Ha pasado un poco más de una semana desde que Jennie apareció para arruinar todo y que Seulgi huyó del agarre de Joohyun. El transcurso de los días pasan con Joohyun esperando a que aparezca Seulgi, aunque sea para verla de lejos. El más mínimo vislumbre de la menor sería suficiente para la pelinegra no sentirse tan mal.

ㅡWannie, ㅡla suave voz de Hyun interrumpe a la rubia que estaba registrando unos recibos. ㅡJisoo me dijo que Seulgi iba a venir por unas cosas hoy, ¿Podrías darle esto cuando la veas? ㅡenvuelto con suma delicadeza le pasa a Wendy algo parecido a un libro. ㅡEs algo que ella quería desde hace tiempo y yo lo había conseguido para dárselo, pero es bastante obvio que no me quiere ni ver.

Con esa pequeña sonrisa natural de sus labios le pide el favor a la mayor, aunque sienta que está perdiendo algo que nunca fue suyo. Tal vez eso sea lo que le duele más.

Que Seulgi nunca fue y ni será suya.

ㅡ¿Por qué no se lo das tú? ㅡWendy intenta regresarle el presente pero la chica la evade poniendo sus manos en los bolsillos de su pantalón. ㅡÚsalo como tu oportunidad para hablarle otra vez.

ㅡSi Seulgi quiere hablar conmigo que sea porque quiere, no por los modales de recibir algo.

Finalmente Seungwan acepta y ve a la menor perderse entre los altos pasillos del local.

Su curiosidad es más grande que su estatura, así que con el mismo cuidado con el que fue envuelto el regalo, Seungwan despega uno de sus lados. Y justo cómo cuándo toda esta trágica historia de amor comenzó, la rubia no puede disimular su sorpresa, ni siquiera de Sooyoung que apareció para su dosis diaria de amor por parte de su nueva novia.

A la pelinegra mayor el truco de darle celos con Roseanne, la nueva trabajadora del local, le dio excelentes resultados.

ㅡ¿Conseguiste el anillo con el que te iba a proponer matrimonio o Soomancito por fin nos aumentará el sueldo? ㅡSooyoung abraza por la espalda a la más pequeña intentando comprender la situación.

ㅡTodavía estoy muy joven para casarme pero aprecio los planes a futuro, y es más probable que Junmyeon consiga novia antes de que Sooman nos aumente. ㅡla rubia despega un poco más el envoltorio y enseña lo qué hay debajo a su novia. ㅡMira esto.

Y la sorpresa es la misma para Sooyoung.

ㅡ¿Quien lo consiguió, cómo lo consiguió, cuánto le costó, que demonios hace eso aquí?

ㅡEs un regalo de Joohyun para Kang, recordó lo mucho que Seul quería esto.

La pequeña conversación se ve interrumpida cuando una comúnmente desaliñada Seulgi entra al local. Ya no hay ropa ajustada, sino su manchada camiseta blanca y pantalones anchos de chandal, está es la Seulgi a la cual todos acostumbraban.

La otaku del lugar, para ser exactos.

Con pasos demasiado lentos llega hasta donde su amiga y la chica que solía ser la molestia de ella. Las mayores pueden notar la profundidad de las ojeras en debajo de los pequeños ojos de Seulgi, al igual que su expresión desinteresada. Está si no es la osa acostumbrada.

Wendy ya estaba lista para entregarle el presente de Joohyun, pero la castaña la detiene poniendo su mano en la cara contraria.

ㅡNo me hables todavía, no he tomado mi café del día aún, así que guárdate tu explicación sobre que mierda hace Sooyoung abrazándote y porqué no la golpeas como tantas veces juraste hacer si te llegaba a tocar.

Ahora son dos chicas las cuales miradas juzgadoras están sobre una nerviosa Seungwan.

ㅡComo quieras, pero toma esto, ㅡla rubia le da el regalo sin darle objeción. ㅡprocura abrirlo después de tu café.

Y así hace. Camina hasta la barra con el objeto en sus brazos lamentándose cada segundo qué pasó ayer llorando mientras veía Attack On Titan y aprovechando el momento para llorar por Joohyun también.

Extraña a la mayor, más de lo que creía que iba a hacer. Esas incómodas conversaciones han sido las mejores que ha tenido, su pequeña mano entre los largos dedos de ella parecían perfectas la una a la otra; extraña poder compartir con Joohyun algo más que los libros de este lugar. Pero Jennie aparece en su mente otra vez, no la ha molestado más desde esa tarde aunque con tan solo verla le recuerda a diario que nunca será suficiente para alguien como ella, como Joohyun.

Su tren de pensamiento toma una parada cuando Junmyeon pone su orden al frente de ella con cara de disgusto. Él todavía no le perdona que le haya robado la atención de su Irene... Como si alguna vez la tuvo.

Llega hasta el boot que ha usado desde que conoció el recinto esperando a que Jisoo aparezca con las cosas que le iba a traer, pero la pelirroja no está en ningún lugar donde pueda verla.

ㅡVeamos que demonios es esto...

Sin nada de cuidado despedaza el envoltorio y siente como si tuviera entre sus manos el Santo Grial. Había esperado demasiado tiempo para poder leerlo y seguir la trama de la historia, incluso habló con el señor Sooman para que hiciera hasta lo imposible para conseguir ese volumen, pero ahora lo tiene y es un regalo solo para ella.

El volumen cuarenta y cinco de Naruto por fin es suyo.

Ahora con delicadeza lo saca de su empaque, viendo con detalle la portada antes de comenzar a hojearlo. Esto es lo que realmente le gusta, historias gráficas tan interesantes e incluso más que las de cualquier libro, dibujos que plasman la realidad de sus personajes, la emoción y suspenso que le puede traer. No le importa los comentarios de Jennie y sus amigos, -no todos-, disfruta de sus mangas y eso es algo que no cambiará, aunque alguna veces lo desee por Joohyun.

Pasando hoja por hoja consigue una hoja rosa entre ellas, una nota bañada en un perfume tan distintivos que por inercia Seulgi voltea a ver hacia el área de novelas románticas esperando verla, pero Joohyun no está ahí.

«Para la chica que una vez llame "mi otaku".

Seungwan una vez me dijo que estabas esperando que este volumen llegara a Luvs porque era el único faltante de todo el manga, pero no podían conseguirlo por ninguna parte... Bueno, yo lo conseguí y quise regalártelo.

Ahora podrás terminar de leer toda la serie. Sé lo mucho que te gusta, al igual que ahora sé lo mucho que yo te gusto o solía gustarte.

Tú también me gustas, aunque nos veas tan diferentes realmente me gustas. Aunque Jennie haya puesto una idea diferente de mi en tu mente, me gustas Seulgi.

Me gustaste desde un principio e intenté evitarlo por esa misma mentalidad tan vacía que tenia, pero tu adorable rostro fue difícil de no querer. Así que hice lo mejor que pude para tener algo en común contigo, comencé a leer lo mismo que tú.

Leer era lo único que compartíamos, yo quise llevarlo a un nuevo nivel. En poco tiempo entendí porque casi te desmayaste leyendo GUNNM, o cuando te enojaste tanto leyendo Una Vida Errante que olvidaste que Yerim te había robado tu lugar (ese es el nombre de la niña cara de tortuga que se roba a menudo tu boot), incluso lloré al igual que tú leyendo Given, aunque no pude terminar Uzumaki.

Por favor, no leas ese tipo de cosas tan atroces.

Y me gustaste aún más después de eso, me gustaste cuando llegaste luciendo diferente, me gustaste cuando estuve celosa de Jisoo, me gustaste cuando me llevaste a ese restaurant y me gustaste aún más aunque Jennie y Nayeon estuvieran diciendo todas esas cosas. Me gustaste cuando te fuiste porque tenías razón para hacerlo y me sigues gustando ahora que espero regreses a Luvs algún día.

Cuando hiciste todo ese cambio radical dije que no me molestaría conocer a la nueva Seulgi, ¿te molestaría conocer a la nueva Joohyun?

No la Irene que todos conocen sino la Joohyun que soy desde que te conocí. La que ya no piensa que el mundo gira alrededor de ella, la que ya no actúa con el interés primero, sino la que quiere tener una de esas asquerosas historias románticas llenas de clichés, pero estaría bien con ello porque serian contigo. ¿Te molestaría enamorarte otra vez de mi si así fuera el caso?

Déjame presentarme otra vez.

Mucho gusto Kang Seulgi, soy Bae Joohyun. ¿Puedo saber que lees hoy?

De la chica que siempre esperará por ti en el área de novelas románticas.»

Y otra vez Seulgi voltea a ese lugar donde se supone debería estar esperándola, pero no está, todos los boots están vacíos, incluso el enorme mueble donde la pelinegra tiende a sentarse.

Antes de levantarse guarda la hoja en la página donde la había conseguido y vuelve a meter la revista en su empaque. Tiene que cuidarlo el doble, primero porque es un volumen importante y segundo porqué Joohyun fue quien se lo dió.

Recorre todo el pasillo de novelas románticas, reconociendo algunos de los textos. Al igual que la mayor, ella intentó conocerla a través de libros, y aunque fue poco lo que descubrió fue suficiente para caer por ella. Siente que está cayendo otra vez al verla batallar para alcanzar un libro.

Esta vez parada de puntillas toma el texto que ha sido devuelto a su lugar en una de las repisas más altas, "Un Globo Sobre Las Baldosas Amarillas", para ponerlo en las manos de Joohyun expectante de cada uno de sus movimientos.

ㅡSeulgi...

ㅡEs curioso, este ha sido el único libro que te he visto llevar que no he leído. ㅡla castaña corta la distancia qué hay entre ella y Hyun. Cada una cargando un texto completamente distinto. ㅡLeí cada novela e historia que tú, te vi avergonzarte y llorar con El Color Faltante, maldecir con la de Espadea, incluso te vi enamorarte de personajes muy indiferentes para mi pero lo hacía porque quería que me vieras de la misma forma. Quería que te enamoraras de mi.

Un par de manos toman una cintura mientras que otras dejan el libro en algún lugar para posicionarse en los amplios hombros contrarios. Sus rostros muy cerca hacen que sus respiraciones causen cosquillas sobre las mejillas, sonrisas inocentes se crispan en los labios de Joohyun mientras que Seulgi lucha con toda su voluntad no besarla ahí y ahora.

ㅡDéjame darte la noticia, ㅡla mayor se acerca un poco más hasta que su frente reposa contra la de Seulgi. ㅡestoy enamorada de ti.

ㅡ¿Aunque sea una otaku y todos hablen de mis gustos, y tú seas la reina del baile para todos?

Joohyun aprieta su agarre hasta asegurar sus brazos detrás del cuello de la castaña, haciendo que Seulgi por instinto haga lo mismo en su cintura. Ese tacto que tanto había extrañado hace estragos otra vez sobre ella.

ㅡPorqué eres mi otaku y poco me importa lo que digan los demás, porque quiero ser tu reina del baile solamente.

La voluntad de Seulgi se rompe y toma esos labios dispuestos para ella.

Dentro de las novelas de Joohyun este momento es donde los fuegos artificiales comienzan a salir detrás de ellas, un comúnmente descrito baile parsimonioso donde ambas partes danzan como si fuera la última canción de la noche; pero todas esas palabras llenas de una lírica romántica no le hacen justicia a como en realidad se siente ahora mismo. Para Seulgi sería el sentimiento de alivio que todos sus personajes tienen al vencer en la batalla, la paz después de indomables tormentas, pero nada de eso se puede comparar a ser correspondida; y no es el hecho de haber salido victoriosa de su propia pelea, sino el premio que trajo consigo, no hay mejor victoria para ella que estar besando a quien ha visto por debajo de las críticas populares.

Seulgi es mucho más que suficiente para Joohyun. Joohyun solo pudo cambiar por y para Seulgi.

ㅡSe supone que te diría que iba a leer hoy, ㅡla castaña habla una vez se separan por algo de aire, sacudiendo un poco en su mano el volumen de Naruto. ㅡpero creo que es bastante obvio que será.

Joohyun deja uno... dos... tres cortos besos sobre los labios de Seulgi, y la menor puede jurar cómo sintió su sonrisa en cada uno de ellos.

ㅡ¿Podemos leerlo juntas?

ㅡ¿Has leído los otros cuarenta y cuatro volúmenes? ㅡla simple pregunta hace que Joohyun se aleje un poco al darse cuenta todo lo que debería leer.

ㅡTú lees eso y yo leo esto, ㅡHyun toma otra vez su libro sin soltar del todo a Seulgi. ㅡpero juntas.

Un beso más y ningun manga o novela podrá compararse a la historia que estas dos chicas están creando.

¿Qué lees hoy? - Seulrene©️
Hwasahoe