¿CUANTAS HORAS HABÍAN PASADO DESDE QUE EL GRUPO ENTRÓ AL cabeza de puerco? Ni ellos mismos lo sabían, lo único que sabían es que la estaban pasando demasiado bien entre ellos, riendo por las ocurrencias de Aria, cantando (según ellos) algunas de las canciones que ponían en el lugar, haciendo sus intentos por bailar de la misma manera de Aria, pero sobre todo, disfrutando de cervezas de mantequilla e hidromiel, lo que hizo que una de las integrantes del grupo comenzara a ponerse mas feliz de lo normal.

Kayla reía en compañía de Damon mientras hablaban sobre algunos recuerdos del primer año en que fueron amigos, en donde apenas se estaban acostumbrando a la excentricidad de Aria, cuando algo los hizo voltear. Era su amiga castaña gritando y acercándose a ellos en compañía de Remus y Adara.

— ¡Yo digo que beso de tres para reforzar la amistad!— exclamó Aria tomando las manos de sus amigas— Remus, tú no porque respeto al hombre de mi amiga, así que dame permiso

— ¿Se pueden besar tres personas al mismo tiempo?— preguntó Remus confundido— ¿Cómo rayos?

— ¿Qué acaso nunca viste a Sirius hace un año? Desde que le conté que eso era posible, podías verlo haciendo varios durante las fiestas— exclamó Aria borrando ligeramente su sonrisa— Aún me estoy cuestionando porque le dije que eso se podía hacer, fuí la creadora de un monstruo... ¡Pero eso a nadie le importa, así que beso de tres!

— Cuando Aria comienza a querer repartir besos significa que es momento de irnos y de alejarla del alcohol— rio Damon poniéndose de pie para quitarse su chaqueta y ponérsela a Aria— Ven aquí Zoé, es momento de irnos antes de que te quieras seguir tomando el agua hasta de los floreros

— ¿Zoé?— volvió a preguntar Remus

— Su segundo nombre. No le gusta mucho que le digan así pero lo hacemos para molestarla— contestó Adara— Iré con Damon para ayudarlo, sabemos que Aria estando ebria no es sencilla de controlar y aunque fue muy divertido verla estrellarse con una puerta hace un año, no queremos que eso se repita

— ¡Qué no me digas Zoé!— se quejó Aria viendo mal a su amigo

Kayla miró a su amiga un poco confusa, ya que si bien la había visto sonriendo y riendo durante la tarde, notaba que había momentos en donde miraba a Remus con tristeza, suponía que algo había ocurrido en lapso de tiempo en donde los vio hablando a solas, ya que después de eso no volvió a ver alguna interacción entre ellos.

Adara le extendió un par de galones a su amiga para que terminaran de pagar lo que habían consumido y salió para seguir al resto de sus amigos.

Remus para no salir junto a la Slytherin, decidió esperar a que Kayla pagara la cuenta.

Para cuando ella volvió, vio con seriedad al Gryffindor, cosa que claramente él había notado, pero no quería preguntar.

— Escucha, no me gusta meterme en las vidas amorosas de mis amigos... a menos claro que lo vea necesario y parece ser que hoy es uno de esos momentos. Desconozco que clase de relación tengas con Adara y no me vengas con que no pasa nada mas allá de una amistad porque desde el quinto año hemos visto como los dos parecen irse enamorando un poco mas... y no me involucré cuando de la nada dejaron de pasar tiempo juntos y ella se alejó de nosotros por sentirse triste, pero ya pasaron algunos años y ninguno de los dos parece querer soltarse— comenzó a hablar la chica, asegurándose que Adara no la escuchara— ¿Qué rayos está pasando? ¿Se quieren? ¿Están juntos? ¿Solo son algo pasajero? Necesito respuestas porque ya no quiero que mi amiga se siga aislando cada que se pone triste y eso es curiosamente cuando deja de hablar o reunirse contigo

— ¿Ella nunca les dijo nada de nosotros?

— Sabemos que tiene sentimientos por ti desde el quinto año, sabemos que quería intentar algo contigo... pero Adara es muy reservada cuando se trata de sus sentimientos y casi no habla sobre lo que ocurre en su interior, es por eso que llega a aislarse, cosa que no nos gusta que haga, pero tratamos de comprender... darle su espacio y no presionarla— explicaba Kayla mientras seguían caminando— Pero no somos ciegos, nos damos cuenta de como se miran, de como Adara comenzó a sonreír más a partir de que se conocieron, de como se sonreían durante algunas clases o en el gran comedor, incluso nos dimos cuenta que fuiste tu quien le manda un arreglo de flores en su cumpleaños aunque no pongas tu nombre en la tarjeta... 

— Es algo muy complicado de explicar... quiero a Adara, la quiero como nunca había querido a alguien en mi vida y por supuesto que soy consciente de los sentimientos que ella tiene por mi, pero las cosas no son tan simples— respondió Remus mirando al suelo— Además de algunas cosas bastante complicadas que ocurren en mi vida, no tengo nada que ofrecerle a alguien como ella... Adara merece un universo completo si así lo quisiera, pero yo no soy capaz de darle ni una tercera parte de eso. ¿Qué clase de vida tendría con alguien como yo?

— Remus, conoces a Adara e incluso me atrevería a decir que igual que yo. Sabes que no le importa nada de eso, que si, comprendo que no puedas vivir de amor una vez que salgas del colegio, que en esa clase de situaciones se necesitan mas cosas que los sentimientos, pero Adara es alguien muy trabajadora y se que tu igual, encontrarán la manera de salir adelante— decía la rubia mirando a su amigo— No voy a darte esa conversación de "Si la sigues haciendo sufrir te voy a golpear", porque ese no es mi papel en el grupo, ese es el de Adara. Damon es quien te va a golpear sin avisar, el claro ejemplo fue cuando golpeó a James en el tren. Aria quien te hará la vida imposible, el ejemplo de eso fueron los polvos pica pica en la cama de James, porque si, los gemelos Prewett lo hicieron, pero la idea fue de ella. Y mi papel, bueno, yo soy quien te va a destruir en todo sentido posible, pero no queremos llegar a eso, así que vamos a quedarnos con que mi papel es solo hablar

Kayla sonrió inocentemente al tener la mirada de Remus en ella.

Y es que aunque muchos consideraban a Kayla como alguien dulce e inocente que no parecía tener ni un solo gramo de agresividad, pero eso no sería siempre y mucho menos cuando se trataba de proteger a quienes le importaban. En esa clase de momentos podía ser la otra cara de la moneda y ser alguien a quien pocos reconocerían.

— Te voy a dar un consejo de alguien que tiene el corazón destrozado, pero conoce las alegrías de ser amada— rio la chica amargamente— Es mejor vivir sabiendo que lo intentaste, que tuviste la oportunidad de tener una bella historia junto a la persona que quieres... a no tener nada, a tener siempre el temor del que dirán o como lo van a lograr. Te puedo decir que aunque el corazón aún me duele, soy mas feliz sabiendo que viví mi amor con James... si fue real o no para él ya no importa, pero al menos se que yo di lo mejor de mi y se que alguien mas en algún momento lo va a saber valorar. Piensa en lo que tú quieres y si eso es estar con Adara, hazlo y no esperes a que ella se canse de esperarte

Remus se quedó en silencio y vio como la rubia corría para alcanzar a sus amigos, quienes estaban evitando que Aria se subiera a un árbol para perseguir una ardilla.

●●●

Cuando todos llegaron a los terrenos de Hogwarts, aún trataban de mantener a Aria en silencio, cosa que parecía ser imposible ya que la castaña no dejaba de reír y de cantar canciones en español. La chica ya se había tropezado un par de veces, por lo que Damon en un intento de evitar que se hiciera daño, decidió cargarla al estilo nupcial, cosa que no estaba funcionando muy bien, ya que la chica se movía demasiado.

— ¡Cuánto daría por gritarles nuestro amor!— cantó Aria llegando a los terrenos del castillo— ¡Decirles que al cerrar la puerta nos amamos sin control, que despertamos abrazados, con ganas de seguir amándonos!

Adara aún se sentía algo triste, pero no podía evitar reír en compañía de Remus y Kayla por la enorme cantidad de ocurrencias por parte de la castaña. Los tres aún entre risas trataban de evitar que los profesores se dieran cuenta de su estado, pero ni ellos mismos podían mantenerse serios.

— ¡Pero es que en realidad no aceptan nuestro amor!— gritó Aria con sentimiento— Esa canción me llega como si tuviera alguna clase de amor secreto... pero la realidad es que a quien quiero no me quiere

— Aria, si no bajas el tono de tu melodiosa voz, Minnie va a venir a castigarnos— le advirtió Remus

Kayla reía por todo lo que pasaba a su alrededor. Sin duda ese día había sido mas que perfecto para ella, no solo por haber tenido la oportunidad de reunirse con sus padres, si no también por el grandioso momento que se encontraba viviendo en compañía de sus amigos.

Era con esa clase de momentos con los que Kayla sabía que aunque la tristeza por lo ocurrido con James aún fuera parte de su vida, podía tener esos pequeños momentos de felicidad y que lo único que necesitaba para eso era a su familia y amigos.

— Ay que aburrido eres Remus— se quejó Aria moviéndose en los brazos de su amigo— Adara, ¿Cómo es que te gusta?

— Aria, yo te amo, pero si vuelves a hacer mención de ese tema, te aviento al lago negro— amenazó Adara 

— Aria, te me vas a caer si te sigues moviendo como gusano en sal— la regañó Damon  

— ¿Cómo que te gusta alguien y nosotros no lo sabíamos?— preguntó Kayla al captar las palabras que su amiga había dicho momentos atrás

— No vale la pena hablar de él y de lo que creía sentir. Se besa con quien se le ponga enfrente, menos conmigo, creo que la señal es bastante clara— suspiró la castaña— Así que mejor vivir la vida de rockstar, soltera y sin compromisos

— ¿Qué no el plan era que Damon y tu fueran los tíos solteros de la familia?— preguntó Kayla nuevamente

— ¡Por supuesto que si! Es mas, solo por eso, yo digo que nos la sigamos— dijo Aria riendo— ¡Fiesta en el cuarto de Remus!

— ¿Y por qué en el mío?— preguntó Remus— Pero sobre todo... ¿Qué tiene que ver que quieras ser una tía soltera de la familia con quererte seguir la fiesta en mi cuarto?

— Porque los chicos no pueden entrar a los dormitorios de chicas, eso nos descarta a Adara, Kayla y a mi— contestó arrastrando las palabras— Los compañeros de Damon son algo payasos... bueno, menos uno del que no recuerdo su nombre, pero eso es solo porque le gusta Kayla...

— ¿Le gustas a un amigo de Damon?— preguntó Remus viendo a la pelirroja

— Le gusta a media escuela— gritó Aria aún moviéndose en brazos de Damon

— No le gusto a media escuela, pero a un compañero de Damon si. Aunque no es mi tipo, pero es buena persona— asintió ella— Y tú, Aria, estas borracha, lo que necesitas dormir, ya luego piensas en si quieres seguirte la fiesta

— Pero Kay, yo quiero seguir divirtiéndome— dijo Aria haciendo un puchero

— Hagamos algo, te vamos a llevar a que duermas un poco, si despiertas antes de las 10 de la noche hacemos una pequeña reunión— propuso Kayla

— ¡Hecho!— dijo Aria feliz

Aria se siguió moviendo hasta que Damon se desesperó y la bajó, la Hufflepuff intentó caminar lo mejor posible para que ningún profesor la descubriera en su estado.

— Kay, ¿Dónde está nuestra sala común?— preguntó Aria al darse cuenta que no sabía a donde tenía que ir

— Remus, ¿La puedes llevar a tu habitación?— le pidió Kayla— La llevaría al nuestro pero no creo que pueda tocar los barriles al ritmo correcto y cuidar de ella. Además de que llevarla a la cama yo sola va a ser muy complicado, sin contar que la profesora Sprout siempre está cerca y no quiero tener detención por su culpa

— Por supuesto— asintió Remus—  La contraseña de la sala de Gryffindor es hocico de cerdo, creo que ya sabes cual es nuestro dormitorio

— Gracias Remus, yo iré a mi habitación para llevarle ropa limpia, con eso de que se tiró una cerveza encima...— explicó Kayla— Y también iré por comida para que se le baje un poco

Remus asintió y le pidió ayuda a Damon para ir por Aria, quien ya se encontraba cantando una nueva canción mientras daba vueltas.

— ¡Aria, te vas a vomitar!— regañó Damon— ¡Deja de dar tanta vuelta!

— ¡Yo no nací para amar, nadie nació para mi, tan solo fui un loco soñador no mas!— cantó con sentimiento la Hufflepuff— Culpo a Lucius Malfoy por mi mala suerte en el amor, ¡Huevos al pendejo de mi ex novio!

— Las canciones mexicanas si que te llegan— dijo Adara riendo al ver a su amiga

— Las reuniones con su familia en México son lo mejor del mundo, es como ver a muchas Aria en diferentes versiones— contestó Kayla riendo— Por cierto, Adara, ¿Me acompañas a mi habitación para buscarle ropa a Aria?

— ¡Qué triste fue decirnos adiós, cuando nos adorábamos mas!— cantó Aria 

— ¿Cuántas canciones de despecho se sabe es mujer?— preguntó Damon al escuchar a Aria cantar 

— Un chingo— contestó Aria que ya estaba siendo cargada por Remus

Adara y Kayla soltaron una carcajada al ver la escena, sin duda amaban a su amiga.

•••

Remus y Damon estuvieron cerca de quince minutos tratando de dormir a Aria antes de entrar al castillo, esto porque así sería mas sencillo trasladarla sin llamar la atención. De una chica dormida, a una chica cantando canciones de despecho a todo volumen, era obvio que llamaba menos la atención.

En cuanto pudieron entrar y acercarse a la entrada de la sala de los leones, tuvieron que quedarse unos momentos en el inicio de las escaleras, recargados en una de las columnas para asegurarse que Aria ya se encontraba profundamente dormida y que no se iba a despertar por el movimiento de Damon al subir las escaleras.

Para la fortuna de ambos chicos pudieron llegar al cuarto de los merodeadores sin ser vistos por algún profesor. Ventajas de que la mayoría aún se encontrara en Hogsmeade o en alguno de los jardines del colegio.

Remus abrió la puerta tratando de no hacer ruido y encontró a Sirius en su cama rodeado de libros, este iba a saludar animadamente hasta que vio a Aria dormida en los brazos del Ravenclaw.

— Wey, contexto, plis—  dijo Sirius viendo confundido a los chicos que acababan de entrar

— Remus nos llevó al cabeza de puerco, el lugar tenía canciones mexicanas, esas que Aria ama y pues se emocionó con el hidromiel, entonces ahora está ebria— explicaba Remus cerrando la puerta

— ¿Se fueron a emborrachar sin mi?— preguntó Sirius ofendido— Me duelen

— Tú tenías tarea, ni modo— contestó Damon— Eso te pasa por atrasarte con los temas pendientes

Sirius iba a contestar que él no tenía nada pendiente, hasta que Remus lo volteó a ver, señal de que no debía negar lo que le acababan de decir.

Damon colocó a Aria en una de las camas disponibles, la cubrió con una manta, le puso un bote de basura a un lado en caso de que quisiera vomitar y se aseguró de que en todo momento estuviera de lado para evitar incidentes.

— Será para la próxima— dijo Sirus—  ¿Y dónde están Adara y Kayla?

— Fueron a las cocinas para buscar algo de comer para Aria, además de hacer una parada en el dormitorio de Kayla para tomar algo de ropa— contestó Damon viendo los libros que Sirius tenía sobre su cama

Sirius se alertó al momento, se puso pálido y miraba a Remus con desesperación.

— ¡No!— gritó Sirius levantándose de su cama— ¡Ellas no pueden ir a las cocinas!

— Sirius, no grites, si despiertas a Aria tu te haces cargo— regañó Remus volteando a ver a la cama en donde Aria descansaba— ¿Por que no pueden ir?

— James vino hace un rato por el mapa del merodeador— le susurró Sirius a su amigo— Iba a llevar a Lily a las cocinas para según él hacerle un picnic bajo la luz de las estrellas, que cursi

Sirius parecía estar tan preocupado por lo que había escuchado, que olvidó por completo cerrar los libros en donde se encontraba investigando sobre hechizos de amor.

Fue entonces que por ese descuido, Damon se acercó hasta donde estaban todos esos libros y comenzo a leer las anotaciones que había en algunos pedazos de pergamino.

— Sirius, ¿Qué clase de tareas te dejan para andar investigando sobre la maldición imperio y conjuros de amor? Tenemos varias clases juntos y no recuerdo que nos hablaran de algo como esto— preguntó Damon extrañado— ¿Y por que Adara y Kayla no pueden ir a las cocinas?

— Bien hecho Sirius— susurró Remus a su amigo— Tenías que cerrar las cortinas de tu cama

— Pues... 

El mayor de los Black no pudo acabar de contestar puesto que en ese instante Peter entró a la habitación gritando, sin darse cuenta de la presencia del Ravenclaw o de la Hufflepuff que ya comenzaba a dar vueltas en la cama por todo el ruido que había.

— ¡No mamen weyes!, ¡No saben lo que acabo de descubrir!— gritó Peter— ¡Si está hechizado, James está hechizado!

— Peter, no creo que...

— Remus, es real, lo están hechizando— interrumpió Peter a su amigo— Pero no es Lily quien lo está haciendo

Aria, quien había comenzado a recuperar la consciencia con el primer grito de Sirius Black, despertó completamente y muy desconcertada al escuchar lo que su amigo acababa de decir

— ¿Qué carajos acabas de decir? ¿Hechizado? ¿De que hablas?— preguntaba Aria que se encontraba muy confundisa

— En la madre, mames, no hagas eso— dijo Peter espantado— ¿Por qué no me dicen que Aria estaba aquí?

— Y no es la única que está aquí— habló Damon— Ahora explíquenme, ¿Cómo es eso de que James está hechizado? 

— ¿Tú no estabas dormida?— le preguntó Remus a la chica

— Unos gritos me despertaron— dijo algo atontada la chica— Denme cinco minutos y pásenme mi mochila, ahí debo de tener algo para bajarme la peda, después de eso, me van a explicar lo que Peter acaba de decir

Remus, Peter y Sirius se miraron un tanto temerosos. No querían que ellos se enteraran de sus sospechas, no hasta que tuvieran mas respuestas, pero ahora estaba claro que no podían mentir. Tenían que ser honestos bajo el riesgo de que ninguno de los dos les creyeran (cosa que veían bastante probable).