Pongan su mejor playlist, preparen botana y preparen los pañuelos, este capitulo tiene muchas emociones.

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—¿Segura que quieres ir?—preguntó Aleksander mirando a la rubia.

Helena asintió, terminando de trenzar su cabello con ayuda de Ivy, la chica dejó un beso en su mejilla para luego terminar de arreglarse.

—. Necesitarás un arma—mencionó Klaus, terminando de guardar algunos frascos en un pequeño bolsillo.

La rubia miró a su alrededor, sonriendo en cuanto se encontró con un sartén—. Ahora sí.

Movía el sartén con bastante destreza—¿Segura que podrás?

—. Por supuesto.. las clases..—mencionó, golpeándose a si misma—. Sirvieron.

Aleksander negó, colgando su arco en su brazo—. Vamos, tenemos poco tiempo antes del atardecer.

Volteandose a los dos—¿Saben por dónde podemos llegar?

Estos negaron—. Solo nos dijeron que vinieramos a buscar a la princesita.

—. Si la pelea será con Uma, debe ser en el puerto—hablo Ivy, mostrando un mapa de la isla.

—¿Cómo llegaremos hasta ahí?—preguntó la rubia.

—. Hay unos túneles que se conectan al puerto, seguro que tus amigos estarán ahí—respondió Klaus.

—¿Y qué haremos con esos dos?—preguntó la chica, señalando a los marinos.

—. Nos servirán de algo, ahora vámonos—Aleksander terminó por desatar a los marinos, para así irse los seis hacia los túneles.

La rubia iba con los nervios recorriendo su cuerpo, no sabría como reaccionar ante la situación que se avecinaba.

Salió de sus pensamientos en cuanto sintió la mano de Aleksander tomar la de ella.

—. Todo saldrá bien—dijo este.

Helena asintió, mirando de reojo a Klaus e Ivy, los cuales le sonrieron.

Al llegar los seis a la parte de los túneles, Aleksander revisó rápidamente el lugar.

—. Tus amigos están ahí—dijo hacia la rubia, señalando a los chicos, los cuales parecían discutir.

Helena miró hacia donde Aleksander señalo, encontrándose con la presencia de Hugo bajar de la limusina con Cordelia.

—. Esperen aquí, no se vayan—pidió la rubia, mirando a los tres.

Ivy tomó de los brazos a los dos chicos—. Yo los cuido, tranquila.

Sonriendoles por última vez, se acerco corriendo hacia ellos.

—¡¿Y Helena?! ¡¿La perdiste?!—exclamó Hugo, mirando a Mal, fulminando a la chica con la mirada.

—¡Chicos!—gritó Helena, llegando con ellos.

El gritó de la rubia sorprendió a todos, dejándolos paralizados, siendo Hugo el primero en reaccionar y correr al reencuentro con la chica.

Aleksander hizo una mueca, sintiendo un dolor en su pequeño, Ivy solo le tranquilizó, sabiendo cómo se sentía el chico.

Debía ser difícil saber que pasaste la mayoría de tu vida lejos de su otra vida y ver cómo se alegraba al ver a sus amigos con cariño, le dolía.

Hugo y Helena se abrazaron—¡No me vuelvas a dar un susto así!—pidió el chico, tomando entre sus manos el rostro de Helena.

Helena negó—. Creeme que no lo volveré a hacer—respondió abrazándolo por última vez y acercándose a abrazar a los demás.

—. Como es.. que..—hablo Mal, abrazándola—. Discúlpame por todo.

Helena limpió una lágrima que bajaba del rostro de la chica—. Todo está perdonado Mal, además, traje refuerzos.

—¿Refuerzos?—Carlos ladeo su cabeza sin entender.

—. Nos comentaron que tienen a un Rey secuestrado—respondió Ivy, acercándose junto a Aleksander y Klaus.

—. Oh..—Jay alzo sus cejas—¿Y como están seguros de que aceptaremos su ayuda?

—. No lo hacemos por ustedes, lo hacemos por ella—respondió Klaus.

Hugo disimuladamente tomó de la hebilla del cinturón de la rubia, acercándola más a él y intentandola proteger.

—. No le haríamos daño a la chica, no a ella—habló Aleksander.

—. Todavía no confío en ustedes—dijo Hugo, teniendo una lucha de miradas con Aleksander.

Helena bufo, agarrando a Hugo de la camiseta y jalandolo, acercándose hasta su oído y susurrando algo.

Los demás se miraron confundidos hasta que la cara de Hugo cambió, su boca se abrió pero no dijo algo, hasta que recuperó la compostura.

—. Bien ¿Tienen un plan?—preguntó, aun procesando la información.

Aleksander asintió—. Haremos una distracción, y Lena será de ayuda.

Los demás asintieron no muy confiados—. Ya casi es hora—recordó Evie.

Jay se acercó a abrir la cajuela, pasando las espadas a cada uno—¿Necesitaras una?

—. Tengo esto—Aleksander le lanzo el sartén con destreza a la chica, siendo atrapado por esta.

—. Genial—dijo el chico, alzando la bolsa, mostrando a Chico—. Ay no.

—¿Chico?—Helena miró hacia la cajuela encontrándose con el can.

—¡Te dije que te quedarás!—exclamó Carlos con molestia.

—. No aprobé la clase de obediencia—se defendió. Aleksander, Klaus, Ivy y Hugo abrieron los ojos sorprendidos.

—. Genial y aún puedes hablar—Jay negó mientras cerraba la cajuela.

—¡Oye! ¡No soy el único que también vino!—de la cabeza de Chico, se mostró a Flyn, que soltó un chillido al ver a Helena.

—¡Flyn!—Helena tomó entre sus manos al camaleón, acercándolo a su rostro—¡Lo lamento mucho!

—. ¿Todos listos? ¿Y la varita?—preguntó Mal, recibiendo la copia de la varita.

—¡Genial! ¿Ustedes lo hicieron?—preguntó Ivy, acercándose a la chica.

Carlos asintió—. Será nuestra coartada para salvar a Ben.

Mientras Ivy y Klaus hablaban brevemente con los demás, Helena se acercó a Aleksander, mostrándole a Flyn.

El pequeño camaleón volvió a chillar, saltando al hombro del chico, como si lo reconociera de inmediato.

Aleksander sonrió ante esto, sintiendo un cariño familiar con el pequeño animal.

—. Estamos listos—habló Hugo, acomodando sus chinos con una liga que Evie le dio, dejando un beso en la mejilla de la chica.

—¿Lista?—preguntó Ivy a Helena, recibiendo un asentimiento por parte de esta.

—. Mientras ustedes tratan con Uma, nosotros entraremos por el lado sur—aviso Aleksander, tomando de la mano a Helena.

—¡Chicos, llegaron!—gritó Gil, los demás empezaron a celebrar.

—¡Bienvenidos!—gritó Harry, teniendo a Ben en la plancha.

—¿Qué hiciste con Helena?—preguntó Ben, fulminando con la mirada al pirata.

—. La deje en un lugar... donde tu ni nadie la alejara de mí—respondió, sonriendo.

—¡Llegó la hora!—Uma festejó riendo.

Los recién llegados se acomodaron en el área, Hugo teniendo su mirada puesta en Ben y Harry.

Ben pasó su mirada por todos sus amigos, preocupado al no ver a la rubia, intentando soltarse del agarre de Harry.

—¿Estás seguro de que esto funcionara?—Aleksander miro por última vez a Klaus, el cual estaba sacando uno de los frascos.

—. Al cien porciento Sander—respondió éste, lanzando el frasco hacia donde estaban unos marinos cuidando.

Aleksander rodó los ojos ante el apodo de su amigo, preparándose para la pelea que se avecinaba.

Al caer desmayados, los chicos pudieron acercarse y ocultarse, mirando cómo empezaba la riña.

Helena recorrió con su mirada el barco, encontrándose con Harry teniendo a Ben en la plancha.

—. Ben..—susurró, sin saber cómo sentirse.

Triste, enojada, confundida, cualquier sentimiento al ver a Harry.

Ivy tomó su mano—. Un pirata es leal a su capitana, aun cuando su amada esté en el bando contrario—murmuró, limpiando una pequeña lágrima del rostro de la chica.

—. Aleksander, ¿Cual es el plan?—preguntó Helena.

Aleksander suspiró—. Serás llevada a la pelea con ayuda de los marinos, se que a Uma le interesa tenerte ahí.

Klaus puso en su mano un frasco con un líquido verde—. Usalo cuando ya estés cerca del barco, será parte de la distracción.

La rubia asintió, Ivy ayudando a que el aspecto de la chica se vea algo dañado, mientras que Aleksander se subía por las escaleras hasta llegar al techo, teniendo cuidado de que nadie lo mirara.

—. Llevenla con cuidado y haz tu mejor actuación de princesa en apuros—pidió Ivy—. Estaremos esperando la señal.

Helena los miro por última vez, siguiendo a los marinos hacia la pelea, ayudandola a acercarse a un área donde Uma pueda verla.

—. Muy sencillo querida Mal—comentó Uma—. Quiero que le des una probada o Ben se ira con los peces.

Mal suspiró, ladeando su cabeza y sonriendo levemente al encontrarse con Chico.

—. Bien, lo haré—dijo esta, volteandose para apuntar al perro con la varita—. Aunque suene descabellado, haré que este perro diga algo—haciendo un movimiento con la varita.

La desesperación se sentía en el ambiente, Chico miró a Mal y al ver el asentimiento de la chica, habló—¿Este chaleco me hace ver mal?—preguntó, haciendo reír a Uma.

—¡Dame la varita!

—¡Tú dame a Ben!

La de trenzas azules volvió a su semblante serio, mientras que Gil se acercaba detrás de ella y le susurraba algo, cuando de nuevo la sonrisa de ella.

—. Te tengo un nuevo trato—habló Uma, sonriendo al ver a la rubia—. Te daré a Ben—chasqueo los dedos hacia Harry el cual se quejo, sacando a Ben de la plancha—. Si tu.. Me das a la princesita.

—¡¿Qué?!—exclamó Mal—. ¿Qué princesita?

Hugo se iba a acercar a la peli-morada pero Evie lo detuvo, señalando hacia donde Helena estaba con los marinos.

Esto llamó la atención de los demás—¡Bienvenida! ¡Justo estábamos hablando de ti!

—. Carajo—murmuró Harry, frunciendo su ceño al ver a la chica.

Más Helena no lo volteó a ver, haciendo que él pirata se desespere al no ver esos ojos verdes que ama.

—¿Y dime? ¿Me darás a la chica?—preguntó Uma, tomando a Ben de la chaqueta y dejándolo incado aun lado de ella.

Mal buscó la mirada de la chica, Helena asintiendo mientras se acercaba hacia ellos.

La mirada de Hugo era de desesperación, pero siendo sostenido ahora por Jay.

Al acercarse a Mal, esta le dio la varita, y tomando la mano de Uma para así está tomara la varita.

Mal ayudó a Ben, acercandolo a ella, mientras que retrocedian y Harry tomaba a la rubia entre sus brazos.

—. Que yo recuerde te había dejado en otro lado—comentó este, jalandola hacia el barco—. Y odió que estes en medio de todo esto.

—. Mentiroso—susurró Helena en respuesta, intentando soltarse, Harry sintió una opresión en su pecho, sabiendo que merecía que ella le llamara así.

Los demás miraron como los marinos se reunían alrededor de Uma y la varita.

Aleksander que seguía en el techo, preparó una de las flechas apuntando directo a una de las cuerdas, esperando que la rubia rompiera el frasco.

—¡Por el poder del océano, la barrera de la isla derribamos!—apuntó, pero nada sucedió—¡No!— comprendiendo lo que pasaba, rompió la varita.

—¡Te aseguro que no ganaras siempre!—gritó hacia Mal.

Helena sacó el frasco de su chaqueta tratando de que Harry se diera cuenta, mientras que Flyn salía de entre el cabello de la chica.

Subiendo por el hombro de Harry sin que este no lo notara, sacando su lengua para golpearlo y que este soltara a Helena.

Harry soltó a la rubia, quejándose y asustandose al ver a Flyn.

Helena aprovecho y golpeó el frasco contra la madera del barco, mirando como el barco se llenaba de un humo de color verde, distrayendo a los marinos.

—¡Helena!—gritó Hugo.

La rubia corrió hasta ellos, Aleksander aprovechó esto y lanzó su flecha hacia la cuerda, la cual sostenía una red con diferentes barriles y golpeaba a los marinos.

Carlos aprovechó, lanzando las bombas y cegandolos.

—¡Vayan tras ellos!—gritó Uma, los marinos corriendo a atacar a los chicos.

—¡Helena!—gritó Jay, lanzándole una espada a la chica al verla defenderse con su sartén.

—¡Gracias!—dijo está, defendiéndose con la espada y esquivando golpes con el sartén.

Uma se acercó a Mal, mientras que Harry empezó a pelear contra Ben, Evie, Carlos, Cordelia y Jay, contra los marinos.

Helena peleaba contra Gil, ambos en contra de hacerlo—¿Seguiremos siendo amigos después de esto?

—. Dependerá de quién gane—respondió Gil, bloqueando la espada de la chica—¡Toda tuya!

El gritó de Gil confundió a la chica, pero al mirar como este golpeaba la madera debajo de ellos, haciendo que la chica caiga hacia la planta baja del lugar.

Helena gritó, esperando recibir el golpe, pero abrió sus ojos al sentir unos brazos rodeándola.

—. Te dije que no volverías a escapar de mi—Harry la apretujo, acercando su rostro al de ella—. Prométeme que cuidaras el collar preciosa y perdoname por esto—susurró, dejando un beso en su mejilla.

Helena sintió sus mejillas coloradas, la confusión en su rostro era clara y esto Harry lo sabía.

Sabía que la había cagado al no quererle decir por segunda vez que Ben estaba de rehén y que él ayudó en su captura.

—. Y yo te dije que no quería ver una lágrima bajar por su rostro Hook—Ivy estaba detrás de ellos—. Así que más vale que la sueltes en este instante.

—. ¿O qué?—preguntó Harry.

—. ¿No quieres una flecha atravesando tu maldita cabeza de pirata estúpido o si?—hablo Aleksander apuntandole con su arco—. Sueltala y pelea.

El chico río, bajando a Helena de sus brazos, mientras que volvía a tomar su espada y se volteaba hacia Aleksander—. Pelear contra ti.. Será un gusto.

Aleksander baja de un salto, bloqueando el golpe de Harry con su arco, ambos aprovechando sus habilidades de combate.

—. Ella no se querrá ir mientras sigamos peleando—susurró Aleksander para Harry, señalando a Helena que seguía defendiéndose de los marinos junto con Ivy.

—¡Tenemos que irnos!—gritó Carlos.

—¡Sander, la chica!—gritó Klaus, agachándose para no recibir un golpe, lanzando otra de sus frascos hacia los marinos.

—. ¿Crees que no me di cuenta de eso?—Harry esquivó otro golpe de Aleksander—. Espero tengan un maldito plan...

—¡Helena!—gritó Ben, acercándose a la chica—. Perdoname, por todo.

La rubia le devolvió el abrazo—. Todo esta bien Ben.

—. Lamento interrumpir su reencuentro pero tienen que irse—interrumpió Ivy, empujándolos con los demás.

Ben y Helena fueron rodeados por los brazos de Hugo, mientras que Ivy, Mal y Evie los protegían.

—¡Ya vámonos!—gritó Jay, jalando a Cordelia.

—¡Vayanse! ¡Nosotros los detendremos!—gritó Aleksander, peleando aun contra Harry.

—¡Aleksander!—exclamó Helena, intentando volver hacia el chico pero los brazos de Hugo lo impidieron—¡No podemos dejarlos aquí! 

—¡Llevatela!—gritaron Aleksander y Harry al mismo tiempo, escuchando las quejas de la rubia mientras Hugo la cargaba en su hombro.

—¡Idiotas! ¡Volveré por ustedes!—gritó por último, entrando al túnel junto a Hugo y Ben.

—¡Maldita!—gritó Uma hacía Mal, pero antes de que pudiera cruzar el puente, este fue empujado por Mal.

Lo último que escucharon fue el gritó de Uma después de haber pasado por el túnel y haber llegado a la limusina.

Helena siendo subida a la limusina por Hugo.

Jay puso en marcha la limusina teniendo a Cordelia de copiloto.

Al estar ya lejos del peligro, sus respiraciones eran las únicas que se escuchaban, hasta que Hugo recordó lo que la rubia le dijo antes.

—¡¿Ese era Aleksander?!—gritó asustando a los demás—¡¿Porqué lo acabo de reconocer?!

—¡No lo se! ¡Yo apenas lo descubrí hoy!—respondió Helena.

—¿Aleksander?—preguntó Ben, abriendo sus ojos al recordar—¿Hablamos del mismo Aleksander que prefería dormir que jugar con nosotros?

Al parecer la rubia no fue afectada por el hechizo, Hugo y Ben también lo fueron, pero al parecer este ha sido roto y los recuerdos han vuelto.

—. En primera ¡¿Hermano?!,  En segunda ¡¿Y es Aleksander?!—exclamó Carlos, procesando toda la información.

Helena suspiro asintiendo—. A lo que recuerdo sí, mi mente por el momento es una laguna de confusiones.

Mal tomó la mano de la chica reconfortandola, Helena ante esto sonrió pero parecía más una mueca.

El apoyo de Mal no se sentía como el de Ivy, pensando en la forma de volver a la isla por su hermano y amigos.

A sus recuerdos llegó Harry, y el beso que compartió con él, sintiendo el cosquilleo en sus labios.

Ben susurraba con Mal, al parecer pidiéndole disculpas ante su comportamiento de antes.

La rubia se exaltó al sentir la mano de Hugo tomar la de ella, volviéndola a la realidad.

Hugo reconocía bien cuando su amiga pasaba por algo, sus hombros bajos, su mirada perdida y ninguna ocurrencia salía de su boca.

Aunque el chico temía hablar y empeorar el comportamiento de la chica, decidió darle su espacio, sabiendo que ella luego lo hablaría.

Fue algo que él aprendió de las últimas veces de la relación de Helena con Nolan, la chica se perdía demasiado en sus pensamientos al punto de no dormir.

Las pesadillas eran constantes, había veces que Cordelia se quedaba con ella para cuidarla mientras él o Ben estaban ocupados.

Y ahora que los recuerdos que nadie recordaba que tenía sobre Aleksander podrían empeorar el estado de la chica.

Los padres de ambos habían salido nuevamente ante una emergencia, dejando a Marcos a cargo, mientras que su hermana menor, Evangeline, se había quedado al cuidado de su tío Louis.

Un suspiró salió de su boca al llegar a la entrada de la escuela, bajando todo aun con sus ropas de la isla.

Helena seguía aún en sus pensamientos pegada a Hugo, éste miró a Ben, moviendo la cabeza.

Señal de que tendrían que hablar nuevamente los tres.

—¿Quieres hablar sobre la isla?—preguntó Hugo, mirando a la chica.

Ben parecía buscar algo entre los estantes de su oficina.

—. No entiendo porque no recordaba a mi hermano—respondió la chica, soltándose a llorar.

Hugo la acercó a sus brazos—. Buscaremos respuestas solecito.

—. Tienen que ver esto—hablo Ben, acercándose con un libro muy reconocido por ellos.

—¿El libro de cuentos legendarios?—Hugo lo miro con duda.

—. Debe haber alguna respuesta aquí—menciono el chico, sentándose al lado de Helena y dejando el libro en sus piernas.

—. Uno para todos—habló Ben, mirando a sus amigos y extendiendo su mano hacia el centro.

—. Todos para uno—respondieron los dos chicos, poniendo sus manos encima de la de Ben y volviendo su atención hacia el libro.

Las manos de la chica pasaban por cada página, algunas ya firmadas otras por ser firmadas.

Marcos Aldair Fitzherbert de Corona

Rey de Corona y príncipe de la estrella
Primogénito de la princesa perdida y el príncipe ladron

Dejado de la foto de su hermano, el día de su coronación estaba el texto, junto con la firma de su hermano.

Pasando la página se encontró con la de James, de la misma forma que la de su hermano.

James Snow

Rey del reino Canterlot
Primogénito de la princesa de las nieves y él príncipe encantador

—¡Esa es la mía!—comentó Ben, causando la risa de sus amigos.

Pasando a la página de Ben, de la cual es la mejor, a palabras del chico.

Benjamin Florian

Rey de Auradon
Príncipe de la princesa adorada y el príncipe maldito.

Las risas siguieron mientras seguían pasando las páginas, hasta llegar a la de Hugo, Helena y Aleksander.

—¿Cuándo será tu coronación?—preguntó Ben hacia el chico.

—. Todavía falta, dejame disfrutar mi tiempo libre hombre—respondió Hugo.

Helena negó, todavía con su mirada en la página del chico.

Hugo de Maldonia 

Próximo Rey de Maldonia 

Hijo de la princesa soñadora y el príncipe hechizado.

Al llegar a la página de Helena se encontraron con la página de Aleksander.

—. Oigan..esto no estaba—dijo la chica, mirando como poco a poco la información de Aleksander volvía a aparecer en la imagen.

Hunter Aleksander Fitzherbert de Corona 

Príncipe de la Luna
Segundo hijo de la princesa perdida y el príncipe ladrón 

Su mirada pasó a su página, notando como algo de la información cambiaba.

Helena Alaia Fitzherbert de Corona 

Princesa del Sol
Tercera y última hija de la princesa perdida y el príncipe ladrón.

—. Debió ser obra del hechizo que la información de Aleksander desapareció —Ben seguía sorprendido ante la magia que el mismo libro hacía.

—¿Pero qué clase de hechizo había sido?—

Se preguntó Hugo, aún con la mirada en la página.

Mientras que Helena tenía una foto más reciente de ella, con la misma vestimenta que usó en la coronación de Ben.

En la página de Aleksander se mostraba una imagen de un pequeño niño que no pasaba de los seis años, su cabello alborotado y sus ojos azules.

La vestimenta era muy conocida para la chica, portando el pequeño un overol en color azul con una blusa blanca y pequeñas lunas grabadas en esta misma.

La chica abrió su boca para hablar pero el estruendo de la puerta de la oficina, al ser abierta, los asustó a los tres.

Mostrando a un Marcos con la ropa desaliñada y lágrimas en sus ojos—¡Él está vivo, lo acabo de recordar! ¡Recordé a Aleksander!

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En la isla

—. Creo que ya estamos a mano—comentó Harry, limpiándose la sangre que escurría de su labio.

—. Eso creo—respondió Aleksander, ayudándolo a levantarse del piso—. Lena ya nos hubiera matado si supiera que nos arreglamos a golpes.

—. Más a mí, que a ti—dijo Harry.

Ambos chicos se quedaron en silencio mientras se limpiaban la sangre de sus heridas causadas por el otro.

Después de la salida de Helena y los demás de la pelea, Uma desapareció sin dejar rastro, esto a Harry no le importó al estar pensando en el estado de la rubia.

Los marinos limpiaron todo el desastre mientras que Gil se quedaba a cargo, mientras que Aleksander aprovechó para hablar con Harry.

—¿Ya tan rápido?—preguntó Ivy, que estaba sentada encima de unas cajas.

—. Dejalos, tu solo mira—respondió Klaus, callando a su amiga, emocionado por espectar la pelea de esos dos.

Ivy rodó los ojos, bajando de las cajas—. Iré a descansar, tu cuida que no se maten.

Klaus se encogió de hombros—. Pides mucho Ivy.

—¿Estás seguro de lo que quieres hacer?—preguntó incrédulo Harry—. Mi padre ya se encargo, así que para que volver.

Aleksander asintió—. Necesito respuesta y se que con él las encontraré, y tú me acompañaras—explicó.

Harry se cruzó de brazos—¿Cómo estás tan seguro de eso?

—. Si Helena vuelve, la convenceré para que ya no esté enojada contigo—respondió Aleksander con una sonrisa en su rostro.

—¿Y ella te creerá?—preguntó Harry, señalandolo con su garfio.

—. Soy su hermano—admitió—. Así que es mejor que me acompañes Hook.

Harry miró la silueta de Aleksander caminando, dejándolo procesando la información.

—¿Eso significa que somos familia? Cuñadito—dijo Harry una vez que alcanzo al chico.

Aleksander rodó los ojos—. Como quieras pero acompáñame.

—. Trato, cuñadito—comentó Harry burlándose del ceño fruncido del chico a lado de él.

Klaus que miraba todo aplaudió emocionado—. Esto está mejor que las novelas que mira mamá.

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Editado, besitos.
—

Barbs.