Cansado, esa era la palabra para describir a Eddie Brock pues ya eran contadas las veces en las que escuchaba como su vecina del departamento de enfrente discutía con su novio y si hacía memoria era la tercera vez esa semana, no era que llevara la cuenta, si no que aveces se quedaba despierto por si las cosas empeoraban y el tendría que intervenir, no conocía de mucho a Elinor, pero no le gustaba la idea de dejarla a la merced de la persona que decía amarla.

Aveces quería tomar el valor e interferir pero siempre se retractaba antes de dar un paso adelante y cuando Anne lo dejó bueno, muchas cosas se habían ido al carajo. En cuanto subió al piso de su apartamento y escuchó los gritos desde que entró sabía que las cosas en verdad irían mal, vio como Elinor y su novio estaban en pleno pasillo discutiendo y a Eddie no le quedaba de otra más que observar incomodo la situación.

—¡Lárgate! — grito Elinor enfurecida —¿¡No me escuchaste?! ¡Quiero que te largues, ahora!

—De verdad. . .no se como pude perder el tiempo con alguien como tú — respondió el hombre mientras se acercaba a ella y acariciaba su rostro —bueno, no todo fue una pérdida total de tiempo

Elinor se enfureció por lo que entró a su departamento y tomó un jarrón de cerámica para acto seguido tirarselo encima, aunque falló en el intento.

—Estas demente —afirmó, se dio la vuelta dispuesto a irse hasta que se topó con Eddie —Esta loca, una perra loca.

Eddie no supo que responder a eso, pero en definitiva no estaba de acuerdo con sus palabras. Cuando hiba a contestar vio como un zapato impacto en la nuca del hombre con fuerza para finalmente irse de ahí rápidamente.

—¡Eres un. . .cabron! —grito Elinor desde el barandal a la planta baja donde el hombre se encontraba yéndose, vio a Eddie por una última vez para después entrar en su departamento con un azoton de puerta estruendoso.

—¡Lamento haber desperdiciado mi tiempo contigo, no valias la pena! — grito devuelta el hombre, grito que solo fue escuchado por Eddie y si Elinor seguia detrás de la puerta, quizá también.

¿De dónde diablos había reunido el valor para ir a hablar con ella y sensiorarse de que estaba bien?. Quizá no era interés si no preocupamiento, quería saber si se encontraba bien, así que tocó la puerta levemente esperando una respuesta aunque no hubo ninguna

—Estonfue estupido — susurró para si mismo mientras apoyaba su frente en la puerta —Oye. . .yo solo quiero saber si esta todo bien. — hablo más alto para que Elinor lo escuchara.

Pero no obtuvo respuesta, así que resignado regresó a paso lento a su departamento hasta que el ruido de la puerta siendo abierta lo detuvo, volteandose encontrándose con la chica.

Elinor se limpió levemente las lágrimas que caían sintiéndose sumamente apenada de que la vieran así.

—Disculpa, yo. . .lamento que tuvieras que ver eso — se diculpo apenada mientras sorbia su nariz —¿Cuál es tu nombre?

—¿Cómo? ¿No sabes mi nombre? — pregunto incrédulo hacia ella.

—No, yo se tu nombre — contradijo mientras sentía que una leve sonrisa hiba apareciendo en su rostro — solo quiero ver que tu lo sepas.

—Eddie — respondió atontado, Elinor hizo un ademán para que siguiera — Brock.

—Claro — murmuró — de nuevo, lo siento Eddie, por todo eso, pero supongo que si estuvieras en su lugar también pensarías que soy una perdida de tiempo y que no valgo la pena.

—Claro que vales la pena — afirmó — y oye, con un poco más de puntería estoy seguro de que le hubieras con jarrón justo en la cara.

Elinor soltó una leve risa al escucharlo.

—Quizá. . .le hubiera roto la nariz — opino divertida con una risa de por medio — aunque lo único por lo que lo lamento fue por mis girasoles.

—¿Te gustan los girasoles? —pregunto sorprendido Eddie, Elinor afirmó con una sonrisa.

—¿Elinor cierto? —pregunto Eddie

—Dime Ellie, así me llaman mi padre y mi hermana — respondió con una leve sonrisa.

—Ellie'. . .suena — hablo Eddie buscando las palabras correctas para decir, pero Elinor se le adelantó.

—¿De locas? —intento bromear, pero recodo las palabras de su exnovio — debes pensar que de verdad estoy loca, le dije un montón de cosas y encima le tiré un jarrón y casi le rompo la cara.

—No pienso que estés loca — nego

—Deberias irte, aveces pierdo el control y tiendo a lastimar a las personas — respondió — pero aún así, duele, apesar de las advertencias y las veces en las que me decían que lo dejara, nunca escuchaba.

—Se lo que es lastimar a las personas — hablo Eddie mientras se recargaba en la pared y metía sus manos en sus bolsillos —y se lo que es hacer daño, pero tienes todo el derecho a sentirte así, no quiero entromerme de más pero supongo que debio haber hecho algo sumamente malo para que reaccionaras así.

—Hizo que perdiera el caso que estaba esperando y después hizo que perdiera mi trabajo — relato Ellie con un semblante serio — no me dijo muy bien lo que hizo, pero supongo que fue la gota que derramó el vaso.

Cuando escuchó a Elinor decir eso no pudo evitar recordar a Anne y en cómo le había arruinado la vida haciendole exactamente lo mismo.

—Lamento eso — hablo apenado

—Ya no importa — respondió restandole importancia — puedo conseguir trabajo en otro bufete de abogados.

—No sabía que eras abogada — hablo Eddie sintiendo nuevamente ese deja vu

—No es la gran cosa del mundo, pero con mi padre siendo jefe de policía en Nueva York, supongo que siempre me interesó esto — afirmó con una leve sonrisa

—Creo que cada vez conozco más cosas sobre ti — admitió Eddie con una risa

—Es curioso, yo solo se tu nombre, bueno supongo que de verdad soy muy patética para solo saber eso — intento bromear Ellie pero no le resulto como quería.

—En ese caso — hablo Eddie mientras se posicionaba delante suyo —¿quieres acompañarme por algo de beber?

Elinor soltó una leve risa, tomó su abrigo, llaves y cerró su departamento.

—No veo por qué no — hablo mientras empezaba a bajar las escaleras siendo seguida por Eddie.

Y mientras bajaban Elinor pensaba que haber conocido a Eddie Brock no era tan malo como pensaba, después de todo, ambos estaban en un agujero negro y ambos se estaban ayudando mutuamente a salir a flote, por qué lo peor eran ellos dos.