Treintavo Capítulo.
30.
Baek no comprendía porqué sus padres estaban actuando de forma tan extraña. Quedándose sentado en el comedor mientras comía su cereal y coloreaba una caricatura, podía observar cómo su padre omega se ruborizaba levemente cuando su padre alfa estaba a centímetros de su espacio personal. Baek frunció su entrecejo al instante y comió otra cucharada del desayuno que su padre omega estaba en desacuerdo que comiera en vez de un desayuno propicio, pero, gracias a su padre alfa, pudo convencerlo de que pudiera comer aquellos casquillos de chocolate con leche que tanto le gustaban.
Taehyung terminó de desayunar antes de recoger los trastes que había usado para irse a la cocina a lavarlos. En ese momento, Baek observó a su padre alfa detallando cada movimiento de su padre omega, y el pequeño cachorro aprovechó para preguntar algo que seguía inquietándolo.
—¿P-por qué has gol-peado a papi ayer, papá? —le preguntó Baek a Hoseok, quien al instante se atragantó con el sorbo de zumo de naranja que bebía.
En ese momento Taehyung volvió al comedor, para estar pendiente de Baek y que este se alimentara. El omega al detallar que el alfa yacía pálido y bastante nervioso, no le dio una buena espina de lo que estaba ocurriendo.
—Yo... yo no estaba golpeando a papi, Baek —le respondió Hoseok, tratando de recomponerse—. ¿Por qué dices eso?
—Porque... porque papi gritaba m-mucho, ¡le estabas haciendo daño! —exclamó Baek, cerrando sus pequeñas manos en puños y golpeando ligeramente la superficie de la mesa— ¡Un buen alfa no g-golpea a los omegas!
Hoseok y Taehyung voltearon a verse mutuamente, tratando de encontrar una explicación lo más rápido posible. Taehyung estaba bastante sonrojado y bueno, Hoseok no sabía cómo manejar la situación. Había esperado que su hijo no hubiese escuchado nada de lo que ocurrió anoche, sin embargo, Taehyung siempre había sido bastante... escandaloso.
—Uh, estábamos jugando, Baek... a papi no le gusta perder, por eso había estado gritando. Nunca lo golpearía —respondió Hoseok, ahora mirando directamente a Baek, quien se cruzó de brazos y analizaba a sus dos padres.
—Sí, cariño. Estaba gritando porque había perdido la partida. No te preocupes, amorcito —intervino Taehyung, acercándose y dejando un suave beso sobre la coronilla de su hijo. Quien parecía asimilar y aceptar la información dada.
—¡Oh! Entonces... ¿p-puedo jugar con ustedes? —les preguntó ingenuamente y ahora quien se atoró con su propia saliva fue Taehyung.
—Mejor vamos al parque de diversiones, ¿qué te parece? —intervino Hoseok mientras golpeaba levemente la espalda del omega para que este recobrara la respiración normal.
—¡Sí! ¡Quiero ir al p-parque! —exclamó efusivo Baek ignorando por completo el alivio que surcó sobre los rostros de sus padres, al ver que olvidó por completo el incidente.
—Entonces ve por tus cosas, campeón —dijo Hoseok e instantáneamente Baek salió corriendo a la segunda planta para... ni siquiera sabía exactamente el alfa qué cosas podría cargar un pequeño de esa edad.
Hoseok le sonrió a un avergonzado omega, y le limpió la comisura de su boca con su dedo pulgar. Taehyung lucía increíblemente hermoso esa mañana, y el alfa se lo había dicho después de que tomaran cada uno duchas separadas. Ambos sabían que haber tenido relaciones fue bastante precipitado, sin embargo, sus lobos estaban regocijados de la más profunda felicidad. Y esperaban que nada ese día pudiera interferir en aquella burbuja mágica que habían creado.
(...)
Jungkook se despertó, hallándose completamente solo en la habitación del hospital. No había siquiera rastro de Jimin, y eso lo desanimó un poco, aunque sabía que debió haber ido a cambiarse de ropa.
El omega sin importar cualquier recomendación del médico, se levantó de la camilla. Realmente necesitaba caminar y al ver que era bastante tarde, le dio una ventaja en que el personal médico era escaso a esa hora. Cuando se levantó una hoja de papel cayó sobre el suelo y con el entrecejo fruncido lo recogió, reconociendo la caligrafía de Jimin en esta.
"Namjoon pagará por todo lo que te hizo. Descansa, Kookie."
¿Acaso ese beta qué se creía? ¿Alguna especie de ninja pequeño con delirio de grandeza? No, no y no lo permitiría Jungkook. Así que calzó sus pies con las sandalias que le había traído Hoseok y salió de la habitación con la bata de hospital.
Jimin debía estar en ese mismo edificio porque sabía que Namjoon había sido trasladado al mismo hospital en donde él estaba internado, porque tenían la mejor calidad de cuidados intensivos de la ciudad. Realmente el alfa ya estaba bastante delicado, y no dejaría que Jimin llegase a ensuciar sus manos cuando el futuro de Namjoon estaba claramente ya sentenciado.
Jungkook era bastante bueno en encubrirse, y tomó como provecho aquella habilidad. Caminando a lo largo de los pasillos buscando la zona de cuidados intensivos. Encontrándose en la puerta giratoria que daba paso a las habitaciones a un guardia de seguridad bastante perdido en un profundo sueño, incluso ya se encontraba roncando y Jungkook agradeció su incompetencia.
No fue bastante difícil descifrar cuál era la habitación de Namjoon. Donde la puerta estaba abierta y podía reconocer el leve aroma de Jimin traspasando los muros. Jungkook entró a la habitación encontrando a un Jimin vestido de negro, por lo tanto, podría llamar Jungkook a su outfit como "asesino serial" (guantes, tapabocas y capucha negra).
—¿Qué crees qué haces? —preguntó de repente Jungkook a Jimin, quien llevaba en sus manos una almohada que seguro utilizaría para asfixiar a Namjoon.
Jimin se sobresaltó y dejó caer la almohada al piso. Giró a ver al omega y sus pequeños ojos le demostraron lo asustado que estaba.
—Yo... él merece morir, Jungkook. Mira lo que te ha hecho a ti y a Taekyung... —respondió en un murmuro Jimin, mientras Jungkook se acercaba lentamente al beta.
—Taehyung, Jimin. Es Taehyung —le respondió Jungkook, levantando su mano y acariciando el cabello del beta—. Pensé que eras lo suficiente inteligente para saber que, si en este momento Namjoon muere, puede que Taehyung también lo haga.
Jimin abrió sus ojos llenos de lágrimas y de repente se derrumbó, abrazando al omega y escondiéndose entre su cuello. Jungkook suspiro y comenzó a acariciar la espalda del beta, para luego bajar un poco su mano y posicionarla en las posaderas ajenas. Sí, ahora estaba mucho mejor.
—Casi cometo una locura, perdóname —murmuró Jimin mientras sollozaba.
—¿En serio serías capaz de matar a alguien por mí? —le preguntó Jungkook con una sonrisa bastante nerviosa.
—Por supuesto que sí, quién te haga daño se las verá conmigo, Kookie —respondió Jimin.
Eso fue lo más enfermo y tóxico que había escuchado decir Jungkook a alguien, y se sintió tan feliz que sin importar que estuvieran frente a un idiota inconsciente en una camilla, comenzó a besar desenfrenadamente los labios de Jimin.
En ese momento, escucharon cómo el aparato que indicaba los signos vitales de Namjoon comenzaba a resonar de manera alarmante. Se retiraron asustados, y Jungkook sin pensarlo acogió la mano de Jimin para que salieran de la zona -probablemente futura escena del crimen no cometido por ellos directamente- antes de que el personal médico llegara por la emergencia.
Se alcanzaron a esconder en el primer cuarto lejos del área de cuidados intensivos, entrando a un pequeño cuarto de limpieza. Al instante que cerraron la puerta, escucharon varios pasos rápidos a lo largo del pasillo y Jimin tuvo que morder su mano para acallar los sollozos.
—¡El paciente está teniendo un paro cardíaco! —clamó uno de los presentes y de inmediato Jungkook pasó saliva fuertemente.
—Mierda —bramó en un murmuró Jungkook—. Mierda, Jimin... ¿sabes qué pasará si muere ese hijo de puta? —le preguntó en un tono bajo, aun así, demostrando la alteración de lo que estaba ocurriendo—. Taehyung puede morir y de paso Hoseok nos mata a nosotros. Me va a dar algo, Jimin, me va a dar un soponcio, sostenme...
Jimin alcanzó a sostener a un omega bastante dramático y aunque no fuera su culpa precisamente que Namjoon estuviera atravesando por la vida y la muerte... se sentía culpable en haberlo deseado.
(...)
Hoseok se despertó cuando escuchó un grito lastimero proveniente de la habitación de Taehyung y de inmediato salió bastante desorientado de su recámara para poder enterarse qué estaba ocurriendo.
Cuando pasó frente a la habitación de Baek, al instante el niño abrió la puerta mientras frotaba sus ojos con sueño y bramaba: —¡eh, no jueguen sin mí!
Hoseok se inclinó para quedar a la misma altura de su hijo y le acarició el cabello: —vuelve a dormir, quizás papi está teniendo una pesadilla.
—Yo... yo p-podría cuidar de papi —murmuró bastante cansado y Hoseok lo tomó en sus brazos para llevarlo de vuelta a su cama y arroparlo rápidamente.
—Yo cuidaré de papi, deja que papá se encargue y sigue durmiendo —le pidió Hoseok antes de arroparlo, Baek asintió y cerró sus ojos—. Buen chico.
Hoseok cerró la puerta de la habitación de Baek antes de salir corriendo a la recámara en donde se encontraba Taehyung, ya que habían acordado dormir en cuartos diferentes. Su lobo estaba atento a cualquier cosa que pudiera ocurrir y al abrir la puerta, la imagen que lo recibió fue alarmante; Taehyung yacía en el suelo al lado de la cama, en posición fetal. El alfa de inmediato corrió hacia él y lo tomó en sus brazos para subirlo a la cama y revisar superficialmente que estaba ocurriendo, encontrando la marca superficial de emparejamiento tomando un color y textura grisácea.
Como si estuviera pudriéndose.
De inmediato se inclinó a olfatear el área, reconociendo el olor calcinado de la piel del omega que no dejaba de gritar y sollozar, aferrándose con sus manos a los brazos de Hoseok para que lo ayudase.
—Mierda... mierda, ¡¿qué mierda está pasando?! —musitaba Hoseok con desesperación, comenzando a pasar su lengua en toda la extensión de la herida, tratando de calmar el dolor del omega.
—Mi pecho... Hoseok... mi pecho duele —alcanzó a articular Taehyung entre su más sumo aflicción—. Creo que él está muriendo...
Bien, si Hoseok estaba angustiado ahora estaba aterrado. Tomando el cuerpo de Taehyung lo arropó con una cobija antes de salir de su casa y tomar uno de sus carros para llevarlo al hospital más cercano. Llamaría a Jimin para que viniera a cuidar de Baek mientras el trataba de no estrellarse por manejar rápidamente a través de la autopista.
—No te duermas, precioso... no lo hagas —le dijo Hoseok a Taehyung que yacía removiéndose en el asiento del copiloto—. Ya llegaremos al hospital y estarás bien.
Taehyung sabía que eso no podía asegurarle Hoseok. El dolor que estaba sintiendo lo estaba consumiendo, ni siquiera sentía sus extremidades y su corazón latía fuertemente. El escozor de la marca le daba un indicio que la razón de porqué estaba ocurriendo ello es que Namjoon estaba entre la vida y la muerte.
—Si... si algo me llega a pasar —musitó Taehyung, respirando precipitadamente—. Cuida de Baek, Hoseok.
—Vas a estar bien, no pasará nada. Solo resiste un minuto, llegaremos al hospital y aliviarán tu dolor —respondió Hoseok entrando a la plaza del estacionamiento del hospital. En donde irónicamente se encontraba Namjoon.
El personal de urgencias escuchó los gritos de auxilio de parte del alfa al entrar con un cuerpo casi inconsciente entre sus brazos no dudaron en traer una camilla para que depositara al omega allí. Hoseok no se separó ni siquiera un momento de Taehyung mientras caminaban rápidamente a lo largo del pasillo y respondía varias preguntas hechas por el internista de turno.
Cuando llegaron a una puerta giratoria, el personal le pidió a Hoseok que se quedara allí ya que tenía restricción para entrar en el área. El alfa de inmediato se opuso, sin embargo, una enfermera omega de mayor edad trató de calmarlo.
—Por favor, señor, quédese aquí. Yo lo mantendré informado... —murmuró la señora y Hoseok indeciso soltó la mano de Taehyung.
—Estarás bien, amor, estaré aquí cuando despiertes —dijo Hoseok observando cómo los ojos del omega se cerraban y de inmediato la camilla fue apartada de su lado.
Hoseok acogió su cabello entre sus manos y tiró de este de forma brusca y ansiosa. Si a Taehyung llegase a pasarle algo no sabría qué hacer. Ahora que todo parecía encontrar una salida en su relación, no podría irse y dejar tanto a Baek como a él solo. De inmediato sacó su teléfono y llamó a Jimin, quien demoró bastante en contestar.
—Jimin. Necesito que vayas a mi casa y estés pendiente de mi hijo. Taehyung... está en urgencias en el mismo hospital de Jungkook... creo que algo le ha pasado a Namjoon —dijo Hoseok rápidamente cuando escuchó cómo descolgaban el celular.
—Sí, sí señor. Voy ahora mismo. Espero que Taehyung mejore —respondió Jimin casi tropezando en cada una de sus palabras. Demostrando lo nervioso que se encontraba, aun así, Hoseok no le preguntó qué pasaba y le pidió que por favor llegase rápido a estar pendiente de Baek. Agradecía que su asistente personal supiera todas las claves de seguridad de su casa.
Hoseok tuvo que esperar sentado en la sala de espera alrededor de una hora para recibir alguna noticia del estado del omega. Cuando vio que el médico que había entrado con Taehyung se acercó a él con una mirada nada confortante, sintió que su corazón daba un vuelco.
—¿Usted es el alfa de Kim Taehyung? —le preguntó el doctor, comenzando a revisar unos papeles.
—Sí, ese soy yo. Mire lo que ocurre es que mi omega hace unos días fue marcado superficialmente en contra de su voluntad... —respondió bastante nervioso Hoseok—. De hecho, el alfa que lo hizo está aquí, se llama Kim Namjoon.
El doctor parecía comprender la situación y chasqueó la lengua contra su paladar. Cruzándose de brazos, miró con mayor comprensión al alfa que pareciese que iba tener un ataque de pánico allí mismo.
—Pudimos estabilizar a su omega... —respondió el médico—. Ha sido de gran ayuda que la marca de emparejamiento no era tan profunda. Está fuera de peligro, señor Jung. Generalmente los omegas cuando pierden al alfa que los ha marcado, primero entran en un estado de depresión y podrían morir, otros superarlo u otros pasar desapercibido a la situación... como este es el caso de una marca forzada, el omega se ha resistido a que el enlace se haya hecho en su totalidad y gracias a eso está completamente bien.
—¿Entonces por qué reaccionó de esa forma? —le preguntó Hoseok con cientos de preguntas en su cabeza y al parecer el médico lo estaba confundiendo aún más—. Espere... ¿Kim Namjoon ha fallecido?
—Porque la marca estaba desapareciendo, señor Jung. Por eso su lobo estaba sufriendo, pero como le comentaba, está sano y salvo su omega. Ah, y sí el alfa Kim Namjoon ha fallecido hace una media hora... ¿quiere un chicle? —le preguntó de repente, extendiéndole un paquete de chicles. De inmediato Hoseok frunció su ceño y negó.
—Muchas gracias, doctor. ¿Podría ir a visitarlo? —le preguntó Hoseok esperando una respuesta afirmativa y cuando esta fue así, no dudó en seguir al médico de forma rápida hasta la habitación en donde Taehyung estaba conectado a varios aparatos médicos.
Hoseok se sentó en una banca al lado de la camilla y estuvo allí con Taehyung cuando despertó. Porque esta vez el alfa cumpliría cada una de las promesas que estaba dispuesto a ofrecerle a su precioso omega.
Los días habían transcurrido más rápido de lo que esperaba Hoseok. Taehyung asistió al funeral privado que le hizo la familia de Namjoon al alfa, que, aunque el omega no admitiera se había sentido bastante triste al escuchar la noticia de su partida.
Sí, Namjoon lo había tratado de violar y le marcó a la fuerza, sin embargo, con él también había compartido bastantes buenos momentos y él le había apoyado cuando nadie lo había hecho en un país de idioma y cultura completamente diferente a su natal corea. Los padres de Namjoon le pidieron disculpas por lo que ocurrió y Taehyung le dio su pésame por su pérdida.
Ahora Taehyung tendría que volver a Holanda y eso hacía sentir a Hoseok desolado, incluso le pidió que renunciara y él le conseguía un puesto mejor tanto en su empresa como en otra si no quería volver a J.J.S Holdings, el omega se negó diciendo que tenía cientos de compromisos y no podría dejar a su jefe con todo el trabajo de un día a otro.
Sin embargo, Hoseok no iba a permitir que su omega y su hijo se llegasen a separar meses hasta que Taehyung decidiera mudarse por completo a Corea del Sur, así que, con ayuda de Jungkook (quién solo le daba pésimos consejos) y de Jimin (quién era más romántico). Realizó numerosas actividades a lo que llamaba Jungkook, "lista de cómo ser un buen alfa y tener loquito a tu omega".
Cocinó una cena romántica una noche, en donde, Baek resultó siendo un invitado sorpresa... cuando Hoseok iba a inclinarse a besar a Taehyung, el niño salió corriendo, gritando y Taehyung le dijo al alfa que debían ser más precavidos la próxima vez.
Otro día lo invitó al cinema, tenía pensado en una película de género dramático o romance, sin embargo, esa noche no pudieron encontrar a alguien disponible de confianza que cuidase de Baek, así que tuvieron que ver una película infantil. Y aunque Hoseok hubiera querido algo más privado, aprovechó para enlazar su mano con la de Taehyung.
También le llevaba rosas todos los días, le decía lo hermoso que se veía todas las mañanas y le alababa su forma de ser cada vez que tenía la oportunidad.
Por las noches se escabullía en la habitación de Taehyung, sin importar que este después de su encuentro íntimo le haya dicho que era mejor no dormir juntos mientras comprobaban si lo que tenían podía funcionar sin tener sexo. Porque no podía siquiera pensar en que su omega estaba solo a unos metros y no podía abrazarlo y apreciar el delicioso aroma que este poseía.
Una noche en particular, Hoseok entró con dos copas de vino, encontrándose despierto a Taehyung. Le ofreció la copa y este la aceptó con gusto, moviéndose a un lado de la cama para darle espacio al alfa.
—No se vayan, Tae —dijo Hoseok—. Pueden quedarse aquí, no necesitas tomarte tanto tiempo, si el problema es que crees que vamos muy rápido en nuestra relación, te prometo que me contendré.
—Necesito terminar varios asuntos en la oficina... no puedo renunciar de un día a otro —le respondió Taehyung—. Prometo volver pronto.
Hoseok abrazó a Taehyung y el omega no descartó comenzar a impregnarse del fuerte aroma, frotando su cabeza contra el cuello del alfa. Últimamente su vida estaba cambiando de forma radical, muchas cosas habían ocurrido y tenía temor, incertidumbre de que las cosas con Hoseok no funcionara y llegase a sufrir de nuevo.
—He alquilado una bella casa en Jeju para que pasemos este último fin de semana antes de que viajen —le informó Hoseok, comenzando a acariciar las hebras del suave cabello de Taehyung.
Taehyung asintió con una sonrisa y Hoseok realmente esperaba que en ese viaje pudiera terminar de convencer al omega de quedarse. Porque estaba seguro de que Taehyung todavía desconfiaba del término de su relación y podría irse y tal vez... nunca volver.
Ese fin de semana Hoseok le demostraría cuánto lo adoraba, admiraba y respetaba. Esperando que la luna estuviera de su lado y nada se interpusiera en su viaje.
**
Les informo que el próximo capítulo es el final :c
Abro debate; ¿quieren qué el vhope queden juntos en la historia o es mejor que estén separados? ¿debía morir Namjoon? ¿Creen que Taehyung accederá a aquedarse?
Muchas gracias por su bello apoyo, ¡las adoro!
Besitos en esas trompitas.
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