Capitulo 4
Mas tarde.....
Luca y Alberto caminaban por la plaza del pueblo, estaban dirigiéndose a la casa Marcovaldo puesto que Alberto se había ofrecido a ayudar a Massimo con la pesca del día, mientras tanto Luca se quedaría con Giulia hasta que padre e hijo regresaran :3
- Porqué no le pides a Giulia que te acompañe? -(Mencionó Alberto)
Luca dudó por un segundo...
-Amm... no lo sé, no creo que sea buena idea, no quiero preocuparla
-Pues más preocupado voy a estar yo sí vas solo, quisiera poder acompañarte pero... Papá necesita que lo ayude en el trabajo
-Alberto descuida, todo estará bien
Se detuvieron en medio de la plaza, ambos se dedicaron una linda sonrisa...
Casi al instante Luca desvío su mirada hacía aún lado de Alberto, puesto que un niño que estaba tras de él se estaba comiendo un gelato.
Nuevamente estaba teniendo esa sensación, "Antojos"
Deseaba ese gelato más que nada, Alberto levantó una ceja, se giró hacía donde Luca estaba mirando y observó al niño, soltó una pequeña risita y habló...
-¿Quieres que te compre uno? -(preguntó maliciosamente en forma de burla)
Luca miró a Alberto, puso los ojos en blanco, no le gustaba cuando su esposo se "burlaba" de él, cruzó sus brazos a la altura de su pecho e hizo un pequeño puchero.
Alberto volvió a reír, se acercó hasta Luca y lo tomó de las mejillas, se veía absolutamente adorable con su carita molesta.
-Peque perdoname, no pude evitarlo, realmente luces muy tierno y gracioso
Luca fingía estar molesto con su esposo, Alberto solo lo observó con una sonrisa en su rostro, lentamente lo acercó hasta él y lo besó delicadamente en los labios.
Luca correspondió, cerró sus ojos y movió su boca de arriba hacia abajo siguiendo el ritmo de Alberto, pasó su brazos por los costados de su marido y lo abrazó juntando su cuerpo con el suyo.
Después de un par de minutos se separaron, el mayor aún estaba sosteniendo las mejillas del menor, lo miró a los ojos y le dió una sonrisa.
-Vamos por tu gelato
Se tomaron de la mano y entraron a la gelateria...
Poco después la joven pareja salió de dicho establecimiento, Luca sostenía un gelato de cinco capas, algo exagerado si me lo preguntan, pues antes solamente lo pedía con una sola capa.
Continuaron su camino hacía la casa de Giulia y Massimo, llegaron hasta la entrada principal y tocaron la puerta, rápidamente una chica pelirroja la abrió mostrando una enorme sonrisa en su rostro.
-Ciao regazzi!
-Ciao Giulia -(Alberto saludó con una sonrisa) - ¿Como está mi hermana favorita?
Giulia río poniendo los ojos en blanco...
-Soy tu única hermana tontito
-Lo sé y por eso eres mi favorita -( mencionó Alberto entrando a la casa)
Giulia solamente se limitó a reír, Luca cerró la puerta y entraron hasta la sala encontrándose con Massimo quien los saludó amablemente.
-Ciao Muchachos!
-Hola papá
-Ciao señor Marcovaldo
-Bambino, necesito que me ayudes a subir algunas redes al bote -(Mencionó Massimo)
-Claro papá, ahora vuelvo Luca
El castaño asintió, mientras que Alberto salió por la puerta trasera hacía él patio junto a Massimo...
Giulia se acercó hasta él con una linda sonrisa en su rostro...
-Entonces.... El bebé te ha dado alguna molestía hoy? -(Preguntó)
Luca se exaltó, realmente ya no quería seguir con este tema...
-Amm.. bueno... con respecto a eso Giulia, Yo....
No pudo continuar puesto que la puerta se abrío de golpe....
-Giulia papá olvidó su cuchillo
-Ohh.... Emm creo que está en la cocina, Luca te importaría si....
-No no, está bien, iré por él
-Grazie -( Dijo Giulia aún sonriendo)
Luca entró a la cocina, Giulia se giró hacía su hermano quien simplemente le devolvió la mirada.
-Ey te pasa algo? -(Preguntó la pelirroja)
-Oye te puedo pedir un favor? -(Alberto mencionó un tanto serio y preocupado)
Giulia borró su sonrisa....
-Alberto eres mi hermano, sabes que puedes pedirme lo que sea -(Colocó una mano sobre su hombro en señal de apoyo*)
Alberto le dió una sonrisa.....
-Dime de que se trata
-Amm.... Pues verás, desde hace unas semanas Luca ah estado sintiéndose mal, no había querido ir con un médico, así que casi nos peleamos por eso
Giulia lo escuchó con mucha atención, no podía creerlo, Luca aún no le había dicho nada a Alberto sobre el bebé.
-Bueno el punto es que... al fin accedió a ir, y quería pedirte si porfavor podrías acompañarlo, me gustaría poder hacerlo yo pero, tengo que ayudar a nuestro papá
-Oye descuida, yo me encargo de eso
-En serio?
-Por supuesto que sí
Alberto suspiró revelando una sonrisa...
-Grazie Giulia
En ese momento Luca salió de la cocina, se acercó hasta Alberto y le entregó el cuchillo con mucho cuidado.
Alberto le dió una sonrisa y con su mano libre tomó una de sus mejillas...
-Te veré luego -( Mencionó depositando un suave beso en los labios de Luca)
El menor ni siquiera tuvo tiempo de responder, Alberto simplemente salió rápidamente.
En cuanto la puerta se cerró Giulia comenzó a hablar...
- Déjame adivinar, aún no le has dicho a mi hermano sobre el embarazo
Luca se giró hacía ella, solo limitándose a mirarla en silencio....
-¡Santa mozarella Luca! ¿Porqué no le contaste? -( Preguntó la chica con reproche)
-¡Porque no lo creo necesario! -(Respondió el piccoletto) - Entiendes?, Posiblemente solo se trate de un error, es... es absurdo el tan solo pensar que esté esperando un bebé
-Luca.... -( Giulia se acercó hasta él ) - Tal vez si sea absurdo el tan solo suponerlo pero.... ¿Que tal si te equivocas? ¿Y si realmente si estás esperando un hijo de Alberto?
-¡Giulia per favore! Creí que eras una persona sensata, no puedo creer que tú, ¡Tú! Giulia Marcovaldo esté siquiera insinuando una cosa así
-Bueno pues... Para serte sincera ya nada puede sorprenderme, tuve suficiente con descubrir que mis mejores amigos eran monstruos marinos y que además se amaban el uno al otro, después de eso... Aprendí a mantener mi mente abierta a cualquier situación relacionada con ustedes, así que... como te lo mencioné, ya nada puede sorprenderme, ¡NADA!, ni siquiera el hecho de que puedas embarazarte
-¡No puedo embarazarme!
-¿Cómo estás tán seguro cariño? Te recuerdo que no eres humano, tu cuerpo puede pasar por cambios que para nosotros son sumamente extraños, e incluso asombrosos
-No es el caso Giulia
-¡Ay vamos! Eso ni siquiera tú lo sabes
Luca suspiró frustrado, esta conversación no estaba llendo a ningún lado...
-Giulia, ¡No estoy embarazado!
-¡Esta bien!, si ese es el caso, entonces, no tendrás ningún inconveniente si vamos juntos con un médico para saber exactamente que es lo que te está provocando las náuseas y los mareos -(La pelirroja habló como si estuviese retando al castaño)
-Alberto te lo pidió cierto?
-Tal vez....
Luca suspiró, sabía hacía donde estaba llendo la pelirroja, así que era hora de ponerle fin a esto.
-Está bien Giulia -( le dió una sonrisa tratando de seguir su juego) - Vamos con un médico
Giulia sonrió victoriosa, tomó a Luca del brazo, caminó hasta la sala, tomó un pequeño y lindo bolso azúl, y salieron de la casa....
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