7: Confesiones al vapor
[Yumi]
La noche caía suavemente sobre el puesto de ramen, y el aire estaba impregnado del aroma reconfortante del caldo hirviendo. Había algo en el ambiente que me animaba a hablar más de lo habitual. Quizás era la calidez de la cocina o la compañía de ese chico misterioso que se había convertido en un habitual.
—¿Tienes algún secreto que quieras compartir? —le pregunté, sonriendo mientras le servía su tazón. Él me miró, sorprendido.
—¿Secreto? ¿Por qué lo preguntas? —respondió, inclinándose un poco hacia adelante, curioso.
—Porque todos tienen uno. —Me encogí de hombros—. Por ejemplo, yo estoy aquí trabajando a medianoche porque necesito ayudar a mi familia. Tengo un sueño, pero no puedo perseguirlo todavía.
Sus ojos se abrieron un poco más. Era como si estuviera viendo a alguien por primera vez. La curiosidad brillaba en su mirada.
—Eso suena duro. —Dijo, tomando un sorbo de su ramen—. ¿Y qué sueñas hacer?
—Quiero ser chef. —Mi voz se volvió un poco más suave, casi como si me estuviera confesando un secreto—. Me encanta la cocina. Siempre quise abrir mi propio restaurante. Pero ahora mismo, solo puedo hacer lo que puedo para ayudar en casa.
Él asintió, y por un momento, había un silencio compartido entre nosotros, un momento de comprensión.
—Eres muy apasionada por lo que haces. —Su voz era reflexiva, y había algo en ella que me hizo sentir que realmente le importaba.
—Sí, pero a veces es frustrante. —Solté un suspiro. —La vida no es fácil, y hay momentos en que siento que no voy a lograrlo.
El chico miró hacia su tazón, como si estuviera sopesando mis palabras. No podía saber lo que realmente pasaba en su vida, pero había algo en su expresión que me decía que él también llevaba sus propias cargas.
—Supongo que todos tenemos nuestras luchas, ¿no? —dijo, y me pareció que había un eco de melancolía en su tono.
—Totalmente. —Sonreí de manera sarcástica—. Pero no puedes dejar que eso te detenga. ¿Y tú? ¿Tienes algún sueño que no estás persiguiendo?
Él se detuvo por un segundo, como si estuviera pensando en lo que iba a decir.
—Oh, no. —Se rió suavemente—. Yo solo soy un chico común que disfruta de un buen ramen a medianoche.
Una parte de mí sabía que había más detrás de esa fachada, pero no era mi lugar presionar. Así que dejé que la conversación fluyera hacia algo más ligero.
—De acuerdo, entonces, ¿cuál es tu ramen favorito? —pregunté con una sonrisa, deseando desviar un poco el tema.
Él soltó una risa y comenzó a contarme sobre las extrañas combinaciones de ramen que había probado en otros lugares, y poco a poco, nuestras risas llenaron el aire. Me gustaba escuchar su voz, aunque me intrigaba el misterio que llevaba consigo.
Mientras continuábamos conversando, sentí que la barrera entre nosotros se iba desvaneciendo lentamente. Era un diálogo ligero, pero había un entendimiento más profundo, como si ambos estuviéramos compartiendo nuestros mundos sin realmente revelarnos por completo.
Al final de la noche, mientras limpiaba las mesas y él disfrutaba de su último bocado, no podía evitar sentir que había encontrado un poco de consuelo en su compañía. Tal vez, a pesar de nuestras diferentes vidas, podíamos ser amigos.
—Gracias por la charla, Yumi. —dijo, mientras se levantaba para irse. Su tono era genuino, y sonrió de una manera que me hizo sentir apreciada.
—¡Hasta mañana! —le respondí, sintiendo una extraña emoción en mi pecho.
A medida que él se alejaba, no pude evitar preguntarme sobre su historia. Quería conocer más de él, pero a la vez, la parte de mí que estaba en su mundo me decía que no era mi lugar.
La noche continuó, pero mi mente estaba llena de pensamientos sobre el chico misterioso que amaba el ramen, sin saber que detrás de esa máscara de simplicidad, había un mundo completamente diferente.
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𝐋𝐥𝐞𝐠𝐨́ 𝐩𝐨𝐫 𝐪𝐮𝐢𝐞𝐧 𝐥𝐥𝐨𝐫𝐚𝐛𝐚𝐧 ;)
𝐀𝐡𝐫𝐞! 𝐉𝐬𝐣𝐬𝐣𝐬𝐣𝐬𝐣, 𝐧𝐚𝐡 𝐦𝐞𝐧𝐭𝐢𝐫𝐚. 𝐀𝐧𝐝𝐨 𝐚𝐜𝐭𝐮𝐚𝐥𝐢𝐳𝐚𝐧𝐝𝐨 𝐡𝐢𝐬𝐭𝐨𝐫𝐢𝐚𝐬 𝐚𝐬𝐢́ 𝐪𝐮𝐞 𝐞𝐬𝐩𝐞𝐫𝐨 𝐪𝐮𝐞 𝐞𝐬𝐭𝐞 𝐜𝐚𝐩 𝐥𝐞𝐬 𝐡𝐚𝐲𝐚 𝐠𝐮𝐬𝐭𝐚𝐝𝐨 😊
𝐐𝐮𝐞́ 𝐩𝐢𝐞𝐧𝐬𝐚𝐧 𝐝𝐞 𝐉𝐮𝐧𝐠𝐤𝐨𝐨𝐤 𝐲 𝐬𝐮 𝐝𝐞𝐬𝐞𝐨 𝐝𝐞 𝐨𝐜𝐮𝐥𝐭𝐚𝐫 𝐭𝐨𝐝𝐨?
𝐋𝐚𝐬 𝐥𝐞𝐨 👀
𝐁𝐞𝐬𝐢𝐭𝐨𝐬 𝐞𝐧 𝐥𝐚 𝐜𝐨𝐥𝐢𝐭𝐚 😚
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