CHAPTER NINE
"TRAINING TIME"

❱❐❲↻❳➟ 𝟏𝟏 𝐃𝐄 𝐉𝐔𝐍𝐈𝐎 𝐃𝐄 𝟐𝟎𝟑𝟎, 𝟎𝟕𝟎𝟎 𝐇𝐎𝐑𝐀𝐒. 𝐌𝐎𝐘𝐔𝐋𝐀𝐍 𝐒𝐇𝐀𝐓𝐓𝐄𝐑𝐃𝐎𝐌𝐄, 𝐇𝐎𝐍𝐊 𝐊𝐎𝐍𝐆

OLYMPIA PODÍA SER MUCHAS cosas, pero no una persona impuntual. Eso se vio demostrado durante todos sus años como oficial y ahora mucho más.

Siendo las siete de la mañana en punto ella ya se encontraba en el área de lucha del Shatterdome, esperando que los cadetes llegaran para su clase de hoy.

Pidió prestado un conjunto de ropa deportiva ya que ella no había traído nada consigo. Éste consistía simplemente en un top y unas calzas de malla color negro. No sé sentía lo más cómoda, pero era eso o nada.

Miró el reloj digital de la pared y el primero en llegar fue Nate. La platinada se tensó un poco al recordar su discusión del día anterior, pero al parecer el castaño venía en son de paz.

—Cómo olvidar la puntualidad de Olympia Hansen— llegó a su lado.

—Es mi don— alzó las manos.

—Luces bien— aquello lo dijo sin si quiera mirarla.

La platinada levantó su vista hacia él buscando algún indicio de lo que él sentía hacia ella. Si era odio, o rencor o simplemente quería lanzarla lejos.

—Está todo bien— le dijo al darse cuenta de aquello y ella sonrió. Luego los cadetes comenzaron a hacer ingreso al lugar y se pusieron en una sola línea; en posición, esperando órdenes de su superior.

—Bien, creo que es hora.

—Suerte— le dijo Nate antes de irse, pero al notar que un grupo entró al lugar se volteó que Hansen— ¿Disculpa?— señaló a los Vengadores a sus espaldas.

Ella se encogió de hombros— Hoy tendremos una clase muy especial.

Río suavemente— Esto será divertido.

Algo que era muy habitual en el Shatterdome era que siempre que había una presentación o una pelea, todos se reunían a verla. Por lo cual, el rededor del área de entrenamiento estaba llena con varios otros militares, los Vengadores y los cadetes al frente.

—Buenos días cadetes— habló Olympia al centro del área.

—¡Buenos días oficial!— dijeron todos al mismo tiempo.

—Espero hayan dormido bien...— comenzó a caminar de un lado al otro mirándoles— Y que sus diferencias hayan quedado de lado. Ya que hoy...Necesito que sus mentes estén claras y concentradas— chasqueó sus dedos— Por lo que vi el día de ayer saben bastantes técnicas de lucha...— habló en referencia a la pelea de ayer— Sin embargo, son algo básicas y nunca está demás saber algo nuevo.

Retrocedió un poco en el área de lucha y le echó una discreta mirada al grupo de Vengadores que esperaban sin saber qué demonios hacer. Todos usando ropa deportiva.

—Vamos a hacer un repaso de cosas básicas...— siguió hablando— ¿Alguien me dice cuál es la escencia principal del control de un Jeager?

—El enlace neuronal, señora.

—Correcto Jinhai— dijo hacia al chico asiático que había respondido— El enlace neuronal permite que seamos mejores peleando al estar conectados con nuestros compañeros...Y, que nuestras acciones en la plataforma estática se repliquen en el robot.

Sonrió de lado con emoción. La acción estaba por iniciar.

—Dicho eso...Podemos concluir que todo lo que aprendamos aquí— señaló al suelo— Lo haremos en un Jeager. Es por eso...Que haré una pequeña demostración para que luego practiquemos— se volteó y desplegó una pantalla con su mente— Podré haber sido muchas cosas...Pero mi récord sigue ahí— apuntó el holograma—Sin ser vencido en seis años.

Más atrás sus amigos Nate, Raleigh y Jake observaban todo con atención.

—Ya llegué, ya llegué— dijo el moreno algo apresurado.

—¿Qué traes ahí?— dijo Lambert con el ceño fruncido.

—Papas— dijo levantando la bolsa y comiendo— ¿Quieren?

—¿Es broma? Baja eso— le dijo Becket.

—Oye...Olympia Hansen hará una demostración de lucha...¡En seis años no tenemos algo tan emocionante!—tomó un bocado— No me lo perdería por nada.

Nate puso los ojos en blanco— Será un día largo...

—...Y es por eso...— continuó la platinada— Que traje unos invitados especiales que me ayudarán con la presentación...— miró al lado— Por favor un aplauso...¡Para los Vengadores!

Toda el área comenzó a aplaudir mientras el equipo—algo confundido— se dejaba ver.

Algunos los ovacionaron— como un muy efusivo Jake— Pero otros simplemente no pudieron olvidar sus diferencias y se mantuvieron rígidos.

—¿Ven sus caras de no sé que demonios hacemos aquí?— algunos rieron— En seguida les diré...Segunda lección básica; Un piloto debe estar preparado para muchas cosas, pero ¿Cuál es la primera?

—Un ataque inminente, señora.

—Así es Vic— dijo a la cadete rusa— Se ve que han estudiado— otras risas— Así que...La dinámica de hoy consistirá en que ese grupo de ahí— señaló a los héroes— Vendrá a atacarme uno por uno y yo les enseñaré cómo defenderse.

Los cadetes se miraron emocionados. Sin embargo, los Vengadores no lo estaban para nada; de hecho, estaban nerviosos.

—¿Qué vamos a hacer qué?— murmuró Tony algo asustado— ¿Y que vamos a hacer eso con la mejor luchadora de este lugar?

—No sé que estoy haciendo aquí, yo me voy— lamentó Bruce a punto de darse vuelta, pero Thor lo detuvo tomándolo de la camiseta.

—Bueno, creo que se lo debemos— respondió Rogers.

—Claro, tú lo dices porque eres un experto luchador— siguió quejándose Bruce— A mí me va a matar.

—Ya relájense y pongan atención— les reclamó la pelirroja.

—De acuerdo— la voz de Hansen llamó sus atenciones— Una fila. Vengan uno a uno cuando termine el turno del otro...Ahora...Prepárense.

Rápidamente se amontonaron de manera abrupta tratando de no quedar en primer lugar. Lamentablemente, el que quedó en el primero puesto fue el doctor Banner que comenzó a lamentarse de inmediato.

—Me llegó la hora— susurró.

—Oficial Lambert— habló con la vista fija en su contrincante— El reloj a mi señal.

Éste entendió la indicación y se preparó. Mientras tanto Olympia comenzó a hacer calentamiento. Estiró sus brazos, sus piernas, pero de un momento a otro se estiró hacia atrás y pegó dos volteretas seguidas para finalmente quedar de pie a la perfección.

Banner sólo tragó saliva.

—Fue un gusto amigo— le dijo Thor detrás de él palmeando su hombro.

—Nate— llamó Hansen solamente mirando a su contrincante.

El oficial silbó— Tres...Dos...Uno...¡Corre reloj!

Con todo el miedo del mundo Bruce se abalanzó hacia la platinada con la intención de atacarla con su puño arriba. Si embargo, ella fue más hábil y tomó su mano y dobló su brazo a su espalda.

—Esta maniobra es un clásico— Bruce soltó algunos quejidos a pesar de que el agarre no fuera tan fuerte— Es un movimiento que sí o sí un Kaiju hará y así lo podrían sobrellevar. Y luego...— soltó a Bruce y este cayó al piso— Lo dejan caer.

El público aplaudió a la oficial y su primera demostración.

Ella hizo una mueca— Lo lamento Banner, ¿Sin rencores?— alzó sus pulgares.

—Sí, sí, yo estoy bien— murmuró a penas en el suelo y después unos soldados lo ayudaron a levantarse para salir de ahí.

La mujer giró nuevamente y sonrió al ver a su nuevo contrincante— Siguiente.

El dios del trueno sonrió también y se abalanzó contra Hansen.

Buscó derribarla al empujarla desde el abdomen, pero ella hizo fuerza con las piernas para evitarlo. Para desestabilizar al rubio lo golpeó en las rodillas, se puso sobre su espalda y con el mismo brazo de él retuvo su cuello.

—¿Tienen esto en sus retinas? El dios del trueno está justo aquí— éste trató de soltarse pero no pudo— Maniobra de Ofstent, la primera que aprendí cuando me uní a la fuerza.

Luego rodó sobre su espalda y con la fuerza de sus piernas lo empujó lejos.

Se puso de pie con agilidad y observó a su siguiente peleador.

Tony corrió y trató de tirarla de la misma manera de Thor, pero esta vez ella simplemente se corrió a un lado, distrayéndolo, y esto permitió que Hansen pudiera lanzarse hacia él con una voltereta, derribarlo y apretarlo con su pierna.

—Esta maniobra la vi bastante decente en una pelea de niñas ayer— se dirigió a las involucradas en el disturbio del día anterior— Sin embargo...— Tony trataba de quitarse el pie de encima, aunque no estuviera matándolo— Falta la agilidad.

Lo soltó y lo tomó de una pierna, y así lo arrastró hasta el otro extremo del área.

No tuvo ni que mirar al lado para cuando su siguiente contrincante ya estaba frente a ella. Clint lanzó varios golpes y ella igual, sin embargo ambos pudieron detener los del otro.

Lamentablemente la ventaja del arquero duró poco cuando Hansen tomó impulso con su espalda y brazos desde el suelo y con sus piernas lo empujó lejos.

Una vez más se levantó con la misma agilidad de una gacela y fue ovacionada.

—Si esa patada tiene fuerza aquí...Imaginen en un Jeager.

Al igual que Barton, su nueva peleadora llegó casi de inmediato como una ráfaga pelirroja. Natasha fue más hábil que el resto y le causó algo más de cansancio a la oficial.

—Finalmente— dijo ésta— Una diga oponente.

Romanoff era mucho más ágil que sus otros compañeros, por lo que el duelo entre ambas mujeres duró un poco más.

Sin embargo, la delantera fue tomada por la platinada tarde o temprano.

Pegó una voltereta e hizo que la rusa cayera de espaldas. Una vez ahí jaló su pierna derecha y su brazo izquierdo en una misma dirección estando sobre ella.

—De acuerdo...— habló con la respiración agitada— Llamo a esta la llave Hansen porque la verdad no la he visto en ningún lado— sonrió— El movimiento contrario de brazo y pierna inmoviliza al enemigo por completo. Pero no vamos a hacerle eso a la agente Romanoff.

Se levantó de encima y ésta de hizo a un lado para que Olympia pudiera seguir con el último contrincante.
Sonrió por lo bajo y comenzó a correr hacia Steve mientras éste hacía lo mismo.

Ella trató de golpear su cara y él lo bloqueó, él trató de golpear su abdomen y ella con una patada lo bloqueó. Olympia quiso darle un rodillazo pero él la esquivó, Steve quiso golpear su rostro...Y lo logró.

Toda el área permaneció en silencio.

Sus amigos atrás quedaron boquiabiertos hasta el punto que a Jake se le cayera la papa que llevaba a su boca.

—¿Qué...Es lo que acabo de ver?— murmuró Raleigh.

—No puedo creerlo— siguió Nate— Ni siquiera yo he logrado eso.

Jake no dijo nada, sólo palmeó el hombro de su compañero con una mueca en la boca.

Olympia se llevó una mano al labio y se dio cuenta que estaba sangrando un poco. Levantó la vista y se dio cuenta que el rubio la observaba asustado.

La había jodido.

Ella soltó una risa nasal— Bueno...— se dirigió a los cadetes— Siempre llegará el momento en que su contrincante va a creer que va ganando ¿Qué hacer?— se giró a Rogers— Contraatacar.

Se fue contra el rubio con toda su fuerza y lo tiró al suelo, luego giró y se puso de pie para seguir golpeándolo. Rogers trató de defenderse con la chica sobre él y reconocía que estaba siendo difícil. Para su suerte, logró darla vuelta
y trató de inmovilizarla por los brazos.

Olympia reconoció igual que él que la pelea estaba siendo dura. Pero no iba a perder su récord, no iba a dejar que la derrotaran.

Con sus piernas enrolló las de él y logró soltarse. Steve permaneció arrodillado lo cual le dio la ventaja a Hansen para subirse a su cuello, encancharlo con las piernas y hacer presión cuando cayeron al suelo.

Una vez allí y al ver que era el último retador todo el público gritó:

—¡Tres, dos, uno!— y luego ovacionaron con aplausos y vitoreos a la ganadora y sostenedora del actual récord: Olympia Hansen.

Ella se puso de pie y ayudó a Rogers a levantarse, el cuál había quedado algo adolorido.

A pesar de que había sido una batalla dura y competitiva, ambos últimos rivales se dieron la mano con una sonrisa.

Hansen se giró a sus cadetes y estuvo satisfecha de verlos alegres y emocionados.

—Muy bien...— habló con voz cansada— El resto que salga de aquí...Los cadetes tienen que entrenar. Formen parejas y todos al centro.

Estos entendieron la indicación y empezaron a trabajar. Mientras eso sucedía y el público se iba la australiana caminó hacia el equipo de Vengadores.

—Realmente espero que no me odien— dijo tratando de no reír— Pero necesitaba apoyo.

—Confieso que fue adrenalínico— dijo el millonario sobando su cuello.

—Yo me divertí— confesó Natasha.

—Ya no tenemos dudas de que eres la mejor en este lugar— siguió Barton a lo que ella se limitó a sonreír de lado.

—Agradezco su ayuda, aunque haya sido algo casi mortal— rieron— Pueden irse...Oh y lleven a Banner a enfermería, lo veo algo pálido.

Éste sólo asintió, el cansancio no lo dejaba ni hablar.

El grupo comenzó a retirarse y ella fijó su vista en ellos hasta que desaparecieran. Pero en eso vio como Rogers se giraba y se encontraba con su mirada. Solamente se sonrieron por lo bajo y luego el equipo se fue.

En su mente solamente tenía una cosa dando vueltas: El duelo con el Capitán había sido el combate más perfecto de su vida.

—¿Qué rayos fue eso?— la platinada se giró al oír a Nate que venía con los otros dos hombres.

—Una demostración de lucha—alzó los brazos.

—¿Con los Vengadores?

—Ay, deja de oír al oficial reglas— se burló Jake de Lambert mientras comía— Aquello fue asombroso, necesitaba ver algo así de genial para continuar con mi vida. Te lo agradezco.

—Cuando quieran— sonrió.

—Por un segundo pensé que el Capitán te vencería— dijo Raleigh y ella se llevó una mano a su labio; recordando la herida— Luego recordé que eres Olympia Hansen y se me pasó. Te luciste como siempre.

Nate suspiró rendido— A quién quiero engañar...Eso fue perfecto y los cadetes tuvieron una lección.

Todos se voltearon a ver al grupo de jóvenes mientras entrenaban.

Hansen sonrió— Yo estoy satisfecha con eso.

Las horas pasaron y los jóvenes tuvieron una asombrosa clase de parte de la oficial Hansen. Luego de agradecerle por su ayuda ellos se fueron al igual que los otros pilotos.

Olympia caminó con cansancio al área de duchas y realizó sus cosas con rapidez para luego volver a su habitación y ponerse ropa limpia.

Luego de estar ahí un rato pensando en el funeral del día anterior y su entrenamiento reciente, se puso de pie para salir sin rumbo fijo.

Cuando lo hizo caminó por los pasillos y agradeció que las miradas ya no fueran tan recurrentes como antes. El mundo ya se estaba acostumbrando a tenerla de vuelta.

Sin embargo, su caminata sí se vio interrumpida por cierto rubio que horas antes casi le daba una paliza.

Sonrió de lado—Miren nada más— ambos se detuvieron en el pasillo— ¿Vienes a restregarme el enfrentamiento?

—No, de hecho iba a comer algo— respondió Rogers con normalidad— Pero ¿Por qué lo haría? Tú ganaste.

—¿En serio?— alzó las cejas— ¿Quieres dejar de ser un soldado con honor por un segundo?— éste soltó una risa nasal—Sabes lo que hiciste.

Éste no respondió, simplemente trató de aguantarse la risa.

—Nunca me había tardado más de cinco minutos en tirar a un contrincante al suelo en el área de entrenamiento— torció la boca— Lo confieso, eres bueno.

—Pero no lo suficiente; tú récord sigue intacto— ella sonrió— Clint tenía razón...Eres la mejor de este lugar.

—Es bueno saber que lo sigo siendo— sonrió, pero está vez con nostalgia.

—Dudo que alguien logre cambiarlo.

Ella mantuvo su sonrisa y miró a Steve como queriendo agradecerle con ella.

No dijeron absolutamente nada más, el silencio fue lo más cómodo que en ese momento pudieron encontrar.

El Capitán iba a decir algo pero fue interrumpido por tres personas que caminaban hacia ellos. Al darse cuenta de esto, Hansen se volteó también.

—Hey, ¿Qué sucede?— habló ella al notar sus expresiones de preocupación.

—Los necesitan en Central— habló una castaña que venía al medio de Nate y Raleigh. Al no conocerla la platinada frunció levemente el ceño.

—Oh— Lambert se adelantó— Ella es Jules Reyes; técnica. No se han conocido.

La platinada asintió, le extendió la mano y ella la tomó—Un gusto.

—Es un honor oficial. Yo...Tomé su cargo dos años después de que usted se fue.

Olympia entendió que se refería a su cargo como jefa de construcción.

Aunque quisiera evitarlo, el interior de la platinada se removió con aquello.

Y obviamente eso no pasó desapercibido por los otros hombres ya que un corto silencio se formó.

—Como ella decía...— Raleigh salvó el momento— El Mariscal nos quiere en Central— el movimiento de cabeza que hizo hacia Steve dio a entender que los Vengadores también estaban involucrados.

—¿Por qué?— preguntó la australiana.

—Gottlieb descubrió algo— respondió Nate.

—¿Saben qué es?

—No aún— volvió a hablar Lambert respondiendo a su compañera— Pero se veía bastante estresado.

Olympia y Steve se repartieron una mirada.

—Si Hermann está así de estresado...No quiero imaginar que fue lo que descubrió— hizo un movimiento de cabeza— Andando.

hoLAAAA cómo están?¿♡

qué emocionante este capítulo lpm, hoy llovieron los vergazos en la sala de entrenamiento nwkfwkdk

no sé ustedes pero está dupla de olympia x steve (a la cual aún no le consigo nombre de ship, ah) me tiene en el cielo bdfjdjd

espero les haya gustado aaaaaa

lo único que diré es que los vergazos van a seguir lloviendo JJAJAJA ups

gracias por su inmenso apoyooo, hasta la próximaaaaa<3