O13
CHAPTER THIRTEEN
"INHUMANITY"
❱❐❲↻❳➟ 𝟏𝟑 𝐃𝐄 𝐉𝐔𝐍𝐈𝐎 𝐃𝐄 𝟐𝟎𝟑𝟎, 𝟏𝟗𝟎𝟎 𝐇𝐎𝐑𝐀𝐒. 𝐌𝐎𝐘𝐔𝐋𝐀𝐍 𝐒𝐇𝐀𝐓𝐓𝐄𝐑𝐃𝐎𝐌𝐄, 𝐇𝐎𝐍𝐊 𝐊𝐎𝐍𝐆.
EL TIEMPO SE LES HIZO poco cuando se trató de apresurarse para cumplir sus labores. Todos los oficiales salieron corriendo de donde estaban para poder presentarse donde debían y comenzar a acatar órdenes.
Tanto como los miembros del Shatterdome como los Vengadores terminaron juntándose en el pasillo mientras caminaban aceleradamente a Central.
—¿Imaginaste que llegarían tan rápido?— le preguntó Nate a Olympia mientras caminaban.
—No...Tomé la ducha más rápida que pude— agitó su cabello que aún estaba húmedo.
—Quan debe estar con la vena a punto de explotar en su cuello— continuó Jake.
—Demonios, odio cuando me apuran y presionan— se quejó la platinada.
—¿Por qué? ¿Dónde estaban? ¿Entrenando?
La voz de Tony hizo que Olympia y Steve se detuvieran. El resto siguió, pero ellos miraron al millonario con confusión.
—Eh...¿Qué quieres decir?— cuestionó el rubio.
El aludido soltó una risa sarcástica— ¿En serio? ¿Se harán los tontos?
Nuevamente ellos se repartieron miradas.
—Nosotros...
—Casualmente pasé fuera del área de entrenamiento y vi una pequeña parte de su enfrentamiento casual— comenzó a caminar—Oh Rogers, esa mujer definitivamente lleva el control.
Cuando Stark estuvo un poco más lejos ambos se miraron una vez más con el ceño fruncido.
—Eso fue extraño— dijo él.
—Me siento espiada.
No perdieron más tiempo y aceleraron su paso hasta alcanzar al resto del grupo que hacía ingreso a una alocada área Central.
Todos corrían de un lado a otro preparando cada detalle para la llegada de los drones. Absolutamente nada podía salir mal.
—Me alegra que ya llegaran— les habló el Mariscal que se veía bastante estresado— Los helicópteros que transportan los drones llegarán aquí en diez minutos. Cuatro modelos listos para unirse a nuestro Programa.
—¿Para unirse o desplazarnos?— murmuró Nate.
—Además de Honk Kong, habrán drones desplegándose en otros puntos a lo largo del mundo. Es muy importante que estemos atentos y pendientes de sus actividades.
—Me conectaré con el servidor central para monitorear a cada segundo que sea posible— dijo la platinada.
—Me parece perfecto— siguió el asiático—Necesito a todos los técnicos en el área, listos para estacionar los drones.
—Sí señor— dijo Jules Reyes.
—Quiero a Hansen y a Lambert conmigo al frente para la recepción oficial— los aludidos asintieron— El resto también puede acompañarnos al hangar desde un poco más atrás— también movieron la cabeza de forma afirmativa— Démosles la bienvenida a Moyulan como se debe.
Una vez que todas las instrucciones fueron entregadas, los equipos comenzaron a desplazarse.
—Hey— la voz de Olympia hizo que el grupo de Vengadores se detuviera mientras salían del lugar— Tomen, ustedes también estarán en el juego así que es importante que nos comuniquemos
A cada uno le extendió un audífono que ella había creado unos minutos antes y estos los pusieron en sus oídos.
—Gracias, estaremos atentos— dijo Steve.
—¿Y el tuyo?— preguntó Clint.
Ella sonrió y con uno de sus dedos tocó su cabeza— Los escucharé aquí, no lo necesito...Buena suerte a todos.
Luego de un par de miradas cada uno se fue a lo suyo; preparados para todo lo que se venía.
Hansen iba poniéndose su chaqueta azul del uniforme mientras caminaba hacia el hangar en compañía de Lambert. No había tiempo que perder; el Mariscal los esperaba y los drones pronto arribarían.
—Yo invito cervezas para todos si salimos pronto de ésta— dijo el oficial.
—No te vayas a arrepentir— respondió ella— Aunque prefiero el salir pronto de ésta que cualquier otra cosa.
El aire frío y nocturno de la noche que empezaba a caer fue lo primero que les recibió al salir al hangar. Las noches en Moyulan siempre caían temprano, y siempre era un placer gozar de la vista.
Sin embargo, hoy tendrían una vista diferente.
—Mariscal— ambos llegaron dónde el hombre y este se volteó al oír a Nate— ¿Vienen en camino?
Éste sonrió de lado— Miren al cielo, oficiales.
Ambos obedecieron y sus cabezas se fueron hacia arriba. Allí, pudieron apreciar cómo grupos de helicópteros traían cuatro modelos de drones volando sobre el Pacífico.
Los tres militares soltaron un largo suspiro, sabiendo que aquello estaba por marcar un hito en su historia.
—Me preocupa que estas cosas estén aquí sin saber noticias de Gottlieb— habló la platinada y los hombres la miraron.
—¿No ha habido ninguna respuesta, Hansen?
Negó— Solamente sabemos que está ahí...Y es por eso que no me gusta esto. Sabemos que Shao tiene malas intenciones...
—Las intenciones no son suficientes— interrumpió el Mariscal.
—Pero sí válidas...Al menos un poco— Olympia soltó un suspiro— Sólo espero que nos estemos equivocando...
El resto de los oficiales y los Vengadores comenzaron a caminar hacia ellos al mismo tiempo que los drones se acercaban más y más.
Olympia frunció en ceño cuando los vio llegar, llena de curiosidad por saber de qué estaban hechos.
Qué era lo que los hacía tan especiales.
En un parpadeo direccionó su energía hacia ellos para poder escanearlos y asegurarse de que eran seguros.
Sin embargo, un dolor punzante llegó de repente a su cabeza.
Nate a su lado lo notó y tuvo que sujetarla por los brazos.
—Olympia...¡Lyn! ¿Qué pasa?
Ella levantó la vista y deseó no haberse colado en los drones.
—Algo anda mal...— susurró.
—¡Los drones están fallando! ¡Cancelen el despliegue!— se escuchó desde Central.
Inmediatamente todos dirigieron sus miradas hacia el cielo y se dieron cuenta que los drones comenzaron a moverse, a tambalearse de las cuerdas que los sostenían, y luego a retorcerse. Como si una bestia horrible estuviera dentro de ellos.
Y en parte así era.
Lambert volvió sus ojos a su compañera y habló en tono de advertencia— Olympia...
—¡No fui yo! ¡Lo juro, lo juro!— se defendió— ¡Solamente sentí aquello!
—¡¿Qué fue lo qué sintió?!— dijo Quan en una orden.
La respuesta de la tecnópata tardó unos segundos en llegar. Su mente aún seguía procesando todo y una serie de imágenes iban y venía. Pero al final respondió:
—Inhumanidad.
Los dos hombres la miraron perplejos.
—Siento que esto es similar a lo que vimos antes...Y no me gusta.
En ese momento otro ruido se escuchó y todos regresaron sus miradas al cielo, en donde pudieron contemplar como los drones seguían transformándose.
Los cuerpos metálicos se fueron rompiendo poco a poco por una ramificación que se estaba creando desde el interior; en el cerebro. Lo cual dio como resultado criaturas horribles con armaduras hechas con los mismos drones.
—Es algo en el epicentro— susurró Hansen— Algo dentro de ellos no está bien.
Al ver que su cercanía estaba más pronta todos empezaron a temblar y a correr por do quier.
—Creo que eso mejor lo averiguamos más tarde— dijo Nate.
El Mariscal se volteó a verlos— ¡Vayan por Thunder y Gipsy! ¡Ahora!
Los aludidos no esperaron otra orden, así que pegaron media vuelta y comenzaron a correr.
En el trayecto se toparon con el resto de su equipo que estaba igual o más desesperados que ellos.
—¿¡Qué demonios está ocurriendo!?— exclamó Tony.
—¿¡Y esas cosas qué son!?— siguió Jake entre los otros gritos.
—No lo sabemos— respondió Olympia con la voz agitada— Pero debemos defendernos ahora, hay que ir a los Jeagers— sus compañeros asintieron, luego ella se dirigió a los Vengadores— ¿Creen que los pueden frenar por un rato mientras vamos por ellos?
Estos se repartieron miradas. Pero no había susto en ellas, sino que decisión.
Steve sonrió de lado, alzó su brazo y en unos segundos el Mjolnir estuvo empuñado en su mano— Por supuesto que sí.
Esto le sacó una sonrisa de oreja a oreja a la platinada.
—Entonces les deseo suerte.
—La necesitarán— secundó Nate.
Luego de eso los pilotos comenzaron a correr en la dirección contraria a la de los Vengadores. Ellos prepararon todo su armamento y los otros se fueron a sus androides.
Sin embargo, la carrera de los últimos se vio bruscamente interrumpida cuando el suelo bajó sus pies se sacudió haciendo que sus cuerpos se desestabilizaran y cayeran. En el piso se giraron algo adoloridos para ver que había causado todo eso y se dieron cuenta que se trataba de los mismos drones; estos habían aterrizado en Moyulan
—Esto no me gusta...— murmuró Hansen mientras Lambert la ayudaba a ponerse de pie— ¡Te lo dije! ¡Desearía que nos hubiéramos equivocado!
Luego siguieron su carrera para tratar de regresar al hangar, pero estaba siendo imposible. Los drones mutados estaban desmantelando todo a su alrededor y parecía que no iban a parar.
Algunos Jeagers ya estaban operativos y habían iniciado su ataque hacia ellos. No obstante, no les estaba resultando bien.
El equipo de superhéroes se había concentrado en uno de los drones y le estaban dando con todo lo que tenían. Hulk colgaba de su cuello mientras el resto volaba, atacaba o disparaba.
Mientras los pilotos corrían un dron se puso frente a ellos y esto los llenó de terror. Era tan alto que su cuello dolió por tanto que lo inclinaron hacia atrás.
Jake tragó saliva— Son horribles ¡Realmente lo son!
—¡Y no tenemos ni un arma con nosotros!— se quejó Raleigh.
En eso Olympia alzó su mano hacia un montón de materiales y en unos ocho segundos sus compañeros ya tenían armamento en sus manos.
Estos los observaron boquiabiertos, sin haberse esperado aquello. Aunque no tenían tiempo para reflexionar.
—Bien, por un segundo olvidé que tenemos a Olympia con nosotros— se retractó Becket y en ese mismo instante comenzaron a disparar.
Esto les dio la ventaja y la oportunidad de desviar al dron y seguir con su carrera.
Los hostiles seguían atacando a todo el Shatterdome. Tomaban a los helicópteros como si fueran juguetes y los lanzaban lejos; así mismo sucedió con algunos de los Vengadores e incluso Jeagers.
No podían darse el lujo de un respiro, debían avanzar a como diera lugar.
Era ahora o nunca.
Bueno...Tal vez nunca.
Uno de los drones arrancó la cabeza de un Jeager y la lanzó lejos. Esta fue directamente hacia los pilotos; lista para caer sobre ellos. Sin embargo, Hansen logró desviarla y hacerla caer en frente de ellos. Nuevamente cayeron al suelo por el impacto.
La cabeza de la tecnópata parecía que iba a estallar. Había estado tratando de ingresar al sistema de los drones pero era imposible. Algo adentro se lo estaba impidiendo.
Como pudo trató de ignorar el malestar y se puso de pie una vez más para seguir corriendo al interior del hangar, lo cual estaba pareciendo un camino infinito a través del mismo infierno.
La destrucción total se estaba desatando en Moyulan.
A lo lejos, ella vio al grupo de jóvenes cadetes en medio de todo el caos— ¡Oigan! ¡Ustedes! ¡Vuelvan a la base! ¡Vuelvan a la base!
—¡Ya escucharon! ¡Regresen!— siguió Nate.
—¡Sí señora! ¡Sí señor! ¡Ya, ya, ya!
Una carrera entre ellos se retomó, escapando de los feroces misiles que los androides comenzaron a disparar, derribando Jeagers que se cruzaban para enfrentarlos.
El grupo de pilotos corría mientras ayudaba a la evacuación, empujando a cadetes y técnicos lejos de ahí, porque a cada paso que daban los drones daban uno más grande trayendo sólo devastación.
Lograron llegar a una parte segura que por un momento los refugió del caos. Pero en eso escucharon la voz alterada de Quan en sus oídos:
—¡A todos los pilotos! ¡Abismos detectados! ¡Los drones en el campo están abriendo múltiples abismos en la costa del Pacífico!
Aquella advertencia.
Aquella única advertencia.
Fue la que desmoronó a todo el mundo.
El grupo de pilotos se miró lleno de miedo y espanto, como probablemente nunca lo habían estado en sus vidas.
Porque es significaba una sola cosa.
—¿Qué fue lo que dijo?
—¡¿A qué se refiere?!
—¿Qué sucede con esos abismos?
Las voces de los Vengadores sonaban bastante confundidas y desesperadas. Obviamente ellos no tenían el conocimiento del todo ante la situación; no eran cien por ciento consientes de lo que aquello significaba.
El pecho de Olympia subía y bajaba con frenetismo y un nudo en la garganta la apretaba a más no poder. Aún así tomó la fuerza para responder con voz temblorosa:
—Los drones están abriendo fisuras en el océano...Y si lo logran— cerró los ojos con fuerza— Le abrirán paso a los Kaiju.
Después de siete años.
Después de arduo esfuerzo.
Después de una vida sin ellos.
Si los abismos se abrían a lo largo del mundo.
Ellos volverían.
El grupo de superhéroes y pilotos se lamentó tal vez sin decir palabra alguna. El silencio entre ellos y las miradas llenas de angustia fueron más cortantes que un cuchillo.
No tuvieron más tiempo para seguir asimilando aquello, ya que otro dron disparó hacia el frente haciendo que el segundo centro de control, donde estaba todo el comando general que en ese momento estaba operando, explotara y comenzara a caer.
Hansen ahogó un grito cuando vio nuevamente a los cadetes.
—¡Les dije que se fueran!— exclamó desesperada.
—¡Las puertas están bloqueadas! ¡No tenemos a dónde ir!— respondió una.
Todos retrocedieron y se cubrieron cuando los restos de la explosión comenzaron a caer.
—¡Maldito Hermann! ¡Nunca obtuvimos esas respuestas!— exclamó Pentecost.
—Sólo espero que no haya sido capturado por Liwen y haya podido averiguar algo con Newt— respondió Nate.
—Espero que ambos estén bien...Que todos lo estemos— siguió la australiana. Luego golpeó con su puño un trozo de metal en donde estaban apoyados con ira— ¡Shao lo va a pagar!— se giró a su compañero— Nate, no he podido ingresar al sistema de los drones, algo les está pasando que me lo impide— tragó saliva— Tenemos que correr a los Jeagers.
—Veo que es nuestra única opción— apoyó Raleigh.
La mente de Olympia analizó el terreno como una computadora para buscar la mejor opción para correr.
—Derecho y a la izquierda; es nuestra mejor ruta.
—¿Estás lista?— le preguntó Labert.
—No— negó— ¿Y tú?
—No.
—Bien— hizo tronar su cuello de un lado a otro— A mi señal. Tres, dos, un...
—¿Hola? ¿Alguien me escucha?
Una voz en sus oídos les detuvo y a la vez les llenó de esperanza.
—¿Gottlieb?— todos se acercaron a los pilotos al oír la voz del doctor.
—Gracias al cielo estás vivo— susurró Jake.
—¡Olympia! ¡Chicos! Qué alivio...— siguió Hermann.
—¡Nos están atacando, maldición!— siguió la oficial— ¡Obliga a Liwen que desactive los drones o te juro que yo misma iré a...!
—¡No es Liwen!
Aquella exclamación por parte del doctor hizo que todos se estremecieran en sus lugares.
—¿Entonces quién?— se atrevió a preguntar la platinada.
—¡Es Newt! ¡Es Newt!...Newton está haciendo todo esto...
AAAAAAAAAAA
ACASO NO LO VISTE VENIR????. JPG
IN CASE YOU FORGOT
Newton 👆 el que era el programa Jeager pero luego se fue a trabajar con Liwen. En la fiesta, Olympia y el equipo lo vieron medio extraño y pensaron que estaba siendo manipulado por liwen PERO AJÁ, nunca fue así.
igual en el otro capítulo la cosa se vuelve más complicada jeje😇 y se entenderán otras cosas. be patient.
todos estos capítulos he estado disfrutando el odio que le tiran a liwen desde mi sillita JAJAJAJ ya si igual era media pesada.
PERO NO LA VILLANA OMGGGG
sea lo que sea que vaya a pasar
sólo diré qué
JSJFKDKFKDKF PERDON ES QUE TODO ESTA ARDIENDO AAAA
anyway, les gustó? ): fue un poco más cortito, pero necesito estos capítulos así para unir todo uwu.
30 votos para actualización <3
estoy muy contenta porque gracias a eso los votos de la historia subieron yayyy🥺
les amo muchoooo♡
nat
Bạn đang đọc truyện trên: AzTruyen.Top