✦┆O12: Haerin
Fuji-Q Highland
Es el lugar a donde Jimin decide llevarme, llámenme infantil pero la verdad es que a mis 27 años sigo amando los parques de atracciones, comer algodón de azúcar y sentir la adrenalia en cada juego. Habíamos optado por dirigirnos primero al hotel por ropa más cómoda, Jimin cambió su elegante traje por unos pantalones negros que se le ajustaban perfectamente, una camiseta del mismo color acompañado de una cazadora negra... Se veía extremadamente sexy
—¿Tienes los boletos?
—Aquí están.
—¡Genial! —Digo con entusiasmo.— Tendremos tiempo de subirnos a todos
—Señorita Kim recuerde que debemos volver al hotel a hacer nuestras...
Sin darle tiempo de poder terminar me sujeté de su brazo arrastrándolo entre la gente mientras decidía cual sería el primer lugar al que subiriamos pero finalmente me decidí primero por la casa del terror.
—Entremos ahí señor Park
—No creo que sea posible &Dijo nervioso.— Recuerde que no soy muy fan de los lugares oscuros, vaya usted la esperaré aquí
—Señor Park, ¿cuál es el chiste de todo esto si no va a subirse conmigo?
—Simplemente no creo que un millonario hombre de negocios como yo se vea bien subiéndose a lugares como esos
Ya en la atracción mientras esperábamos a que el carrito diera marcha pude ver a Jimin muy nervioso mirando por todas partes posiblemente buscando una salida, no tenía idea si realmente estaba así por la oscuridad o por el hecho de temerle a personas disfrazadas y sangre falsa así que sujeté su mano firmemente intentando que se calmara. Ante mi acto me miró con desaprobación pero en cuanto el carro se movió su agarré se volvió más firme que por un momento creí que iba a romperme la mano.
Después de ese subimos a ese, subíamos a algunos más como: la Noria, los carritos chocones, el martillo, la canoa, incluso al carrusel que principalmente era un juego para niños. Mi pecho se llenó de alegría al verlo tan feliz, realmente se estaba divirtiendo y por un momento me pregunté cuando había sido la última vez que lo había hecho.
—Ire por algo de comer —Anunció.— Esperame aquí y no se te ocurra moverte
—Si señor Park
Jimin me dio una última mirada antes de perderse entre la gente, yo por mi parte, me dispuse a comer mi algodón se azúcar. Estaba tan concentrada en ello que no me percaté que dos chicos se pararon frente a mi hasta que uno de ellos habló
—Hola linda —Dijo sonriendo.— Me presto soy Dan y él es mi amigo Yoshida
—Um... ¿Mucho gusto? -Dije confundida
—Mi amigo y yo no pudimos dejar de mirarte y la verdad es que nos pareces una chica muy linda
—Mucho mejor que cualquiera —Habló Yoshida.— Así que creímos que tal vez... Podrías darnos tu número
—¿Mi número?
—Si —Dan sacó de sus bolsillos su teléfono extendiéndolo.— ¿Podrías?
Mi vista viajo de chico en chico para detenerse finalmente en el teléfono, por un segundo creí que esto era una mala idea bien podrían ser secuestradores, violadores o lo que sea pero realmente parecían buenos chicos así que sin más tome su teléfono
—No eres de Japón ¿cierto?
—No —Le contesté a Dan sin mirarlo.— Soy de Corea, viajé a Japón por negocios
—Ya veo, ¿estás aquí sola?
Estaba a punto de responder a eso y terminar de anotar mi número si no fuera porque una mano muy conocida me arrebató el teléfono de las manos.
—Ella viene conmigo —Gruñó Jimin arrojándole de vuelta el teléfono.
—Él es... ¿Tu novio?
Pude ver como a Dan le costaba pronunciar las palabras y a Yoshida temblar. Jimin siempre había sido así, con una mirada lograba descolocarte tanto. Mi jefe daba mucho miedo cuando se enfadaba
—Así es —Jimin pasó su brazo por cintura acercándome a él.— Así que les pido de la manera menos violenta posible que saquen su culo fuera de mi vista si no quieren tener problemas conmigo
—Lo... Lo sentimos mucho...
Yoshida sujetó el brazo de Dan arrastrándolo lejos de nosotros temerosos de que Jimin pudiera hacerles algo.
—¿Que demonios sucede contigo? —Gruñi molesta.
—¡¿Estás demente?! —Me gritó.— ¡Cómo carajos se te ocurre darle el número a un desconocido! No sabes que clase de persona es
—¡Personas amables tal vez!
—¡Por dios, no digas estupideces! El problema contigo es que eres demasiado ingenua y confías muy rápido en las personas —Jimin me miró furioso entregándome la comida que había comprado para mi.— Ten
—Ya no quiero nada, se me quitó el apetito
—Bien.
Jimin caminó hacia un cesto de basura arrojando la comida con coraje, me miró por unos segundos y se marchó dejándome sola.
Realmente lo había hecho enojar tal vez tenía razón, confiaba muy rápido en las personas y no sabia que clase de personas eran esos dos chicos en realidad así que negándome a terminar de esta forma nuestro día corrí hacia Jimin sujetándolo de la mano.
—Me equivoque —Dije.— Hice mal y lo siento, no volveré hacerlo
—Haerin —Suspiró sujetando firmemente mis manos.— Siento mucho haberte gritado pero hay personas muy malas en el mundo además no quiero tener problemas con tu padre y tu hermano si llegara a pasarte algo. Soy muy guapo para morir en sus manos
—¡Oye! —Exclamé golpeándole el pecho.— Subamos a la montaña rusa
—Ni loco
—¿Que sucede? —Me burlé.— El pequeño Chimmy le tiene miedo a...
—¡No tengo miedo! —Gritó.— ¿Quieres subir a ese maldito juego? Bien hagamos lo
Jimin me arrastro hasta la atracción, realmente fue divertido verlo gritar muerto de miedo pidiendo que detuvieran el juego, que no quería morir y que los demandaría si le pasaba algo. Me hubiera encantado tener una cámara para grabar ese momento y mostrárselo a todos en la empresa.
—Ese hombre es un llorón —Susurraron dos niños pasando junto a nosotros.— Por un momento creí que iba a ponerse a llorar
—Yo creí que iba a orinarse en los pantalones
—Estúpidos mocosos —Gruñó Jimin reteniendo las ganas de vomitar mientras yo acariciaba su espalda.
—No les hagas caso
—Tú también quieres burlarte
—Lo siento —Dije elevando mis manos.— Es que... Debió ver su cara
Y no pude más. Estallé en carcajadas mientras Jimin me asesinaba con la mirada, justo ahora parecía un fantasma debido a lo pálido que se encontraba el sonido de su teléfono lo obligó a alejar su mirada de mi y a mi a detenerme.
Desconocía lo que decía el mensaje pero no parecieron ser buenas noticias porque lo vi ponerse más pálido si es que eso era posible.
¿Ustedes que dicen, se puso celoso o sólo estaba preocupado por ella?
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