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⚠️Contenido sexual⚠️

La idea de encontrar un Pensadero se puso en marcha. Se dividieron en grupos. Obviamente cada uno fue con su pareja, el único grupo conformado por tres fue el de Jameline, quien formaba grupo con los dos azabaches miopes.

Por un lado reinaba un silencio cómodo y por el otro era uno incómodo.

James se acercó un poco a esa pelirroja, rozaba sus dedos sobre el brazo de Jameline. Esa ojiverde tragó en grueso. Trataba de fingir que ese azabache no existía.

Potter se acercó un poco más hasta estar cerca del oído de Line. -¿Quieres hacer algo esta noche? -susurró con su voz ronca. El escalofrío viajo por todo el cuerpo de la chica.

Se mordió el labio y lo miró de reojo. Ella guiñó como afirmación y ese azabache se alejó victorioso.

A la mierda esas palabras, "última vez". Quería sentirlo. Ambos se volvieron adictos al otro.

Lucas carraspeo rompiendo esa tensión de ambos Prongs.

-Line.

-Dime. -lo miró.

-¿Quieres hacer algo más tarde? -preguntó nervioso.

James tenso su mandíbula y apretó sus puños esperando la respuesta de esa pelirroja.

-Claro. -aceptó. James chasqueo su lengua molesto. -¿Antes de la cena? Debo hacer algo luego.

Esas palabras hizo cambiar repentinamente a James. Por supuesto que debia hacer algo, estar en cualquier lugar haciéndola gemir su nombre. Pero aún así sentía celos de que alguien más salga con ella, algo que no podía evitar. Cada vez que la veía muy cariñosa con otro chico, porque sí Line podía estar con quien sea, no tenía ataduras.

-Antes de la cena. -contestó seguro Lucas.

La pelirroja estaba apuntó de comentar algo más pero la figura de una chica a lo lejos la mantuvo callada. James siguió la mirada de Jameline y vió a Lily tratando de cargar su baúl.

Line se acercó a esa pelirroja dejando a los dos azabaches atrás.

-Gracias por tu consejo. -dijo Lucas.

-¿Querías invitar a Potts? -en subtono se podía sentir los celos. Si tan solo James hubiera sabido que Lucas quería invitar a Line por supuesto no le hubiera aconsejado.

Lucas asintió. -Estamos iniciando de nuevo, y ya no quiero huir de sus encantos.

James refunfuño por lo bajo.

-Lily. -saludó Line. -¿Qué haces aquí? Creí que pasarías Navidad en tu casa.

La pelirroja levantó su mirada, veía rastros de lágrimas secas por las mejillas, nariz roja y ojos hinchados. Esta claro que estuvo llorando.

Line tomó su rostro y la miró preocupada. -¿Sucedió algo? ¿Estás bien? -tenía preocupación en su tono.

Lily dió una pequeña sonrisa al escuchar cuan preocupada estaba esa pelirroja frente a ella.

-Problemas con mi hermana. Eso es todo.

-¿Quieres contarme?

Lily negó.

-¿Quieres un chocolate caliente y leer frente a la chimenea?

Lily soltó una pequeña risita, le gustaba oír ese plan. -Me encanta esa idea.

-Lily. -saludó Lucas y James, y al notar el rostro de la pelirroja se les borró la sonrisa a ambos.

-¿Estás bien? ¿Pasó algo? ¿Quieres hablar? -preguntó rápidamente Lucas.

-Tranquilo, estoy bien. -contestó con una pequeña sonrisa. -Iremos a buscar chocolate caliente, ¿quieren unirse? -miró a ambos azabaches.

-Por supuesto. -contestaron ambos chicos con una sonrisa.

-Te ayudo con tu baúl. -ofreció Lucas.

-Gracias.

Lucas y Lily iniciaron la caminata dejando atrás a los dos Prongs.

-Nos queda buscar los chocolates calientes. -dijo Line sin mirar a James.

-Bien. -soltó secamente James.

-¿Qué te sucede? -Line lo miró.

-Nada. -sin más caminó dejando a una confundida Line.

[...]

Remei y Sirius se encontraban vagando cerca de la Torre de Astronomía. El pelinegro tenía una cita planeada para la castaña.

-Mi Watson. -detuvo a la castaña.

-¿Qué sucede? -Remei podía notar la mirada de picardía que radeaba ese ojigris. -¿En qué problema te metiste? -cruzó sus brazos.

-En ninguno. -hizo una breve pausa. -Por ahora. -sonrió ladino.

-Sirius. -demandó.

-Ambos nos meteremos en problemas.

-Oh, no, no, no. -negó la castaña sin saber lo que su novio tenía planeado.

Sirius pusó ojos de cachorro e hizo puchero.

El corazón de Remei se derritió al verlo así. Suspiró y lo miró. -¿Qué tienes en mente? -se rindió con tan solo ver el rostro suplicante de Sirius.

-Escaparnos.

El pelinegro tomó la mano de la chica y comenzó a correr.

Al llegar a la Torre, buscó su escoba.

-Sube.

Un poco dudosa Remei subió detrás de Sirius.

-No te sueltes por nada en el mundo. No quiero perder lo único que le da sentido a mi vida.

Remei sonrió dulcemente al oír esas palabras. Remei Lupton le daba sentido a la vida de Sirius Black.

Iniciaron vuelo. Estuvieron horas viajando.

Se podía ver todo Londres.

-Bienvenida al Mundo Muggle.

Remei estaba sorprendida, era como si hubiera visto por primera vez Londres.

-Tendremos una cita.

-¿Por qué no me dijiste antes? No estoy vestida para la ocasión.

-Porqué sino no hubiera sido una sorpresa. Además con cualquier cosas te ves preciosa.

Remei soltó una risita. -¿Qué haremos, Sherlock?

-Primero iremos a una biblioteca. He oído que son enormes, y tal vez encontremos libros para nuestra rutina de lectura, luego iremos a cenar y por último veremos las estrellas desde el lugar más alto de todo Londres.

-Wow. -estaba impresionada por el día planeado.

Fueron a la primera parada, la biblioteca.

[...]

Line estaba preparándose para su salida con Lucas. Es pelirroja aun no podía creer que saldrá con el azabache.

-¿Vestido, falda o pantalón? -preguntó mirando a Sirene.

-El pantalón será difícil de quitar si pasan a más. -comentó experta Sirene.

-No pasaremos a más. Es solo una salida. No creo que Lucas tenga esas intenciones, no la primera vez, ni yo tengo esas intenciones en la primera salida.

-Entonces ponte el jean. -rodó sus ojos.

Line pensó una vez más. -Me pondré el vestido.

-No entiendo por qué me pides consejos si terminas haciendo lo contrario. -dramatizo.

-Padi, la verdad no lo sé. -rió. -Vestido, medias largas, botas y tu tapado.

Jameline se terminó de vestir. Sirene la maquillo un poco y ya estaba lista para su primera cita con Lucas.

Al bajar vio al azabache con un traje, esperándola.

Los ojos avellana se posaron en la figura de Line. Estaba jodidamente hermosa y por supuesto se lo haría saber.

-Estás preciosa. -sonrió nervioso.

-Gracias, Lucky Puky. -Jameline se tapó la boca luego de llamarlo por su apodo. -Lo siento. Gracias, Lucas.

-Solo tú puedes llamarme así. Con tu voz, ese apodo suena tan bien.

Line soltó una risita. Se sentía débil junto a él. Pero con James se sentía superior, sentía que ella era la dominante en esos tipos de encuentros.

-¿Lista para irnos?

Line asintió.

Ambos salieron de la Sala Común. Caminaron hasta llegar al Campo de Quidditch. Lucas tenía preparado un pequeño picnic. Una especie de carpa está allí, con una mesa y sillas pequeñas dentro de ella. Estaba nevando, pero eso no impedía que pasarán un par de horas a las afuera.

Algunos copos se asentaron en los cabellos pelirrojos y azabaches.

-Creo que elegí mal mi atuendo. -rió Line. -Siempre tomando malas decisiones.

-Puedes vestirte como quieras, tal vez no sientes frío con el vestido, en caso de ser así podemos regresar al castillo y hacer otra cosa.

Line negó con sus manos. -No quiero arruinar lo que hiciste. Además el frío es ¿psicológico?, o eso dice Sirene que lo oyó de Remei.

Lucas rió.

-No te burles. -cruzó sus brazos.

-Lo siento. -se disculpó con una sonrisa. Esa sonrisa que a Line tanto le gusta, o ¿le gustaba? -No he traído demasiada comida ya que luego será la cena en el Gran Comedor.

-No te preocupes.

Lucas comenzó a sacar algunas cosas de la canasta. Lo que a Line le llamó la atención fueron esas fresas cubiertas de chocolate.

-Quiero probar eso. -señaló.

-¿Las fresas? -Lucas miró la fruta.

-Sí, por favor.

Lucas tomó una y se lo acercó a los labios de Line, ella miraba fijamente esa fruta y luego pasó su mirada al azabache. Le dió un pequeño y lento mordisco sin quitar el contacto visual con Lucas. El azabache mordió levemente su labio al ver como la pelirroja disfrutaba lo dulce.

Algo se apoderó de él, una necesidad de besarla se presentó. Lucas se levantó de su silla y se acercó para besarla intensificamente. Obviamente Line lo aceptó. El besó era apasionado que la pelirroja debía ponerse de pie.

Line corto el beso comenzó a dejar pequeños rastros húmedos por el cuello del azabache. Lucas lo disfrutaba. ¿Acaso ninguno de los dos pasaban a más en la primera salida? Una jodida mentira.

Lucas levantó el rostro de Line para besarla una vez más, masajeando la cintura de la chica. Pequeños jadeos abandonaban de ambas bocas.

El cerebro de Lucas conectó y se alejó.

-¿Qué sucede? -preguntó agitada Line.

-No puedo hacerlo. No aquí. -confesó con algo de vergüenza. -Quiero hacerlo contigo... -Line sonrió. -pero no de esta manera.

-Lo entiendo. Creo que nos dejamos llevar. Apretamos el acelerador y eso no está bien si apenas llevamos una salida, es mejor ir de a poco.

-Sí, lo siento, Line.

-No te disculpes. Sigamos con las fresas.

El pequeño picnic continuó. Olvidaron el pequeño momento.

Al terminar Line ingresó sola al castillo. Lucas se encontró con un Slytherin pelinegro. La pelirroja sentía que lo conocía, se parecía a alguien que ella conocía.

Mientras caminaba para poder vestí una ropa cómoda, se tocaba los labios. Había besado por primera vez a Lucas, no lo podía creer.

Una cuerpo la arrastró a uno de los salones abandonados.

-¡¿QUÉ CARAJOS TE SUCEDE?!

-¡¿A TI QUÉ TE SUCEDE?!

-¿De qué hablas? -miró confundida a James.

-¿Besarte con Lucas? -se cruzó de brazos.

-¿Y eso a ti qué?

-Nadie puede besarte. Nadie más que yo puede besarte.

-Tú y yo -señaló a los dos. -no somos nada. No puedes reclamarme. Soy libre de hacer lo que se me plazca.

-Eres mía, Jameline. -tensó su mandíbula.

-Ahí te equivocas, gafitas. -se acercó. -No le pertenezco a nadie.

-No tienes idea de lo celoso que me pongo cada vez que alguien te toca.

-¿Celoso? -miró desafiante.

-Sí. Y sé que tú también te pones así cuando me acercó a alguna chica.

-Eso no es cierto.

-Admitelo, Jameline. Admite que no sientes celos cuando alguna chica se me insinúa. Dilo.

La respiración de Line pesaba. Quedo en completo silencio.

-No puedes admitirlo. Estas llena de orgullo.

-Bien. Lo admito. -habló entre dientes. -Madita sea, James. No sé qué me hiciste. Estaba tranquila con mi enamoramiento con Lucas y luego...

-Me pasa lo mismo. Me hechizaste, Line. -dió un paso más. -Desde aquella noche no puedo sacarte de mi cabeza.

-Ni yo. -confesó. -Pero algo me dice que no podemos estar juntos que mi destino es estar con él, con Lucas.

-Escucha, Line, soy tuyo. Completamente tuyo y nada ni nadie cambiará eso. Pero verte con él... maldita sea eso es demasiado.

-Besame. -soltó.

James no lo pensó dos veces. Beso tan apasionadamente a esa pelirroja.

La tomó por los muslos y Line dió un pequeño salto para que la levantará. James caminó y apoyo a Line a la pared. Sus partes se rozaban provocando los jadeos.

El azabache dejaba rastros húmedos por el cuello de la chica. La pelirroja tironeaba el cabello del chico.

James bajo a Line y lentamente fue bajando hasta estar de rodillas. Levantó un poco el vestido de la pelirroja y bajo las medias largas. Podía apreciar la hermosa lencería empapada.

James y Jameline conectaron miradas.

El azabache comenzó a masajear sobre la tela. Line cerraba los ojos. Hizo a un costado interior e inició con los círculos. La pelirroja enredo sus dedos en el cabello del chico empujándolo para que este más cerca de su intimidad.

James se lamió los labios y acercó su rostro. El aire cálido provocaba escalofríos a la chica.

Abrió su boca y comenzó a succionar el punto sensible.

-Oh por... -jadeaba.

La lencería le molestaba y la bajo, continuó con lo que estaba haciendo anteriormente.

La ojiverde cerraba fuertemente sus ojos y mordía sus labios para evitar se escuchada.

-No te contengas, pequeña. Quiero escucharte.

La pelirroja abrió la boca y gemidos salían. James sonreía orgulloso.

Esta vez utilizo su lengua. Movimientos circulares e irregulares sobre el clitoris.

-Ahí, sigue... -suplicó.

James hacía presión sobre la protuberancia palpitante.

Sumo los dedos. Introdujo uno. Luego dos. Entraban y salían.

Line se sentía en el paraíso. Sus piernas temblaban. Estaba por llegar al orgasmo. Necesitaba sentir más.

-Estoy por...

James entendió y los movimientos con su lengua más los dedos se intensificó.

Line sintió que ese nudo se deshizo. James saboreo cada gota.

Al levantarse su boca brillaba, lamió sus dedos y miró a la pelirroja.

Ella desabrochó esos pantalones que estorbaban. Se lograba ver la erección del chico. Ella relamio sus labios al ver tal cosa. Al bajar el bóxer, masturbo el pene con sus manos. Gruñidos salían de la boca de James. Con tan solo un toque de esa pelirroja lo excitaba.

James dió un paso más para poder estar tan cerca posible. La giró bruscamente, haciendo que el rostro de Line quede frente a la pared. James tomó su longitud y lo alineó a la entrada de la pelirroja. Poco a poco se iba introduciendo.

La tomó por el cuello para que la espalda chocará con el pecho de él. Line dejó descansar su cabeza en el hombro del azabache y él comenzó a embestirla como sólo Line se merecía ser llenada.

James tenía acceso completo al cuello de la pelirroja comenzó a deborarlo, subiendo sus besos hasta llegar a los labios de la chica.

El salón abandonado estaba lleno de lujuria y golpes de cuerpos.

-¿Qué significa esto? -Line logró decir.

-Que solo yo puedo hacerte sentir en la cima del mundo. -gruñó James en la oreja de la pelirroja.

-¿Qué sucederá entre nosotros? -preguntó acompañado de gemidos.

-Ahora nos concentremos en lo que estamos haciendo y luego tenemos esa conversación.

Line asintió.

Las piernas de Line estaban por fallar y ese azabache lo sabía, la agarro fuertemente por la cintura para sostenerla.

-No quiero dejar de hacer esto. -confesó James.

-Ni yo.

Ambos estaban por llegar al limite. Las paredes de Line apretaron el pene de James y la liberación llegó.

Line se dejo caer sobre James. Estaban exhaustos.

-¿Y si ambos finjimos odiarnos? -susurró James tratando de recuperar su aliento.

-Creo que es una buena idea. -sonrió Line agitada. -Por ahora nada formal.

-Entendido.

-Hasta que sepamos bien lo que sentimos.

-Ya te deje en claro que solo soy tuyo, Line. No hay nadie más.

-Yo debo aclarar mi mente. No quiero herir a nadie.

James la besó. -Cuándo lo sepas házmelo saber. Pero aún así tendremos estos encuentros.

Line soltó una risita. -Por supuesto que sí. No quiero dejar esto.

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Hola, hola!!!

¿Qué sucedió entre Sirius y Remei?

¿Amigos con beneficios?

Espero que les haya gustado y no olviden si quieren hacer edits sobre esta historia, háganlo me encantaría verlos, me haría mucha ilusión, pueden etiquetarme @prongs.girl_ o usar el propio hashtag de la historia #parallelswattpad.

Opiniones y teorías...

With love, Sofy 💕 🦋