. Un gran quejido salió de su boca, alertando a su esposo quien corrió al baño en su ayuda.

─¡Amor! ¿Estás bien? Amor responde. ─Entró en pánico al verlo así.

Lo levantó dejándolo en la cama abrazando su cuerpo, su rubio no respondía así que llamó aún médico rápidamente. Este le contestó diciéndole que ya venía en camino.

─Amor por favor despierta. Dime que te pasa.

Acaricio su rostro con ese leve morado en su mejilla, no sabía qué le pasaba a su rubio y tenía miedo, mucho miedo. Lo abrigo en lo que el médico llegaba y al cabo de unos minutos llegó.

─¿Qué fue lo que pasó exactamente, señor Min? ─saco algunas cosas médicas de su maletín.

─No... No lo sé, cuando escuché un fuerte golpe y quejidos lo encontré en el baño tirado, no sé qué fue lo que le pasó exactamente. ¿Estará bien?

─Lo voy a revisar, le pediré que salga un momento para revisarle bien, por favor espere afuera.

YoonGi no queriendo salió afuera aún en pijama llevándose las manos al rostro, esto no podía estar pasándole a él, no era la forma de iniciar su luna de miel con algo malo.

Estaba dando vueltas por el pasillo con las manos en la cabeza y la desesperación inundando su ser, se estaba tardando del médico y eso sólo ponía a su lobo nervioso quien aullaba en su desesperación.

─Tranquilo Agust él está bien, sólo no hay que pensar negativos.

Su lobo estaba inquieto que rasguñaba sus adentros, eso puso más inquietante al Alfa, después la puerta se abrió saliendo el médico.

─¿Está bien? ¿Qué fue lo que le pasó? ─pregunta rápidamente.

─Está bien aunque con un golpe en la mejilla por la caída, pero está bien. Su Omega quiere hablar con usted, él le dirá lo que le pasa, y felicidades.

─¿Por qué? ─se quedó un poco más confundido.

─Entre señor Min y lo averiguará, le dejé un medicamento procuraré que lo tome cada ocho horas. Compromiso.

Se aleja el médico dejando un muy confundió Alfa, sin perder el tiempo entro mirando a su Omega en la cama abrigado y algo ¿sonrojado?

─¿Qué fue lo que te pasó amor? Estaba muy preocupado cuando no despertabas ¿Qué fue lo que pasó?

─Tranquilo estoy bien, amor, es sólo que...

─¿Dime qué te pasa Jimin? Me tienes muy preocupado.

Le dio un beso en la frente a su esposo cosa que hizo ruborizar al rubio.

─Esto no es algo fácil de decir, quería que fuera una sorpresa cuando llegáramos a nuestro apartamento, pero según el médico debo decirte lo que me pasa porque me tienes que cuidar muy bien.

Lo miraba muy confundidó y Jimin se quitó las sábanas de su cuerpo queriendo ir por esa prueba de embarazo, sólo que su alfa no lo dejo.

─No te vas a parar de aquí Min Jimin, hasta que me digas que te pasa.

Su voz demandante hizo al rubio hacer un puchero, pero termino aceptando.

─Muy bien... ─suspira─ Cuando tú y yo hicimos él... ya sabes: el amor ─miro como su esposo asintió─ pues me marcaste y se hizo el nudo lo cual si no me falla mis instintos omegas... Estoy esperando cachorros, estoy embarazado ¡Feliz regalo de bodas!

Alzó las manos en sorpresa el rubio, pero su alfa estaba en shock mirándolo sin poder creerlo. ¿Será papá? ¿Su esposo espera cachorros? ¡¿Era en serio?! ¿Cuando paso? Bueno si sabe y como.

─¿Amor...? ¿Estás bien?

De repente Min se levanta eufórico con toda la puta emoción del mundo, su lobo brincaba de felicidad y Jimin sonreía feliz al ver a su alfa así de contento.

─¡No lo puedo creer amor, es que no puedo!. ¿En serio seremos padres?

─Si Yoonie, seremos padres tendremos un cachorro o dos, no lo sé.

Min atrapo sus labios en un dulce beso que les quitó el aliento a ambos, por inercia acaricio su vientre donde sus cachorros se estaban formando. Sentía tanta alegría ahora mismo, tanta felicidad.

─Joder no puedo creerlo, voy a hacer padre.

─Si amor vamos a ser padres, nuestros primeros hijos ─sintió sus ojitos picar, esto era muy conmovedor.

─Estoy muy feliz, quiero celebrarlo con una comida en bosque, ¿qué te parece? ─Musito feliz.

─¿En el bosque amor?

Pregunta dudoso.

─Hay un lugar en el bosque que te gustará mucho, ese será nuestro primer destino. ─se acerca y besa sus labios con ternura─ Te amo cariño, gracias por darme el mejor regalo de bodas.

Jimin tenía sus ojitos acuosos, era un conmovedor momento para ambos.

─También te amo, vamos a hacer una familia, te amo YoonGi.

─Te amo mucho más.

Se volvieron a besar con esas emociones en sus pechos, así se quedaron durante toda la mañana, acurrucados y consintiendo a su Omega. El médico dijo que los síntomas de su esposo eran algo más fuertes por lo que debía cuidarlo muy bien, y era por eso que no pensaba dejarlo solo ni un momento.

Sus lobos internos estaban felices y mucho.

Cuando la tarde llegó. El Omega bajo para cocinar algo con las mujeres del servicio. Tenía una tarde de picnic con su alfa en el bosque a su lugar secreto. Cuando termino de organizar todo su esposo llego con una manta blanca y la canasta y las mujeres empezaron a meter la comida.

─¿Estás listo cariño?

─Si estoy listo.

─Andando entonces.

Le robo un pequeño beso y se fueron.

El bosque era hermoso de ver y apreciar, quería convertirse en su lobo y correr un poco por los alrededores. YoonGi por otro lado miro con nostalgia el lugar donde están, era el lugar especial de sus padres, un lugar donde ambos compartieron muchos momentos juntos y el aprecio escondido detrás de los árboles.

─Llegamos.

Se detiene mirando el hermoso quiosco de madera con la vista a un hermoso lago con su cascada, él sitió estaba hermoso, sin duda su esposo lo está sorprendiendo mucho más.

─Mi amor es bellísimo.

─Este es el lugar especial de mis padres, ellos pasaban aquí sus momentos como esposos y disfrutaban de la vista al lago. Mi madre decía que el lago era mágico y que curaba las heridas, creo que me lo decía para que no llorara porque de cachorro solía rasparme mucho y me curaba con aquella agua.

Abraza a su esposo desde atrás tocando su vientre, donde sus cachorros se formaban. Era una sensación cálida y hermosa que jamás llegó pensar que le pasaría, amaba con todas sus fuerzas a su Omega, su lindo rubio de mejillas regordetas. Sus hijos, sus primeros hijos, algunas veces se cuestionó que jamás llegaría el día que esto pasaría.

─O puede que sí sea mágica esa agua.

─Tal vez sí.

Beso su cuello sacándole un suspiro al Omega que derritió sus piernas.

─Tengo hambre mi amor, comamos, los cachorros tienen hambre.

El sólo oír la palabra cachorros le hacía latir el corazón al alfa.

─Entonces hay que alimentar a nuestros cachorros, nuestros cachorros. ─se le formó una risita tonta.

─¿Uno no puede creer que serás padre verdad?

─Aún no lo puedo asimilar, creí que moriría solo y sin que nadie me amará por lo que ocultaba bajo mi máscara. Realmente cuestione mucho aquello.

─Pero mírate ahora, estamos casados, estoy marcado y espero tus primeros bebés. Sé que no fue fácil para ti y todo lo que has sufrido, pero quiero que sepas que eres un Alfa increíble, te amo y a pesar de cómo inició todo, no me arrepiento de nada.

Enrollo sus brazos al cuello de su alfa colocándose de puntitas para besar sus labios, fue correspondido por su alfa quien intensificó el beso.

Al separarse ahora sí sacan la comida y disfrutan de vista y una agradable conversación. Jimin estaba feliz de que su esposo lo trajera a los lugares más especiales para él, eso significaba muchas cosas para él.

Le dio de comer algunas uvas a su esposo quien reía por los lindos pucheros que hacía su omega por no comer de ellos, dejaron la comida sobrante y empezaron a caminar un poco por el hermoso lago. Todo es verde y hermoso, abrazados y robándose besos Jimin decidió sé pararse un poco para empezar a quitar su ropa, su alfa lo miro curioso.

─¿Qué haces amor?

─Quiero convertirme en mi lobo, quiero que él también disfrute de estar con su alfa un momento.

Se quitó absolutamente todo frente a su alfa quien se mordió el labio al verle desnudo. Miro como su Omega se transformó en un hermoso lobo color caramelo y blanco y esos ojos grises hermosos. YoonGi rápido quitó su ropa transformándose en ese gigante lobo negro que hizo retroceder unos pasos a su Omega.

Daba miedo, pero que esperaba, es un lobo real.

Después el Omega se acerca y lame parte de su hocico y corre un poco para disfrutar, el Alfa lo siguió jugando con su Omega, claro que ahora Jimin no se sentía tan rápido, tenía cachorros en su vientre y las fuerzas lo debilitaban.

Se dejó caer cerca del quiosco y su alfa se recargó en él lamiendo su rostro, se quedaron en sus formas lobos acurrucados uno con el otro, sólo mirando el lago tranquilamente.

Minutos después volvieron en sus formas humanas pero no sin antes meterse al lago totalmente desnudos. Jimin soltó esas feromonas dulzonas de lujuria que su alfa no tardó en olfatear.

Se besaron apasionadamente mientras la excitación y el calor emanaba de sus cuerpos, Jimin estaba húmedo por su lubricación natural, YoonGi no desaprovecho en meterse dentro de el de una sola estocada haciendo gemir a su Omega, el agua a pesar de estar un poco fría con su calor hicieron que se sintiera caliente.

El Alfa embistió a su Omega con tal fuerza que Jimin mordió un poco su hombro, joder le encantaba ser tomado de esta manera por su alfa, dando justo ese punto que lo vuelve loco.

─¡Yoon- Yoonie! ─grito.

─Eso mi amor, grita mi nombre.

El agua ayuda con esos deliciosos embistes, Jimin deliraba del placer, su esposo sabía sus puntos débiles así que él sin quedarse atrás, beso sus labios mordiendo y chupando sus delgados labios, le dejo varias marcas en su cuello y clavo sus uñas en su espalda ancha.

El chapoteo del agua era una magnífica sinfonía que combina con el ruido de la cascada, YoonGi aceleró sus penetraciones corriéndose dentro de su Omega, Jimin dejo salir su esencia con el mejor puto orgasmo. Se aferró a su alfa en lo que pasa el nudo, se besaron despacio con mucho cariño, se miraron a los ojos sonriendo por lo que acaban de hacer.

─Tus padres tienen razón, estás aguas son mágicas. —Dijo jadeante.

─¿Por qué lo dices? ─pregunta regulando la respiración.

─Porque me diste la mejor follada en el agua y sentir al mismo tiempo más deseó.

Gruño tierno mirando un con ganas a su alfa, YoonGi sí que amaba este Jimin, descarado y listo para él.

─Con gusto te vuelvo a follar en el lago mi descarado esposo, te amo y amo cada centímetro de tu cuerpo.

El rubio un enrollado en el cuerpo de su alfa, escondió su rostro en su cuello, dejando besitos ahí.

─Y yo amo como me haces sentir, te amo YoonGi.

─Y yo a ti mi amor.

Vuelven a retomar su apasionada tarde en aquel lago, desnudos rodeados de árboles y con los gemidos haciendo eco por todo el hermoso lugar.

Definitivamente estos dos no tenían suficiente.