𝐂𝐀𝐏𝐈𝐓𝐔𝐋𝐎 𝟏𝟎

Advertencia ⚠️ contenido+18






-No te arrepentirás

Las gotas de agua resbalaban por su piel, su cabello totalmente mojado, sus ojos cerrados, la sangre que se había pegado a su cuerpo desaparecía con facilidad.
Su pequeño cuerpo cubierto por el agua, y aunque la habitación aparentaba no haber nadie, una sombra se mantenía entre la oscuridad.

Miraba a la joven con intensidad y deseo, aunque no quisiera admitirlo la desea demasiado.
Su orgullo no dejaba que su cuerpo actuará, un gran bulto se hizo presente en sus pantalones.

La imagen de la joven no salía de su mente, cada pequeño detalle de ella parecía marcarse en su cabeza.

Los pequeños movimientos que hacia la joven al ducharse, lo hacían exitar, al ser el mayor que ella, eso sería algo indebido pero aún así no le importaba mucho.

El tiempo en que la joven desapareció, había sido una eternidad para el.
Al estar cerca de ella, se sentía seguro, sentía que la joven era su otra mitad.
Sentir su aroma serca era un recuerdo de lo mucho que la deseaba y amaba.

Un gemido de la joven lo sacaron de sus pensamientos, la joven tenía las mejillas ruborizadas.
Los celos lo empezaron a consumir, el pensar que ella estaba con otro hombre, lo enojaban por completo.

Con cuidado salió de su escondite, encaminandose hacia la cama de la habitación.
Se acostó en ella y espero a que la joven saliera.

- ¿En quien pensabas?
Hablo su voz firme y llena de celos.
- En ti -
Murmuró la joven con sorpresa.

- ¡Dime en quien pensabas! -
Exclamó el mayor, caminando hacia ella con enojo. Con enojó tomo bruscamente sus manos que sostenían la toalla que envolvía su cuerpo.

La toalla desapareció, mostrando el cuerpo de la menor, ella rápidamente trato de cubrir su cuerpo desnudo.
Pero el agarre del mayor era tan fuerte, que no lograba soltarse.

- ¡Suéltame!
Hablo con desesperación.
- no me gusta demasiado la vista
Susurro cerca de su cuello.
Su aliento cálido erizaba la piel de la joven.

- ¡He dicho que me sueltes!
Forcegio, pequeños besos en su cuello se hicieron presentes. Varios suspiros de placer fueron acompañados.

Los besos se fueron extendiendo, los gemidos y suspiros de la joven eran silenciosos. Pero aún así lograban exitar al mayor.

La cercanía de ambos era inevitable, ninguno quería romper el momento, hasta que unos toques en la puerta se hicieron presentes.

Jun-ho gruño separándose de la joven, que inmediatamente cubrió su cuerpo y regreso al baño.

- ¿Que quieres?
Pregunto irritado, su voz era ronca.
- Debemos vigilar, no lo recuerdas
Contesto un señor, mantenía su mirada en el interior de la habitación.
- Hoy no haré vigilancia, ve tu
Sin más la puerta se cerró, la habitación que momentos antes estaba llena de emociones incontrolables.

La menor que se encontraba dentro del baño, maldecia en bajo.
"Porque mierda no traje otra cosa" Murmuraba mientras miraba una camisa del policía.

Con cuidado se la coloco, aquella camisa, era demasiado grande, tanto que cubría sus muslos.

Con lentitud salió del baño, encontrándose con la mirada de deseo del policía.

Sin esperar más tiempo, lo beso, aquel beso fue intenso, ambos se amaban demasiado.
Pero si orgullo no deja admitir, Pero sus acciones lo demostraban.

El mayor agarro los muslos de la chica, llevándolos hasta su cadera, haciendo que está enrolle sus pies en ellas.
Sus intimidades se rozaban, el deseo se exparsia por doquier.

-Le dijiste a la jugadora 067 que sería tuya, es verdad
Hablo entre suspiros.
-Es verdad
Murmuró besando sus pechos, dejando varias marcas en ellos

De un momento a otro empecé a besar su cuello, bajando hasta su abdomen.
Varias marcas eran dejadas en el abdomen del mayor, que solo soltaba gruñidos de placer.

Ambos sabían que sus cuerpos no soportarían estar separados una vez más, sus labios encajaban perfectamente, como si el destino hubiera estado esperando este encuentro.

Sus almas tan unidas, pero tan separadas a la vez, se implementaban correctamente.

El apretaba suavemente los muslos de la chica, el debo del mayor se poso en la entrepierna de la chica.

- Ten por seguro que te haré gritar, hasta que no puedas más
Susurro, las bragas de la joven, desaparecieron, el debo del mayor con mas libertad se introdujo en el interior de la joven.

Ella soltó un gran gemido.
La sensación de los dedos del policía le resultaba totalmente placentero.
Sin esperar un minuto más, metió otro dedo, sus dedos se movían en círculos.

Los gemidos y gruñidos imparables que lanzaba aquella pareja resonaba por la pequeña habitación.
Jun-ho con rapidez se quito el pantalón junto con su boxer, dejando ver su gran miembro.

"Esto dolerá demasiado" Pensó la chica, trago en seco, sus manos se posaban en los hombros de el.

Sin más rodeos, el miembro de mayor, entro en el interior de la chica, un gran suspiro profundamente de parte de ambos.

-No te arrepentirás
Murmuró cerca de su cuello, dejando varios besos en el.
-Esto sería lo último de lo que me arrepentiría
Hablo, tomando las caderas de Sae-byeol.

Corto pero intenso, Sorry no se explicar bien estás escenas +18.
Se eliminará el Capítulo si la mayoría lo desea.
Gracias por todo su apoyo.
Voten y comenten me ayudaría mucho a seguir escribiendo.

ANDIE💗

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