~ ESPECIAL WENJOY ~

La platinada se encuentra en busca de otro volumen de otro manga para Seulgi, pareciera que la castaña sabe justamente cuáles son aquellos que se encuentran en los lugares más imposibles del almacén para que su amiga vaya por ellos.

Wendy se ha caído, lastimado, obtenido alergias, e incluso cree haber conseguido el acta de nacimiento de Sooman buscando esas revistas.

Sin embargo, esos no son molestia para ella, ver la emoción de Seulgi al leer por horas es un pago por su esfuerzo. Lo que tanto le irrita es que Sooyoung siempre está en el almacén cuando le toca ir.

La pelinegra ha estado pegada a su cadera desde que comenzó a trabajar en el local unos meses después que Seungwan, y desde el principio le ha dejado en claro a la mayor sus flamantes sentimientos por ella, cosa que solo parece molestar a Wendy hasta el nivel de querer evitarla a toda costa.

No hay lugar para el amor en su vida, mucho menos si viene de alguien tan molesto e irritante como Park Sooyoung.

ㅡJuro que te mataré algún día, Kang. ㅡun quejido hace eco entre las abarrotadas paredes del almacén.

Wendy intenta alcanzar un volumen de Fullmetal Alchemist pero está en una repisa muy alta para ella, probablemente alguien de estatura promedio podría alcanzarlo sin mucho problema, pero su metro y medio de estatura no la ayudan.

Se gira para ir en busca de la escalera cuando una mano en su cintura y un embriagador aroma tan acogedor que es imposible para la chica describir la detienen en su lugar. Un extraño impulso dentro de ella la hacen levantar un poco su cabeza para acercar su nariz al cuello de la portadora del perfume sabiendo muy bien de quien se trata, pero debe aprovechar que está distraída para hacer lo que no haría con toda su atención sobre ella.

ㅡ¿Por qué eres tan pequeña, Wannie? ㅡSooyoung pregunta poniendo la revista a la altura de la mayor, que trata fallidamente de ocultar su sonrojo fingiendo un pequeño ataque de tos.

ㅡEso no es de tu incumbencia. ㅡtoma el manga e intenta salir del acorralamiento en que Sooyoung la ha puesto entre su cuerpo y el librero. ㅡMuchas gracias, ¿pero podrías moverte?

La brillante chispa en los ojos de la pelinegra le avisan a Wendy que hará algo que solo la hará molestar por no saber cómo controlar sus sentimientos ante lo que sea que Soo vaya a hacer.

Y no se equivoca cuando un par de brazos fuertes la abrazan sin esperanza de soltarla y la comienzan a bailar a un ritmo ridículamente lento.

ㅡEres pequeña para que cuando yo te abrace así, puedas escuchar mi corazón latiendo por ti.

Sooyoung dice con una de sus dulces sonrisas que la hacen mostrar las encías. De eso habla Wendy cuando dice que no puede controlarse cuando la menor dice o hace algo que la hace reconsiderar su decisión sobre la posición que le ha dado al amor en su vida.

No quiere enamorarse de Soo porque tiene otra cosas más importantes por las cuales preocuparse; la universidad, su trabajo, ser el soporte para su madre y hermana, ser Son Seungwan. Una relación solo ocuparía tiempo y energía que podría usar en otra cosa, aunque no pueda evitar poner su cabeza en el pecho de la menor por un segundo para probar la veracidad de su palabra, rezando que Sooyoung no pueda sentir como su corazón late con fuerza.

Seungwan regresa a la realidad cuando uno de los brazo que restringía su movimiento baja hasta su cintura en un abrazo más ligero.

ㅡ¿Sooyoung?

ㅡ¿Si, mi Wannie?

La menor está tan absorta en el momento, con su mejilla completamente apoyada en la cabeza de la platinada que no ve cuando esta agarra el bolígrafo que había en el mesón detrás de ellas.

ㅡ¿Nunca te han apuñalado con un bolígrafo? ㅡla pregunta saca de lugar a la pelinegra que se ajela un poco sin soltar por completo a Wendy.

ㅡ¿No?...

ㅡEntonces no espero te moleste que yo sea la primera en hacerlo si no me sueltas ahora mismo.

A Sooyoung no le importaría morir a manos de Seungwan, en los libros de fantasía medieval que ha leído durante sus eternas horas de completa soledad en el almacén dice que entregar tu vida a la persona que amas es el voto de amor más grande que se puede hacer.

Además, solo es un bolígrafo, y no puede hacerle mucho daño si es Seungwan quien lo porta.

Otra chispa de diversión y en un ágil movimiento pega a la mayor contra su cuerpo, escuchando el crujido del bolígrafo entre ellas y las maldiciones de Seungwan borboteando de su boca.

Ambas salen del almacén con una mancha de tinta en sus camisetas, junto con la expresión oscura de Wendy y la brillante sonrisa de Sooyoung.

ㅡㅡㅡㅡ

Seungwan ha perdido la cuenta de las veces que ha visto a Joohyun y Seulgi dar vueltas alrededor de si por sentimientos que obviamente son correspondidos.

Le parece tan patético, el amor en general le parece una pérdida de tiempo. Hay mucho que hacer para ser alguien en esta vida como para preocuparse de complacer y amoldarse a alguien solo porque una idealización del corazón dice qué hay que hacerlo para ser feliz.

Sin embargo, las ocurrencias de Sooyoung inundan su cabeza cuando piensa en el amor.

La chica es cálida, divertida, especial y hermosa, muchos han intentando algo con ella pero es Wendy quien la tiene alrededor de su dedo. Los abrazos no deseados, las sonrisas segadoras y las palabras ridículas llenas de afecto son solo de la platinada, nadie más ha vivido esa experiencia por parte de Sooyoung y Seungwan lo sabe.

Sabe que la ve como si fuera la única chica en la habitación aunque la rechace en cada oportunidad que tenga, y le molesta desear que le vea así por siempre.

Es más fácil ignorar los sentimientos que guarda por la pelinegra que aceptar que alguien ha podido romper esa barrera que ha construido alrededor de ellos y de su vida productiva.

ㅡUnnie, unnie, unnie. ㅡla aguda voz de la pequeña Yerim saca a Wendy de sus pensamientos. ㅡNecesito tu ayuda, no alcanzo el libro que quiero.

Antes de que pueda siquiera procesar la petición, la niña ya la está arrastrando por el local hasta llegar a la sección de dramas policiacos. Yerim tiene solo ocho años, nadie se explica que hace leyendo este tipo de cosas, pero Wendy supone que se está entrenando para cuando se convierta en la criminal más grande de la nación.

ㅡEs ese. ㅡla rubia señala uno que está en la segunda repisa más alta.

Otra vez, el metro y medio de altura de Wendy no son de ayuda ahora mismo.

ㅡYerimmie, yo tampoco puedo alcanzarlo. ㅡla platinada hace el intento pero falla patéticamente. ㅡ¿Por qué no buscas a Sooyoung? Ella definitivamente podría alcanzarlo.

ㅡElla fue la primera a la que pedí el favor, pero me dijo que fuera a ver si Junmyeon oppa ya había llorado por Irene unnie hoy, que ella estaba muy ocupada con la chica nueva.

Sooyoung nunca se negaría a cualquier cosa que la pequeña Yerim le pida, incluso la ayudó en aquella travesura contra Seulgi, esto es extraño.

ㅡ¿Chica nueva, que chica nueva?

ㅡLa que parece que está a un tinte de distancia de quedarse calva. ㅡla niña señala dirección al bar de café. ㅡSoo unnie está ayudándola como barista y le está diciendo cosas como "no te preocupes, Rosie. Lo estás haciendo muy bien, Rosie. ¿Estás libre este fin de semana, Rosie hermosa?"

Con comillas exageradas en el aire, Yerim cita las palabras que escuchó decir a la pelinegra sin notar la forma en que los puños de Seungwan se aprietan en fuertes puños.

ㅡEstás muy pequeña para leer de asesinatos y cosas que considero preocupante que leas, anda ver si Seulgi dejó su boot vacío, yo te llevaré algo más educativo para que leas. ㅡWendy despeina un poco a la niña ignorando sus llamados exigiéndole el libro que quería.

Sooyoung unnie deberá pagarme caro este favor. Ahora, ¿Donde está Chanyeol oppa? Necesito ese libro y es la única jirafa disponible en este lugar.

Pero está demasiado cegada por algo que no admitirá para prestarle atención a la pequeña prospecto a criminal. Debe encontrar a Sooyoung y debe encontrarla ahora.

Va directo a la barra pero no hay señales de la pelinegra allí, en cambio ve a la chica de la cual Yerim le habló muy entretenida comiéndose una de las donas del mostrador mientras que Jaehyun, otro de los trabajadores, le habla sobre que tintes hace menos daño al cabello.

No se detiene de caminar por el local hasta conseguir a Sooyoung en en área de romance sentada junto a Joohyun y por alguna razón Seulgi y Jisoo también están allí.

ㅡ¡Park Sooyoung! ㅡalza su voz sin llegar a gritar pero sabe que todos la escucharon cuando voltean a donde está.

En especial Soo, que la ve como si tuviera la sentencia de su vida en su manos. La menor se levanta y con pasos muy alegres y ligeros para el gusto de Wendy se acerca a ella.

ㅡ¿Ocurre algo malo, mi Wannie?

¿Como puede ser tan cínica? Agh, luego pregunta porqué la odio tanto.

ㅡ¿Que es eso de que andas seduciendo a mis trabajadores? ㅡla imagen de Seungwan con sus manos en sus caderas es adorable para Soo, haciéndola ignorar el enojo que baña las palabras de la mayor. ㅡYerim me dijo que estabas encima de Rosé y que incluso la invitaste a salir este fin de semana.

La niña cara de tortuga ha hecho un excelente trabajo.

ㅡ¿Que tiene que la invite a salir? Ella está soltera, yo estoy soltera y juntas hacemos una pareja realmente hermosa. No puedo dejar perder esa oportunidad, Wannie.

Sooyoung es consciente de que está presionando todos los botones que puede de Wendy, es el empujón que necesita darle para obtener lo que ambas quieren.

La mayor cree que ha hecho un excelente trabajo ocultando sus sentimientos por Sooyoung, pero esta ha notado las miradas que duran más de lo debido, la necesidad de su atención, y esos pequeños detalles que Wendy hace cuando están a solas y Soo hace de las suyas sobre ella.

Pareciera que la única que no sabe que Wendy está enamorada de Sooyoung es Wendy misma.

ㅡPues la dejarás perder, no saldrás con Roseanne. ㅡla mayor habla claro y fuerte, como si el sonrojo de sus mejillas no existiese y el ligero temblor de sus puños solo son reflejo de su enojo.

La verdad es que no quiere perder a Sooyoung, quiere tenerla para sí sola. Es egoísta pero no puede dejar ir a la chica que le gusta sin intentar quererla primero.

Hará tiempo en su calculada vida si es necesario, pero quiere a Sooyoung a su lado.

ㅡ¿Estás celosa, Seungwan? ㅡcomo si su voz ha bajado una octava completa, Soo habla mientras se acerca a la mayor con lentitud.

ㅡNo estoy celosa, solo busco el bienestar de los trabajadores a mi cargo y que salgas con Rosé será una molestia.

ㅡ¿Para quien?

ㅡPara mi. ㅡSeungwan cierra la distancia que quedaba entre ellas pero sin tocar a Soo y lo mismo en viceversa.

Solo tan cerca que pueden escuchar como tragan fuerte por la falta de espacio entre sí. No es la primera vez que no existe distancia entre ellas, pero no habían estas miradas expectantes a lo que ocurrirá, no había una Seungwan dispuesta y una Sooyoung nerviosa. ㅡNo voy a permitir que salgas con Rosé antes que salgas conmigo, así que invítame a salir antes de que me arrepienta de estar haciendo todo esto.

La fuerza y altura de Sooyoung vienen oportunas cuando toma a Seungwan por las caderas con una mano y con la otra le hace levantar el rostro para que quede a alcance de la suya.

ㅡ¿Por fin aceptas que me amas tanto como te amo?

ㅡNo te adelantes a los hechos, Park. Ahora invítame a salir, que ya estoy arrepintiéndome.

ㅡ¿Saldrías conmigo este fin de semana y acabarías con este sufrimiento que tengo desde hace dos años de no haberte podido llevar a una cita? ㅡla pelinegra habla tan cerca del rostro de Wendy que sus labios se rozan entre sí con cada palabra que dice, alimentando las chispas que siente explotar en su pecho.

Seungwan asiente entre los brazos de Sooyoung moviendo su cabeza hacia un lado creando el espacio y momento perfecto para por fin dar el beso que había estado guardando para la más alta, pero ese beso nunca llega, en cambio esboza una sonrisa al sentir la necesidad de Sooyoung por ese tacto.

ㅡOh vamos, quiero mi beso y lo quiero ahora. ㅡla menor se queja ante una burlona Seungwan.

ㅡTodavía no, no aquí y no ahora.

Las manos de Wendy que ningún momento tocaron a Sooyoung hacen que la chica suelte el agarre alrededor de su cuerpo y cara para tomar una de sus manos y llevarla en silencio hasta el almacén escasamente iluminado por los restantes rayos del sol que se cola por las pequeñas ventanas.

ㅡ¿Qué tal aquí y ahora?

La platinada no recibe respuesta y en cambio es levantada por Soo quien la sienta sobre el escritorio que hace semanas fue testigo de la propuesta de asesinato de Seungwan.

Pero son los gruesos labios que comienzan a bailar sobre los suyos y ese ardiente agarre en su cintura que le dice que no necesita palabra por parte de Sooyoung que le den confirmación a su propuesta.