—¿Qué nos tienes preparado el día de hoy?

—Tal vez no lo sepan pero mi pequeño hermano menor le tiene miedo a las alturas

—¿Vas a ayudarlo a perder su miedo?

—Exactamente —Sonrie.— Se supone que él tiene que estar llegando de la casa de el estúpido de su amigo

El vídeo hace un corte para después la cámara ser enfocada hacia una de las ramas donde Jae Ha sostiene a un asustado Jimin

—Quiero bajar, tengo miedo

—Guarda silencio fenómeno —Gruñe.— Agradece que vamos a echarte una mano

—No me hagas esto hermano —Dice sollozando.— Déjame bajar

—¿Realmente quieres bajar?

—Deja bajar a la nenita antes de que se orine en los pantalones

Una idea parece cruzar rápidamente por la cabeza de Jae Ha porque después de escuchar al chico que sostiene la cámara, empuja a Jimin haciéndolo caer desde una gran altura, un escalofrío recorre mi cuerpo después de escuchar el grito desgarrador al caer contra las piedras

—¿Te lastimaste? —Dice el chico de la cámara

—Duele...

—Solo eres una mariquita, ponte de pie

—No puedo moverme —Dice el pequeño Jimin de ocho años sosteniendo su brazo izquierdo con una mueca de dolor.— Me duele mucho

El segundo vídeo al que le doy click empieza con Jae Ha siendo enfocado frente a una puerta de madera

—¡No me gusta estar aquí! —Grita Jimin.— ¡Déjame salir hermano!

—Vas a quedarte ahí hasta que aprendas la maldita lección

—No me gusta la oscuridad, por favor

—No me vengas con tus lloriqueos fenómeno —Dice con molestia.— Tienes que aprender de una maldita vez que aquí el que manda soy yo

El tercer vídeo enfoca a Jae Ha enterrando el rostro de Jimin contra el lado

—¿Te gusta? —Sonrie.— A los cerdos como tú le encanta esto

—Déjame enfocar esa linda carita suya Jae

—Ni siquiera puedo imaginarme cómo te miras al espejo sin sentir asco

Jae Ha sujetó a Jimin por el cabello levantandolo con brusquedad, su rostro se encuentra cubierto de lodo y aun así se pueden percibir las lágrimas que parece estar conteniendo.

Sin poder mirar algo más cierro con fuerza mi computadora, no puedo creer lo terriblemente cruel que puede llegar a ser una persona, ni siquiera hay necesidad de revisar lo que hay en el resto de las memorias. Con todo esto me ha quedado claro que Park Jae Ha es un maldito mounstro que no merece absolutamente nada

[...]

De un tiempo a otro me encuentro estacionando difícilmente el BMW frente a la casa de Jimin para después llamarle por teléfono sin importarme que sean las malditas tres con cuarenta de la madrugada

—Park

—Estoy a fuera

—¿Dónde a fuera?

—De tu casa, sal

—Es muy temprano como para que estés aquí —Dice con voz ronca.— Salgo de inmediato

Un par de minutos después Jimin sale luciendo con el cabello despeinado y su bata de dormir, al verme tambaleante y probablemente apestando al alcohol se acerca a mi furioso

—¿Condujiste el auto en ese estado?

—Tal vez

—¿Eres estúpida? —Sujetando mi brazo, me acerca a su cuerpo.— Pudiste haber tenido un accidente, ¿por qué demonios has bebido?

—Simplemente quería hacerlo —Rio.— También quería verte

—No puedo creerlo

—Tengo que irme a casa ahora

—Estas loca si crees que voy a dejarte conducir en ese estado, dormirás esta noche conmigo

Sin darme tiempo de decir algo, Jimin me levanta rápidamente sobre sus brazos llevandome dentro de la casa. Entiendo que este molesto conmigo, cometí una estupidez al conducir en estado de ebriedad pero después de ver esos malditos vídeos estaba tan molesta y llena de impotencia que acabé bebiendo dos botellas de vino que tenía reservadas para una ocasión especial.

Cuando Jimin intenta dejarme caer sobre la cama de su habitación, me aferro con fuerza a su cuello impidiéndole apartarse de mi

—No me sueltes

—Iré a preparate un poco de café

—No lo quiero —Murmuro con dificultad.— Sólo quédate conmigo

—¿Qué es lo que pasa Haerin? ¿Por qué has bebido tanto?

—Lo siento tanto Jimin —Digo sollozando.— Lamento que hayas tenido que sufrir por todo eso, me parte el corazón saber que ese maldito se encargó de hacerte la vida un infierno a tal punto de generarte muchos traumas

Jimin no dice nada, sólo se limita a estrecharme a su cuerpo hasta caer recostado sobre la cama mientras una de sus manos acaricia mi cabello con delicadeza.

—Tranquila, eso es cosa del pasado

—No puedes sólo dejarlo ir, el tiene que pagar por todo el daño que te causo

—Sabes que no puedo hacer eso

Durante toda la madrugada y parte del día en la empresa intento pensar, pensar que debo hacer con las memorias. Sí se lo cuento a Jimin el terminaría por ordenarme quedarme callada, está tan seguro de mantener todo el asunto de Jae Ha en secreto con tal de no destruir a su familia pero yo no me siento de la misma forma.

Quiero venganza, venganza por todo lo que el psicópata hizo con un pequeño niño indefenso durante muchos años. Mientras espero el elevador que me llevaba a mi departamento finalmente llego a una conclusión, confesarlo todo, algo en mi interior me dicta a decir la verdad, demostrar que Park Jae Ha no es la persona que aparenta ser. Con la decisión ya tomada me apresuro a llegar a mi departamento para tomar las memorias robadas y correr hacia la estación de policía donde Taehyung se encuentra trabajando, lo siguiente que ocurre es algo que definitivamente me venía esperar.

Cuando doy un paso dentro, un hombre encapuchado me estrella fuertemente con el suelo impidiendo moverme.

—¿Dónde están?

—¿Quien carajos eres?

—Contesta mi maldita pregunta —Dice apretando el agarre que tiene en mis muñecas.— ¿Dónde están los USB?

—No pienso decírtelo

—Escúchame perra, vas a decirme dónde están si no quieres morir

Su comentario me hace sonreír, en un ágil movimiento logro quitarmelo de encima para intentar huir de ahí lo que me resulta imposible cuando el me sujeta por mis cabellos arrojándome fuertemente contra la pared haciéndome gemir de dolor

—No intentes hacerte la valiente conmigo

—Te estás metiendo con la persona equivocada

En un ágil movimiento logro soltarme de su agarre para después lanzar una patada contra sus genitales haciéndolo caer de rodillas para finalmente rematarlo con un fuerte derechazo que lo dejo inconsciente

[...]

—¿Estás segura de que estás bien?

—Estoy bien Tae

—¿No te hizo daño?

—Se defender de tipos como él

—Tener un padre y un hermano que son expertos en el combate de cuerpo a cuerpo realmente ayuda

Taehyung acaricia mi cabello con ternura mientras me sonríe con esa sonrisa cuadrada suya.

—Quiero hablarte de otra cosa Tae

—¿Sobre qué?

—Quiero levantar una denuncia —Digo entregándole todos los USB.— Pero no se si sea demasiado tarde

Después de arreglar unas cosas, Tae me guía a una de las habitaciones privadas de la estación de policía para revisar la evidencia. Lo que definitivamente no esperábamos y que no dejo la sangre helada fue el contenido de la memoria con la letra S

—Dios mío...

—¿La conoces?

—Es la ex novia de Jimin —Digo sintiendo un nudo en la garganta

—Creo que deberías llamarlo